
3 minute read
Destape de “narcovínculos” y sobornos a periodistas durante juicio de García Luna
from 02-02-2023
El Conejo testificó sobre su labor mediadora entre narcos de México y Colombia, y de supuestos pagos a medios
Agencias
Advertisement
Nueva York
El juicio contra el exsecretario de Seguridad Pública durante la administración de Felipe Calderón, Genaro García Luna, sigue arrojando información sobre narcotraficantes que operaron en territorio nacional durante aquellos años. Ahora Harold Mauricio Poveda Ortega, El Conejo, rindió su testimonio ante la corte.
Durante su declaración, e l narcotraficante colombiano dijo que su trabajo consistía en facilitar relaciones entre narcos mexicanos y colombianos. Narró que en busca de traficar grandes cantidades de cocaína a través de México con rumbo a Estados Unidos, se hacían colectas entre varios miembros de los cárteles de Sinaloa y Beltrán Leyva para cargamentos de varias toneladas en Colombia.
Señaló que su rol en el tráfico de drogas fue intermediar entre los grandes traficantes colombianos y mexicanos, en busca de lograr llevar la droga a distintas ciudades de Estados Unidos como Los Ángeles, Chicago, Nueva York y Atlanta.
El Conejo explicó que fue detenido un 4 de noviembre de 2010, sin embargo, fue presentado ante la PGR hasta el día
5. Presuntamente lo llevaron a una casa de seguridad que desconoce, debido a que todo el tiempo tuvo los ojos vendados. En el supuesto interrogatorio Harold Poveda denunció que sufrió “tehuacanazos, golpes y toques eléctricos”.
CAPTURA DE EL REY Y SOBORNO A
LOS MEDIOS
El narcotraficante colombiano aseguró que Arturo Beltrán Leyva le pidió el día de la captu- ra de Jesús El Rey Zambada que le enviara “de manera urgente” 300,000 dólares para que los medios de comunicación difundieran rápido la noticia. drey Azoulay, directora general de la Unesco.
Según el relato de El Conejo, que proveía a Beltrán Leyva con cocaína procedente de Colombia, El Rey había sido detenido en un operativo formado por agentes de policía junto con sicarios del clan de los Beltrán Leyva y después fue entregado a la Policía Federal.
Los narcotraficantes temían que la Policía Federal lo pusiera en libertad o negociara su liberación.
El objetivo es asegurar la “libertad de expresión”, al tiempo que se promueve la “disponibilidad de información precisa y fiable”, dentro de un modelo de negocio que esta agencia de la ONU califica como “defectuoso”.
A pesar de las grandes ventajas en comunicación, transformación social y compartición del conocimiento, estas plataformas son “cada vez más” un “caldo de cultivo para la desinformación, la incitación al odio y las teorías conspirativas”. (Alan Rodríguez)
“Arturo Beltrán me llama y me dice que, por favor, le haga llegar 300,000 dólares urgentemente para hacer llegar rápido el dinero a los medios de comunicación, para que empezaran a anunciar en los medios” la detención, dijo El Conejo, que actualmente se encuentra en libertad condicional en Estados Unidos en espera de su sentencia por narcotráfico.
La Fiscalía cuestionó a Poveda Ortega sobre la razón de pagar a los medios, El Conejo precisó que si salía en los medios la noticia “se hacía popular en México y también ya la DEA (la agencia antidrogas estadounidense) se daba cuenta de que (El Rey Zambada) está detenido y no podían soltarlo o llegar a algún arreglo”.
El pasado martes, el narcocontable Israel Ávila aseguró ante el jurado que el narco para el que trabajaba en enero de 2008, Mario Pineda Villa, quien era socio de Arturo Beltrán, le pidió, después de la captura de El Rey, que se pusiera en contacto con un periodista que supuestamente trabajaba para el cartel.
El Conejo confesó que su papel fue mediar entre narcos de México y Colombia
Reveló que hubo sobornos a periodistas tras captura de El Rey Zambada
Según Ávila, cuando El Rey Zambada ya estaba bajo custodia los policías estaban diciendo por radio “que querían cambiarlo, que el Gobierno quería cambiarlo para no presentarlo (ante las autoridades judiciales)”.
Ávila aseguró que Pineda Villa le pidió “que hablara con un periodista que trabajaba para el cartel para que hiciera saber a otros periodistas lo que estaba pasando. Se lo dije a este periodista», contó ayer Ávila antes de explicar que de esta manera lograron ejercer «mucha presión sobre el Gobierno» para que siguiera detenido.
Ni Ávila ni El Conejo revelaron nombres de los periodistas o de los medios supuestamente sobornados por los carteles, y tampoco la Fiscalía indagó en esa información.