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A. VALADEZ Y L. POY

SÓLO 42% DE JÓVENES CURSAN ESTE NIVEL

México, penúltimo lugar de AL en cobertura de educación superior: SEP

ALFREDO VALADEZ RODRÍGUEZ CORRESPONSAL ZACATECAS, ZAC.

El subsecretario de Educación Superior de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Luciano Concheiro, aseguró que, en la actualidad, México ocupa el penúltimo lugar de América Latina en cobertura de educación superior entre sus jóvenes de 18 a 23 años.

La pandemia por covid-19 afectó severamente al sistema educativo de nivel superior y posgrados del país, pues durante los dos años de la crisis de salud hubo 85

Por el covid, 85 mil estudiantes no regresaron a las universidades privadas

mil estudiantes que no regresaron a las universidades privadas, 30 mil dejaron los institutos superiores y 20 mil las universidades tecnológicas.

El funcionario federal acudió el viernes a la entidad zacatecana para supervisar los avances del proceso general de reforma en la Universidad Autónoma de Zacatecas, encabezada por Raúl Delgado Wise.

En el evento, realizado en el foyer del teatro universitario Fernando Calderón, el subsecretario señaló en su discurso que México ocupa el penúltimo lugar de América Latina en cobertura de educación superior entre sus jóvenes de 18 y 23 años; sólo 42 por ciento de ese grupo etario se encuentra en las aulas.

Durante su exposición, Concheiro planteó que a pesar de que durante el proceso de la pandemia no hubo menciones más que a los temas de salud, porque como seres humanos buscamos borrar este horror, “resulta que la pandemia generada por el coronavirus ha tenido un fuerte papel en el desarrollo de los procesos de transformación de la educación superior”.

Añadió que “tenemos que reconocerlo, en una coyuntura específica de desánimo social, de miedo, de instalación de varias condiciones que hoy deberíamos tomar en cuenta, ¿qué impacto tuvieron esos efectos de la pandemia, en el sistema de la educación superior en general, conformado por 6 mil 897 planteles a nivel nacional, con más de 433 mil profesores que atienden a 5.1 millones de estudiantes a nivel licenciatura y posgrado? ¿Qué diferencias hubo en el impacto del covid en los distintos subsistemas, carreras, condiciones?”

Desigualdad acentuada

El propio Concheiro respondió que en el nivel superior las instituciones que mejor sortearon la pandemia, en todos los ámbitos son las que integran el sistema de las escuelas normales del país, “que no paró de hacer algo, como lo que dice el lema de la UAZ: que somos Arte, Ciencia y Desarrollo Cultural”.

Porque en términos generales, indicó, este impacto de la pandemia, “les quiero decir que es mucho más brutal. Ahí donde ya somos desiguales, nos volvimos aún más desiguales después de la pandemia, en materia de educación superior en el país”.

Por la pandemia, 70% de menores de 10 años aún no leen, alerta Unesco

Desarrollaron otras habilidades, como la resiliencia, aseguran profesores

LAURA POY SOLANO

La Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) estima que, tras la pandemia de covid-19, la crisis de aprendizaje se agudizó. Alerta que 70 por ciento de los niños de 10 años, en países de ingresos bajos y medios, no pueden leer ni comprender un texto simple.

Al respecto, directores y maestros de primaria destacan que en el primer diagnóstico de aprendizaje del ciclo escolar 2022-2023 “constatamos que sí hay pérdida de saberes básicos, en particular aquellos que permiten a los estudiantes seguir aprendiendo”.

Sin embargo, agregaron los profesores, “adquirieron nuevas habilidades que no contempla la curricula nacional, como el valor de la solidaridad, el trabajo en equipo y la importancia de ser parte de una comunidad. Son niños más resilientes y compasivos”.

Directores de escuelas primarias en la Ciudad de México indicaron que, al concluir el primer trimestre del ciclo escolar, “es evidente que arrastramos un déficit de aprendizajes, pero también hay mejoras en las estrategias didácticas de los maestros para facilitar a los alumnos la comprensión de nuevos conocimientos”.

Profesores frente a grupo, que solicitaron el anonimato, indicaron que “durante la modalidad a distancia aprendimos que es posible generar conocimiento no sólo en la escuela, también en casa, con las actividades cotidianas, como cocinar y estimar a qué temperatura puede hervir el agua o cómo se calculan las cantidades para hacer un pastel”.

En entrevista con La Jornada, destacaron que pese a los reportes internacionales de la Unesco, que en junio pasado lanzó el informe “La situación de la pobreza de aprendizajes mundial: actualización 2022”, elaborado de forma conjunta con el Banco Mundial y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, entre otros organismos, “no todo fue malo durante la pandemia”.

Destacaron que si bien los estudios internacionales aseguran que los cierres prolongados de escuelas y las estrategias desiguales de mitigación empeoraron la falta de igualdad en el aprendizaje de los niños, “existen mejores herramientas pedagógicas para hacer frente a esta pérdida de saberes, porque hubo una enorme transformación tanto en maestros como en alumnos”.

Los educadores señalaron que “se debe considerar no sólo aquello que se incluye como contenido educativo. Muchos de nuestros alumnos superaron situaciones críticas en casa. Son distintos a cómo eran antes de la pandemia, no dejan de ser niños, pero sobrevivieron a una situación límite y eso también les generó aprendizajes”.

Basifi can en la CDMX a 9 mil maestros de primaria y secundaria

DE LA REDACCIÓN

La secretaria de Educación Pública, Leticia Ramírez Amaya, y el secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Alfonso Cepeda Salas, entregaron su base laboral a docentes de educación básica de la Ciudad de México.

En esta tercera etapa, 9 mil maestros capitalinos obtendrán estabilidad laboral en el transcurso de este mes, con lo que se llega a más de 53 mil docentes basificados, tan sólo en la capital del país.

