Ley Federal electoral Enero 7 de 1946
Presidente Manuel Ávila Camacho decreta la nueva Ley Electoral Federal. La Ley consta de 136 artículos divididos en doce capítulos. El Presidente Manuel Ávila Camacho promulga la Ley Federal Electoral y crea la Comisión Federal de Vigilancia Electoral, conformada por el Secretario de Gobernación y otro miembro del gabinete, un diputado, un senador y dos representantes de los partidos políticos con mayor relevancia. De igual forma, la Ley ordena la creación de comisiones electorales locales y el Consejo del Padrón Electoral. Modernización industrial
A partir de 1940 se inicia en México un acelerado crecimiento económico que se prolongará hasta 1970; en apoyo a lo anterior diremos que el Producto Interno Bruto en dicho período fue del 6.5 % en promedio anual. Dicho crecimiento se dará en el contexto de un nuevo modelo de crecimiento económico. El país recibió maquinaria, herramientas, capitales y créditos, que activaron la industria, la agricultura y la minería. De esta manera, el modelo económico capitalista favoreció a la
CREACIÓN DEL IMSS Los derechos para la clase trabajadora se lograron con la Constitución Política de 1917, donde se establece en el Artículo 123, entre otras medidas, responsabilidades de los patrones en accidentes de trabajo y enfermedades profesionales, así como también la obligación de observar los preceptos legales sobre higiene y seguridad.
Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) El 6 de abril de 1943 se fundó el Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social (SNTSS), que hoy en día constituye la organización sindical más grande del apartado A del Artículo 123 Constitucional. El decreto de creación del IMSS proveyó la puesta en marcha de los servicios para el 1° de enero de 1944.
Y fue así como el 19 de enero de 1943 nació el Instituto Mexicano del Seguro Social, con una composición tripartita para su gobierno
Sin embargo, no fue sino 26 años después, bajo el gobierno del Presidente de la República Manuel Ávila Camacho, cuando se logró hacer realidad este mandato constitucional.
PNR cambia sus siglas a PRM 30 de marzo de 1938
El Partido Nacional Revolucionario, cambió su nombre a Partido de la Revolución Mexicana en la III Asamblea Nacional Ordinaria del PNR el 30 de marzo de 1938 en el Palacio de Bellas Artes, con la asistencia de 100 representantes del sector obrero, 96 del sector agrario, 96 del sector popular y 101 del sector militar. Se firmó el “Pacto Constitutivo del Partido de la Revolución Mexicana” en el cual los cuatro sectores se comprometieron a no realizar acciones de tipo político-electoral al margen del nuevo PRM y que, por otro lado, se aseguró a los sectores obrero y campesino el mantenimiento de su autonomía en cuanto a su acción social y a la realización de sus finalidades específicas. También se desprendió la “Declaración de Principios y Programa de Acción del Partido de la Revolución Mexicana” cuyos aspectos más relevantes fueron que se aceptó el sistema democrático de gobierno, así como la existencia de la lucha de clases, se consideró un objetivo fundamental la preparación del pueblo para la implantación de una democracia de los trabajadores para alcanzar el régimen socialista. En los “Estatutos” habrá una doble estructura: una directa cuyos órganos centrales serán el Consejo Nacional y el Comité Central Ejecutivo y la indirecta que, estará formada por los cuatro sectores antes mencionados. El Partido de la Revolución Mexicana, pretende legitimar el poder con el apoyo de las masas y, ante la fuerza adquirida por ellas. Cárdenas a través de este partido postulara al general Manuel Ávila Camacho para la presidencia.
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Política de Unidad Nacional 12 de septiembre de 1940 El presidente Manuel Ávila Camacho basará su gobierno en la conciliación y la unidad nacional. Manuel Ávila Camacho decidió que, a partir de este año, los partidos de oposición lograrán ingresar a la cámara y constituir el 5% del su totalidad, siendo anteriormente unicamente diputados los miembros del partido oficial. Camacho busca estabilizar el sistema social y político puesto en peligro por las intensas reformas cardenistas, eliminar los resabios de radicalismo y conducir al país por la vía de un mayor crecimiento industrial, y para ello aprovechara la coyuntura económica creada por la Segunda Guerra Mundial, iniciada en 1939.