SoB 239 WEB

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Socialismo o Barbarie PUBLICACIÓN DEL MOVIMIENTO AL SOCIALISMO - www.mas.org.ar - masarg@mas.org.ar - Año X - Nº 239- 13/12 /12 - $ 4

19 D

MARCHAMOS CRÍTICAMENTE

Con las banderas del

argentinazo TRAS EL FALLO EN 1º INSTANCIA EN FAVOR DE MAXI CISNEROS

TERMINAMOS LA CAMPAÑA EN NEUQUÉN Y AHORA PELEAMOS LA DE CÓRDOBA

¡Vamos por la legalidad Nacional del Nuevo MAS!

Redoblemos la campaña para que vuelva a su puesto de trabajo


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www.socialismo-o-barbarie.org Se actualiza los domingos EEDICIÓN DEL DOMINGO 9/12/212 PALESTINA • Israel no pudo hacer una masacre a gran escala como la de 2009... pero nada ha quedado solucionado en Palestina, Socialismo o Barbarie, 26/11/2012 • ¡Basta de masacrar al pueblo palestino! ¡Abajo el Estado colonial, racista y genocida de Israel!, Declaración de la corriente internacional Socialismo o Barbarie, 16/11/2012 • Halte à la massacre contre le peuple palestinien! - À bas l’État colonial, raciste et génocide d’Israël!, déclaration du courant international SoB, en format .pdf, page 7 ( Socialisme ou Barbarie France ) • Gaza, asesinatos y desinformación - La escalada militar y las mentiras de Israel, por Alain Gresh, blog. mondediplo.net, 15/11/2012 • La masacre de 2009 de Israel en Gaza Declaración de Socialismo o Barbarie, 04/01/2009 EGIPTO • Rebelión contra Morsi, el faraón neoliberal islámico, por Flora Kessler, desde El Cairo, Socialismo o Barbarie, periódico, 29/11/2012 • Against the Constitutional Declaration - Thousands of Mahalla workers march against Morsy, MENA Solidarity Network, November 29, 2012 HONDURAS • Sanciones contra estudiantes de la Juventud Socialista - SoB • Llamado al movimiento popular, social y de izquierda

Socialismo o Barbarie Director propietario:Víctor Rodolfo Onesti Coordinación general: Sergio Revelli. Equipo de redacción:Ana Vázquez, Manuel Rodríguez, Marcelo Yunes, Oscar Alba, Patricia López, Roberto Ramírez, Roberto Sáenz, Rodolfo F. Torres. Chile 1362 – CP 1098 – Ciudad Autónoma de Buenos Aires – Argentina Teléfonos 4381-2718 / 2995 - Fax 4381-2976. Página web: www.mas.org.ar e-mail: masarg@mas.org.ar Impreso en Balbi S.A. C. Larralde 5620 - Avellaneda Los artículos firmados expresan la opinión de sus autores y no necesariamente la posición editorial.

EXIGIMOS AL RESTO DE LA IZQUIERDA UNA INICIATIVA EN COMÚN EL 20 DE DICIEMBRE

¡Marchamos críticamente el 19 con las banderas de la

REBELIÓN POPULAR!

E

l lunes 10 se realizó una nueva reunión de las corrientes de la izquierda frente a las jornadas del 19 y 20 de diciembre que fue de pura crisis. Desde el Nuevo MAS reiteramos nuestra propuesta de que, más allá de la posición a asumir respecto del 19, la izquierda debía tomar alguna iniciativa respecto del 20, para que no se pierdan las banderas de la rebelión popular, y buscar la manera de resolver el problema político que va más allá de las consideraciones tácticas del 19. Sin embargo, no se encontró allí ninguna respuesta a estas preocupaciones. Al mismo tiempo, conforme pasan los días y aunque aún no se conocen los detalles de la jornada convocada por el 19 por el moyanismo y la CTA Micheli, parece reafirmarse que el eje programático siguen siendo los problemas sentidos por los trabajadores como el impuesto al salario, la universalización de las asignaciones familiares, las jubilaciones y demás. Esto es lo que realmente preocupa a la mayoría y no la pelea de tiburones entre el gobierno y el Grupo Clarín por quién se queda con los medios de comunicación. La jornada a la que se llama no es un paro, y ni siquiera se convoca en un horario que convenga al grueso de los trabajadores. Sin embargo, y como habíamos señalado en nuestra declaración anterior, con el transcurso de los días íbamos a definir la posición para la marcha convocada por la burocracia sindical: era un error cerrarse a priori a participar. Claro que el centro de nuestra política pasa por otro lado: un llamado o exigencia al resto de la izquierda a no dejarse arrebatar las banderas del 19 y 20 de diciembre. Es imprescindible alguna iniciativa común frente al hecho evidente de que Moyano y Micheli convocaron para el 19 a sabiendas de que así le disputaban a la izquierda la reivindicación de la rebelión popular. Sucede que la mayoría de la izquierda no está dispuesta a hacer algo al respecto. Se trata de una capitulación política.

En estas circunstancias, el Nuevo MAS llama a participar críticamente, pero con todo, en la convocatoria del 19. Haremos esta participación con la política que planteamos desde el comienzo: poniendo bien alto las banderas de la rebelión popular y llamando a conformar un bloque durante la marcha con aquellos sectores y corrientes de la izquierda que estén dispuestos a hacerlo en este mismo sentido. Por otra parte, nos parece un grave error que la izquierda no haga nada el 20. Puede haber un conjunto de propuestas válidas en este sentido. Estamos abiertos a escuchar iniciativas. Mientras tanto, proponemos que se levante una tribuna independiente que le dé voz a la experiencia de la rebelión popular y la recomposición obrera en Plaza de Mayo el propio 20, o, en su defecto, que se convoque a un gran festival juvenil y popular en la Plaza con las banderas de la rebelión popular. Viva la rebelión popular del 19 y 20 de diciembre Contra el gobierno de Cristina, la oposición patronal y la burocracia sindical en todas sus expresiones Por una nueva dirección antiburocrática y clasista para el movimiento obrero Eliminación total del impuesto a las ganancias Salarios y jubilaciones indexados por inflación Asignaciones familiares para todos Cierre de todas las causas judiciales contra los luchadores Anulación de la “Ley antiterrorista” “Que se vayan todos, que no quede uno solo” El Nuevo MAS hará una gran columna el 19 para levantar estas banderas y continuar la campaña por la reincorporación efectiva de nuestro compañero Maxi Cisneros luego del fallo que condenó a la empresa Bridgestone por despido discriminatorio.

A ONCE AÑOS DEL 19 Y 20 DE DICIEMBRE DEL 2001

¡Levantemos bien

L

a semana próxima se cumplen 11 años de la rebelión popular que el 19 y 20 de diciembre del 2001 tirara abajo a De la Rúa y abriera un nuevo ciclo político en la Argentina que se extiende hasta el día de hoy. Si la rebelión como tal fue reabsorbida más o menos rápidamente, sin embargo algunas de sus consecuencias se extienden hasta hoy. Se trata, además, de un fenómeno que no es solamente nacional, sino que hace parte de un ciclo político regional que atañe a varios países latinoamericanos, proceso que, además, navega en medio de una crisis capitalista mundial que no termina. En estas condiciones, en los últimos meses se han sucedido en el país una serie de acontecimientos de onda más corta que deben ser puestos en relación con esas tendencias más de fondo. UNA

COYUNTURA DE DETERIO-

RO ECONÓMICO Y POLÍTICO DEL KIRCHNERISMO

Que el gobierno viene golpeado por los desarrollos a lo largo de este 2012 no cabe ninguna duda. El síntoma más importante de esto es que el deterioro en las condiciones de vida que se ha ido acumulando es el factor motor de la bronca que crece por abajo contra el gobierno. Al compás de una escalada de precios que no afloja, amén de otros flagelos como el desastre del transporte y los servicios públicos en general, cada punto de aumento de la inflación parece uno de caída en la popularidad de Cristina Kirchner. Como en 2008 y 2009, aunque de manera menos aguda por ahora, el kirchnerismo parece nuevamente haber quedado en minoría, más allá de tener organizado un amplio movimiento que lo respalda, factor que no debe perderse de vista. Los motivos de este deterioro son variados. El principal es que el salario ha quedado bajo asedio por la escalada de los precios. Además, al no haber aumentado el gobierno el piso del impuesto a las ganancias, el mismo se está llevando un porcentaje variable, pero importante, de los salarios por encima de 6.000 pesos, lo que configura un verdadero escándalo. Y no se trata solamente del salario: todas las estadísticas indican que la creación de empleo se estancó en 2012 y que las perspectivas para el año que viene no son mejores. Incluso habría crecido algo el desempleo. Otros flagelos impactan en las condiciones de vida de la mayoría, estrechamente vinculados con las inercias que viene arrastrando el “modelo”, cada vez más deteriorado. Es que el negocio de

los servicios públicos con tarifas congeladas fue muy simple: las empresas concesionarias se comieron todo el capital sin reponer ni un tornillo. Conclusión: los accidentes como el del ex Sarmiento en marzo pasado están siempre a la vuelta de la esquina y el servicio de trenes y subtes ya linda con la marginalidad. Para colmo, cada vez que llueve se cae el servicio de electricidad, y para que la luz vuelva tienen que pasar días y días. Y no se trata solamente de la lluvia: ¡se viene el verano y hay que agarrarse porque cualquier día de calor hace estallar las redes de electricidad! Si esta situación de deterioro no ha llegado a detonar todavía un ascenso en regla de las luchas obreras, aunque venimos de un parazo general el 20 de noviembre pasado, en todo caso está generando una bronca popular creciente que alimenta la posibilidad de que, más temprano que tarde, se detone una escalada de las luchas. La burocracia de Moyano y Micheli –de la oficialista no da ni para hablar–, están maniobrando justamente para evitar un salto de conjunto que los desborde; de ahí que busquen administrar y aprovechar para sus propios fines las manifestaciones de descontento. EL

PAPELÓN DEL

7D

El deterioro del gobierno acumula además otro tipo de problemas. El principal es que la oposición burguesa está cuestionando de manera creciente la capacidad de arbitraje del kirchnerismo de los conflictos nacionales. El gobierno acaba de sufrir el cachetazo y el bochorno de que el famoso 7D pasara con mucha pena y sin nada de gloria. Simplemente, el grueso de la burguesía, por intermedio del Poder Judicial, le ha dicho no al gobierno en su pretensión de cuestionar la intangibilidad de la propiedad privada y de ser el oficialismo el que administre a quién le saca y a quién le da. Estos dos elementos son los que han estado combinados en el fallo de la Cámara de Apelaciones de extender la cautelar pedida por Clarín contra el plazo para “desinvertir” hasta tanto esté el fallo sobre el fondo del asunto, así como el rechazo de la Corte Suprema de Justicia al per saltum pedido por el gobierno para revocar esta extensión de la cautelar. El fondo del asunto es que la justicia patronal está diciéndole al gobierno que considera una “arbitrariedad” obligar a una empresa –en este caso Clarín– a deshacerse de negocios “bien


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alto las banderas de la rebelión popular! SICIÓN OBRERA Y LA INDEPENDENCIA DE CLASE DE LOS TRABAJADORES

habidos” y que, además, el arbitraje que el gobierno pretende hacer sobre los medios de comunicación sería un paso “avasallante de derechos adquiridos”. Un poco pasa como en el caso del decreto 125, que pretendía aumentar las retenciones a la soja; nuevamente el kirchnerismo se ve confrontado a sectores de los más concentrados de la economía nacional y sale derrotado. Si realizó el domingo pasado un gran festival político en la Plaza de Mayo, otra cosa muy distinta es que el gobierno se juegue a desarrollar una gran movilización para llevar hasta el final el enfrentamiento. Desde ya, la pelea del gobierno con Clarín es entre tiburones. Es decir, una pugna donde los trabajadores, los explotados y oprimidos no tienen nada que ganar: estén en manos oficialistas o estén en manos de la oposición, los medios son utilizados de una manera arbitraria que no tienen que ver con las verdaderas necesidades populares; muy distinto sería el caso si pasasen a las manos de las organizaciones de masas, sindicatos, de derechos humanos, populares y demás. Nada más lejos del objetivo oficialista. De ahí que todos los analistas y encuestadores constaten algo que es evidente en los lugares de trabajo y en los barrios: a nadie le preocupa la pelea por arriba entre Cristina y Magnetto: eso es un invento de “6, 7, 8”, Lanata y demás medios y programas tanto oficialistas como opositores gorilas. Lo que le preocupa a la mayoría de la clase obrera es que las condiciones de salario y empleo se están deteriorando conforme el gobierno nacional, el porteño, el bonaerense y todo el país están administrando un ajuste económico que, aunque venga en cuotas, se está haciendo sentir.

Incluso en el terreno judicial, importan más hechos aberrantes y escandalosos como el fallo absolutorio de los acusados de secuestrar a Marita Verón; un caso que, por mucho que Cristina se rasgue las vestiduras, ocurre en una provincia gobernada por los Alperovich, íntimos de la familia Kirchner. Para no olvidarnos de otro bochorno: acaba de caer el proyecto de ley de trata en el Congreso Nacional, donde el kirchnerismo tiene mayoría en ambas cámaras. LA

BRONCA POR ABAJO, LAS

DIVISIONES POR ARRIBA Y LA LUCHA POR HACER VALER LOS RECLAMOS OBREROS

Sin embargo, y a pesar que la pelea por arriba rememora en algo la crisis del 2008 y 2009, al mismo tiempo en el fondo es completamente distinta. El hecho de que el gobierno no esté todavía tan a la defensiva como en aquella oportunidad (Cristina estuvo a punto de renunciar cuando el voto “no positivo” de Cobos) no es el dato principal. El más importante es que en este caso el peso de los reclamos obreros está terciando en la disputa. Es ahí donde se coloca el parazo general del 20 de noviembre pasado. Claro que para que ese paro ocurriera, además de la bronca en curso por abajo, hizo falta un factor superestructural: que la burocracia lo convocara. Esto es otro de los elementos de la realidad y del deterioro general del oficialismo: ha emergido un fuerte sector sindical opositor que aparece por ahora como vehículo de los reclamos, más allá de su alineamiento político evidente con sectores de la oposición patronal. Sin embargo, con esta mediación se pudo concretar el primer paro

general en la Argentina desde 2001, que colocó al tope de la agenda aquellos reclamos que tienen que ver más concretamente con el deterioro salarial. Recapitulando un poco los acontecimientos de las últimas semanas, se puede ver entonces que hubo varias acciones de masas, por así llamarlas. Estuvo primero el cacerolazo cheto del 8 de noviembre, donde una multitud de 200.000 a 300.000 personas de las clases medias altas se movilizó en la Capital Federal y el resto del país con reclamos vinculados a las “necesidades” de los sectores más acomodados de la sociedad: el cepo al dólar, el rechazo a tocar una coma de la constitución neoliberal que impera en el país desde 1994 y otras demandas por el estilo. Luego terció el paro general del 20 de noviembre, que paralizando el país y poniendo en pie a nivel de la vanguardia la experiencia de los piquetes, colocó al tope de las reivindicaciones una agenda de reclamos obreros: es decir, de una naturaleza completamente distinta y hasta opuesta a la del cacerolazo. Luego ocurrió el “fatídico” 7D, pero aun en su derrota el gobierno realizó una importante movilización oficialista con el acto-festival del domingo 9 de diciembre en Plaza de Mayo. Oposición patronal, oficialismo K y clase trabajadora (por intermedio de la burocracia sindical), se expresaron en la palestra nacional de una manera masiva en espacio de sólo unas semanas. La pregunta es: ¿quién se impondrá? ¿Cuáles son las reivindicaciones que serán satisfechas en esta disputa nacional? Y una más general: ¿cuáles son las perspectivas para el país en el año que se inicia? GOLPEAR

JUNTOS, MARCHAR

SEPARADOS.

