3 minute read

Viaje al pasado de Tordesillas. El Humilladero del Cristo de las Batallas

Imágenes del Humilladero del Cristo de las Batallas al otro lado del Puente Medieval de Tordesillas.

Advertisement

HUMILLADERO DEL CRISTO DE LAS BATALLAS

POR REDACCIÓN

Estuvo situado al otro lado del Río Duero, en la orilla sur, marcando a la salida del puente la separación de los caminos que conducían hasta Medina del Campo y Salamanca.

Se le llamaba el Humilladero de la Cruz porque era precisamente la Cofradía de la Vera Cruz su propie- taria, tal y como consta en la revista diocesana de 1623 (Catalogo Monumental, Tordesillas, p 198. R.L KAGAN). Aunque lo cierto es que también existen otras noticias de comienzos del siglo XVI (Catalogo Monumental, Tordesillas, p305) atribuyendo su fundación a la Reina Juana durante su estancia en la Villa de Tordesillas.

Un grabado del siglo XVI nos muestra el Humilladero con planta cuadrada y espadaña. Hasta comienzos del siglo XVIII se resaltaba el buen estado de la fábrica y su situación fuera del casco urbano, al otro lado del puente. A finales de ese siglo, en 1771, el Humilladero ya aparece como Cristo de las Batallas y se recomienda enchanchar el altar al otro lado del evangelio (Catalogo Monumental Tordesillas p.201). En esta fecha se le asigna a la parroquia de San Pedro, en lugar de a la de Santa María.

El edificio fue destruido por los franceses durante la invasión napoleónica y reconstruido de nuevo en 1824. A mediados del XIX, bajo la escueta denomi-

EN EL JARDÍN DEL PUESTO DE LA CRUZ ROJA AÚN SE CONSERVA LA CRUZ QUE ESTABA EN LA PUERTA DEL EDIFICIO Y RESTOS PÉTREOS

nación de El Cristo, se reunían al otro lado del puente la ermita, una fuente y el lavadero.

Poco después, en 1860, una de las crecidas del río Duero se la llevó por delante, siendo restaurada al año siguiente por Don Eusebio Rodríguez, en voto por la curación de su hija. Este último edificio llegó a ser descrito como de una sola nave y planta rectangular, fachada de piedra adintelada y espadaña de ladrillo rematada con bolas. Ante ella, un crucero de piedra que todavía se conserva. En su interior albergaba un relieve de La Piedad junto a un San Jerónimo Penitente del siglo XVIII y la escultura titular de la ermita, un Cristo del siglo XVIII en retablo neoclásico, una Virgen y un San Sebastián del siglo XVI.

El edificio desapareció en la segunda mitad del siglo XX, en buena medida por el empuje de las infraestructuras de carreteras, ya que el camino de Medina del Campo y el de Salamanca se habían convertido con los años en carreteras nacionales. En uno de sus muros interiores se rotulaba la historia del edificio. (E. Fernández Torres p.17)

El decimo sesto siglo, Dª Juana del Reyno de Castilla soberana cuando en la Villa su Palacio habita con católica fe fundó esta ermita.

1811: Con sacnlego afán aquel Guerrero que hizo temblar un día al mundo entero apurando las furias de la Guerra la Basélica real echó por tierra.

se pudo ver la ennita reparada y el santísimo Cristo en su morada.

1860: La inundación mayor de que hay memoria de su casa espulsó al Rey de la gloria y aunados a la vez los elementos la destruyen después por los cimientos.

1861: Aurea, de tierna edad, niña inocente se hallaba ya a las puertas de la muerte y su padre en el cielo confinado la encomendó al Señor crucificado.

En la actualidad podemos ver en el jardín del puesto de la Cruz Roja, la cruz que estaba frente a la puerta del edificio y varios restos pétreos de bolas y pirámides.