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El jurado debatirá desde este martes violación atribuida a Trump

En caso de ser declarado culpable, tendría que abonar una indemnización y no iría a la cárcel

El jurado popular debatirá desde mañana martes el caso de violación y difamación contra el expresidente Donald Trump en Nueva York, después de que la defensa y la acusación hayan concluido este lunes sus alegatos finales.

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El juez Lewis Kaplan, que ha presidido el tribunal durante las dos semanas que ha durado el juicio, citó a los miembros del jurado mañana a las 10 de la mañana para leerles las instrucciones (principalmente la confidencialidad y no exponerse a programas, lecturas o comentarios que puedan influir en su opinión) antes de dejarlos deliberando sobre la culpabilidad o inocencia de Trump.

En esta última sesión en que los equipos de defensa y acusación tuvieron la última oportunidad de persuadir al jurado, ambos insistieron en la cuestión de la reputación como la que realmente ha motivado a la escritora E. Jean Carroll a denunciar una supuesta violación que tuvo lugar a mediados de la

Aldea Global

Fran Ruiz fransink76@gmail.com

década de 1990 pero que ella no reveló hasta 2019 en un artículo de prensa.

Según Carroll, Trump, que por entonces era un conocido suyo, la acompañó a elegir ropa en unos grandes almacenes, y la convenció para dirigirse juntos a un probador, donde la violó sin que existieran testigos; al salir, ella no lo denunció a la Policía, pero se lo confesó a dos amigas, que le desaconsejaron denunciar porque de lo contrario el podría “enterrarla” con los “cientos de abogados” que trabajaban para él.

Recuperar Su Bueno Nombre

La abogada Roberta Kaplan, del equipo acusador, insistió en las motivaciones de su clienta, según los medios presentes en la sala: “Para Jean Carroll, esta denuncia no tiene que ver con el dinero”, insistió, sino que se trata de “recuperar su buen nombre”, dijo, en referencia a los distintos calificativos que Carroll ha recibido de parte de Trump —como mentirosa o enferma mental, entre otros— desde que él conoció la denuncia.

Kaplan se refirió de nuevo a la comentada frase de Trump de que Carroll “no era (su) tipo”, y recordó al jurado la reacción de Trump al ver una antigua foto en la que confundió a Carroll con su propia exesposa Marla Trump.

“Señoras y señores —dijo la letrada en tono solemne—, esta es la foto. Lo cierto es que E.

Jean Carroll, antigua animadora y miss Indiana (universitaria), era exactamente el tipo de Donald Trump”.

Además, Kaplan llamó la atención sobre el hecho de que el equipo legal de Trump no haya traído ningún testigo y tampoco él haya querido comparecer sino dejar grabada una declaración por video, lo que lo convirtió —dijo— “en un testigo contra sí mismo”.

También rebatió algunos argumentos de la defensa, como el hecho de que Carroll confesara no haber gritado durante la presunta violación, afirmando que esa es la actitud más común en un suceso traumático como es una agresión sexual.

“SÓLO BUSCA LA FAMA”

También la defensa de Trump insistió en la idea de la reputación, en su caso para demostrar que lo que ha movido a Carroll para su denuncia fue la búsqueda de la fama, aunque eso significara denunciar hechos que no existieron.

“Los hechos son tozudos -dijo el abogado Joe Tacopina ante los miembros del jurado-. (El relato de Carroll) no merece crédito”.

En línea con lo mantenido durante el juicio, Tacopina dijo que toda la historia de la violación en el probador de unos grandes almacenes fue una invención porque quiso aprovecharse de un cierto clima anti-Trump para vender libros, como quedó claro -argumentó- en el intercambio de correos con su amiga Lisa Birnbach.

“Se convirtió en su estilo de vida —insistió Tacopina—. Ella pasó a ser una estrella”.

El letrado no pasó por alto las palabras “crudas” y “brutales” de Trump en una grabación escuchada durante el juicio cuando decía que una persona con fama podía disponer de una mujer a su antojo y agarrarla “por la vagina”.

“Lo dijo —admitió Tacopina—, pero eso no convierte la historia increíble de la señora Carroll en una historia creíble”, recordó, según los periodistas presentes en la sala.

A partir de este martes, el jurado puede en cualquier momento pronunciarse sobre la inocencia o culpabilidad del expresidente, pero Trump, de ser declarado culpable, solo tendría que abonar una indemnización y no ir a la cárcel al tratarse de un caso por vía civil.

Chile renueva su amor al pinochetismo

¿Qué hizo terriblemente mal Boric?

rado por el pinochetista José Antonio Kast) a no cometer el mismo error que cometimos nosotros”.

rrotado en las elecciones presidenciales de 2021 por el joven activista Boric, sea ahora la estrella de la política chilena?

El presidente de Chile, Gabriel Boric, tuvo la humildad de reconocer que el desastroso resultado del bloque izquierdista en las elecciones constituyentes y la victoria sorprendente y aplastante de la extrema derecha, se debió a que “no supimos escuchar a los pensaban distintos”; por eso, añadió, “quiero invitar desde ya al Partido Republicano (lide-

Este es el diagnóstico acertado de por qué, precisamente, el único partido que no quiere cambiar la Constitución que heredó la democracia chilena de la dictadura militar, va a ser el que redacte la nueva Carta Magna gracias a su mayoría de electores y a su derecho a vetar las propuestas que no le gusten.

De los 50 elegidos para redactar la nueva Constitución (25 hombres y 25 mujeres), 22 son del partido de Kast.

¿Pero, cómo ha llegado a ocurrir que Kast, el candidato ultraderechista de-

No precisamente por méritos propios, sino por el terrible error de Boric, al permitir que los elementos más radicales de su coalición de gobierno redactaran el primer intento de nueva Constitución, al que llegó a decir que iba a ser “revolucionaria”, un adjetivo que asunta a tantos chilenos como a otros asusta la palabra “dictadura”.

Boric creyó, erróneamente, que ese 78% de chilenos que votó en plebiscito a favor de la Constitución, era básicamente un cheque en blanco para redactar un texto a su antojo y el de sus aliados, entre ellos el Partido Comunista, pero no dio importancia a que una mayoría de chilenos se quedó en casa ese día.

Esa mayoría silenciosa es la que este domingo emitió un voto de castigo contra lo que entendieron como la soberbia del presidente izquierdista, que queda casi tocado de muerte, o peor aún, la debilidad de Boric ante aliados que buscan un Chile más cercano al Brasil de Lula (y algunos a la Venezuela de Maduro).

Ahora sólo queda que Kast haga caso a Boric y no caiga en su error de dejarse tentar por imponer una Constitución extremista, pero ahora por la derecha.

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