Esteban Quito Esteban Quito es un niño travieso y juguetón. Le encanta trepar, saltar y correr como a todos los chicos. Lola Mento es su vecina y compañera de travesuras. Un día colocaron un banquito sobre la mesa de la cocina. Esteban trepó y saltó. Pero resbaló y… —¡Ay mi pierna!– gritó Esteban. Lola corrió a ayudarlo, pero no podía levantarlo porque estaba muy dolorido. Su mamá escuchó el ruido y entró preocupada a la cocina. —¡Mamá, lo lamento!– dijo Esteban. —¡Este banquito no es para trepar!– dijo su mamá. Pronto llegó el doctor y dijo que había que enyesar esa pierna. —Es conveniente llevarlo a su sanatorio, señora– dijo el doctor. Esteban fue con su mamá al sanatorio donde le enyesaron la pierna derecha. Lola los acompañó. Claro que ella no iba a dejar a su compañero en esa situación. ¿Se imaginan a Esteban, tan inquieto, con una pierna enyesada? El señor y la señora Quito, o sea, los papás de Esteban, decidieron construir una trepadora en su jardín para que Esteban pueda trepar y saltar. El señor Quito dijo: “¡Así no nos quedamos sin banquitos!”
Para reco rdar cómo se escr ibe biblio teca libro
¿Qué pasa con las palabras marcadas? ¿Cómo cambian? Escriban, en sus cuadernos, alguna otra situación con los nombres de la página anterior en donde suceda algo parecido.
Reflexión ortográfica. Separación entre palabras.
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