POR

LA RECOMPO-

Es en ese contexto que aparece la convocatoria de una nueva marcha por parte de Moyano y Micheli para el 19 de diciembre, que desató un debate en la izquierda acerca de qué posición tomar. La movilización del 19 no es un paro y está convocada a las 18, algo que la convierte en una jornada más política que reivindicativa, dado que no es un horario que le sea cómodo a la masa de los trabajadores. Tampoco se sabe todavía detalle alguno de cómo será, en concreto, la jornada, ni cómo estará integrado el palco. Sin embargo, hasta el momento los convocantes parecen ceñidos al programa con el que hicieron el llamado: en su centro sigue estando el rechazo al impuesto al salario, la exigencia de universalización de las asignaciones familiares, el aumento de las jubilaciones y demás reivindicaciones mínimas de los trabajadores. Cuestiones que son sentidas y le otorgan un sentido progresivo al llamado que no se puede desconocer, y que de no tenerse en cuenta significaría, en los hechos, una capitulación frente al gobierno K, que está administrando un ajuste en regla, aunque lo “tercerice” y lleve adelante otro tipo de maniobras “distractivas”. Pero como se tratará de una jornada más política que reivindicativa, un enfoque puramente sindicalista, que ha expresado la mayoría de las corrientes de la izquierda, es peligroso y oportunista. Parte de esto último es la nada ingenua fecha de la convocatoria: viene de sectores que no participaron de las jornadas del 19 y 20 del 2001. Es más, que se borraron olímpicamente de ellas, o que convocaron al paro general más corto de la historia, ya que no duró más que unos minutos. Se dice que fue al hijo de Moyano a quien se le “ocurrió” convocar el 19 en vez del 18, “en homenaje al 19 y 20 del 2001”… Pero es evidente que ni a Facundo ni a Moyano ni a Micheli se les escapa que estas jornadas vienen siendo reivindicadas desde hace once años por la izquierda, parte de la cual fue un actor independiente que participó en la rebelión popular mientras ellos se quedaban convenientemente en sus casas. Pero este tema se plantea en un plano más general que excede con mucho la disputa de efemérides, como creen incluso otras corrientes de izquierda. Tiene que ver con que el conjunto de los actores que aparecen hasta ahora

al frente de las convocatorias ante la creciente crisis nacional son burgueses o burocráticos: el gobierno, la oposición patronal “cacerolera”, la burocracia sindical opositora. El inmenso valor del 19 y 20 del 2001 es que fue una acción histórica independiente de los trabajadores y las masas populares, que desbordando a las direcciones sindicales y partidos tradicionales, amenazó con poner patas para arriba el país. De ahí que una de sus consignas haya sido “Que se vayan todos, que no quede ni uno solo”, y que la imperecedera obra del kirchnerismo haya sido venir a “normalizar” eso. Esto es lo que une la experiencia del 19 y 20 de diciembre del 2001 con los desafíos del presente: la necesidad de colocar una salida independiente, de clase y antiburocrática a la creciente crisis nacional; la de sostener, más allá de todas las tácticas, una estrategia por disputarle la dirección de los procesos y luchas a la burocracia sindical, sea del color que sea. Se trata de una pelea más general por la independencia de clase de los trabajadores enfrentando el operativo de “re-peronización” de la clase obrera, que desde distintos ángulos encarnan tanto el kirchnerismo como, de manera más conservadora aún, el mismo Moyano. De ahí que le planteáramos al resto de la izquierda cómo se iba a participar en la convocatoria del 19 y qué íbamos a hacer el 20. Porque la participación en la marcha del 19 convocada por Moyano y Micheli es un problema táctico que no puede no partir de que quienes convocan dirigen porciones de masas de las organizaciones obreras, pero al mismo tiempo está la cuestión de con qué política participar: no poner en el centro las banderas de la rebelión popular es una capitulación, que en vez que servir a la clase obrera, sus reivindicaciones y su proceso de recomposición, sirve a fortalecer a Moyano y Micheli en su pretensión de legitimarse frente a la base obrera. Por lo tanto, el Nuevo MAS participará con todas sus fuerzas en la movilización del 19 para pegarle un nuevo golpe al gobierno desde las necesidades de los trabajadores, al tiempo que levantará bien en alto las banderas del 19 y 20 de diciembre, para no dejarlas en manos de una burocracia que es enemiga mortal del proceso de recomposición obrera en curso, y para proponer una perspectiva de independencia de clase de los trabajadores en la actual crisis nacional.


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LA REBELIÓN POPULAR, LA BUROCRACIA SINDICAL Y EL PAPEL DE LA IZQUIERDA

“Que se vayan todos, que no quede uno solo”

O

nce años han pasado desde el 2001 y una nueva generación obrera y juvenil es la que ocupa el lugar de vanguardia en la lucha. Nueva generación que prácticamente no participó de los acontecimientos del 19 y 20; en todo caso, solamente ha escuchado vagamente historias acerca de esas jornadas. A continuación, haremos un muy breve racconto de esa experiencia y de las posiciones de la burocracia sindical y la izquierda en ese histórico acontecimiento. UNA ACCIÓN

HISTÓRICA INDE-

PENDIENTE

Comprender el 19 y 20 de diciembre obliga a repasar someramente algunos de sus antecedentes. Lo central es que los años 90 configuraron una suerte de “nueva década infame” en que se remató el país al mejor postor y se multiplicaron hasta el infinito las condiciones de explotación de la clase obrera. Esa década, en realidad, no hizo más que completar la obra de la dictadura militar. Obra parcialmente interrumpida por el “interregno” burgués del alfonsinismo al que, en un principio, le costó ir abiertamente contra las masas que venían del sentimiento de triunfo de la caída de la dictadura. Sin embargo, dos hiperinflaciones (1989 y 1990) sin salida por la izquierda y los trabajadores legitimaron el brutal ajuste deflacionario que no tardó en lanzar el menemismo y que a pesar que en determinado momento pareció dar lugar a cierta recuperación salarial, terminó en lo que todo el mundo conoce: una catastrófica hiperrecesión e hiperdesocupación que dejaría en la calle a entre el 30 y el 50% de la población económicamente activa del país, sacrificada en el altar de mantener el famoso “un peso, un dólar”. Derrotado en las urnas el menemismo a finales de 1999, la Alianza encabezada por De la Rúa tomó su lugar. Pero nada cambió. Para mantener el corsé del 1 a 1, volvió a llamar a Domingo Cavallo, que se encargó de administrar un nuevo y brutal ajuste que congelaba los salarios estatales e incluso planteaba su rebaja nominal. No pasaría mucho tiempo para que el país estallara, y eso fue lo que pasó el 19 y 20 de diciembre. Este estallido configuró una acción histórica independiente. Como decía León Trotsky a propósito de las revoluciones, son esas raras ocasiones en que las más grandes masas irrumpen con su acción directa en la vida nacional y

parecen tomar el destino en sus manos. El reflejo político de esto fue que en una sola semana el país tuvo cinco presidentes: no había monigote que aguantara el vendaval de la crisis y la bronca popular. Porque era evidente que el poder no anidaba en las instituciones de la democracia patronal: ¡estaba en las calles, en los píes de los que se movilizaban día y noche! Si la rebelión no se transformó en revolución social, se debió, entre otras razones, a que la clase obrera que tenía trabajo permaneció en sus puestos producto del terror social que significaba el desempleo de masas como elemento disciplinador y, además, porque la burocracia sindical no movió un dedo en esas jornadas. El poder estuvo en las calles, pero nadie lo tomó: no se crearon organismos de poder alternativo; los lugares de trabajo no se paralizaron; la rebelión se reabsorbió. En todo caso, sin embargo, la acción de cientos de miles lanzados a las calles en todo el país con la exigencia de la renuncia de De la Rúa y demás manifestaciones de resistencia y lucha social constituyeron una acción histórica independiente de una magnitud que no se había visto desde el Cordobazo de finales de los años 60. Claro que en este caso se trató de una acción de masas menos radicalizada política y socialmente que en aquella oportunidad, donde el motor de los acontecimientos había sido claramente la clase obrera. Si la rebelión de las grandes masas duró sólo unas semanas, sin embargo la movilización de lo que llamamos “vanguardia de masas” continuó por varios años, poniendo en pie enormes expe-

riencias de organización como fueron los masivos movimientos piqueteros, las fábricas recuperadas y las asambleas populares. Esas experiencias de organización independiente, de en alguna forma, parieron el proceso de recomposición obrera que se vive hoy, y que fue lo más estratégico que dejaron aquellas jornadas. LA

OBRA

PROFUNDAMENTE

CONSERVADORA DEL KIRCHNERISMO

La rebelión popular hizo otra cosa: vino a abrir un ciclo político más de conjunto que sigue presente aun hoy. Y ahí aparece la verdadera historia del kirchnerismo. El domingo pasado Cristina dijo que el 2001 había sido “lo más bajo que había caído el país”; una circunstancia de supuesta “decadencia política, económica y moral” buscando ensuciar y condenar solapadamente la rebelión popular. Esto es mentira, pero no es casual. El papel histórico del kirchnerismo no fue “venir a ampliar derechos” como se autoproclama, sino que las concesiones que se vieron obligados a hacer fueron subproducto de la movilización de masas de aquellos años. Ningún gobierno burgués “otorga derechos” si no es obligado, directa o indirectamente a ello, por la movilización popular y las condiciones políticas más generales. El kirchnerismo se vio obligado a conceder algo para mejor cumplir su verdadero papel, el más estratégico al servicio de la continuidad del capitalismo argentino: reabsorber la rebelión popular y reinstitucionalizar la vida política del país. Esta relegitimación consistía en que la

mayoría volviera a considerar al voto como mecanismo para “cambiar las cosas”, volviendo a poner sobre la mesa el famoso dicho de Raúl Alfonsín (que no casualmente Cristina reivindica tanto) de que “con la democracia se come, se educa y se cura”. De la cooptación de los movimientos de lucha logrados con la acción del Estado surgió el “movimiento kirchnerista”. De ahí que para el kirchnerismo “la historia” de los últimos años haya comenzado el 25 de mayo del 2003, cuando asumía Néstor Kirchner y no como opinamos desde el nuevo MAS (y otras corrientes de la izquierda), el 19 y 20 de diciembre de 2001 con la rebelión popular. ¡Ése no fue el punto más “bajo” de los últimos años, como opina Cristina y toda la burguesía, sino la más alta expresión de la lucha popular de las últimas décadas! A esta historia conservadora y típicamente “desde arriba” de los K se debe contraponer la verdadera historia desde abajo de los explotados y oprimidos, que fueron los que con su acción abrieron un nuevo ciclo político en el país. Como decía Marx, “la historia hasta nuestros días no es más que la historia de la lucha de clases”. Y en esa lucha de clases mandan los grandes momentos de irrupción de las masas en la palestra histórica y no las mezquinas historietas de los gobernantes, que vienen a escamotear e inhibir las aspiraciones emancipatorias como hicieron los kirchneristas en estos diez años de mandato. LOS QUE SE BORRARON OLÍMPICAMENTE

Hay otra historia particularmente

importante respecto del 19 y 20, y que muchos quieren soslayar: qué fuerzas políticas estuvieron realmente en las calles en esas jornadas revolucionarias y cuáles no. El centro de la rebelión popular fue lo que se dio en llamar “La batalla de Plaza de Mayo”. Es que en torno a ella y al Congreso se sustanciaron las principales acciones de masas esos días, más allá del levantamiento en los barrios populares, los saqueos a supermercados, las fogatas levantadas en muchas esquinas del gran Buenos Aires y demás. Por la noche del 19 una multitudinaria y espontánea movilización desde los barrios de la Capital Federal obligaba a De la Rúa a derogar el Estado de sitio decretado sólo unas horas antes. La movilización confluyó en la Plaza de Mayo, pero luego derivó hacia el Congreso ante atisbos de represión. La consigna más cantada: “Que se vayan todos, que no quede uno solo”. Se trataba de un cuestionamiento no solamente al gobierno, sino al conjunto de las instituciones del régimen político. Pero junto con esto crecía el clamor para que se fuera De la Rúa. El “Abajo De la Rúa” se ponía a la orden del día y así nacía, sin solución de continuidad, la jornada del 20. El foco de esta batalla ya fue directamente la Plaza de Mayo y se desarrolló a lo largo de todo el día. Su lugar: la propia Plaza, la Avenida de Mayo y las diagonales Norte y Sur. Su composición: más plebeya que el día anterior, con más participación de compañeros y compañeras del Gran Buenos Aires. Precisamente sobre Diagonal Norte estuvimos el nuevo MAS, el PO, el PTS y otros grupos menores de izquierda. A la vanguar-


5 ELECCIONES EN LA UNIÓN FERROVIARIA¨: UN BALANCE LAPIDARIO PARA LOS INTEGRANTES DEL FIT dia estuvieron jóvenes (algunos incluso oficinistas de los aledaños), los compañeros motoqueros, así como hubo enfrentamientos con las Madres de Plaza de Mayo cuando quisieron llevar adelante su habitual ronda de los jueves. Varios compañeros cayeron aquí, sobre todo por Avenida de Mayo, donde se concentraron centralmente compañeros y compañeras del movimiento piquetero. Entre las corrientes de la izquierda que participamos de la lucha no hubo bajas. Pero no todas lo hicimos, y, menos que menos, la burocracia sindical. La CGT y el moyanismo en ningún momento se hicieron presentes, y no se conoce que se hayan convocado a reunión alguna. Habían hecho un paro nacional bastante pasivo y formal el 13 de diciembre anterior, que no tuvo ninguna consecuencia, y con eso les bastaba. Sí es conocido que la CTA y la CCC se reunieron, discutieron y resolvieron expresamente quedarse en sus casas con el increíble y escandaloso argumento de que lo que se estaba procesando era un “golpe de Estado y que había que defender la democracia”… La CCC y el PCR llegaron incluso a ordenar a sus movimientos de desocupados “quedarse en La Matanza” y no asistir a la lucha en la Plaza con un argumento similar. Por su parte, el MST, que en ese momento incluía el actual MST e IS, estuvo unas horas en el Obelisco, pero cuando arreciaba la represión se retiró... LA PRUEBA DE LA LUCHA DE CLASES

Sólo las corrientes nombradas y grupos políticos menores de la izquierda participamos los dos días en la pelea. En el caso de nuestro partido, consideramos a esas jornadas nuestra verdadera “acta de fundación”. Son las pruebas que plantea la lucha de clases y no las discusiones generales abstractas la prueba última, decisiva y fundamental, de las corrientes revolucionarias que pretenden ser dignas de tal nombre. Y podemos decir, orgullosamente, que pasamos muy bien esa prueba, incluso derrotando un sector interno que vergonzosamente se colocó completamente a la derecha de los acontecimientos y que no pasaron muchos meses para que se fueran del nuevo partido que estábamos poniendo en pie. JOSÉ LUIS ROJO

El “pedracismo” sin Pedraza

E

l jueves 29 terminaron las elecciones en la UF, ese día se votó para los cuerpos de delegados en la mayoría de las seccionales salvo en el Roca1y en otras seccionales del interior que se había votado meses atrás. La Verde volvió a ganar en todos lados, salvo en el ex Sarmiento, que al igual que para la seccional Haedo ganó la Lista Bordó que encabeza el blondo Sobrero, y no dejo de ser un importante triunfo. El cuerpo de delegados del Belgrano Norte que se había ganado hace dos años, a los pocos días del asesinato de Mariano y por solo 23 votos, lamentablemente se perdió. Esta suerte de estancamiento del proceso de la recomposición en el ferrocarril (mas alla del ex Sarmiento, insistimos), merece en todo caso una explicación que no puede ser tapada haciendo balances autoproclamatorios u ocultando los balances. La burocracia de la Verde estuvo y está en el centro de la escena política y lo está acusada y sentada en el banquillo de los acusados por el asesinato de Mariano, pero en el ferrocarril se relegitimó. EL MISMO PERRO CON OTRO COLLAR

