que exhibe un aspecto reconocible intersubjetivamente, que da razón del hecho de que alguien (y no necesariamente alguien cualquiera) identifique un sabor a hierro. 8. Nanni repite varias veces que entre una reflexión filosófica sobre el arte, que es la que luego él lleva a cabo en su pars construens, y la pluralidad de las lecturas críticas no hay espacio para algo que se parezca a la poética praguense. No se da cuenta de que al hacer esto está echando por la borda lo único que podía parecerse a aquella propuesta de teorías científicas, sujetas a falsación, a la que tanto cariño le tiene a causa de sus idola theatri. Las que propongo ahora son tres polaridades ideales, que luego en la práctica pueden fundirse de varias maneras. En primer lugar una propuesta filosófica, que supone que la obra objeto se pone como matriz de pertinencias posibles. Es decir, que debe tener una regla de las propias manipulaciones del lenguaje, no sólo la posibilidad de exhibir pertinencias ante la mirada del lector, sino también relaciones contextúales entre tales pertinencias. Se trata de un postulado, una idea reguladora, y en este sentido el idiolecto postulado nunca se describe. Es la pura posibilidad de descripción conjetural de un objeto físico material, que pueda ser visto o no como algo que exhibe pertinencias. No es todavía un idiolecto conjeturado, es la propuesta de que se deben conjeturar idiolectos, es decir, teorías del objeto. Viene luego una actividad que podría denominar también semiótica del arte, si no fuera porque creo que, para bien o para mal, este tipo de actividad se desarrolla también en otros horizontes metodológicos donde no se hace uso de instrumentos semióticos. Llamémosla, para hacer rabiar a Nanni, «poética», en el sentido praguense: análisis y descripción de estructuras. Un análisis que diga que la cuba contiene vino, hierro, cuero. Que el cenicero es pesado, profundamente cóncavo y de cristal tallado. Todo ello determinando oposiciones, porque sin oposiciones no hay pertinencia y viceversa. Este análisis no puede ser nunca ni neutral ni puro ni ingenuo: desde luego tiene bajo control pertinentizaciones posibles, especialmente si se lleva a cabo sobre convenciones semióticas. Y, sin embargo, este análisis no debe decirme cuáles son las pertinencias optimates. Debe mostrarme la estrategia en acto de la obra como matriz de pertinencias posibles. 152