ttltii
iil i
lectoescritura. Cada maestro crea su propia rnetodologÍa, tomando como base el lenguaje natural y las experiencias del alumno y teniendo en cuenta sus esquemas, para enriquecerlos cada vez más. contribuyendo a forrnar aquellos de los cuales carece".33 Coincidimos con algunas apreciaciones teóricas pero no con la afirmación de que el lenguEe escrito es transcripción del oral. La autora presenta una variedad de actividades que obüamente atraen al docente porque están explicitadas y apuntan a aspectos especÍficos de la lengua. Algunas de ellas son semejantes a las propuestas por Borzone de Manrique y Marro, asÍ como la terminologÍa de "palabras picaronas" recuerda a las "chispipalabras" o "palabras mágicas". Estas estrategias son las que aún hoy pueden ser observaclas en las carpetas de actividades que manejan los maestros. No voy a detenerme en cada una de ellas, sino mencionar que se establecen secuencias paso a paso y terminan cornbinando lo fonético y alfabético. Pese a la crÍtica que la autora realiza a las escrituras producidas por la aplicación del método de palabra generadora, lo que propugna como ejemplo de escritura significativa es lo siguiente: "Canela es muy dormilona. Canela tiene una cola larga. Canela soñó con Pipo. Pipo es un gato. Pipo ama a Canela. Canela se lastimó una pata. Pipo la curó". El resultado no es un texto que reproduzca el habla real de los chicos (tal como propugna teóricamente Cuenca) que sÍ utilizan en sus expresiones nexos y estructuras compleJas. Éstas son oraciones prefabricadas por el maestro que luego el niño debe copiar. "Los pequeños realizaron redacciones cortas en lenguaje natural, utilizando y enriqueciendo sus esquernas,
I
rt'lacionancio lengua-ieorai v escrito, a partir de una vivencia compartida por todos. Aclaración intportante: el Itarlrertrabajado con la palabra Canela, hizo que ios alumnos, espontáneamente, en las clases subsiguientes. reconocieran y formaran palabras tales como casa, cosa, loco, come, saco, etc."3a En síntesis, Ia mavoría de las propuestas didácticas se centran en la palabra y las oraciones resultantes no corrtribuycn a que ei niño genere un discurso personai. 4- Fundamentos didácticos a partir del marco psicogenético En este apartado voy a desarrollar los Fundamentos diclácticos tal como han sido conocidos por los maestros y profesores, ya sea mediante cursos de divulgáción o publicaciones en editoriales de fácil acceso. Las primeras investigaciones de E. Ferreiro y A. Teberosky tuvieron una enorrne difusión entre los maestros, aunque expresamente las investigadoras habían aclarado que no proponÍan una nueva metodología de enseñanza - aprendizaje. Ana Teberosky comienza en I9BO su primera experiencia de práctica educativa con un grupo de niños de nivel preescolar en una escuela urbana de Barcelona. [,os principios metodolÓgicos que guiaron la organización del trabajo en el aula fueron los siguientes: O L,os niños trabajaban en grupos de cinco o seis alumnos, organizados por la maestra según el criterio de reunir a sujetos de distinto aunque próximo nivel de conceptualización sobre el sistema de escritura a fin de favorecer intercambios fecundos. O I-a maestra no impartía enseñanza: proponía actividades, facilitaba intercambios y socializaba las preguntas.
+9