El resultado a nivel nacional se descontaba ya que solo se presentó la lista Verde. Según la junta electoral, hubo una alta participación cercana al 78% del padrón, de los cuales la Verde sacó el 82% de los votos. Obvio que en la mayoría de las 32 seccionales no hubo fiscales de las oposiciones; por caso, en el Belgrano Sur la participación pasó el 90% del padrón y la lista única sacó el 98% de los votos emitidos. Claro que en ningun caso pueden votar todos los companeros, sino solo los afiliados. En septiembre pasado Pedraza y Fernández hicieron pública una carta donde informaban que: "Por los hechos ocurridos que dejaron la repudiable muerte de Mariano Ferreyra, que enlutó a la Unión Ferroviaria y a nosotros en particular, hemos decidido dar un paso al costado y no ser candidatos –a pesar de que legalmente estamos en condiciones de serlo– hasta tanto se expida la Justicia, en la que confiamos plenamente, demostrando nuestra inocencia” (La Nación 4 de septiembre de 2012). Asi dejaban la puerta abierta para un futuro retorno. Allí empezó una pelea ínter burocrática por la sucesión de Pedraza, entre el “Oso” Rodríguez (ex Celeste del Mitre, vuelto al redil de la Verde muchos años atrás), que es parte del secretariado nacional y ladero fiel de Pedraza, el único que fue a visitarlo regularmente a la cárcel según informa la prensa; y

por el otro lado, otro Verde también de la conducción nacional: Sergio Sasia, que finalmente con el apoyo del gobierno se quedó con el premio mayor. Ser Verde y revindicar la Verde como lo hacen tanto Sassia como Rodríguez significa, entre muchas otras cosas, haber carnereado las históricas y heroicas luchas de los 90 contra las privatizaciones. Es haber llamado a los trabajadores al retiro voluntario y llevarlos a la muerte en vida de la desocupación. Es haber sido cómplice del desguasamiento del ferrocarril. Es haber sido parte de las empresas privatizadas, de la tercerizaciones y lucrar con la creación de decenas de cooperativas siendo parte de la explotación de los trabajadores que decían representar. Es haber militado en contra del pase a planta permanente, es haber organizado la patota asesina y matar a Mariano Ferreyra. Todo eso significa ser Verde. Después de más de 25 años, Pedraza dejará de estar al frente de la Unión, pero sus hijos defenderán su herencia de traiciones y asesinatos. Sus hijos intentarán lavarle la cara a la Verde y a Pedraza; este triunfo es parte de ese operativo de relegitimar a la Verde y a Pedraza, y junto a él a toda la podrida burocracia sindical argentina que por primera vez en la historia está en el banquillo de los acusados por hacer lo que hizo siempre: perseguir a los zurdos que luchan por los justos reclamos obreros. EL PROCESO DE LOS TERCERIZADOS

La paradoja de la experiencia del ferrocarril es que en el lugar donde la izquierda jugó un rol destacado, y donde se obtuvo un triunfo resonante (el pase a planta permanente y casi el fin de la tercerización en el ferrocarril), ahí se relegitimó la burocracia. El proceso objetivo tuvo dos limites muy grandes: por una lado, el motor de los compañeros tercerizados era estrechamente salarial: la equiparación y el pase a planta permanente; solo un pequeñismo sector se elevó a la lucha antiburocrática y politica. En esto se apoyo el gobierno para intervenir. El otro limite objetivo enorme fue que los efectivos nunca entraron en la lucha de los tercerizados; más aun: un sector importante la miró con recelo “ahora tu hijo no va a poder entrar” decía la Verde... Sobre esta realidad el gobierno y la burocracia se apoyaron y maniobraron para arrebatarle el triunfo a los sectores independientes, o por lo menos para mediatizarlo lo más posible. Así fue como a fines del 2010 hubo mil idas y vueltas sobre el

pase a planta del Roca y más aun de las otras líneas. Tanto fue así que el gobierno decidio darle lugar a la Verde en el traspaso a planta permanente. En ese contexto, la intervención de la izquierda tuvo evidentes falencias desde vender como “un triunfo histórico” el acta del ministerio con el compromiso del pase a planta cuando todavía faltaba garantizarlo, y se tuvo que seguir luchando y cortando vías un mes más, pasando por dividir a la asamblea única de tercerizados y la comisión negociadora, hasta llegar a ningunear la lucha de los tercerizados en el acto del 20 de diciembre del 2010.2 El resultado fue que entre el gobierno y la burocracia lograron reabsorber el proceso de lucha de los tercerizados y cooptar a la mayoría de los sectores independientes. LA “IZQUIERDA”:

UNA ADAPTA-

CIÓN MÁS A LAS REGLAS DEL JUEGO

La Verde tenía asegurada la conducción porque los estatutos de la Unión, como muchos otros, no son democráticos, son proscriptivos. El mecanismo es un clásico de las burocracias: exigir condiciones imposibles de cumplir, por ese medio solo la burocracia o un desprendimiento de la misma puede cumplir las condiciones para presentarse, así se aseguran la continuidad casi eterna. Esta “trampita” es eficazmente fiscalizada por el Ministerio de Trabajo, autor intelectual de los estatutos sindicales. Pero esta elección se dió en un contexto particular. Por una parte, determinado por el proceso de la recomposición del movimiento obrero que producto de haber ganado posiciones, instaló públicamente –con vaivenes– la discusión del “modelo sindical, de la “libertad sindical” y la “renovación dirigencial”, y por otro el asesinato de Mariano Ferreyra que puso en evidencia los negociados de la burocracia sindical a costa de los trabajadores. Es decir, de sus propios representados y sus métodos patoteros y asesinos que dejaron a la Verde en el limite inferior de la legitimidad social. En este contexto, junto a la lucha por la causa judicial por el asesinato de Mariano y la cárcel a Pedraza, se imponía una campaña sistemática contra el estatuto de la Verde, el estatuto del Preso, del reo, del autor intelectual del asesinato. Esta campaña que se imponía y que era una obviedad, estuvo ausente en todas las expresiones de la izquierda. Es cierto que todo el mundo con más y con menos dijo que los estatutos son una farsa; pero de ahí a hacer una campaña en regla en forma individual y

/ o en común de toda la oposición, eso no existió. Esta ausencia no es una casualidad: es la expresión de una permanente adaptación de la izquierda a las reglas del juego que impone la burguesía y sus estado patronal. Lo mismo sucedió con la nueva ley electoral proscriptiva. El argumento y el razonamiento siempre es el mismo:“como no se puede cambiar, para que vamos a luchar o hacer una campaña política contra los estatutos”. Y acá entra con todos sus matices toda la izquierda: desde la que se dice “nueva izquierda”, “clasista y combativa”, “transformadora” hasta la que se dice “revolucionaria” y hasta “trostskista”... EL KIOSKITO PROPIO ANTES DE LOS INTERESES GENERALES

Como si faltase algo para facilitarle las cosas a la burocracia, la izquierda -y en esto le recae la mayor responsabilidad a los integrantes del FIT-, fue toda dividida. No solo no hicieron campaña común contra los estatutos proscriptivos, sino que se armaron listas de un integrante del FIT contra otro en las distintas líneas. Como deciamos en su momento:“resulta ser que en una elección de altísimo voltaje político como la de la Unión Ferroviaria, tienen el comportamientos sin principios de dividir el frente clasista y preparar una grave derrota, que no dejará de tener consecuencias sobre el juicio por el asesinato de Mariano, independientemente de que éste parezca bien encaminado hasta el momento”.3 En la edición de Prensa Obrera 1251 se titula “Advertimos golpe burdo contra el juicio a la patota de Pedraza”, es decir, ni lerda, ni perezosa la burocracia y el gobierno siguen embarrando la cancha con nuevos brios. Habra que sacar entonces conclusiones para ver como rearmar la alternativa clasista en el ferrocarril a partir de los puntos de apoyo que se han reafirmado, como es el caso de la linea ex Sarmiento. RODOLFO TORRES Notas 1- La oposición unificada perdió 25% a 75% de los votos con la Verde 2- Ver SoB 192 (27/12/2010) “La lucha de los tercerizados del Ferrocarril: Triunfalismo, comportamiento instrumental y sindicalismo. Por una gran marcha unificada por el pase a planta”; SoB 193 (20/01/2011) “¡Hay que unificar la lucha de todos los tercerizados del ferrocarril!” y SoB 194 (7/02/2011) “Tercerizados del Roca: No bajar la guardia. Ir por la cabeza de Pedraza” 3- Ver SoB 236 (2/11/2012) “Una crítica a la práctica política de sectores de la izquierda argentina. Anatomía de la izquierda “porotera””


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SUBTES

EL PAPELÓN DEL 7D… Y DE LA LEY DE MEDIOS

¿Como desandar el camino hacia un callejón sin salida?

Crónica de un fia

E

n nuestra edición anterior dábamos cuenta de las peleas que los trabajadores del subte tenían por delante. En estos días acaba de librarse una de ellas y los compañeros salieron en principio airosos luego de tomar medidas de fuerza. Es importante hacer un primer balance de esta lucha a fin de ver los logros y las limitaciones de la misma en forma lo más objetiva posible.

L

os trabajadores de subte se encuentran frente al desafío de defender las conquistas obtenidas a partir de la lucha y la organización de un sindicato, surgido con un carácter independiente (aunque hoy, lamentablemente, sometido al kirchnerismo): la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y el Premetro (AGTSyP). El Proyecto de Traspaso de los subterráneos del gobierno nacional a la órbita al gobierno de la Ciudad y que es parte del ajuste que viene impulsando Cristina, apunta a liquidar dichas conquistas. A tal fin, existe un verdadero frente patronal, burócrático y político conformado por Macri, la empresa Metrovías, la burocracia de la Unión Tranviaria Automotor (UTA), y que cuenta con la venia de los K. Esta puja tiene sus peleas preliminares que también cobran una importancia fundamental en la relación de fuerzas entre los trabajadores y sus oponentes anti-obreros. Desde hace meses, los trabajadores de Metrovías venían reclamando en la mesa de negociaciones el cierre de paritarias con un porcentaje acorde con las necesidades de los compañeros. En los últimos días de noviembre, la empresa había cerrado un acuerdo con la burocracia de la UTA (1), sacando a luz una vez más el desconocimiento por parte de la empresa de la representatividad de la AGTSyP. Roberto Pianelli, secretario general de la AGTSyP, declaró entonces al diario La Nación: “Nos ponen en situación inevitable de conflicto. Hay un acuerdo entre el Gobierno de la Ciudad, el grupo Roggio y el sindicalista empresarial Roberto Fernández para intentar destruir este sindicato”. Si bien esto es así, hay un cuarto actor que Pianelli no nombró: el Gobierno nacional. Porque el hecho es que el Ministerio de Trabajo de la Nación, también considera a la UTA como sindicato representante de los trabajadores del transporte y hace todo lo posible por evitar que se ponga en pie una organización independiente de un sector de trabaja-

dores. El “olvido” de Pianelli no es casual. Una semana antes, el 20 de noviembre, cuando millones trabajadores no fueron a trabajar repudiando la política del gobierno kirchnerista, Pianelli llamó a no parar argumentando, entre otras cosas, que su sector “no considera que haya (que hacer) una huelga general para modificar el eje del plan económico.” (2) Pero no se trató solamente del paro: el mismo Pianelli metió a los trabajadores del subte en el callejón sin salida de en vez de exigir la estatización inmediata del servicio bajo control obrero, ser parte de la estrategia del gobierno nacional de lavarse las manos pasándoselo al gobierno de Macri: ¡una agachada sin nombre! Así las cosas, y ante la falta de respuesta de la empresa, los Metrodelegados debieron recurrir a tomar medidas de fuerza. Comenzaron los paros escalonados, a diferentes horarios, en las distintas líneas. Así y todo, luego de dos días de paros, aún no había respuestas, por lo que se estableció un nuevo plan de paros escalonados a partir del lunes 2 de diciembre. Pero durante el fin de semana la empresa llamó a los delegados para presentarles una propuesta. Los Metrodelegados suspendieron las medidas proyectadas para el lunes y concurrieron a la reunión con la patronal. La propuesta patronal significó un triunfo en el terreno sindical: les devolvieron los días descontados por el paro, y no se concretaría el descuento del 1% para la UTA; sin embargo, el problema de fondo del traspaso sigue abierto. Con respecto al aumento salarial, los trabajadores alcanzaron un 23% de aumento en las paritarias. LA

PELEA TAMBIÉN ES CONTRA

EL GOBIERNO DE

CRISTINA

El secretario adjunto de la AGTSyP, Néstor Segovia, aludiendo al porcentaje de aumento salarial, expresó, en declaraciones a C5N: “Hasta marzo se pueden quedar tranquilos”. Pues bien, los que no pueden “bajar la guardia” son los trabajadores porque la patronal no se va a

quedar tranquila. Volverá a la carga para arrebatar el terreno ganado por los compañeros. La implementación del traspaso del subte no va a ser un tranquilo debate parlamentario. Será una férrea lucha para la cual los trabajadores deben visualizar claramente quién es el enemigo que tienen enfrente. En este sentido, la obsecuencia política de la mayoría de los Metrodelegados hacia el gobierno de Cristina, no hace más que desarmar a los trabajadores. A lo largo del conflicto, la responsabilidad del kirchnerismo no estuvo entre las denuncias que hicieron tanto Pianelli como Segovia, sus principales dirigentes. Los activistas del subte deben preguntarse: ¿porqué deben salir permanentemente a la pelea si su dirección apoya la política de Cristina Kirchner? ¿Porqué a una semana de un paro masivo contra el Gobierno del que no participaron, tuvieron que salir al paro para pelear por paritarias más justas? El progreso logrado recientemente contra Macri, Roggio y el burócrata Fernández no fue gracias al apoyo de Cristina sino, una vez más, porque los paros escalonados podían convertirse en un paro general de subterráneos. Y tanto la patronal como el Gobierno nacional y el de Macri aún tienen presente la bronca más general de los trabajadores que el 20 del mes pasado paralizaron el país. Por eso tengamos en claro que este round fue nuestro, pero el combate va a continuar y hay que saber a quiénes hay que pegarles, desandando el callejón sin salida en el que Pianelli los metió. Oscar Alba

(1) “El acuerdo firmado por UTA estableció el pago de 2.500 pesos a pagar en tres veces para los peones. Mientras que los empleados de categoría mayor como conductores tendrán 4.500 pesos a cobrar también en tras meses. Los pagos serán en enero, febrero y marzo”, La Nación, 28/11/12. (2) Nueva Ciudad, 27/11.

A

sí es como termina el mundo Así es como termina el mundo Así es como termina el mundo No con una explosión sino con un suave quejido T. S. Eliot, “The Hollow Men”, estrofa final Dentro de todo el amplio surtido de relatos épicos del kirchnerismo, casi no hay ninguno más épico (salvo, claro, la muerte del Héroe) que la que ellos mismos llamaron “la madre de todas las batallas”: el enfrentamiento con Clarín. El gobierno dice haber hecho muchas cosas buenas, pero casi ninguna tan buena como la Ley de Medios. ¿Por qué la tienen en tan alta estima? Porque les da un enemigo con el que el enfrentamiento es real y al que se espera derrotar. Algo que no pasa en casi ninguna de las demás “batallas”. En efecto: contra el FMI se habla, pero se le paga con rigurosa puntualidad. El ALCA de Bush era malo, pero Obama es bueno, y las inversiones de empresas yanquis, mejores todavía. Techint era bueno, después fue malo, y ahora parece que está entrando en razones otra vez. Moyano era bueno y ahora es malo; con los “Gordos” de la CGT y Barrionuevo pasa lo contrario. Repsol era una maravilla y de golpe pasó a ser malísimo, pero se están yendo, igual que los Eskenazi, primero modelos de burguesía nacional y ahora capitalistas lúmpenes. Los fondos buitres son re malos, pero son poquitos y de afuera. Los milicos son de acá y son muy malos, pero no los defiende casi nadie. Hace falta alguien bien malo, y de adentro, y derrotable. Clarín se puso solo como candidato ideal a enemigo épico del kirchnerismo. Entonces, la Ley de Medios pasó a ser el símbolo de la Gran Batalla. Los kirchneristas podían hablar, según el momento, bien o mal de Paolo Rocca, de las automotrices, de Scioli, de los burócratas sindicales, pero desde 2008 se reservan todos los rayos y truenos para Clarín.Y los soldados de Magnetto (patéticos y/o despreciables periodistas y politicastros a sueldo) se ponen a la altura de las circunstancias: ellos también se creen los últimos cruzados contra el “autoritarismo” y la “dictadura K” (salvo algunos que todo lo que hacen, lo hacen por plata). Mientras el común de la población se preocupa por la inflación, los salarios, los problemas laborales que recrudecen, el impuesto a las ganancias que se come las

horas extras o el último aumento de las paritarias, lo imposible que es viajar al laburo y otras minucias, kirchneristas y clarinistas viven en su mundo donde lo único, o lo más, importante es su pelea por quién se queda con los medios. Como veremos, los K aflojaron incluso en eso con tal de sostener la “madre de todas las batallas”. Que iba a tener lugar, gracias al glorioso dictamen de la impoluta Corte Suprema, el 7 de diciembre, o 7D. Ahí se va a acabar la joda para Clarín. Ahí se va a armar la podrida. Ahí morderá el monopolio gorila el polvo de la derrota. Llegó el 7D y no pasó nada. Nada de nada. En realidad, ya el 6D se sabía que la fiesta se había aguado, y que la batalla se suspendía hasta nuevo aviso. Llegó el 7D y no hubo explosión del monopolio Clarín. Sólo se oyeron los quejidos del kirchnerismo. BAILANDO