En el Centro Cultural del México Contemporáneo del SNTE, Ramírez Amaya señaló que a través de la Autoridad Educativa Federal en la Ciudad de México (AEFCDM), en diálogo con las representaciones sindicales, en una primera etapa de basificación se benefició a más de 14 mil profesores, y se priorizó a quienes tenían nombramientos al amparo de la mal llamada reforma educativa.

La segunda etapa, en el ciclo 2019-2020, benefició a más de 19 mil docentes, los cuales poseían plazas sin titular. Adicionalmente, se basificó a 8 mil trabajadores administrativos, así como a 2 mil 269 trabajadores de la educación, como prefectos, laboratoristas y médicos escolares.

El líder sindical agradeció al presidente Andrés Manuel López Obrador y a la titular de la SEP la disposición para atender las demandas de los trabajadores, pues afirmó que ya son más de 700 mil las basificaciones entregadas en todo el país.

Cepeda Salas confió en que continúe esta misma disposición con los docentes de Baja California Sur, ya que algunos llevan muchos años trabajando sin las prestaciones y derechos que corresponden.

INFANCIA Y SOCIEDAD

Spinoza, fi lósofo de la libertad

ANDREA BÁRCENA

ANIÑOS Y JÓVENES de hoy no les tocó, como a nosotros, crecer con ayuda de las utopías del siglo XX y de héroes de carne y hueso; carecen de utopías y sus héroes son virtuales, violentos, sin historia ni arte. Viven en un mundo amenazante, lleno de incertidumbres. Por eso sus maestros deben tener una mínima cultura ética y filosófica; sin ella, difícilmente podrán estimular el pensamiento complejo y buenas actitudes. ¿Cuántos maestros conocen, por ejemplo, el pensamiento de Heráclito, de Spinoza o de María Zambrano? BARUCH SPINOZA (1632-1677) filósofo de origen sefardí hispanoportugués, nacido en Ámsterdam, cuyo pensamiento y obra enfrentaron adversidades similares a las que padecemos hoy: intolerancia, fanatismos, soldados de la fe, del género, la raza, la ideología, la cultura y el sexo. Se le maldijo y se le llamó hereje porque su obra rechazó las formas ortodoxas de trascendencia confesional o metafísica, y reivindicó la libertad de expresión y pensamiento. Leer hoy a Spinoza dice Enrique Krauze “ayuda a vivir, a perseverar. Spinoza es un bálsamo para ver el teatro del mundo con serenidad, sin alarmas inútiles ni entusiasmos excesivos. La vida y la obra de Spinoza –emblema universal de la razón, la libertad y la tolerancia– tienen mucho que decir a nuestro siglo”. ** EN LA ÉTICAde Spinoza, mediante la razón podemos alcanzar el conocimiento y con él la libertad, que reside en la comprensión “clara y distinta” de la necesidad, de las determinaciones que condicionan y que conducen a la paradoja de querer ser libres y no poder serlo del todo. Spinoza analiza las pasiones humanas para entenderlas y así liberarnos de ellas. Las ideas de Spinoza sembraron la ilustración europea que llegó 100 años más tarde. SI HOY EL mayor peligro es la irracionalidad colectiva, ¿qué arma tenemos, sino la razón, para defender la libertad? Fincado en la razón, sereno, Spinoza se alejó de la ortodoxia, de la tribu, de la identidad exclusiva y excluyente, y al divinizar la naturaleza conquistó el territorio de la razón libre en “el infinito mapa de Aquel que es todas Sus estrellas”, como lo explicó Borges.

**REVISTA LETRAS LIBRES, número 285: Spinoza, nuestro contemporáneo. También recomiendo el libro Spinoza en el Parque México, Enrique Krauze. Tusquets Editores, 2022. hypatia.alejandría18@gmail.com

En CIDH, primer caso contra EU por muerte de migrante mexicano

JESSICA XANTOMILA

En una audiencia inédita, la primera en la que Estados Unidos es acusado ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) por el asesinato de un migrante mexicano, Anastasio Hernández, a manos de agentes de migración en 2010 en San Diego, los familiares de la víctima demandaron “verdad y justicia”, luego de que el caso fue cerrado en 2015, a pesar de que hay videos y testigos de cómo el hombre fue golpeado hasta la muerte.

Indicaron que con este caso se tiene la oportunidad de crear un cambio duradero. En contraparte, los representantes de Estados Unidos reiteraron que hubo una investigación “por fiscales federales experimentados que determinaron que las pruebas eran insuficientes para presentar cargos penales”.

María Puga, esposa de Anastasio, narró ante los comisionados de la CIDH que se enteró por un oficial que su pareja estaba en el hospital, con muerte cerebral, el 29 de mayo de 2010, pero “nadie nos explicó qué había pasado. Me enteré de los detalles después, el día de su funeral”, señaló. Cuando estaba en casa, en un noticiero de televisión “se empezó a difundir un video, escuché los gritos de dolor de mi esposo”.

Fue dos años después cuando tuvo acceso a un segundo video. “Vi las imágenes de cómo mi esposo estaba rodeado de agentes, golpéandolo, torturándolo… le pusieron la pistola eléctrica, lo humillaron, le quitaron su ropa”, dijo. Eran unos 13 sujetos quienes lo agredieron y se presume que eran agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas y Patrulla Fronteriza.

María explicó que al solicitar a la CIDH revisar el caso se quiere que “los oficiales involucrados y el gobierno pidan perdón a la familia por haber asesinado a mi esposo, que haya cambios en estas políticas de uso de la fuerza que tanto han hecho sufrir”.

En la audiencia, en el marco del 185 periodo de sesiones de la comisión, los representantes de la familia de Anastasio, de la Clínica Legal Internacional de Derechos Humanos de la Universidad de Berkeley y de Alliance San Diego, denunciaron el “encubrimiento” de las autoridades estadunidenses.

