Poe XV por Micaela Martinez Aquella mañana invernal Cuando te abriste paso entre la multitud Supe sin dudarlo Que eras el indicado. Mi corazón se detuvo Mi cuerpo colapsó Mis labios se sellaron Mi alma te perteneció Las noches fueron eternas Los días no se consumieron Impaciente aguardé tu llegada Anhelante rechacé tu partida ¿Qué haré con este amor? ¿Qué haré ahora que no estás? El conjuro se marchitó Pero mi pasión no se extinguió
36