EL MINUÉ JUDICIAL

La parte legal del asunto es a la vez la más concreta en cuanto a resultados y la más aburrida en cuanto a desarrollo. Todo empezó el 6 de diciembre, cuando la Cámara integrada por jueces pro Clarín (incluido De las Carreras, a quien directamente Clarín le pagó vacaciones de lujo en Miami) decidió extender la medida cautelar que suspende la aplicación del artículo 161 de la ley, el que exige desinversión (es decir, desprenderse de las licencias en exceso). Ese dictamen a la vez desobedecía el consejo de la Corte de evitar nuevas dilaciones y arruinaba por completo el significado del 7D como “fecha final”. Aunque el gobierno sin duda sabía que esto se estaba cocinando (en la prensa se decía que el fallo de Cámara estaba escrito semanas antes), es curioso lo mal preparado que estaba para ese escenario. Lo único que los kirchneristas atinaron a hacer, además de ir a “6,7,8” a llorar


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sco anunciado juntos, fue organizar el festival masivo del 9, a modo de “acción de masas” contra el fallo. Pero tampoco se podía transformar una fecha “ecuménica” en un acto político contra Clarín. Sucede que a las masas, la verdad, les interesaban más Fito Páez y los demás números musicales que la pelea con Clarín. Para el oficialismo no hay nada más importante, pero a la gente de a pie, no hay caso: a nadie le quita el sueño. Por eso, aunque habló Cristina, el gobierno no pudo decir que los cientos de miles de personas que estuvieron el 9 se movilizaron contra Clarín. ¿Cómo está la causa judicial? Así: el reclamo de Clarín contra la Ley de Medios tiene un juez (que tampoco es el inicial sino un “subrogante”), Horacio Alfonso. Ese juez debe dictaminar sobre la “cuestión de fondo”, es decir, si la ley es constitucional o si viola los derechos de Clarín. Mientras eso no se resolviera, valía la cautelar. La Corte dijo que la cautelar, en lo posible, debía correr sólo hasta el 7D. Pero una Cámara de segunda instancia (la “cuestión de fondo” y las cautelares recorren caminos independientes hasta que haya fallo definitivo) extendió la cautelar. Chau 7D. El gobierno, desesperado, pidió per saltum, es decir, que la Corte se pronuncie sobre la cautelar extendida por la Cámara. La Corte dijo que no, que no piensa agarrar una cautelar y que va a esperar la resolución sobre la cuestión de fondo (otra actitud que era de esperar). Cristina y el ministro de Justicia Alak se quejaron amargamente contra los “fierros judiciales”. Todos los implicados se dan cuenta de que los tiempos urgen. El 11 de diciembre, el fiscal Uriarte, de la causa “de fondo”, dice que la ley vale, y obliga al juez Alfonso a pronunciarse. La idea de Alfonso era esperar hasta marzo, pero como están las cosas, tal vez su fallo salga antes que este periódico (13 de diciembre). Mientras tanto, el gobierno apela ante la

misma Cámara pro Clarín para que ésta le permita llevar a la Corte la cuestión de la cautelar (¡no la cuestión de fondo!) que la misma Corte se había negado a aceptar per saltum. Es decir, el gobierno hace una ley de per saltum para saltearse a la Cámara y poder ir derecho a la Corte, y ahora recorre el camino inverso. Los enredos judiciales prometen seguir: si Alfonso dice que la ley es constitucional (lo más probable hoy), el que va a apelar a la Cámara pro Clarín es… Clarín. Y como la Cámara pro Clarín seguramente dará vuelta el fallo, el gobierno terminará apelando a la Corte Suprema por la causa “de fondo”, es decir, la constitucionalidad. Entretanto, sólo Dios sabe qué habrá pasado con la cautelar a esa altura de los recursos, apelaciones y recontraapelaciones. El final de la cosa va a ser, entonces, cuando –salvo que la cautelar haya caído en alguno de todos los pasos anteriores– la Corte Suprema termine recibiendo la causa de fondo y dictamine si la Ley de Medios es constitucional o no. ¿Cuándo va a ser eso? Cálculo hiperoptimista de los K: enero. Cálculo más realista: marzo. Cálculo especulativo, pero en absoluto descabellado: septiembre de 2013. Un mes antes de las elecciones nacionales. Si el amable lector quedó algo mareado de tanto dar vueltas en este minué-vals-contradanza infernal que es el laberinto judicial, lo invitamos al tema siguiente. Ánimo: es más político y más entendible. LA

VERDADERA

FONDO” DE LA

“CUESTIÓN DE LEY DE MEDIOS

Las palabras “cuestión de fondo” van a sonar mucho en esta causa, pero en verdad sólo se referirán a una cuestión de forma: si la ley es “constitucional” o no. En realidad, esa discusión, en abstracto, es eterna y escolástica, como el sexo de los ángeles. En última instancia, como en toda cuestión judicial profunda, los elementos políticos son imposibles de eliminar, se trate de la Ley de Medios, de la causa de los fondos buitre en el juzgado de Griesa o de la reincorporación de Maxi Cisneros a Firestone. Como dice un analista de derecha, para la propia Corte Suprema “este entuerto parece más político que jurídico” (I. Zuleta, Ámbito Financiero, 12-12). Lo que se decide aquí no es la cuestión filosófica de si concuerdan o no la cláusula de desinversión de la ley y el derecho de propiedad, sino la cuestión política de aceptar que sea el gobierno quien le recorte poder económico, mediático y (por esas dos razones) polí-

tico al Grupo Clarín. Esa decisión no está tomada aún. Por ahora, lo que hace la “corporación judicial” es marcarle límites al gobierno en cuanto a lo formal, al procedimiento: los asuntos judiciales se resuelven a la manera judicial y por el Poder Judicial, no a la manera kirchnerista y por el Poder Ejecutivo. Ése es el mensaje de la Corte con la denegación del per saltum. De allí en más, y en cuanto a la cuestión de si la ley quedará vigente o no, se abre un tortuoso y más o menos largo camino de negociación… política, en la que influirá no sólo el lobby de Clarín y las presiones oficiales, sino el ambiente político más general. Pero, como dijimos, en último análisis la cuestión de fondo es otra, y es muy simple: si la Ley de Medios se aplica en su totalidad y los “monopolios” se ven a obligados a “desinvertir”, ¿qué saldrá de eso? ¿Acaso la “democratización de medios” y la “pluralidad de voces” que pregonan los K? En suma: ¿qué panorama de medios quedará si se aplica la ley? Pues bien, si los “planes de adecuación” que presentaron los “monopolios” que sí aceptan la Ley de Medios son guía de algo, hay que decir ahora mismo que la “explosión de nuevos medios de comunicación” puede quedar, también aquí, en un suave y amargo quejido. Vayamos a los hechos.Varios grupos de medios presentaron –para beneplácito del gobierno, que los mostraba como empresarios serios y respetuosos de la ley– sus planes de adecuación, es decir, de qué modo pensaban desprenderse de las licencias en exceso que tienen hoy. Pues bien, al ver esos planes incluso superficialmente es difícil imaginarse una burla más grosera a la ley, a las legítimas expectativas de muchos trabajadores del sector y a la población en general. Es sabido que cuando algún

empresario no quiere poner la cara (es decir, el nombre) en algún emprendimiento no muy lícito recurre a testaferros, prestanombres. En este caso, ni eso. Ni siquiera se toman la molestia de fingir que desguazan su multimedios para ponerlo a nombre de alguien secretamente vinculado al empresario en cuestión. El vínculo del nuevo “propietario” con el viejo no es secreto, sino público. Hasta tienen el mismo apellido. ¡Son sus propios parientes y socios! ¡Ni testaferros necesitan! Uno de los pulpos mediáticos más importantes es el Grupo Uno, encabezado por Daniel Vila y José Luis Manzano. Pues bien, su propuesta consiste en “repartir entre sus socios las licencias en conflicto con la normativa. Es decir, disolver el actuar grupo y cambiar las razones jurídicas (…) Como primera medida, la cableoperadora Supercanal se quedaría con sólo 18 licencias de cable y Manzano tendría el 7,5% de las acciones y el resto se distribuirá entre los acreedores del concurso de acreedores y otros socios minoritarios. Alfredo Vila Santander, hermano del actual presidente de Supercanal, conformaría una sociedad independiente a la cableoperadora para operar otras 15 licencias de cable y 7 de radio en el interior del país. Por otra parte, Daniel Vila (…) armaría otra sociedad con Manzano para operar seis licencias: América TV (junto a su actual socio Francisco de Narváez) y radio La Red junto a sus subsidiarias en el interior del país. Por último, se propuso que Barbarita Vila (hija de Daniel) quede como titular de una licencia de una radio FM en Cuyo” (lapoliticaonline de La Plata, 2-12). Con ser el caso más escandaloso, no es el único. El Grupo Indalo, del empresario K Cristóbal López, el grupo La Capital y el Grupo Ick, entre otros, presentaron planes con modalidades similares.

¿Qué dijo Martín Sabbatella, titular de la AFSCA, ente encargado del asunto? ¿Acaso que no iba a aceptar como válidos planes que representan una tomadura de pelo? Nada de eso: no hubo ningún cuestionamiento y sí muchos elogios y, sobre todo, comparaciones entre estos buenos empresarios y el malvado Magnetto. Aquí es donde se ven, finalmente, los límites de la Ley de Medios kirchnerista. El objetivo esencial de ésta no es (y probablemente no lo fue nunca, salvo para los que de buena fe influyeron en la redacción de la ley) “democratizar los medios” y “profundizar el pluralismo”, sino reventar a Clarín. Y si hay otros empresarios que, como Clarín, también son monopólicos, también acaparan más licencias de las permitidas, también tienen prácticas antidemocráticas brutales con sus trabajadores (ver el reciente conflicto en La Capital de Rosario), pero que, a diferencia de Clarín, sí están dispuestos a jugar el juego de los medios con las reglas que ponga el gobierno, entonces se le acepta cualquier disparate. Porque no otra cosa son los “planes de adecuación” que se conocen. Entonces, los trabajadores de prensa y el público en general deben tener en claro que en la guerra gobierno-Clarín son convidados de piedra, si en aras de la “madre de todas las batallas” el kirchnerismo termina vaciando de contenido incluso su propia ley. Una vez más, queda claro que para una verdadera democratización y desmonopolización del panorama, para una defensa sustantiva de los derechos de los trabajadores de prensa y de la audiencia, el camino no es “tomar partido” por el “mal menor” sino dar pasos en la constitución de un polo independiente del kirchnerismo y de los patrones, se lleven bien o mal con el gobierno. MARCELO YUNES


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GRAN ACTO EN FIRESTONE HABLA MARCELO QUIROZ, EX DELEGADO DE FATE Y MIEMBRO DE LA LISTA MARRÓN

“¡Abran ya la

“Maxi Cisneros representa a la nueva generación obrera”

B

uenos compañeros, como dijo acá el compañero “Mosqui”, yo soy trabajador de FATE, ex delegado de la Lista Marrón, estuve en la Lista Nacional Marrón, integré la lista en las elecciones de la CTA, integré la Lista 5, una experiencia muy linda, independiente. “Maxi” Cisneros, para mí representa a la nueva generación obrera, a la nueva clase obrera, la recomposición que empieza a criticar y cuestionar a la burocracia sindical, a criticar a los patrones y a plantarse para mejorar, no solamente las condiciones laborales, sino también por el salario y pelear contra el Impuesto a las Ganancias, como se está peleando ahora. En FATE tenemos un problema, como en todo el gremio, pasa en Pirelli, pasa en Firestone, bueno, yo soy empleado en el sector Tractor, ahí hay muchos compañeros que están con hernias de disco. Son compañeros que entran sanos y después la empresa los vomita hechos mierda para decirlo mal y pronto. Están 6

meses con licencia, después les dejan de pagar y hacen todo para que renuncien o arreglen, esa es la situación allá. Ahora en cuanto al día 20, me parece que el día 20 tenemos que salir, la clase obrera.Yo en el 2001 lo sufrí mucho, estaba con poco laburo, veía todo por TV, sentía impotencia desde mi casa, pero claro, era inconsciente de lo que pasaba, pero quería pelearla, quería saber qué era lo que estaba pasando. Hoy en día, soy un poco más conciente, y me parece que a la nueva clase obrera, a la nueva generación, a la recomposición hay que darle una salida obrera muy importante el 20. Y bueno, saludar a “Maxi” por lo que logró el compañero, no es que está solo. Allá en FATE también estuvimos todo el cuerpo de delegados quincena a quincena poniendo la urna haciendo un nexo con los compañeros para que no pierdan la sensibilidad con los trabajadores despedidos de afuera y esa fue la ayuda que se

E le dio a los compañeros que estaban despedidos desde el 2008. Fue una pelea dura, se hicieron movilizaciones y se luchó, se luchó adentro, se luchó afuera, se hicieron movilizaciones para que los compañeros pudieran entrar, más allá de lo que dijo la justicia, que también es importante, pero si no se lucha es muy difícil. El compañero “Maxi” no está solo, él como yo estamos organizados en una organización política porque yo creo que el camino no es sólo sindical para solucionar los problemas del país, los problemas globales, la salida para mí, compañeros, es el socialismo.

“Saludamos el inmenso paso que se está dando” el jugo que le han dado. Entonces me parece que a las patronales ahí hay que ponerles freno. (...) Yo creo que va haber un antes y un después de la entrada del compañero Cisneros a Firestone, va a haber un envión anímico en los trabajadores de Firestone, a través de la reincorporación de Cisneros, y yo creo que a través de Cisneros va a haber que organizarse en el gremio para dar la pelea a la burocracia que en estos momentos no está acompañando al compañero, que es la Lista Violeta. (...) Nosotros vamos a estar acá, compañeras y compañeros, cuando ingrese y yo creo que en el corto plazo va a entrar y va a ser un antes y un después en la fá-

brica Firestone, y los compañeros van a estar muy contentos con el ingreso del compañero que está dando una lucha ejemplar.