Indicaron que aunque la víctima no representaba una amenaza para la seguridad de los agentes, hicieron un uso de la fuerza desproporcionado.

“Estados Unidos no ha refutado ni respondido a estos alegatos, de hecho, intenta justificar la utilización de la fuerza de los agentes y la decisión del Departamento de Justicia de concluir la investigación penal al sostener que Anastasio era combativo y estaba agrediendo”.

Thomas Hastings, representante interino de Estados Unidos ante la OEA, subrayó que tienen diferencias de opinión sobre que la CIDH admitiera este caso. Refirió que mediante acuerdo, el gobierno “pagó un millón de dólares (a la familia) para resolver todo tipo de reclamación de los actos u omisiones que dieron lugar al caso”.

AMPLÍAN VENEZOLANOS CAMPAMENTO EN CIUDAD JUÁREZ

▲ En protesta por las detenciones masivas de migrantes en Estados Unidos, el campamento de venezolanos en las inmediaciones del puente internacional Paso del Norte, frente al muro fronterizo en Ciudad Juárez, Chihuahua, aumentó ayer a más de cien casas de campaña. Con información de Jesús Estrada y Rubén Villalpando, corresponsales.Foto Afp

Universidades de cochera

JOSÉ M. MURIÀ

Como en todo lo que abarca la iniciativa privada, en materia educativa, especialmente desde que el estado, cada vez más “neoliberal” o “neoporfirista”, soltó las riendas de la enseñanza superior, se han consolidando algunos –no muchos– centros de estudios de apreciable calidad y seriedad. Pero también ha proliferado una gran cantidad de instituciones privadas pésimas, de conducta inmora l y, a fin de cuentas, una verdadera toma de pelo para medrar a costa de quienes caen en el garlito de confiar en ellas.

Algunas incluso caben perfectamente en lo que, quienes bregamos por una buena enseñanza en los altos niveles, llamamos “universidades de cochera”.

No daré nombres por respeto a sus incautos alumnos, pero no son difíciles de identificar, máxime que en esta época se anuncian en diferentes medios en busca de “clientes” ofreciendo siempre descuentos o lo que llaman “becas” en vez de hablar de la calidad de su trabajo.

Claro está, nunca hablan del nivel de sus docentes ni de sus instalaciones y, mucho menos de sus talleres y bibliotecas, porque carecen completamente de ellos.

Incluso, andan algunas ahora presumiendo que no tienen repositorios bibliográficos porque con sus recursos técnicos no se requieren.

Asimismo, llama la atención que en la retórica publicitaria ya no se habla nunca de forjar ciudadanos útiles a la sociedad, como se nos predicaba antaño, ahora el objetivo es que se encumbren en ella: “forjamos líderes” hemos oído decir por ahí.

En ese sentido, las universidades chafas coinciden hasta con las más prestigiosas. Los estudios superiores se consideran ahora un mecanismo para sobresalir y no para contribuir al bienestar general. De esta manera queda bien establecido que, quienes van a dichas escuelas, pueden aspirar a ser superiores a los demás.

Por fortuna, al menos en Jalisco, quienes más destacan siguen siendo todavía los egresados de la universidad pública, aunque es cierto que los hay de algunas privadas, incluso de las más reaccionarias y con ribetes fascistas.

Cuando todavía no se había dado lugar al libertinaje educativo actual, en Guadalajara se produjo una abierta competencia entre la universidad pública y la privada, de la que salió ganadora esta última prácticamente siempre y cada vez de manera más clara, especialmente en las disciplinas universitarias de las que no se podían obtener buenos pesos y centavos.

Por más que se pretenda disimular, se sabe que el abrevadero más rico para el aprendizaje son los libros, de manera que basta comparar las bibliotecas de una universidad y la otra para calibrar la magnitud de las diferencias, de la misma manera que una diferencia similar produce el inventario de autores y miembros del Sistema Nacional de Investigadores de una y otra.

Es precisamente con la Benemérita Universidad de Guadalajara con la que ha agarrado pleito el señor gobernador, a pesar de que su señor padre fue rector de ella en los años 80, en tanto que, con las demás casas de estudio anda de a “pellizco en la nalga”. Por algo será…

Prevén escasez e infl ación si se restringe el glifosato

JARED LAURELES

A unos días de su análisis en el Senado, el Consejo Nacional Agropecuario (CNA) reiteró su rechazo al dictamen para prohibir el uso de plaguicidas altamente tóxicos como el glifosato, ya que, aseguró, aún no hay alternativas para remplazarlo. En un extenso documento, la institución, que agrupa a grandes corporativos productores de glifosato, consideró que la iniciativa es “ambigua y con profundo desconocimiento del tema” y tiene un enfoque “ideológico y prohibicionista”. “No se trata de una iniciativa que simplemente busque incentivar el uso de productos biológicos o prácticas agroecológicas, sino que textualmente menciona que busca ‘garantizar la eliminación de la existencia de los plaguicidas’”, apuntó luego de que un grupo de senadoras de Morena adelantó en conferencia que, tras posponerse una semana, el dictamen está listo para su análisis en comisiones unidas de Salud y de Estudios Legislativos Segunda. El CNA señaló que el decreto presidencial de diciembre de 2020 establece la reducción gradual de la importación del glifosato, pero la iniciativa de ley califica de nocivos a todos los productos de protección de cultivos y la comparó con una similar en Sri Lanka, donde se intentó aplicar de forma “abrupta” la agricultura orgánica en todo el país, pero su cultivo más grande, el arroz, cayó hasta 50 por ciento, aumentó la inflación y la pobreza.

Recalcó que en diversos artículos, el dictamen establece que la Secretaría de Salud debe ordenar y supervisar la prohibición progresiva de los plaguicidas altamente peligrosos. Sin embargo, no define cuáles son estos productos.

