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Transportistas interprovinciales rompen sellos para subir pasajeros ilegalmente
Los sellos adhesivos son colocados en las terminales terrestres para evitar que los transportistas recojan pasajeros antes de salir de la ciudad.
Transportistas interprovinciales rompen los sellos adhesivos, que son colocados en las puertas de los buses, para subir pasajeros de manera ilegal.
Esta práctica es recurrente en calles aledañas a las terminales terrestres y en las afueras del cantón, lugares que se transformaron en paradas clandestinas.
Antecedentes de llegar a las casetas.
Con la inauguración de la Terminal Terrestre Sur en febrero de 2022, el Municipio de Ambato optó por la instalación de casetas en Cunchibamba , en el sector de la Manzana de Oro en Huachi Grande y en la avenida Confraternidad para eliminar las miniterminales.
Otro inconveniente detectado por este medio de comunicación es que las personas encargadas de retirar los sellos no se encuentran permanentemente en las casetas.
Problemas
Ante esto existen posiciones divididas entre los pasajeros, pues algunos de ellos aseguran que los buses demoran más al detenerse en cada esquina para recoger pasajeros.
EL DATO
En Ambato existen dos terminales terrestres, la primera en Ingahurco y la segunda en Huachi Grande.
Maritza Criollo, usuaria habitual del transporte interprovincial , dijo que los viajes se hacen más largos debido a esta práctica.
Los funcionarios que ocupan estas instalaciones son los encargados de retirar los sellos adhesivos, a partir de ese punto los conductores de los buses interprovinciales tienen permitido recoger pasajeros.
Todo este proceso no se cumple, pues los ayudantes de las unidades de transporte rompen los sellos antes
“Debería haber alguien que controle a los señores choferes que se quedan hasta media hora esperando pasajeros afuera de la terminal”, aseguró.
Mientras tanto, otros usuarios como Carla Izurieta, explicaron que se les hace más fácil esperar el bus en la vía, así pueden ahorrar el bus o el taxi a la terminal.
Al tratar de consultar sobre este inconveniente a los choferes de buses interprovinciales , ninguno quiso ofrecer declaraciones.

Autoridades
Juan Fernando Darquea, administrador de Terminales de Ambato, dijo que el inspector que está en las casetas no puede sancionar, es así que el proceso se realiza a través del Sistema de Justicia que podría determinar una multa por realizar esta infracción.
De igual manera aseguró que la presencia de funcionarios en las casetas es permanente para el control de los sellos en las unidades de transporte interprovincial. (RMC)
SEGUNDA CONVOCATORIA
A JUNTA GENERAL EXTRAORDINARIA DE SOCIOS DEL “CLUB SOCIAL, CULTURAL Y DEPORTIVO TUNGURAHUA”
De acuerdo a lo que establece el artículo 31 del estatuto vigente, me permito convocar a los señores socios del “CLUB SOCIAL, CULTURAL Y DEPORTIVO TUNGURAHUA”, a la Junta General Extraordinaria de Socios, Junta que se efectuará el día sábado 4 de febrero de 2023, a partir de las 11H00, en su sede social ubicada en esta ciudad de Ambato, en la avenida “Los Guaytambos”, sector “Ficoa - El Sueño”. La Junta tratará los siguientes puntos:

Orden Del Dia
1. Conocimiento y resolución sobre la propuesta para la reforma integral y codificación del estatuto del CLUB SOCIAL, CULTURAL Y DEPORTIVO TUNGURAHUA.
2. Análisis y resolución sobre la propuesta para acceder al descuento, en la adquisición de las membresías y de los certificados de aportación, para hijos e hijas de socios y de socias especiales.
3 Análisis y resolución sobre la propuesta para el incremento de la cuota mensual, desde el 01 de enero de cada año, con vigencia a partir del año 2024.