HABLA MARINA, MIEMBRO DE LA JUNTA INTERNA DE PROMOCIÓN SOCIAL DE ATE CAPITAL

“Estamos dando una pelea muy grande contra la persecución”

H

ola compañeras y compañeros, yo soy delegada de la Junta de Promoción Social de la Ciudad, estoy acá apoyando la pelea que se está dando por la reincorporación de Maxi. Allá nosotros estamos dando una pelea muy grande contra la persecución. Tenemos cuatro compañeros despedidos por los que venimos

que antes de entrar a su puesto de trabajo se quedaron presenciando el acto. En cualquier caso, todo el mundo se enteró del acto, porque la empresa volvió a sacar la gente por el portón de atrás porque había un “acto de los zurdos”… La jornada tuvo importancia también hacia el exterior de la planta, ya que logró una presencia de las distintas organizaciones políticas y sindicales junto a distintos sectores de la vanguardia, quienes participaron con su voz en el acto, y numerosas declaraciones de solidaridad se pronunciaron a favor de la reincorporación de “Maxi” a su fuente de trabajo. Es en este marco que durante el acto tomaron la palabra distintas expresiones como los compañeros colectiveros de la Línea 60,

HABLA MAXI CISNEROS

¡Cada vez estamos

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HABLA MAXIMILIANO BRUONZOLI DE LA SECCIONAL SAN FERNANDO DEL SUTNA

(...) Hoy por hoy, quedó demostrada la actividad sindical del compañero y eso es un indicio de una pelea larga que van a dar los compañeros a través de su reincorporación de su más referente compañero, que tiene la Lista Naranja acá en Firestone que es el compañero Maxi Cisneros. (...) Nosotros en cada acto o en cada movilización que van a hacer acá en la puerta para exigir su reincorporación, nosotros vamos a estar acá presentes. (...) Yo creo que hay organizarse para poder enfrentar a la burocracia, enfrentar a las patronales que sacan el jugo a los trabajadores, los explotan y después los sacan a la calle, después de que le sacan

l pasado lunes 10 de diciembre, finalmente se realizó el acto en la puerta de la fábrica Firestone para exigir que la multinacional japonesa cumpla el fallo judicial dictado por la jueza Patricia Russo en el que ordena la reinstalación a su puesto de trabajo a nuestro compañero Maxi Cisneros. Este acto tuvo una importancia enorme tanto dentro como fuera de la planta. Muchos trabajadores mostraban su alegría tras el fallo y anunciaban su presencia, que condiciones climáticas adversas mediante y que nos obligó a la reprogramación de la actividad, fue garantizada. Durante el mismo se pudo ver a una parte de los compañeros de la Lista Naranja, junto a trabajadores

peleando ya hace algunos meses, así que bueno, lo de hoy es muy importante, no sólo por la pelea que se está dando acá en la fábrica Firestone, sino que es parte de la pelea que estamos dando todas y todos para sacar a patadas a la burocracia sindical. Así que bueno, ¡fuerza y sigamos peleando!

ace poco estuvimos acá para decirles que iban a tener que abrir estos portones. Cada vez estamos más cerca de eso. Venimos de conseguir un gran triunfo con este fallo que obtuvimos. Triunfo que ya lleva un año de dura lucha y si lo logramos, fue por la gran campaña que venimos desplegando. Por los actos, por las movilizaciones, por el estado público que tomó, la fuerza que está pasando acá en Firestone.Y por el apoyo que nos vienen dando los distintos sectores que vienen apoyando este reclamo. Esto nos demuestra, una vez más, la fuerza que tenemos los trabajadores cuando estamos convencidos de lo que queremos. Y por más que nos pongan las trabas de la patronal y la burocracia, cuando los trabajadores nos ponemos en movimiento somos capaces de hacer estas cosas y mucho más. ¡Eso, para los que no creían y no apoyaron y nos metieron trabas, compañeros! Les venimos a decir eso hoy: ¡cada vez estamos más cerca de volver a Firestone! Y si bien había muchos que no confiaban en eso, hoy se empiezan a dar cuenta que la realidad es otra. Algunos, conscientemente, empezaron a decir que yo no iba a volver, sobretodo la burocracia, pero muchos compañeros, ingenuamente, también creían eso. Es que los trabajadores, lamentablemente, tenemos una visión, a veces, que no es del todo real. Por las cosas que nos vienen metiendo, por las cosas con las que nos bombardean cotidianamente. Pero hay que ser claros, compañeros, en principio tenemos un enemigo que parece mucho más fuerte que nos-

otros. Pero eso cae enseguida cuando nos ponemos en movimiento.Y les demostramos de lo que somos capaces con la fuerza de nuestro reclamo. Este gran golpe que le dimos a Firestone nos va a fortalecer a todos los activistas y los luchadores de acá de la fábrica y también del gremio. Porque a partir de ahora una y mil veces van a pensar Álvarez y Cía. el día que tenga que echar a alguien por decir las cosas como son.Van a pensar una y mil veces a la hora de aumentar los ritmos de producción. Van a pensar una y mil veces que vamos a estar ahí adentro para recordárselos a cada momento que no nos van a poder usar como material descartable, que no somos perros. Y les vamos a demostrar que vamos a recuperar la


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as puertas los patrones!” ATE Sur, la Lista Roja de SUTEBA, compañeros de la Lista Negra que dirigen la seccional San Fernando del SUTNA, como así también integrantes de la Lista Marrón del Neumático, de Judiciales Clasistas, además de las distintas corrientes políticas que se acercaron a expresar la exigencia de que “Maxi” vuelva a entrar. En los numerosos discursos del acto se hizo hincapié en la importancia que tiene el hecho que el compañero vuelva a entrar a la fábrica y el rol que “Maxi” puede jugar en la recomposición obrera en la medida que la reincorporación se concrete de manera efectiva. Por eso ahora la tarea es redoblar la campaña por la reincorporación garantizando el fallo en segunda instancia que, de obtenerse, ya será de aplicación efectiva para la patronal.

más cerca de volver a Firestone!

dignidad de todos los trabajadores, porque como dijo Guillermo Silva: ¡Eso no se vende! ¡Eso no se puede vender como quieren hacer ellos constantemente! Echarnos a las calles por unos pesos. ¡Vamos a devolverle la dignidad a todos los trabajadores de Firestone y del gremio! En este camino, seguramente nos vamos a encontrar con muchos trabajadores que pasan las mismas situaciones que sufrimos nosotros acá en la fábrica. Porque sabemos que las condiciones que hay aquí adentro son muy similares a las que hay en otros lugares de trabajo también. Por eso, desde la Lista Naranja y desde la Lista Marrón vamos a apoyar esa

pelea también, en los distintos lugares de trabajo donde se están dando. Porque tomamos nota que hay un proceso que se está dando y que excede a esta fábrica. Que en distintos lugares de trabajo, con las injusticias que pasan como acá en Firestone, hay muchos compañeros que se están empezando a rebelar, que están empezando a decir las cosas como son. Nosotros también vamos a aportar a esa tarea. Vamos a poner nuestro granito de arena para acabar con la flexibilización laboral, con los accidentes de trabajo y con las tantas injusticias que surgen y pasan en otros lugares de trabajo. Esa es la tarea estratégica que te-

nemos que dar. Es parte de una herencia que hemos heredado los jóvenes producto de las políticas neoliberales que nos han impuesto. Políticas que al día de hoy perduran. A pesar de que el gobierno se encargue de decir, o nos quiera vender otro relato. Hoy sabemos, y nosotros tenemos en claro que es el gobierno que mantiene el Impuesto a las Ganancias. Este es el gobierno que nos fija techos salariales y que hace que nuestros salarios estén muy por detrás de lo que tendrían que ser, que hace que no lleguemos a fin de mes. Sabemos que es el gobierno que sanciona las leyes para estas patronales, donde le pone precio a nuestras vidas. En vez de estar viendo cómo se previenen los accidentes y las enfermedades laborales. Nosotros sabemos que este gobierno está con las patronales y cada vez somos más los trabajadores que nos damos cuenta que no podemos confiar en este gobierno. Por eso, también vamos a hacer eso: le vamos a decir a todos los gobiernos y a las patronales que nosotros nos vamos a plantar contra ellos, que no podemos confiar en estos gobiernos los trabajadores. Tenemos que tener bien en claro quiénes son nuestros enemigos y quiénes son nuestros aliados. Por eso, esta semana y no casualmente desde la Seccional, que hoy ni vino a filmar, apagaron las luces directamente; sacaron un comunicado diciendo que el fallo por mi reinstalación se debía a que algo

está cambiando, que a raíz de que, supuestamente, los jueces son más progresistas en este gobierno y ahora, bueno, están fallando a favor de los trabajadores. Nosotros les venimos a decir, y eso lo saben, que nosotros confiamos en la lucha y no en los jueces. Nosotros no confiamos en esta justicia y si llegamos hasta acá es por la lucha que venimos dando los trabajadores desde abajo. Y si la justicia está empezando a tomar nota y está sacando estos fallos, es porque desde abajo está surgiendo la realidad de nuevas comisiones internas, están surgiendo nuevos compañeros que se plantan y no se van a su casa. Eso es lo que ellos intentan distorsionar. Nos intentan hacer ver que los gobiernos, si son progresistas, están a favor nuestro. Esos son los que intentan confundirnos y crear confusiones a los trabajadores. Por eso nosotros venimos di-

ciendo lo contrario, compañeros: llegamos hasta acá no gracias a la justicia, menos gracias a ellos. Llegamos acá gracias a la gran campaña que venimos haciendo, gracias al apoyo que nos vienen dando los compañeros que vienen acompañando este reclamo, gracias a los compañeros de la Lista Marrón y de la Lista Naranja y de todas las listas opositoras del gremio, sobre todo de las organizaciones políticas que también vienen acompañando. Bueno compañeros, agradecerles nuevamente, decirles que no hay que bajar los brazos ahora, que muy pronto, pero muy pronto, voy a volver ingresar, que el próximo acto lo vamos a realizar acá, en la puerta de la fábrica, vamos a hacer efectivo el fallo, cuando reingrese nuevamente a Firestone. Gracias a todos los compañeros y compañeras que vienen acompañando esto y nos vemos en la próxima, compañeros.


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HABLA GUILLERMO SILVA, DELEGADO DE FATE Y MIEMBRO DE LA LISTA MARRÓN

“Maxi es un ejemplo de que no todo se compra o se vende”

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ste es un ejemplo que nos pasa cuando los trabajadores nos organizamos, luchamos, que esto se debe gracias a lucha y no a la justicia burguesa, porque acá hay miles y miles de compañeros procesados por luchar. “Maxi” es un ejemplo de que no todo se compra o se vende… que a pesar de las mil y una que pasamos tenemos nuestras convicciones y principios bien firmes. Que sabemos adónde apuntamos y de

qué lado estamos, y que la chispa sigue viva y esto sigue, no es el principio ni el final. Que la patronal y la burocracia sepan que vamos a seguir luchando, que vamos a pelear por nuestros derechos, que vamos a tratar que nuestros compañeros tomen conciencia de todas estas situaciones, de para qué está la patronal, para qué está el gobierno, para qué la burocracia. Nada más compañeros.

DERECHO, MARXISMO Y LUCHA DE CLASES: ANÁLISIS EL FALLO EN PRIMERA INS

Un enorme triunfo que es sólo

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on fecha del 14 de noviembre pasado, la titular del Juzgado de Trabajo 27, falló en primera instancia en favor de la reincorporación de nuestro compañero Maximiliano Cisneros en Bridgestone con la consideración de que su despido fue “discriminatorio”. Posteriormente, la empresa apeló el fallo y la jueza dio lugar a la apelación de manera “suspensiva”: la reincorporación no ocurrirá ahora sino que habrá que seguir la pelea en la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo durante los primeros meses del 2013 para lograrlo. Si la cámara fallara a favor de Maxi –y este fallo en primera instancia, al ser tan contundente, indica que esto puede ocurrir, aunque nunca hay certezas–, la empresa se vería obligada finalmente a acatar la orden de reincorporación del compañero. En conclusión: tenemos un primer y enorme triunfo que sienta un importantísimo precedente para lo que se viene, pero que es todavía la mitad de la pelea. Mientras redoblamos la lucha por que se efectivice la reincorporación del compañero, queremos detenernos a hacer un comentario acerca del fallo. Para ello, haremos primero un somero análisis de las consideraciones marxistas acerca del derecho burgués, aun sin ser especialistas en el tema. MARXISMO Y DERECHO LABORAL

DIEGO BRIZUELA, INTEGRANTE DE JUDICIALES CLASISTAS

La persecución no es una situación que se pueda resolver solamente en el ámbito de la justicia

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pesar de haber obtenido la victoria en la justicia, con el fallo que ordena a la empresa la reincorporación de “Maxi” Cisneros, organizamos hoy este acto para exigirle a la patronal y no esperamos de brazos cruzados que cumplan la sentencia porque no confiamos en ella.Y expresamos de esta manera con este acto la exigencia de que se cumpla de manera inmediata el fallo. (...) La situación, la persecución que ha sufrido el compañero “Maxi” no es una situación aislada, una situación individual, una situación que se pueda resolver solamente en el ámbito de la justicia, sino que hay muchos compañeros, en las empresas, y también en el empleo público, que vienen sufriendo la misma situación: despidos, cesantías, en definitiva: ¡la persecución político gremial, compañeros! (...) No es casualidad que la burocracia siga intacta

en sus lugares, cómodamente negociando con la patronal, y que seamos los compañeros que expresamos el desarrollo y el avance del clasismo en los distintos gremios los que terminamos siendo perseguidos. (...) Nosotros creemos que tenemos que trabajar para que ante cada persecución en cada lugar de trabajo al activismo, podamos dar también una respuesta colectiva, para decir basta a la persecución político gremial, compañeros. (...) la patronal advierte que por parte del gobierno hay una política de ataque a los trabajadores con políticas anti-obreras, es indudable compañeros que tenemos que tener que estar organizados para enfrentar a la patronal, porque van a seguir avanzando. Entonces, como cantaban hace un rato: ¡Que abran bien las puertas los patrones que ya vuelve “Maxi” a Firestone, carajo!

Partamos de señalar la posición de principios que es que los marxistas no confiamos en la justicia patronal. Esto parte de la base que el derecho en la sociedad capitalista no deja de ser una forma superestructural que, más allá de que pueda gozar de cierta “autonomía relativa” respecto de las relaciones económicas, sanciona las relaciones sociales imperantes en el sistema, que son las de la propiedad privada capitalista y la explotación del trabajo asalariado. El derecho y todo el sistema de justicia, incluyendo la justicia laboral, consagran el imperio irrestricto de la propiedad privada y su consecuencia: el derecho de contratación de las patronales, dueños de los medios de producción. Sin embargo, esta relación entre economía y derecho en el capitalismo no es nunca tan mecánica. No solamente está mediatizada por las circunstancias políticas cambiantes, sino que el derecho mismo tiene su especificidad. Existen doctrinas diversas que imperan en distintos tiempos y momentos políticos. Esto es así sobre todo cuando hablamos de un derecho como el laboral, que tiene como elemento constitutivo la idea de que su materia específica es “tutelar las relaciones entre pa-

tronos y obreros”; o, incluso, ir más allá: tutelar sobre todo la situación de los “más débiles” (según sus palabras), que vendrían a ser los trabajadores. Esta representación de las relaciones laborales obrero-patronales conforma una ideología metida en la cabeza de los trabajadores desde hace décadas (en la Argentina el que más trabajó históricamente en este sentido ha sido, obviamente, el peronismo), en el sentido de que hay que “confiar en la justicia y el Ministerio de Trabajo”, y no se puede dar paso alguno sin pasar por alguna instancia de estas instituciones. Se trata de una ideología. Pero también de una realidad material que no se puede desconocer, so pena de infantilismo. Porque realmente las relaciones entre el trabajador y el dueño de la empresa, amén del sindicato mismo, están institucionalizadas, mediatizadas por un “tercer actor”, el Estado (y el derecho). Esto significa que la justicia laboral y el Ministerio de Trabajo son parte real de las relaciones establecidas entre “ambos actores” (obreros y patronos) por intermedio de las paritarias, el establecimiento de permisos sindicales, las representaciones sindicales, las conciliaciones obligatorias, y un largo etcétera. Esas instancias no pueden pasarse por alto a la hora de reclamar o luchar, más allá de que los socialistas revolucionarios debemos educar siempre en que la única garantía que tienen los trabajadores es la lucha misma: nunca podría ser confiar en estas instancias, que son en definitiva instituciones del Estado que garantiza la continuidad del capitalismo. DERECHO LABORAL Y REBELIÓN POPULAR

Sin embargo, como señalábamos arriba, esta relación entre estado, economía capitalista y derecho está mediada siempre por las circunstancias políticas. En condiciones dictatoriales o de gran estabilidad, evidentemente la “autonomía” relativa del derecho laboral es muy limitada o más bien directamente nula, por lo que pasa a ser una instancia que no es más que mero trámite en el que nada se podría obtener. Pero en las condiciones como las que se están viviendo en el país creadas por la rebelión del 2001 (rebelión popular que significó un giro a la izquierda del conjunto del cuadrante nacional), el derecho laboral adquirió una mayor autonomía relativa. Esto ha podido observarse en casos como la reinstalación de compañeros activistas de FATE despedidos en el conflicto del neumático del 2008, y ha sido subproducto de varias razones, tanto locales como in-

ternacionales. Localmente, la clase trabajadora recuperó capacidad de lucha y algunos sectores lograron, incluso, legalizar la expropiación de plantas abandonadas por sus patrones. Se ha tratado de una lucha durísima, y, además, esa legalización invariablemente se ha hecho bajo la forma de cooperativas de producción que las deja sin financiamiento y aisladas frente a la competencia capitalista, como forma de reventarlas a mediano plazo y que se reabsorban en una propiedad privada, por así decirlo,“tradicional”. La forma misma de la cooperativa como “primera expresión de emancipación del trabajo de la propiedad privada”, como la caracterizaba Marx (aunque esa propiedad privada no es abolida sino más bien entregada al colectivo de trabajadores), no es la más común en circunstancias normales. En cualquier caso, se han venido logrando fallos que sentaron precedente, también en el sentido de cuestionar la potestad del empresario de despedir arbitrariamente trabajadores que sus compañeros visualizan como cumpliendo funciones de delegado, más allá de que no lo sean formalmente. A estas condiciones locales más favorables creadas por la lucha de clases misma se le han sumado ciertas disposiciones internacionales del derecho laboral, que incluso se han visto influenciadas por elementos que en materia legal vienen de un ámbito completamente distinto al laboral, el de los derechos humanos. Explicaremos esto más abajo como “eco” de determinadas relaciones de fuerzas o “sensibilidades” en obra internacionalmente hoy. Expresan o reflejan un determinado “espíritu de época” que hace a la evolución de la legislación laboral internacionalmente, y que también opera como elemento político que se introduce estableciendo matices en la relación entre economía, derecho y Estado. PROGRESISMO Y LEGITIMACIÓN En nuestro país se vive un momento con un matiz “progresista” en materia laboral, que se desprende todo el contexto señalado. Pero ese matiz “progresista”, que da elementos para explicar fallos como el de Maxi, en ningún modo cuestiona los fundamentos de la explotación capitalista o la propiedad privada: más bien viene a operar como elemento legitimador de ambas, eliminando sus “distorsiones” más aberrantes. Ya hemos señalado que el derecho en definitiva es una “superestructura” que sanciona legalmente las relaciones básicas del capitalismo que son las de la propiedad privada y la explotación del tra-