“Su intención es que se aplique el principio precautorio, es decir, que no es necesario que exista la eviden-

▲ Según el CNA, la iniciativa de ley apunta a eliminar todos los plaguicidas. Foto Cuartoscuro

cia del daño de un producto, sino que con su simple sospecha es suficiente para que se prohíba”, añadió.

El organismo empresarial refirió que el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias reconoció que no han encontrado opciones de sustitución y requieren tiempo, mientras el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología tampoco cuenta con un proyecto a gran escala.

Se extiende gripe aviar a siete estados

DE LA REDACCIÓN

La influenza aviar de alta patogenicidad (IAAP) A/H5N1 se extendió a siete estados del país, por lo que el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) aplicó medidas para proteger la producción avícola nacional.

El organismo de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) informó que tres de ocho focos identificados han afectado unidades de producción avícola (UPA) tecnificadas, dos en el estado de Sonora y una en Nuevo León, donde se localizaron 296 mil aves afectadas.

Decretan cuarentena

El virus se ha detectado en el estado de México, Nuevo León, Chiapas, Sonora, Baja California, Jalisco y Aguascalientes.

En las UPA comerciales, el Senasica ordenó la cuarentena interna en dichos estados, lo cual implica que las granjas en esas entidades no pueden movilizar productos avícolas sin permiso de la autoridad sanitaria federal.

Se procedió a la despoblación, limpieza y desinfección de las UPA para iniciar el periodo de vacío sanitario y posteriormente introducir aves centinelas, con el propósito de constatar la ausencia del virus antes de reiniciar los procesos de producción.

Senasica detectó el primer caso de influenza aviar de alta patogenicidad, A/H5N1, en un halcón gerifalte (Falco rusticolus) que se alimentaba de aves silvestres en la cuenca del río Lerma, en el estado de México, que murió a causa de la enfermedad.

La cepa de ese virus ha provocado graves brotes en Europa, Estados Unidos y Canadá, advirtió el organismo.

La Sader recordó que en Chiapas se localizó la IAAP A/H5N1 en una granja familiar del municipio de Juárez, Chiapas, con una población de 186 aves; 120 fueron sacrificadas en el Parque Morelos de Tijuana, Baja California, y en el estado de México, Aguascalientes y Tepatitlán murieron cinco ejemplares, que fueron contagiados por aves migratorias.

Actualmente, los técnicos del Senasica y de la Comisión Auxiliar de Sanidad Avícola de la Unión Nacional de Avicultores ya se encuentran analizando la efectividad de las vacunas disponibles y trabajan en el diseño de una estrategia de inoculación para proteger a la avicultura nacional.

En ninguna parte

FABRIZIO MEJÍA MADRID

Apareció un libro sobre las fantasías de los multimillonarios escrito por el estudioso de lo digital Douglas Rushkoff, Survival of the richest. Se trata de un recuento de conversaciones que este téorico del cyberpunk ha tenido con los dueños de las nuevas tecnologías, esos que, al estilo del Viejo Oeste, tomaron una tierra y le extrajeron productos para vender. En el caso de la tecnología, el territorio es una plataforma digital creada de la que se extraen datos personales para vender algoritmos. Lo que llama la atención es lo que preocupa a estos multimillonarios. En vez de preguntarle al futurólogo por el cambio climático o cómo sus modelos de negocio generaron medios de odio, desigualdad y falsedades, lo que les interesa es saber si es Alaska o Nueva Zelanda el mejor lugar para construir los búnkers que los salvarán del desastre climático final, una nueva pandemia, un ataque nuclear, una tormenta solar, una revolución de los pobres, un hackeo que inmovilice todos los servicios, o si cree que ya estarán accesibles los robots que los cuiden y, si no es el caso, cómo hacer para que los guardias de carne y hueso no los asesinen y se queden con todo.

La fantasía de los más ricos es, qué duda cabe, sobrevivirnos a todos los demás y aun al planeta. El dueño de Amazon y el de Tesla y Twitter, Bezos y Musk, creen en mudarse a Marte; los demás, Thiel o Kurtzweil, creen en revertir la vejez o vaciar sus cerebros en un disco duro. La idea es escapar. En lugar de invertir en una tecnología que aleje la catástrofe climática con toda su cauda de inundaciones, migraciones desesperadas, sequías y hambrunas, la idea es sobrepasar lo humano y huir a la mayor velocidad posible. Rushkoff propone una idea escalofriante: escapar no es el resultado del capitalismo digital, sino su causa. Lo lleva a una descripción de una “sociopatía” propia de los desarrolladores digitales: “Conformidad con los sesgos contenidos en los códigos digitales, entendimiento de las relaciones humanas como fenómenos mercantiles, pánico a la naturaleza y a las mujeres, la necesidad de ver las propias contribuciones como ideas innovadoras únicas que nunca nadie antes había pensado, y neutralizar lo desconocido a partir de dominarlo y deshumanizarlo”. Lo más relevante de esta “sicopatía” es ver la vida como un videojuego que tiene un final –“el evento”– y buscar una forma de sobrevivirlos a todos a partir de encontrar una “meta”, es decir, saltar a otra plataforma que incluye al propio juego y desde la que se le pueda manipular.

Ya Paul Virilio, el téorico de la velocidad, había hecho una descripción bastante aproximada de la fantasía detrás de acumular riquezas: vivir en ninguna parte. Cuando describe los últimos años del genio multimillonario Howard Hughes, lo que encuentra es que habitaba cuartos de hotel que eran copias unos de otros, sostenía a como diera lugar sus mismas rutinas obsesivas, e insistía en que cada mañana un empleado pusiera un sándwich en una bolsa colgado del árbol, el mismo árbol, en la calle de enfrente. Virilio no recurre a la sicología para descifrar a Hughes, sino a la fantasía millonaria: habitar un mismo espacio donde el tiempo no transcurra. Dentro de los aviones de guerra que inventó, lo que ocurría era la inercia, una fantasía de eternidad al alcance de la mano. Lo mismo puede decirse de la isla, el avión, el yate privado. Ninguna parte.