4. Lectura y aprobación del acta
NOTA: De conformidad con lo dispuesto en el artículo 32 del estatuto vigente del “CLUB SOCIAL, CULTURAL Y DEPORTIVO TUNGURAHUA”, por tratarse de la segunda convocatoria, la Junta se instalará en el número de socios que asistieren a la reunión. Ambato, febrero 1 de 2023 Santiago Sevilla Gortaire Presidente
Medio
Directora Nacional Gabriela Vivanco Salvador
Editor General: Jean Cano
Editor Regional: Fabricio Cevallos Chávez
Redacción: editorgeneral@lahora.com.ec
Publicidad: publicidad@lahora.com.ec
Año: XXXIX No. 10.6465
LORENA BALLESTEROS @loballesteros
La violencia y el fútbol
El fin de semana pasado volví al estadio. Lo hice después de cuatro años. Desde que tengo uso de razón, me recuerdo sentada en los graderíos del estadio Atahualpa, junto a mi padre, alentando a la Liga Deportiva Universitaria.
Llevé a mi hija, desde muy chiquita, a vivir la experiencia del fútbol. Luego llegó la pandemia, los estadios se vaciaron y comenzamos a seguir los partidos exclusivamente por televisión.
La pasión se mantiene, no ha muerto, ni ha cambiado de preferencias. Uno nace con una camiseta y la lleva hasta la muerte. Pero la pasión ciega y desbordada sí se ha equilibrado. ¿Síntomas de la madurez? Por no decir, el inicio de la vejez.
Quienes amamos el fútbol comprendemos la satisfacción de ir al estadio en familia, pero me sucedió algo paradójico. Me vi cohibida de gritar y alentar al equipo con ciertos cánticos. No alcé la voz libremente como antes lo hacía. La agresividad, la rivalidad, el menosprecio del otro están latentes en muchas de las barras, que con ferviente emoción se claman.
Mi esposo, que también es padre de una niña y de un niño, analizó este aspecto. Ambos queremos formar personas tolerantes y respetuosas. ¿Qué ejemplo les damos si les enseñamos a disminuir al otro? Tomando en cuenta que para insultar o menospreciar al rival lo tachamos de gay, ‘marica’, ‘esposa’… y fomentamos un vocabulario en el cual el marido, el hombre o la virilidad son cualidades y la feminidad o la homosexualidad son defectos.
No había analizado este aspecto hasta que leí una de las columnas de Elvira Sastre, una escritora española con la cual empatizo en su sentimiento de rechazo a la agresividad y la violencia. El fútbol no tiene por qué serlo. Me disgusta que este hermoso deporte, que tantas alegrías nos da, se manche con palabras o acciones violentas. Replanteemos. Fomentemos el aliento al propio equipo sin ridiculizar o agredir al otro.
JAIME LÓPEZ
Hacia el acuerdo nacional

El País ha soportado una precampaña electoral, efectuada por los candidatos en muchas Provincias, que ha rebasado todos los límites de cordura necesarios para ratificar que si vivimos en una democracia, pero que embarcados en el medio ambiente creado
Tratar a los niños a patadas
El país observó con horror las imágenes de una madre arrastrando a patadas a su hijo de dos años de edad. Cabía esperar una vigorosa reacción de parte del Estado —como la que se desató tras el asesinato de María Belén Bernal y que llegó hasta a contemplar la demolición de edificios—, pero lo único que hubo fue promesas en Twitter — “lo protegeremos”, escribía el ministro de Inclusión Económica y Social, Esteban Bernal—, tras una detención rutinaria e inútil. Bajo las leyes actuales, en un país que carece de una política de prevención de violencia intrafamiliar, resulta probable que la preocupación por el porvenir de ese pequeño tungurahuense no trascienda el escándalo mediático.
Las madres no son las únicas víctimas en el hogar. Hay más de 6 millones de menores de edad en Ecuador; muchos de ellos
TUNGURAHUA MIÉRCOLES 01/FEBRERO/2023
Los monstruos
crecen bajo el yugo del maltrato y la humillación. Esas heridas sufridas en años formativos, especialmente antes de los ocho años de edad, dejan daños en ocasiones irreversibles en la psique y el cuerpo.