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STANCIA EN FAVOR DE MAXIMILIANO CISNEROS

la mitad de la pelea bajo asalariado. Sin embargo, dentro de ese contexto, hay variaciones y matices en cuanto a las “situaciones aberrantes”, que al no ser aceptadas, sirven a los objetivos más generales de legitimación del propio sistema (o, en todo caso, a “absorber” conquistas logradas en la lucha dentro del cuerpo legal general, como veremos más abajo). El Estado capitalista y el fuero laboral aparecen así realimentando la ilusión de su “neutralidad” entre patrones y obreros, para que estos últimos confíen en él y no en su acción directa. Y sin embargo, sería un necio absoluto y ridículo en condiciones de normalidad burguesa y no abiertamente revolucionarias, no utilizar ese terreno –como utilizamos la palestra parlamentaria– para hacer un uso revolucionario incluso del mínimo matiz para, como en este caso, sancionar legalmente la reincorporación de nuestro compañero. Parte de esto mismo es que en determinadas circunstancias históricas, las leyes y el derecho mismo pueden terminar sancionando conquistas, directas o indirectas, de los explotados y oprimidos. Esta sanción legal siempre tendrá dos caras: por un lado cristalizará conquistas y eso es un enorme triunfo; por el otro las introduce dentro de un articulado legal que, en definitiva y en su totalidad, es que el que sanciona la continuidad del orden capitalista. Sin embargo, nuevamente aquí el que se opusiera a la sanción de estos triunfos, aun parciales, sería un ultraizquierdista sin remedio. Lo que corresponde es más bien insistir en que ese nuevo derecho adquirido no fue una graciosa concesión de nadie desde arriba, sino un subproducto de la lucha desde abajo, y que la única manera de evitar que éstas y otras conquistas se pierdan es con la transformación socialista de la sociedad. DERECHO Y REALIDAD, O CUANDO TODO DEPENDE DE LA LUCHA DE CLASES

De aquí se desprende otro problema, incluso teorizado por los estudiosos del derecho. ¿Cuál es la relación entre el derecho y la realidad? Porque la mayoría de las veces lo que se observa es que los supuestos “derechos” van por un lado y los hechos por el otro. Este es otro aspecto de la autonomía relativa del derecho (en este caso, su forma perversa), ya que si sanciona legalmente derechos, eso no quiere decir que se puedan concretar. Lo que está “igualado” en el mundo abstracto de las formas jurídicas permanece desigual en la realidad económica cotidiana (un obrero y un burgués tienen derecho a un voto en las elecciones; pero la influencia política del

obrero y la del burgués son completamente distintos: el primero cuenta sólo para la estadística electoral; el burgués tiene una capacidad de presión e influencias que en el marxismo siempre se ha denunciado como la “dictadura” de un puñado de empresas capitalistas sobre todo un país. Tanto Marx como el sociólogo burgués alemán Max Weber decían que el Estado no sería nada sin el monopolio de la violencia. Ese monopolio es el que les permite hacerse valer.Y el derecho funciona igual: el respeto a la propiedad privada se garantiza no sólo por la costumbre y la “naturalización” de las relaciones sociales de explotación, sino sobre todo por la amenaza de una sanción para quien la transgreda: “Si ocupan la fábrica, van a ir presos”. Pero esta materialización de las sanciones jurídicas no siempre procede, sobre todo cuando se trata de los derechos de los explotados y oprimidos que incluso cuando las obtienen deben hacerlas valer con la lucha. Demasiadas veces el derecho se va por los vericuetos procesales que en definitiva no suponen ningún cambio real, y hay que presionar con la movilización para que se hagan valer. Por ejemplo: en el caso de Maxi hemos obtenido ahora un fallo favorable en primera instancia. Sin embargo, por ahora ha quedado todo “suspendido” porque la empresa tiene la posibilidad de apelar a una segunda instancia que, dependiendo de cual de las Salas que conforman la cámara en la que caiga, procederá de una u otra manera, e incluso puede revertir en todo o en parte (aunque esto no parezca de momento lo más probable) el fallo de la jueza. Esa autonomía relativa del derecho puede operar entonces de dos formas muy distintas: en el sentido de hacerlo “presionable” para lograr sancionar legalmente conquistas o, por el contrario, que quede en un derecho abstracto que no significa ninguna modificación real. En definitiva, el logro de triunfos jurídicos y su “materialización” en la realidad sólo se pueden obtener mediante un mecanismo “extrajurídico” que es siempre el fundamental: la lucha de clases. Es decir, el desarrollo de la movilización para hacer valer esos derechos en los hechos. EL ANÁLISIS DEL MAXI CISNEROS

FALLO SOBRE

Vayamos ahora al fallo. Cualquiera que lo haya leído se dará cuenta de que es una verdadera pieza política: reconstruye toda la experiencia de la Lista Marrón y la Naranja como opositoras en el neumático, consecuentemente antipatronales. Tiene, básicamente, dos andariveles: uno “doctrinario” o concep-

tual, con la evaluación médica de nuestro compañero, y el análisis específico de la situación “discriminatoria”. Desde el punto de vista médico, le hace honor al perito de cargo por no haberse dejado “influenciar” (las comillas pueden querer decir varias cosas…) por la empresa. El fallo muestra que incluso los propios análisis ordenados por la empresa mostraban que la “lesión” de Maxi era algo transitorio, subproducto del esfuerzo laboral de una empresa del neumático, y no algo “permanente”, como alegó, contra toda prueba, la patronal. La jueza reconoce palmariamente que se trataba de algo que pasaba con unos días de reposo. El fallo desmiente toda la defensa de la patronal: muestra la falsedad de haber esgrimido una lesión “permanente” donde sólo había una suerte de esguince lumbar transitorio producto del esfuerzo laboral; incluso el propio jefe de personal reconoció ante la jueza que cada día Bridgestone tiene “cien posiciones para tareas livianas, pero no tenía ninguna para Cisneros”. Si desde el punto de vista fáctico lo anterior es categórico, más interesante es la cuestión “doctrinaria”. Porque en la última década se han logrado una serie de fallos favorables a la reinstalación de compañeros y compañeras trabajadoras por despidos arbitrarios. El fallo de la jueza Russo tomó como antecedente principal un recurso promovido por los compañeros del ALI (Abogados Laboralistas de Izquierda, organismo integrante de nuestro partido y representantes de Maxi), Leonardo Sinistri y Daniel Martinez, en el conocido caso Parra Vera. Un caso que habiendo llegado a la Corte Suprema de Justicia, sentó jurisprudencia ordenando la reinstalación laboral de esta compañera despedida injustamente por cumplir –en los hechos– tareas de delegada sindical. DISCRIMINACIÓN Y LIBERTAD SINDICAL

Hay tres aspectos de importancia. El primero es la figura de la “discriminación”, considerada como un derecho humano. Esta figura se ha introducido al derecho laboral desde un campo completamente ajeno: el campo de la condena internacional a las circunstancias de genocidio o discriminación de minorías como mujeres y negros y que están en “estado jurídico internacional” en distintos ámbitos. A la Argentina ha llegado por intermedio del acogimiento de la Constitución Nacional de 1994 del Pacto de San José de Costa Rica, que estableció una serie de derechos con rango constitucional. Se considera así “discriminatorio” según los parámetros de la ley 23592 al despido arbitrario, que responde a causas ajenas a las cuestiones estrictamente laborales, tales como raza, religión, nacionalidad, ideología, opinión política o

gremial, sexo, posición económica, condición social o caracteres físicos. Lo interesante del caso es que aquí se produce una colisión jurídica entre la figura de la discriminación y el derecho de contratación laboral de la empresa que proviene de la propiedad privada. En el fallo de la Jueza, citando el caso Parra Vera y otros de la última década, lo que se dice es que la “reparación del daño causado por el comportamiento discriminatorio de la empresa” solamente se logra reinstalando al trabajador en su puesto de trabajo, porque el despido es el acto discriminatorio por su reales causas –actividad sindical-; por ende, mantener el despido vigente es mantener la discriminación. Ante objeciones de que esto pasaría por encima de los derechos de libre contratación empresaria, y que la solución para evitar esta circunstancia es “indemnizar al trabajador”, el fallo responde estableciendo un límite a ese derecho burgués clásico de libre contratación (aquí reaparece la autonomía relativa del derecho), considerando que el “derecho a la no discriminación” está, en opinión de la jueza, por encima del derecho de contratación. Así, la dignidad del trabajador despedido injustamente “no tiene precio”, y la única manera de solucionar el daño causado es volver a la situación anterior: que el trabajador vuelva a su lugar de trabajo. En el último acto del lunes 10 se señaló esto como el ejemplo de Maxi frente a sus compañeros de “no venderse”: ¡la dignidad del trabajador no se compra ni se vende! Pero el fallo incorpora una tercera determinación. Se trata de la legislación laboral internacional que sanciona la “libertad sindical”. No es ninguna “legislación izquierdista” ni nada parecido: las formas de organización sindical de los trabajadores nunca son buenas o malas en si mismas, dependen de las circunstancias. Las progresivas, en cada caso, son las que responden mejor a las necesidades de la lucha. De ahí que siempre se revolucionen las viejas o surjan nuevas organizaciones en condiciones de ascenso obrero; ni hablar si es revolucionario. La OIT apunta más bien a una legislación con rasgos “liberal-progresistas” del estilo de la “democratización” que promueven organizaciones como la CTA. Al parecer, la burocracia laboral internacional considera que este

“modelo” se ajustaría mejor a los tiempos que corren de mundialización capitalista, así como a los aires “progresistas” que también marcan hoy día la tónica mundial. La “libertad sindical” tiene dos caras. Si por un lado puede siempre fragmentar las organizaciones obreras. Por el otro, abre brechas y posibilita el debilitamiento de las organizaciones y burocracia tradicionales. El efecto final dependerá de las condiciones de la lucha de clases en cada momento. Es en este último sentido positivo que esta legislación impactó en el caso Parra Vera, y ahora en el fallo de la jueza. Porque la Dra. Russo explícitamente ubica a nuestro compañero como opositor y rechaza la idea esgrimida por la patronal de que “los únicos delegados existentes pueden ser los del SUTNA”. El fallo dice no: aunque sea de otro sindicato o de una lista opositora, y aunque no sea delegado “formal”, si el trabajador venía cumpliendo en los hechos un rol de representación de sus compañeros, se trata de un caso de libertad sindical y el despido es doblemente discriminatorio. SÓLO

SE PUEDE CONFIAR EN LA

MOVILIZACIÓN

Estos son los fundamentos del fallo que ahora en segunda instancia la empresa tratará de revertir. Sabemos que Bridgestone-Firestone es una multinacional poderosísima que va a mover cielo y tierra para evitar la reincorporación de nuestro compañero. También sabemos que con el sorteo el caso puede caer en una Sala reaccionaria que pretenda dar vuelta las cosas. Como ya explicamos, el derecho solamente goza de una autonomía relativa, cuyos límites están marcados por el imperio de la propiedad privada de los capitalistas y, en el otro extremo, por las relaciones de fuerzas más generales y las luchas. En cualquier caso, el enorme triunfo logrado en la primera instancia hay que ponerlo al servicio no de cualquier “confianza” en la justicia patronal, sino de avanzar en el trabajo de concientización y movilización de los compañeros dentro de la planta, y en redoblar la campaña nacional que desde el nuevo MAS venimos llevando adelante, garantía última de la reincorporación de nuestro compañero. Roberto Sáenz


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FRANCIA

¿Qué oposición de izquierda al gobierno de Hollande? Socialisme ou Barbarie – France, diciembre 2012

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omo hemos señalado en la editorial, la combinación de las esperanzas iniciales en el gobierno de Hollande y la política de austeridad cada vez más profunda que lleva adelante, comienza a desarrollar una desconfianza creciente de cara al gobierno y su pérdida de legitimidad. Esto puede estimular en los próximos meses la emergencia de opciones políticas a izquierda y a derecha del gobierno, un proceso que se verifica en los otros países de Europa (centralmente Grecia, con el desplome del sistema bipartidista tradicional). El debate sobre cómo capitalizar la crisis del gobierno, y qué oposición de izquierda construir es esencial entre los revolucionarios.

presas es más importante que la vida de millones de trabajadores, que no se puede ir más allá de la propiedad privada. “Si estás en buena salud, señor patrón, te pedimos la cortesía de no despedir a los pobres obreros, pero si tenés dificultades para seguir exprimiendo a los trabajadores y realizar ganancias multimillonarias, adelante, despedid sin problemas.” La única solución al problema del desempleo, es la prohibición de los despidos y la nacionalización bajo control obrero de las empresas que despidan, pero eso significa atacar el corazón del sistema capitalista, algo que el Front de Gauche no quiere hacer.