No se necesita mucha imaginación para encontrar semejanzas entre estas fantasías de eternidad y la cultura digital: desaparece lo material y la duración. La experiencia de tomar un libro o un disco se evapora en bytes. Lo instantáneo sustituye a la espera y a la contemplación. Ya no se lee y redacta, sólo se reacciona; ya no se aprecia, sólo se descarta para ver lo que sigue. Como escribió Virilio, “se instaura la industria de la no-mirada”. La fantasía de eternidad es el instante. Lo es, también, la uniformidad. No es sólo que los malls de todo el mundo tienen la misma arquitectura, tiendas y marcas, sino que, en un estudio reciente de Oxford sobre la apariencia en Instagram, se descubrió que las personas están usando una especie de molde para alterar sus retratos con filtros fotográficos: ojos levemente rasgados, labios turgentes, ángulos agudos, narices rectas. A esto se le ha llamado la cara “de cachorro felino” y ya llegó como moda a los consultorios de cirugía estética. La profecía de Virilio de que la genética sería una de las nuevas artes va tomando forma. Lo ha hecho ya su otro pronóstico: que la libertad de expresarse se ceñiría al efecto y se alejaría de la verdad.

Con el avance de la cultura digital, hemos visto el fortalecimiento de una idea muy antigua: la crueldad tiene más efecto que la verdad. En el ansia de captar clics, se usan imágenes de destrucción, tortura, y asesinato; se profieren insultos y calumnias; se tratan de dirigir las miradas en esta cultura de no-mirar y de ser escuchado en una dinámica de pura reacción. A tal grado ha llegado la industria de la crueldad que se justifica diciendo que es “libertad” de expresión, la presentación de un ego sincero. Como concluye Virilio, el límite de toda libertad es el umbral del llamado al asesinato. Pero esas invitaciones a la crueldad traspasan ese borde a cada instante.

Sin los millones de dólares para comprar un búnker o una isla privada, los usuarios digitales reproducimos la fantasía de irnos aislando en nuestra burbuja de algoritmos que deciden cuáles son nuestros deseos e, incluso, anhelos. Se nos han vendido aplicaciones diseñadas para crear adicción, hábitos y compulsión, que financian las ganas de fugarse de los supermillonarios. Pero, le recuerdo, que, en el caso de que llegara “el evento”, difícilmente alguno de nosotros tendría señal de Internet para evadirse hacia ninguna parte.

Democracia asediada

MIGUEL CONCHA

Los tiempos actuales no son los mejores para la democracia. De todas partes del mundo llegan signos preocupantes de su asedio. En Europa, en paralelo al escepticismo –principalmente juvenil– sobre los partidos políticos tradicionales, avanza a pasos agigantados el populismo conservador, sea en el caso más reciente de la alianza de derecha y la ultraderecha en Italia, o el avance parlamentario del Frente Nacional en Francia, la consolidación reaccionaria en Hungría e incluso en países que parecían inmunes, como Suecia, crece esta tendencia.

En otras latitudes, naciones con luchas ejemplares por alcanzar su libertad y su democracia, como es el caso de India, ven renacer gobiernos discriminatorios, xenófobos y misóginos. En nuestra América Latina los populismos, autodenominados de izquierda, avanzan hacia el más descarado autoritarismo, aniquilando despóticamente a la sociedad civil, como en Nicaragua, en alta traición a su pasado revolucionario y democrático. ¿Qué es lo que tiene en común este asedio cuasi global a la democracia?, por un lado, el intento de reducir los avances políticos de siglos a democracias plebiscitarias; es decir, dispuestos a confirmar los mandatos del gobernante, en los que el ciudadano queda reducido al votante individual, sin mediaciones frente al poder político, que se asume como el único autorizado a decidir por todos, a cambio de adular al pueblo abstracto, sin avances concretos en su bienestar.

En cada región a estos temas se les añaden otros. En América Latina, por ejemplo, se plantea el falso dilema entre democracia y justicia social, mismo que parte del desconocimiento intencionado de que los derechos humanos son indivisibles e interdependientes. Por tanto, que no se podrá avanzar hacia una verdadera justicia social –más allá de la dádiva condicionada, explícita o implícitamente– si su sociedad no tiene el poder de imponer las políticas públicas necesarias a los gobiernos en turno.

No en balde el aporte latinoamericano a la cultura política mundial fue el de la participación ciudadana, hoy ampliamente reconocido, salvo por las posiciones ultraconservadoras. La democracia, para que sea tal, debe tener al menos tres ingredientes: un contenido representativo, necesario, pero no suficiente; un componente de toma directa de decisiones por la población sobre aspectos cruciales, sin mediaciones partidarias, y una dimensión participativa, que implica la intervención de la sociedad a través de sus múltiples formas de organización en la formulación y ejecución de las políticas públicas que más afectan su vida.

En la actualidad, sin alguno de los tres es falaz hablar de democracia. Por ello, los populismos, conservadores o seudoprogresistas, tienden a combatir y pretenden deslegitimar toda forma de organización social que no se someta a su poder y que en tal medida se convierta en contrapeso a su omnipotencia; la que además de pretenderla absoluta, la quieren perdurable, más allá de los mandatos legales.

Frente a este sombrío panorama de asedio a la democracia, hay por supuesto signos esperanzadores, como las rebeliones juveniles contra las teocracias misóginas; las articulaciones de los movimientos sociales, y los gobiernos progresistas emergentes en América Latina, como el de Chile, Colombia o Brasil, los que al mismo tiempo que reivindican la democracia, completa, no sólo electoral, diseñan estrategias de redistribución de la riqueza, uno de los principales puntos de conflicto que experimentan con la oposición conservadora, al diseño de las reformas fiscales redistributivas, que prometieron y están en proceso de formulación.