EL FRONT DE GAUCHE: UN PROYECTO REFORMISTA, CÓMPLICE DEL GOBIERNO DE HOLLANDE

O REVOLUCIÓN EN LAS CALLES

REVOLUCIÓN EN LAS URNAS

El Front de Gauche generó muchas expectativas entre los militantes de izquierda, con su fraseología revolucionaria y su relativamente buen desempeño electoral (el llamado a la revolución ciudadana, la publicación del libro “Que se vayan todos !”, frase utilizada durante la rebelión popular en Argentina en 2001). Sin embargo, luego de las elecciones legislativas (Melenchon había llamado a votar a Hollande en la segunda vuelta), el Front de Gauche mostró claramente qué rol juega frente al gobierno, por ejemplo, con el voto de “abstención constructiva” frente a la constitución del gobierno, declarando que el objetivo no era “salir de una mayoría de izquierda sino hacer proposiciones precisas que estén en el corazón de la izquierda”. Es decir, que el Front de Gauche entiende su actividad solo como un apoyo crítico al gobierno Hollande, con la idea de empujar al gobierno hacia la izquierda. Esto no es sorprendente: Melenchon viene de ser dirigente del PS durante años y ha sido ministro del gobierno Jospin entre 2000 y 2002. El Front de Gauche muestra su carácter reformista también con sus posiciones en relación a uno de los temas más importantes de la actualidad: los despidos y la desocupación. En relación a los despidos, el Front de Gauche tiene el proyecto de prohibición de los despidos “boursiers”, es decir, los despidos llevados adelante por empresas que obtienen ganancias. El problema es que de esa manera, se acepta que una empresa “en dificultades” despida sin problemas. Pero, en el cuadro de la crisis internacional, es posible que las empresas sean, desde el punto de vista capitalista, no rentables y que sean entonces “obligadas” a despedir. Si permanecemos en el marco de la lógica capitalista, esto significa que la ganancia de las em-

Estos aspectos reformistas del programa del Front de Gauche remiten a una discusión más profunda sobre los métodos de lucha. Es que el Front de Gauche considera la lucha como un ejercicio puramente parlamentario, donde los parlamentarios serían los "salvadores del pueblo" y tan sólo tenemos que votar en las elecciones burguesas y luego quedarnos en nuestras casas. Para el Front de Gauche, las instituciones del régimen burgués son el único medio para la transformación social, que puede alcanzarse a través de reformas sucesivas, para llegar a un “capitalismo de rostro humano”. Esto explica la actitud de total pasividad de las direcciones sindicales burocráticas ligadas al Front de Gauche de cara a la ola de despidos: la CGT se consagra hoy al “diálogo social” de Hollande, es decir, a negociar la austeridad con la gran patronal; durante los ataques de Sarkozy, la gran idea de Thibault, dirigente de la CGT, fue proponer convocar los “Estados Generales de la Industria”. Según estos burócratas, la negociación con la patronal serviría para mejorar la situación de los trabajadores: no escuchamos nunca hablar de huelga, movilización, ocupación, para conseguirlo. Podemos ver esta táctica parlamentaria también con respecto a la lucha contra el tratado europeo, el TSCG. La política de Melenchon fue llamar a un referéndum. Pero aunque esto parezca lo más democrático del mundo, lo cierto es que en una sociedad capitalista, la burguesía tiene a su disposición todos los medios para influir sobre los resultados: la propaganda masiva de los medios dominantes, la movilización de los aparatos de los partidos burgueses, las prebendas y las amenazas contra la población. Los referéndums dan el mismo peso a aquellos que luchan, que se organizan, que toman su destino en sus

manos, que a aquellos que se mantienen pasivos y que son más fácilmente influenciables por las herramientas del sistema. En las situaciones de desarrollo de las luchas, las elecciones sirven para sacar a la gente de las calles, terreno más favorable para los trabajadores, y meterlos en las urnas, más favorables a la burguesía. Esa es la experiencia de Mayo del 68, cuando De Gaulle logró desinflar el movimiento con la convocatoria de elecciones legislativas, maniobra a la cual contribuyó el PC, dedicando toda su energía a las elecciones; esta experiencia terminó con una victoria absoluta de los gaullistas. El método de los revolucionarios es, al contrario, impulsar la movilización independiente y la autoorganización de los trabajadores, la lucha en las calles. La política contra el tratado europeo debía ser la exigencia a las direcciones sindicales de la convocatoria a una huelga general, y el desarrollo de organizaciones independientes de la burocracia para impulsarla. Estas enseñanzas son tanto más claras en el momento en que el ejemplo de Europa muestra cuál es el verdadero rol de la democracia burguesa. En Grecia o en Italia, los parlamentos han designado gobiernos “técnicos”, que nadie votó, para aplicar la austeridad; en esos países, como en España, las medidas de los gobiernos son repudiadas por la mayoría de los trabajadores y el pueblo, y sólo se sostienen gracias a una represión policial que recrudece cada vez más. En Grecia las últimas elecciones legislativas fueron el escenario de una campaña de terror llevada adelante por los medios griegos e incluso alemanes, para aterrorizar a la población con las consecuencias “catastróficas” de una salida de Grecia de la zona euro, y han sido también utilizadas para desviar las fuertes huelgas y movilizaciones y canalizarlas por la vía electoral. La participación electoral de las corrientes revolucionarias es una herramienta a la cual no podemos renunciar: permite agrandar nuestro auditorio y realizar una agitación política entre las masas. Sin embargo, la actividad electoral no puede ser jamás la principal actividad de una organización revolucionaria: el clima electoral se puede modificar rápidamente, lo que cuenta es la construcción orgánica entre la clase obrera, la juventud, los barrios populares. Además, la política electoral no puede ser jamás un fin en sí mismo que permita abandonar una política revolucionaria de acuerdo a los cálculos electorales. Los diputados deben ser un punto de apoyo para la movilización obrera, y también una herramienta para denunciar y clarificar los límites de la democracia burguesa. Hacer creer a los trabajadores

que la solución está en las elecciones y que el único medio para mejorar las condiciones de vida es la lucha parlamentaria es un engaño y sirve para perpetuar la dominación capitalista (con o sin “rostro humano”); el control burocrático del movimiento obrero y el freno a toda iniciativa independiente y de lucha es la contra cara. La crisis del capitalismo y el carácter cada vez más antidemocrático de las “democracias” burguesas muestran que el único camino para la causa obrera es la auto-organización, las huelgas, las movilizaciones, para derribar el sistema capitalista y sus instituciones. ALGUNAS PALABRAS SOBRE LA UNIDAD DE ACCIÓN

Queremos hablar ahora sobre una cuestión más general que creemos necesario clarificar, sobre todo porque hay aún en el NPA ambigüedades sobre este tema. Se trata del frente único y la unidad de acción. Para nosotros, está claro que la unidad de acción y el frente único son tácticas indispensables de la política revolucionaria: rechazar estas herramientas con argumentos “puristas” (es decir, que la clase obrera no puede compartir nunca acciones de lucha con sectores reformistas o burocráticos) sería de un ultraizquierdismo infantil. Sin embargo, la táctica de frente único tiene algunas “reglas” a seguir. Por empezar, el frente único debe estar al servicio de la lucha y la organización independiente del proletariado, es decir, debe servir a unir fuerzas alrededor de objetivos comunes favorables a la clase obrera. Durante las huelgas o luchas, el frente único es deseable e incluso indispensable para ganar. Por ejemplo, los sindicatos son frentes únicos de los trabajadores: dentro de ellos hay corrientes revolucionarias y también corrientes reformistas. Si el burócrata N° 1 de Francia, Thibault, llama a una huelga general contra los despidos, está claro que sería sectario no participar porque Thibault es un reformista y un burócrata; al contrario, se trataría de aprovechar el llamado de los burócratas para ir más lejos, para contribuir a la organización independiente del proletariado y el desborde de los aparatos burocráticos. Esa es la otra regla importante del frente único: durante las acciones llevadas adelante por ese frente único, es necesario no solamente sostener, sino redoblar la crítica hacia las direcciones reformistas. Hace falta tener una política sistemática de exigencia y de denuncia: exigir a las direcciones de ir más lejos, de continuar las huelgas, de ser consecuentes con la lucha (todo eso,

está claro, con las consideraciones tácticas propias de cada lucha y el ritmo que puede tener). Y como complemento de eso, hay que denunciar las traiciones de la burocracia, el no respeto de la democracia obrera. Es justamente en el desarrollo mismo de la lucha, a través de su propia experiencia y gracias a una política sistemática de clarificación de parte de las organizaciones revolucionarias, que los trabajadores podrán sacar las conclusiones y romper con las direcciones reformistas. Callar las criticas bajo la excusa de la unidad, es abandonar la perspectiva de disputar la dirección de las organizaciones a estas direcciones reformistas, y por lo tanto reforzar el control burocrático sobre la clase obrera. Estas consideraciones se aplican también a la política de cara al Front de Gauche. Hablamos acá de frentes únicos sobre aspectos concretos de la lucha de clases; rechazamos, al contrario, frentes políticos con formaciones burguesas, ya que eso significaría impulsar la colaboración de clases y abandonar el principio de independencia política de la clase obrera. Pero es necesario tener unidad de acción en relación a las reivindicaciones concretas de la lucha de clases. La no ratificación del tratado europeo es un ejemplo: había que movilizarse en conjunto con el Front de Gauche por esta reivindicación, pero al mismo tiempo exigirle que ponga su influencia en los sindicatos al servicio de un verdadero plan de lucha, de huelgas masivas, etc. y denunciar su política exclusivamente parlamentaria y los límites que su apoyo crítico al gobierno de Hollando implicaban. El frente único en las luchas no puede ser nunca una justificación para disolverse políticamente en las organizaciones reformistas, callando las críticas a su política.Al contrario, es con la combinación de la unidad de acción y de una delimitación política clara de cara al reformismo, que podremos, a lo largo de la experiencia misma de la lucha de clases, demostrar concretamente a los trabajadores cuáles son nuestras divergencias estratégicas y construir una organización revolucionaria independiente.


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FRANCIA

Hollande - Ayrault: un gobierno al servicio del ajuste Editorial de Socialisme ou Barbarie – France, diciembre 2012

T

an sólo a algunos meses de haber sido elegido, la popularidad del presidente Hollande y de su primer ministro Ayrault se desfonda. Es que para una gran parte de los trabajadores, la juventud y los sectores populares, sacar a Sarkozy fue vivido verdaderamente como un triunfo. La esperanza era que, después de cuatro años de ataques de Sarkozy a la clase obrera y la juventud (Contrato Primer Empleo, aumento de la edad de jubilación, expulsión de los gitanos y otras medidas racistas), el gobierno de “izquierda” cambiaría las cosas. Sin embargo, esta esperanza chocó con la dura realidad: el gobierno “socialista” no es más que el defensor de las ganancias patronales, y en una época de crisis eso significa ataques redoblados contra la clase obrera. Es por eso que ahora las esperanzas comienzan a desvanecerse y la pasividad inicial frente al gobierno también. UNA

CRISIS ECONÓMICA QUE

SE PROFUNDIZA

Para comprender la situación de Francia, es necesario primero analizar la situación económica de la Unión Europea. Estos últimos meses, la crisis económica no para de profundizarse en todo el continente. En los países más débiles de Europa (España, Grecia, Portugal), el crecimiento económico continúa deteriorándose, la tasa de desocupación aumenta y la deuda pública que acosa a esos países es cada vez más impagable. Los planes de ajuste que hunden a los trabajadores en la miseria, bajo la promesa de que hace falta mejorar la competitividad para salir de la crisis, ponen a esas economías en situaciones cada vez más recesivas y la “salida de la crisis” prometida está cada vez más lejos. Además, las economías emergentes, que no habían sido tan golpeadas por la crisis como Europa, y que habían incluso experimentado un crecimiento económico luego de su comienzo en 2008, sufren ahora las consecuencias de la crisis, con un crecimiento menor, que tendrá consecuencias sobre las economías del resto del globo. La hipótesis de una salida rápida de la crisis, así como la hipótesis de las economías emergentes que irían a remplazar a las potencias económicas en decadencia y a continuar la expansión capitalista, se demostraron erró-

neas. En todos lados, los planes de ajustes de los gobiernos se multiplican, intentando hacer pagar la crisis a los trabajadores. Pero también se multiplican las huelgas, las ocupaciones de fábricas y más movilizaciones masivas. FRANCIA:

LA AUSTERIDAD, ES

AHORA!

En relación a los demás países europeos, Francia está de cierta manera “retrasada” en la reducción del costo del trabajo y la mejora de la competitividad. A excepción de la reforma de las jubilaciones aprobada en 2010, no hubo verdaderamente medidas de austeridad tan grandes como en los otros países de Europa, donde muchas reformas para flexibilizar el mercado de trabajo han sido aprobadas en los últimos años, y donde el desmantelamiento del Estado de Bienestar (reducción del presupuesto de Salud y Educación, privatización de los servicios públicos) está más avanzado. Eso no es el resultado de la bondad de la burguesía francesa, sino de una tradición de resistencia de parte de la clase obrera francesa (por ejemplo, las huelgas del 95 que derrotaron al Plan Juppé, y también las huelgas de 2010 que escaparon en cierta medida al control de los aparatos burocráticos). Es por eso que ahora el gobierno debe, para recuperar terreno, llevar adelante ataques de una amplitud sin precedentes. La ola de despidos en la industria (PSA, Sanofi, ArcelorMittal) tiene como objetivo no sola-

mente reducir el costo de trabajo a través de la superexplotación de los que quedan en las fábricas, sino también de inflingir una derrota a la clase obrera para establecer una relación de fuerzas que permita la flexibilización del mercado de trabajo. El gobierno, a pesar de sus bravuconadas mediáticas contra la familia Peugeot al principio del anuncio de cierre, ha aceptado el plan de despidos luego del reporte Sartorius, lo cual muestra claramente su actitud cómplice respecto a la gran patronal. A estos ajustes en la industria se suma el shock presupuestario, 10 mil millones de recortes en el gasto público, y 20 millones de aumentos de impuestos. Es decir, menos presupuesto para la educación y la salud, por ejemplo, con el no reemplazo de un trabajador estatal por cada dos que se jubilen, e incluso de dos por cada tres, lo cual reduce el número de efectivos y hace más pesado el trabajo de los que quedan, y más impuestos para pagar para los sectores populares. La solución del gobierno al problema del desempleo es una estafa: los jóvenes contratados a través de los "emplois d'avenir" ("empleos del porvenir") no tienen ninguna garantía de conservar un empleo estable cuando el plan termine (los contratos serán precarios) y el Estado paga el 75% del salario, un verdadero regalo para los patrones (15.000 empleos serán en empresas privadas). Los estudiantes becarios podrán acceder a un "emploi d'avenir" en la educación, lo que permite al gobierno por una parte, no aumentar las becas, y por otro lado, resolver la crisis

de efectivos en la educación con contratos precarios en vez de verdaderos contratos. El problema del desempleo no puede ser disociado de los despidos, y el gobierno no puede pretender resolverlo mientras permite a las empresas despedir masivamente. El último ataque contra los trabajadores, anunciado por el gobierno el 6 de noviembre, es la exoneración de 20 mil millones de euros de impuestos patronales. Esta exoneración será financiada por 10 mil millones de reducciones en el gasto público (que se agregan a los 10 mil millones ya anunciados) y el resto por un aumento del IVA, que reducirá aún más el poder adquisitivo de los trabajadores. La elaboración de un estudio por un “experto” supuestamente objetivo para justificar este ataque, no logra esconder que el gobierno ha decidido seguir el programa de la gran patronal. LA COMPLICIDAD DE LA BUROCRACIA Y LA EMERGENCIA DE SECTORES INDEPENDIENTES

A pesar de la desconfianza creciente en el gobierno, no ha habido aún una respuesta de envergadura a los ataques del gobierno y de la patronal. Esto se explica por el rol de las burocracias sindicales (CGT, CFDT, etc.), que luego de la elección de Hollande han favorecido la pasividad en la clase obrera y la confianza en las negociaciones con el gobierno y la patronal. En vez de coordinar las diferentes luchas contra los despidos y de llamar a huelgas y movilizaciones para derrotar los ataques de la

patronal, las burocracias sindicales se han comprometido en el “diálogo social” que propone Hollande. Este diálogo es una trampa para frenar la movilización de los trabajadores, con la mentira de que podría haber acuerdos “ganador-ganador” entre los trabajadores y la patronal. La ola de despidos en la industria, los recortes presupuestarios, demuestran claramente cuál es el programa de la burguesía para salir de la crisis: en una sociedad capitalista donde la patronal realiza sus ganancias a través de la explotación obrera, una situación “ganador-ganador” no existe. Sin embargo, algunos sectores de la clase obrera comienzan a hacer una experiencia con este método del diálogo social y a expresar su descontento de manera independiente de los aparatos burocráticos. La movilización frente al Salón del Automóvil el 9 de octubre (ver artículo en esta misma edición), con un grado de radicalización importante, fue organizada por fuera de los aparatos burocráticos, por los trabajadores mismos. Fue también un ejemplo concreto de la convergencia de las luchas, con trabajadores de PSA, Sanofi, ArcerlorMittal, Doux, Ford y otras empresas en lucha. Esta estrategia de autoorganización, de convergencia y de lucha en las calles es lo opuesto al “diálogo social” que defienden las centrales sindicales, del cual el aislamiento de las luchas en curso y la negativa a realizar acciones concretas de solidaridad es el complemento. A medida que la confianza inicial en el gobierno se disipe, estas organizaciones independientes de los burócratas pueden tomar una amplitud más importante. La tarea principal de los revolucionarios es desarrollar estas experiencias de auto-organización de la clase obrera y romper con la estrategia de conciliación de los burócratas con el gobierno. Eso debe ser acompañado de la construcción de una organización política revolucionaria que organice a los militantes más activos y politizados que surjan de las luchas a venir, de manera independiente del gobierno pero también del proyecto reformista del Front de Gauche (ver artículo en esta edición). El NPA puede representar esta organización revolucionaria, a través de una relimitación clara del Front de Gauche, y si pone su inserción en el movimiento obrero (por ejemplo, la figura reconocida de Philippe Poutou, dirigente de Ford Blanquefort y candidato a presidente del NPA) al servicio de la organización independiente de esta nueva vanguardia de las luchas.


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COSTA RICA

¡Construimos un Nuevo Partido Socialista para la intervención en la lucha de clases!