La victoria de Luiz Inácio Lula da Silva en Brasil fortalecerá esta tendencia, sobre todo si, como es de esperarse, retoma el reconocimiento y apoyo a las diversas e innovadoras formas de participación ciudadana que tuvieron auge en los anteriores periodos en que fue presidente y que se convirtieron en ejemplo y fueron puestos en práctica en múltiples países del mundo. El reto común a estas experiencias emergentes es fortalecer sus vínculos con las organizaciones y movimientos de la sociedad.

El panorama planteado será el espejo en el que tendremos que ver los retos para el futuro próximo de México. Ante la anticipación de la discusión centrada sobre el quién del próximo gobernante, la sociedad tiene la necesidad de poner en la agenda el qué de las acciones que debería realizar, y el cómo lo va a hacer, influyendo para que aquéllas se encaminen al desarrollo del pueblo que, como lo señala la Declaración Universal del Derecho al Desarrollo, tiene que ser integral. Es decir, social, económico, político, cultural y participativo. En consecuencia, fundamentado en los derechos indivisibles e interdependientes, con la intervención de la sociedad. Este es el aporte que nos toca para romper el asedio a la democracia.

Ante la discusión sobre quién será el próximo gobernante en México, la sociedad tiene que poner en la agenda las acciones que debería realizar y cómo lo va a hacer

¿Y si nuestra libertad se jugase en una rave?

BEÑAT ZALDUA

Más de 3 mil personas se dieron cita esta misma semana en una rave organizada en las afueras de la ciudad italiana de Módena, al calor de un Halloween que colonizó hace años las costumbres europeas. La fiesta, en un terreno agrícola ocupado, debió ser mundial, envidiable, pero difícilmente hubiese llegado a la prensa del continente si el recién estrenado gobierno neofascista encabezado por Giorgia Meloni no hubiese aprovechado el festival para lanzar su primera ley. La norma lleva el sello de Matteo Piantedosi, conocido como el “prefecto de hierro” en su época de delegado de gobierno en Roma, y actual ministro del Interior –Secretaría de Gobernación, para entendernos–. Él fue el encargado de enviar la policía a disolver la rave de Módena.

La alarma causada por la nueva ley no ha venido por un interés repentino por los derechos de los raveros, noble y entrañable tribu humana que se conforma con un lugar en el que la música no cesa. La alarma, que va desde los partidos de la oposición hasta organizaciones como Amnistía Internacional, la ha causado la calculada ambigüedad con la que está redactada la ley, que prevé penas de entre tres y seis años de cárcel para quien promueva “la invasión de terrenos o edificios para reuniones de más de 50 personas que sean peligrosas para el orden público, la seguridad pública o la salud pública”.

Con ese redactado, cualquier concentración puede ser perseguida por el gobierno; las raves apenas son las paganas de una norma que ofrece patente de corso al Ejecutivo italiano. Con una arbitrariedad lacerante, por supuesto, porque en los mismos días más de 2 mil personas se reunieron para conmemorar el centenario de la Marcha sobre Roma que encumbró a Mussolini hace un siglo, sin que la policía de Piantedosi moviese un dedo ante semejante apología del fascismo.

Hay que seguir de cerca a Italia, porque siempre anticipa acontecimientos. Quizás este sea, lejos del histrionismo de Trump, el rostro del neofascismo en el poder europeo, o al menos en su inicio: más taimado y rebuscado, parapetado tras pretextos como ahora las raves, pero con la misma agenda de siempre: achicar espacio a las libertades, perpetuar privilegios y violar derechos humanos. Mientras estas letras son escritas, más de un millar de migrantes rescatados en el Mediterráneo –otro día hablaremos de esta inmensa fosa común– esperan que el gobierno de Meloni abra sus puertos.

En esta incipiente –y no irremediable– vía europea al autoritarismo, la ley es una piedra angular, el baluarte que garantiza la construcción paulatina de un nuevo orden. No es casualidad que Meloni comience por ahí. ¿Para qué adecuar tus políticas a la ley si puedes escribir la ley que se amolde a tus políticas? Las grandes mayorías absolutas son armas de calibre mayor en manos de una derecha desacomplejada: a las amplias coaliciones con las que la izquierda logra rozar algo de poder en el continente les cuesta sudor y lágrimas revertir la ley más simple.

Está ocurriendo a pocos kilómetros, en España. El “gobierno más progresista de la historia”, como lo bautizaron sus impulsores –lo más dramático es que tienen razón–, ni siquiera ha logrado revertir las normas más liberticidas de la anterior era de Mariano Rajoy. El ejemplo paradigmático es la Ley de Seguridad Ciudadana, más conocida como la ley mordaza, que limita severamente el derecho a la manifestación, impide la fiscalización adecuada de las actuaciones policiales y otorga una amplia discrecionalidad a los agentes de seguridad a la hora de imponer multas por, simplemente, faltar al respeto a un agente de la autoridad. PSOE y Podemos, más por el primero que por el segundo, no han sido capaces de llevar a cabo la derogación prometida en campaña.

Otro ejemplo es la reforma del tipo penal de sedición, que fue el empleado para condenar a los líderes independentistas catalanes. El gobierno insiste en que lo hará, algo que ha llevado a un timorato Feijóo a bloquear de nuevo las negociaciones para la renovación de la cúpula judicial española, que lleva un lustro en funciones –eso sí que es una rave en condiciones–, pero lo cierto es que estamos en el último año de legislatura, y todavía no ha habido reforma.

La aprobación de una ley deja su aplicación en manos de dos estamentos que, por lo general, responden a intereses conservadores, cuando no abiertamente autoritarios. Hablamos de los jueces y los policías. Con ellos, la derecha se asegura el control de resortes claves mientras la incómoda democracia lo condena a la alternancia en el poder político.

De hecho, son resortes con vida propia, capaces de convertir en liberticidas medidas aprobadas con la intención original de proteger a minorías. Ocurre con los delitos de odio, que han acabado sirviendo para condenar insultos a la policía, pese a ser originariamente incluidos en el Código Penal con la idea de proteger a colectivos amenazados como migrantes, comunidad LGBT+ y disidencias varias. Quizá cabría incluir a los raveros, últimas víctimas de una derecha ultramontana que busca perpetuar a través de leyes y tribunales lo que acaba perdiendo en las urnas.

Hay que seguir de cerca a Italia, porque siempre anticipa acontecimientos. Quizás este sea el rostro del neofascismo en el poder europeo

Luis Villoro y las revoluciones

PEDRO SALMERÓN SANGINÉS

Hace un cuarto de siglo, intentando entender la Revolución Mexicana, encontré un luminoso ensayo de Luis Villoro que me permitió superar el añejo debate entre quienes afirman que las revoluciones lo transforman todo (siguiendo a Michelet) y quienes aseguran que no cambian nada (siguiendo a Tocqueville). Recordaba don Luis que el concepto mismo de revolución se diluía, pues los historiadores “revisionistas” de diversas revoluciones han terminado por desechar “la noción de ruptura y recomienzo” como lo significativo de una revolución: vista desde un periodo largo, la ruptura con el pasado habría sido más ilusoria que real. Si la continuidad prevalece sobre el cambio, si la revolución no es un giro decisivo, si tiene lugar más en la mente de sus actores que en la realidad histórica ¿el de “revolución” continúa siendo un concepto útil para la historia?

Tras la lectura crítica de esos revisionismos, Villoro propuso una reformulación del concepto de revolución, según el cual, lo que caracteriza a las revoluciones modernas no es la transformación de las estructuras, sino la de la “actitud” o la relación de los individuos y grupos con la sociedad y la manera de entenderla y de ubicarse en ella.

Las actitudes son las “disposiciones comunes a los integrantes de un grupo, favorables o desfavorables hacia la sociedad existente, que se expresan en creencias sobre la sociedad de acuerdo con preferencias y rechazos e impulsan comportamientos consistentes con ellas. Las actitudes implican la adhesión a ciertos valores y el rechazo a situaciones que no permiten realizarnos”.

De esa manera, si encontramos que si un proceso histórico (sin discutir qué tanto transforma las estructuras políticas, económicas y sociales) transforma la “actitud” o “las realidades ideológico culturales”, puede llamársele “revolución”. Y lo encontré en la Revolución que yo estudié: de la última década del porfiriato a la década de 1920 pasamos de los festines (el oficial del Centenario, por ejemplo) con manjares y vinos franceses a la celebración de los moles y los pozoles; de la pintura impresionista, en formal copia de lo europeo, a Rivera, Orozco y Siqueiros… y, sobre todo, apareció una sociedad movilizada: obreros que estallan huelgas masivas y construyen sindicatos de clase; campesinos que lo mismo exigen al gobierno la tierra por la que lucharon, que la toman por su cuenta, dislocando poco a poco el latifundismo oligárquico.

No divaguemos: Luis Villoro llegó a esta forma de comprender la Revolución tras su estudio filosófico (muy mal recibido por los historiadores de entonces) de una revolución particular: El proceso ideológico de la revolución de Independencia (1953) es el segundo gran libro de interpretación histórica de Villoro que, como el anterior (Los grandes momentos del indigenismo en México, 1950), pertenece a la búsqueda colectiva del Grupo Hiperión y otros intelectuales de la época (digamos de 1947 con El laberinto de la soledad a 1956 con la Visión de los vencidos) por desentrañar el ser del mexicano. Ahí encontró Villoro con claridad esos cambios de actitud: primero Hidalgo y luego Morelos y sus compañeros negaron en bloque el orden jurídico colonial, rechazaron la Conquista, negaron el pasado. Al dar la espalda al pasado y abrazar “la libertad”, los insurgentes hicieron suyas las ideas políticas liberales, la búsqueda de la república representativa y los principios fundamentales de libertad e igualdad.

“En el Congreso de Chilpancingo Villoro percibe el triunfo de esta actitud histórica y de la nueva concepción política. La clase media reunida en este Congreso, al desconocer la organización política y social de la monarquía española, ya no fundaba la Independencia en las antiguas leyes; por el contrario, construía la nación sobre la noción de soberanía popular. La clase media abolía, con ello, la constitución social de la Colonia y elegía organizarse libremente de nuevo” (María José Garrido: https://historicas. unam.mx/publicaciones/publicadigital/ libros/escribir/ELH_011.pdf).

Así pues, en lugar de discutir las transformaciones reales o los ritmos de esas transformaciones, para Villoro lo central es el cambio de actitud, que deposita en el futuro los esfuerzos del presente. Y esas clases medias lo hicieron en contacto o tras el contacto con las clases oprimidas que con su acción destruyeron el orden colonial y se erigieron a sí mismas como fundamento del nuevo orden (en tanto se basaba en el soberanismo popular).

Hidalgo y Morelos, Villa y Zapata fueron vencidos, pero la acción de los ejércitos populares que mandaron transformó para siempre la realidad, la “actitud”.

Hidalgo y Morelos, Villa y Zapata fueron vencidos, pero la acción de sus ejércitos populares transformó para siempre la realidad, la “actitud”

Pd: hemos criticado en estas páginas al Grupo Hiperión y sus contemporáneos. No podemos dejar de añadir que mientras Leopoldo Zea u Octavio Paz se convertían en ideólogos del régimen o para el régimen, y Emilio Uranga se convertía en Galio Bermúdez (aunque nunca tanto como el actual Galio), Villoro transitó hacia un pensamiento crítico, siempre del lado de las rebeldías populares como las que historia. Su reflexión sobre la Revolución lo llevó a acompañar la revolución del EZLN, que lo es en tanto ha cambiado irremediablemente nuestras actitudes.