E

l 9 de diciembre se realizó con gran éxito la Asamblea Superior del Nuevo Partido Socialista (NPS), a la cual concurrieron un centenar de personas entre delegados y delegadas, además de gran cantidad de simpatizantes políticos. Víctor Artavia, presidente del partido, planteó durante su discurso de apertura de la asamblea que “el lanzamiento e inscripción electoral del NPS, tiene como objetivo construir un partido socialista y revolucionario con proyección nacional, cuyo énfasis sea la intervención en las luchas de todos los sectores explotados y oprimidos, para potenciar su politización y avance desde una óptica revolucionaria.” Artavia explicó que “el actual ciclo internacional de rebeliones populares y el proceso de reactivación de las luchas sociales en Costa Rica, nos brinda un contexto donde el desarrollo de una alternativa anti-capitalista y socialista tiene mucho potencial.” Además enfatizó que “la intervención del NPS en los procesos

electorales nunca la visualizamos como un fin en sí mismo, por el contrario, la comprendemos como una táctica muy importante para amplificar la difusión de nuestros planteamientos programáticos. Si alcanzamos un puesto de representación popular en las elecciones genial, pero nuestro eje como NPS es construir un partido de especialistas en luchas.” Marcela Ramírez, dirigente del partido y Las Rojas contra el patriarcado, señaló en su intervención hacia la asamblea “la tarea de utilizar la participación electoral del NPS como un medio para discutir con amplios sectores de las mujeres y el conjunto de la clase trabajadora, la necesidad de luchar por un Estado laico sin concordato y por el derecho al aborto.” Junto con esto, reiteró que “la lucha feminista y por los derechos de la comunidad sexualmente diversa, no puede desvincularse de la lucha de la clase trabajadora.” En representación de la Juventud Socialista intervino Deby

Calderón, quien ocupa el puesto de Secretario General del partido. Calderón fue enfático en que el NPS “pretende convertirse en un referente para organizar a todos los sectores de la juventud estudiantil y trabajadora que estén por pelear por un cambio social y vincular sus luchas con la clase trabajadora, en particular la del sector privado industrial del país, que no cuenta con derechos sindicales y políticos en los hechos.” También se dirigió a la asamblea José Tamariz, dirigente sindical del magisterio, para quien “desde ya el partido tenía planteado vincularse de lleno con las luchas venideras de la clase trabajadora por la defensa de las conquistas laborales y salariales en el sector público.” Además explicó la perspectiva socialista del NPS como “un partido trotskista, totalmente diferente a los aparatos electoralistas, reformistas y burocráticos que durante décadas sostuvo el estalinismo en Centroamérica y todo el mundo.” El punto político de la asamblea

terminó con la lectura del saludo internacionalista enviado por Maxi Cisneros, reconocido dirigente obrero y militante del Nuevo MAS de Argentina y la Corriente Internacional Socialismo o Barbarie. Cisneros indicó que los “trabajadores necesitamos estrechar lazos mas allá de las fronteras artificiales que nos separan, la conformación del NPS para la lucha electoral es un paso también en esta tarea histórica que tenemos por delante los que nos consideramos revolucionarios y socialistas.” Posterior a las intervenciones y

saludos políticos, se procedió a votar el Estatuto y reglamentos internos del partido, así como la conformación de las estructuras necesarias para obtener la legalidad electoral. De esta forma culminamos el proceso de inscripción electoral y en las próximas semanas presentaremos la solicitud formal de inscripción de nuestro partido ante el Tribunal Supremo de Elecciones. COMITÉ EJECUTIVO DEL NUEVO PARTIDO SOCIALISTA 12 DE DICIEMBRE DE 2012 SAN JOSÉ, COSTA RICA

EGIPTO

Las mujeres se cobran las primeras revanchas “O

ficialmente, Egipto no padece ‘asesinatos de honor’; quizá muchas jóvenes se suicidan, pero no son asesinadas... Una mentira, por supuesto.” (1) Esos “asesinatos de honor” podían y “pueden” ocurrir porque la mujer recibió un llamado de su novio, porque saludó a un hombre en la calle o porque quedó embarazada producto de una relación incestuosa con su propio padre. Para limpiar el honor de la familia, la joven es asesinada. Su muerte puede “pasar” como un suicidio o de lo contrario, los jueces fallan a favor del atacante cuando se trata de asesinatos dentro de la familia. En Egipto se concede al juez una autoridad especial, según el art. 17 del Código, por el cual puede reducir la pena de 25 años a sólo 6 meses de prisión si el comportamiento de la víctima fue contrario a la “tradición” y, por lo tanto, el “pobre asesino” reaccionó de manera natural, lo cual ya motiva la indulgencia del juez. “’Hubo un hombre sentenciado a seis meses de cárcel, sólo seis meses, por matar a su hermana’, dice Amal Abdelhadi. ‘¡Un juez decidió que dado que el hombre viviría el resto de su vida con la culpa de matar a su hermana inocente, no debía ir a prisión!’”. (2) Fuera del ámbito familiar, no es más placentera la vida de las mu-

jeres. Son abusadas y violadas en la calle como método habitual. Y la “pena” recae sobre ellas, que a la vuelta a sus hogares son culpadas por su conducta “provocadora”. Pero la rebelión contra Mubarak en su momento, sacudió toda la estantería social y el sector más oprimido, la mujer, tuvo su participación activa en la Plaza Tahrir. A fuerza de su lucha codo a codo con el resto de la juventud y los trabajadores que derrocaron a la tiranía, se ganaron un lugar como mujeres y como luchadoras en ese proceso. Como respuesta a esto, las fuerzas de seguridad del electo presidente Morsi se ensañaron con las ellas para darles un escarmiento ejemplar. En la misma Plaza Tahrir donde ellas fueron protagonistas y se sintieron seguras, en las calles, las atacaron y violaron en forma sistemática, intentando dar por concluida la breve “primavera” que vivieron. Pero la rebelión continúa ahora contra el actual presidente de la Hermandad Musulmana.Y las mujeres egipcias siguen en la línea de combate y empezaron a lograr apoyos en su lucha contra la opresión milenaria. Opresión en la cual no hay distinción entre las mujeres musulmanas y las de origen cristiano que conviven en Egipto. Ejemplo de esto es la formación

de brigadas de hombres que protegen a las mujeres de los ultrajes en las calles y en las concentraciones públicas. Su función va más allá de cuidarlas. Al ser abusada una mujer, persiguen al atacante hasta capturarlo. Su arma es un aerosol. Pueden “marcarlo” como abusador o, de una forma más “educativa”, tirarle aerosol en los ojos. “El primer grupo del que oímos hablar en la NPR fue ‘Be a Man’ (Se un hombre), uno de los grupos

antiabuso sexual con una de las campañas más radicales. Los miembros del grupo patrullaban durante el reciente festival Eid alAdha, armados con spray blanco y negro, atacando, inmovilizando y marcando a los abusadores con las palabras ‘Soy un acosador’. La mayoría de los activistas, casi todos hombres, llevaban chalecos reflectantes en los que se podía leer, en árabe, ‘prevención de acosos sexuales’”. (3) La enconada lucha de la mujer

egipcia sigue en las calles. Allí encontró su lugar y sus aliados para poder dejar atrás tantos años de sufrimiento, humillación y aislamiento y avanzar hacia un futuro que marque los pasos de su liberación junto a los trabajadores y el pueblo. 1- Robert Fisk, La Haine, 23/9/10. 2- Idem. 3- Rebecca Fitzsimons. www. vice. com


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GRAN COMIENZO PARA UNA GRAN CAMPAÑA

¡Vamos por nuestra legalidad en Córdoba!

A

lo largo del año en Neuquén hemos realizado una gran campaña militante por la conquista de la legalidad en la provincia. En las calles céntricas de la ciudad y muchas veces superando condiciones climáticas adversas, el Nuevo MAS instaló con éxito la campaña de afiliaciones necesarias para presentarnos en las elecciones. La obtención de la legalidad partidaria nos permitirá desarrollar con mucha más fuerza campañas como las que impulsamos el año pasado, la candidatura obrera de Alcides Christiansen en las elecciones municipales de la ciudad de Neuquén. El compañero obrero de la construcción, ex secretario general de la UOCRA Neuquén, es una figura reconocida a nivel provincial al ser protagonista de los acontecimientos más

importantes de la lucha de clases en la región, como la UOCRA clasista o la caminata de Piedra del Águila. Con él a la cabeza, hicimos una campaña que lejos de dejarse llevar por la fiebre electoralista del FIT, la pusimos al servicio de la denuncia a los gobiernos que administran los asuntos patronales dando la pelea estratégica por la independencia política de la clase obrera que emerja como un polo de izquierda alternativo frente al derechista “Pechi” Quiroga o el MPN de Sapag y Sobisch, el asesino de nuestro compañero Carlos Fuentealba. El esfuerzo de más de un año nos pone a unos muy pocos pasos de la obtención de la legalidad provincial, a su vez que es un importante paso para que el Nuevo MAS obtenga la legalidad a nivel nacional.

nuevo nuevo

A un paso de la obtención de la legalidad partidaria

Compañero: ............................... $...........

NEUQUÉN: FINALIZAMOS LA CAMPAÑA DE LEGALIDAD

TE PEDIMOS UN APORTE, COMPRÁ UN BONO

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FIT ha demostrado no jugar ese rol, por lo menos hasta ahora, aquí donde tienen una Legisladora provincial y bastantes votos. En luchas de gran magnitud e importancia, como la de los docentes, la de los estatales por sus jubilaciones, la pelea contra Monsanto, etc, el frente de izquierda ha jugado un rol completamente nulo. Buscamos nuestra legalidad para poder torcer esa situación, construyendo una izquierda consecuente para quien los votos NO vayan por un lado y la lucha de clases por el otro. Estamos inmensamente contentos de este gran comienzo, con más de Mil firmas en apenas un poco más de una semana, que preanuncia la palpable realidad de que podemos llegar a nuestro objetivo incluso en mucho menos tiempo del planeado.

Compañero:

E

n Diciembre dimos comienzo a la Campaña de Legalidad del Nuevo MAS en Córdoba verano 20122013. Las últimas dos semanas constituyeron un enorme salto en el camino para romper las condiciones proscriptivas que nos dejaron, el año pasado, fuera de la participación en las elecciones. El diálogo cotidiano con cientos y cientos de compañeros en la calle nos permite ver que hay mucho espacio para que una corriente de la izquierda revolucionaria, como la nuestra, se abra paso en la provincia. Nos han dado su apoyo, desde trabajadores que nos vieron participando de la lucha de los estatales de este año, hasta compañeras que nos reconocen por nuestra intensa actividad por el Derecho al Aborto desde LAS ROJAS, pasando por la juventud universitaria que nos conoce por nuestras peleas en el movimiento estudiantil. Muchas veces, la gente nos ha dado su apoyo espontáneamente, sin que se lo pidamos, simplemente acercándose a nuestra mesa para darnos su firma. Lo cierto es que las elecciones del año que viene en la provincia serán una importante prueba en la tarea de conformar un polo de independencia de clase en la segunda provincia del país, hogar de uno de los movimientos obreros de mayor tradición e importancia de la historia de Argentina. Lamentablemente, el


POR MARITA VERÓN: UNA OLA DE INDIGNACIÓN NACIONAL RECORRE EL PAÍS

¡Hay que dar vuelta esta historia! Las Rojas y el nuevo MAS nos movilizamos en Buenos Aires, La Plata, Neuquén, Córdoba, y en otros puntos del país.

R

abia, indignación, bronca… una furia por lo que se estaba escuchando se apoderó de todos nosotros cuando se supo la noticia: tres protectores de proxenetas, los jueces Alberto Piedrabuena, Emilio Herrera Molina y Eduardo Romero Lascano, anunciaban que absolvían a todos los acusados de secuestrar, torturar y desaparecer a Marita Verón para ser explotada en prostíbulos de La Rioja, Tucumán y quién sabe dónde más. Diez dilatados meses duró el juicio contra los 13 acusados, en el medio alguno salió libre, se dio una vuelta por su La Rioja natal, y la indignación popular lo volvió a meter preso. Susana Trimarco, la mamá de Marita, relató con lujo de detalles todas las peripecias que pasó desde que desapareció su hija, golpeando las puertas del gobierno provincial, para encontrarla. Susana se enfrentó sola a proxenetas y liberó a más de cien jóvenes que también estaban en manos de las redes de explotación sexual en varias provincias. Una de las víctimas no quiso declarar porque dijo que el juez de instrucción

fue uno de los tantos que la violó cuando estaba secuestrada en un prostíbulo. ¿Por qué los consistentes relatos de estas mujeres víctimas de las redes de trata no alcanzaron para condenar a la banda de Alé? Llegado el juicio, Susana relató con lujo de detalles los vínculos de la banda de la “Chancha” Alé y sus parientes con el poder político de la provincia. En el camino recibió amenazas de la policía, y una maraña de ardides para que desistiera de buscar a Marita, incluyendo amenazas y el intento de un fiscal de investigarla a ella, el allanamiento de su casa y el del hermano de Marita, que vive en Santa Cruz. El entonces gobernador Julio Miranda la mandó a hablar con los de la remisería Cinco Estrellas, que la iban a “ayudar” a buscar a Marita, porque según el gobernador tenían más autos y mejores armas que la policía. Cinco estrellas es propiedad de… Rubén “la Chancha” Alé. Nueve años lleva el gobernador kirchnerista José Alperovich al mando de la provincia de Tucumán. Antes fue ministro de Economía del gobernador Julio

Miranda. En los diez años que lleva desaparecida Marita, el gobierno de Tucumán, bajo Miranda o bajo Alperovich, nunca puso ni medio recurso para encontrar a Marita, nunca desbarató ni una parte mínima de alguna red de trata. Mientras tanto Cristina K ya le dio ya dos premios a Susana Trimarco por su lucha por los derechos humanos. ¿Cuántos policías, gendarmes, fiscales, funcionarios del Estado puso Cristina para encontrar a Marita Verón? Las redes de trata de mujeres para la explotación sexual se mueven tranquilamente entre distintas provincias, tienen contratos de transporte con los gobiernos locales, y hasta armas mejores que las de la policía. Secuestran jóvenes en una ciudad, la llevan a otra, y a otra, y a otra. Montan “whiskerías” que enmascaran prostíbulos a los costados de las rutas, a la vista de todo el mundo. Por allí pasan los policías a cobrar su parte. Por allí pasan algunos jueces a utilizar mujeres. Por allí pasan los funcionarios de los gobiernos provinciales que también reciben su tajada de una industria mundial que no para de crecer, el tercer negocio más lucrativo detrás de la venta

de drogas y armas. El Estado proxeneta sostiene y protege a las redes que pueden manejarse libremente y salir impunes de un juicio que todo el país miraba, porque podía marcar un antes y un después en la lucha contra las redes. Las Rojas junto a otras organizaciones de mujeres nos pusimos en marcha inmediatamente, y una hora después de conocido el fallo, estábamos escrachando la Casa de la Provincia de Tucumán en Buenos Aires. Muchas compañeras se fueron acercando, llenas de indignación, pero también diciendo: “algo hay que hacer”. Porque hay una red de jueces, funcionarios públicos, policías, senadores y diputados, gobernadores y ex gobernadores dedicados a amparar, proteger, absolver y ser cómplices de la explotación sexual de mujeres, que además amparan a violadores, femicidas y golpeadores. Por eso hoy hemos sido miles y miles en todo el país: una verdadera ola de indignación nacional recorrió de abajo arriba a la Argentina reclamando contra este fallo aberrante y por justicia. Ahora hay que seguir en las calles:

las organizaciones de mujeres, los centros de estudiantes, las organizaciones sociales, sindicales y políticas de izquierda tenemos que mantenernos moviizadas para exigir y conseguir: ¡Inmediata destitución de los jueces Piedrabuena, Herrera Molina y Romero Lescano! ¡INMEDIATA

DESTITUCIÓN DE

PIEDRABUENA, HERRERA MOLINA Y ROMERO LESCANO! LOS JUECES

¡CÁRCEL

EFECTIVA A TODOS LOS

RESPONSABLES MATERIALES Y POLÍTICOS DEL SECUESTRO Y EXPLOTACIÓN DE

MARITA

VERÓN! ¡BASTA

DE JUSTICIA PATRIARCAL!

¡DESMANTELAMIENTO

DE LAS

REDES DE TRATA PARA LA EXPLOTACIÓN SEXUAL!

¡JUSTICIA YA VERÓN! ¡EL

PARA

GOBIERNO

K

MARITA

ES RESPONSA-

BLE!

¡SIN ESTADO

CÓMPLICE NO HAY

TRATA NI PROSTITUCIÓN!


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