Normales rurales: no sólo legado histórico, sino necesidad presente

TATIANA COLL

Las normales rurales (NR), que han cumplido ya 101 años de vida, difícil, de grandes resistencias combativas, pero también esperanzadora y llena de conquistas; no representan sólo ese legado histórico que, como prólogo o introducción, muchos apuntan al hablar de ellas. No son sólo ese baluarte representativo de aquella primera intención de la Revolución por dar respuesta a las demandas sociales urgentes que levantaron en armas a la enorme masa campesina, son una necesidad real en el México rural. La Revolución la comenzaron a enterrar con gran empeño los poderes gubernamentales desde Ávila Camacho y Miguel Alemán, en un largo proceso que fue desmontando todas las medidas de una posible reforma agraria, que en realidad nunca llegó en su totalidad. Los campesinos siguieron empecinados en su lucha por la tierra, la consolidación de sus ejidos y comunidades agrarias. Díaz Ordaz y Echeverría desataron a escala sin precedente la guerra sucia y Salinas la remató con la modificación al artículo 27. Los funcionarios en estos años sembraron el campo de muerte y corrupción a través de la CNC, los caciques, señores de horca y cuchillo y el PRI.

Las NR fueron parte de estas luchas y resistencia campesina por su origen. Pero, además, se engarzaron con las de estudiantes y maestros, valga la redundancia: por su condición y destino. Los embates del Estado fueron constantemente los mismos: represión y muerte, abandono presupuestal, encarcelamiento, infiltración, cooptación o corrupción. El Estado mexicano ha optado siempre por el control por encima de la consistencia y coherencia de los procesos educativos. Su mera sobrevivencia y tenacidad llevaron al poder, desde el comienzo, a construir la leyenda negra para justificar sus acciones y aislarlas. Ayotzinapa es ahora el símbolo doloroso de esta barbarie irrefrenable.

La leyenda negra surgió desde la fundación. La primera normal establecida por Vasconcelos en Tacámbaro, como parte del programa de la SEP de Escuelas Centrales Agrícolas, tenía y tiene el objetivo de formar maestros campesinos, para esparcir por el campo la educación y la dignidad de vida. Allí mismo en Tacámbaro se instaló un seminario católico, inmediatamente se levantaron voces persecutoras desde el púlpito: “son las escuelas del diablo”, “son inmorales y pecaminosas”, tronaban y amenazaban con excomulgar a padres, estudiantes y profesores.

La normal tuvo que peregrinar por diferentes comunidades hasta quedarse definitivamente, en 1949, en Tiripetío.

La leyenda negra se retomó después del cardenismo, era la época de la guerra fría. Alemán alentó el mito de que eran “nidos de comunistas apátridas”, “vivero de líderes rojillos”. Con Díaz Ordaz y Echeverría involucrados en masacres y la guerra sucia fueron bautizadas como “semilleros de guerrilleros” y “terroristas extranjerizantes”, y con esa excusa cerraron la mitad de ellas tomadas por el Ejército, la policía y la CNC. La llegada de los tecnócratas al poder acuñó la definición de que no eran más que “entelequias del pasado populista” que ya no servían para nada.

Así, los normalistas tienen que luchar por su sobrevivencia. Bajo la perniciosa influencia de la leyenda negra, la pregunta que muchos se hacen es: ¿acaso son necesarias las NR en pleno siglo XXI? La respuesta es sí, por supuesto. Los estudiantes agrupados en la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México siguen empeñados en defender la formación de un maestro vinculado a su comunidad, atento a los problemas y condiciones de vida de barrios y localidades, sensible al entorno depredado por un capitalismo neoliberal devastador, enfadado por el creciente despojo y destrucción de la naturaleza, alarmado por el empobrecimiento de pueblos, consciente del mundo implacable que nos rodea, diría Freire. ¿Acaso no sería necesario entender y esclarecer esta situación en la formación de nuestros maestros? Contrario al profesor reproductor de planes elaborados en oficinas “expertas”, alejadas de la vida cotidiana de las comunidades, en un México tan diverso y complejo ¿acaso no es necesario recuperar los saberes y cosmovisiones diferentes?

Los planes de estudio de las NR enarbolan tres principios que en educación: 1. La vinculación entre teoría y práctica, como eje de la construcción del conocimiento no memorístico; 2. La vinculación de la escuela con la comunidad: abierta y parte de la vida social y no sólo como centro de transmisión de conocimientos, y 3. El desarrollo de la escuelatrabajo que, vinculada a las labores y procesos de producción agrícola permitirá enriquecer, sostener y desarrollar el trabajo campesino en otros niveles.

Las NR sostienen cinco ejes formativos: el primero es el de la formación profesional docente en el medio rural, el punto más vulnerado por las reformas curriculares elaboradas centralmente, planes en los que impone la enseñanza del inglés y las TICS por encima de materias formativas y prácticas docentes en el aula; se decide eliminar el apoyo para materiales diversos y transporte para ir a los planteles; se elimina la posibilidad de enseñar las lenguas indígenas. Este es el único eje que realmente está bajo la responsabilidad de los maestros. Los estudiantes han asumido la responsabilidad de mantener los otros cuatro: producción agropecuaria, cultura y oficios, deportivo y formación política.

En México la estructura educativa desigual prevalece, 46 por ciento de las escuelas básicas del país son aún unidocentes, multigrado e incompletas. La escena es la de un maestro en una escuelita con piso de tierra, sin materiales, con mesas precarias y un montón de chiquillos de todas las edades que tiene que organizar para enseñarles a leer y escribir. Profesores que muchas veces se quedan a dormir en el plantel y que tardan horas para llegar a las cabeceras municipales a cobrar raquíticos salarios. ¿No son necesarios hoy día, en pleno siglo XXI, estos maestros rurales? ¿No merecen nuestras comunidades tener escuelas decentes, con maestros sensibles y comprometidos socialmente?

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