Los niños víctimas de hoy son los adultos agresores del mañana. Eso es lo que explica el perturbador ‘síndrome de Estocolmo’ del que adolecen tantos ecuatorianos con respecto a la violencia infantil. Tras crecer sufriendo golpizas y humillaciones, muchos terminan creyendo que estas son herramientas pedagógicas útiles y las defienden fervorosamente. Lo único que un niño maltratado aprende es que la violencia funciona, que es un recurso legítimo de la autoridad y que las agresiones tienen cabida en una relación cercana; esa es, justamente, la manera de pensar que, en estos tiempos sangrientos, necesitamos superar.
Los monstruos son tales o existen cuando quien los descubre se siente diferente de ellos; entonces un monstruo no existe porque asusta o es malo, su vida depende de lo que el otro le concede como diferente.
El más célebre y conocido, Frankenstein, fue construido a partir de partes humanas y que en su esencia no era malo, sino que su maldad se generó por el rechazo de los diferentes. Otro monstruo literario o el doble de monstruosidad es el que creó Stevenson con esa historia del hombre que prueba en sí mismo una pócima para convertirse en el opuesto: Dr. Jekyll y Mr. Hyde. Esta fantasía clásica nos lleva a valorar cómo somos los seres humanos que mostramos nuestra faceta monstruosa cuando queremos, pero luego se descontrola y nos gobierna, por lo que debe morir una de ellas, pero a la final, son los dos los que mueren, porque el científico es tan monstruoso como su creación.
El monstruo existe porque lo nominamos y ese nombramiento está en nosotros. Es decir, cuando ponemos apodos o cuando nos burlamos de alguien por sus diferencias físicas, somos nosotros los monstruos, no ellos. Es más fácil agredir, que empatizar y comprender.
Los monstruos están con nosotros y son aquellos que, a pesar de conocer nuestras historias, nos miran como extraños; a fin de cuentas, los monstruos siempre se reconocen en el otro y no quieren dejar ver su alma, por ello se escudan en las similitudes físicas y no en las diferencias espirituales. Si no, que nos lo cuente el personaje principal de la película de Guillermo Del Toro en ‘La forma del agua’.
O que lo diga el niño torpe, débil y cobarde que llamó ‘Frankenstein’ a una niña con una marca de operación en su dedo índice. Él es el monstruo porque ella solo demuestra su valentía y fuerza vital, mientras que él siente miedo porque no soportaría lo que ella vivió, pero su cobardía no le deja reconocerlo. El monstruo es él.
por la corrupción , lo que provoca pensar es que individualmente debemos reaccionar y seguir con el sentimiento de que hay que luchar contra ésta pandemia, porque la otra nos sigue castigando en forma diaria y miles de hogares sufren la muerte de los suyos, a pesar de que se proclama que está controlada. El desate publicitario es una de las estructuras que ha contribuido a crear el monumental edificio a donde debe contribuir el elector a depositar su voto, publicidad ilegal que ha confundido a una buena a mayoría de ellos, que deben elegir descifrando una decena de pliegos a sus mandatarios, eliminar o ratificar mamotretos edificados con la mala intención correísta disfrazada de participación ciudadana, responder a una consulta prevista por el Gobierno como apoyo y seguir siendo si es que los electores así lo disponen, en fin, llegar a la jornada electoral obligatoria en la que el TSE se ha conducido diversificando caminos y no ha sancionado a los que embarcados en los camiones llenos de pancartas, jabas de cerveza, tanques de gas, persisten en seguir ejerciendo mandatos. Todo lo mencionado ha ocurrido en buena parte del País, por lo que cabe pensar en que el Acuerdo Nacional podría ser un triunfador en las elecciones, si es que los ganadores están convencidos de que el Gobierno somos todos, que el germen inicial del Gobierno Nacional, está en los Gobiernos Provinciales y cantonales, que luego de su triunfo, antes de ser posesionados legalmente, podrían convocar a una reunión, a sus vencidos, a una reunión llena de patriotismo y delinear los principios del Acuerdo
Nacional, que antes de descalabrar sus Administraciones Institucionales , cobren conciencia de lo que reciben, respeten programaciones elaboradas, continúen con las obras pendientes, no llenen vacantes sin contemplaciones ,porque hasta que el nuevo personal funcione, el contribuyente será perjudicado. Ambato siempre ha sido ejemplo y sus acciones han sido copiadas en todo el PAÍS Y EL EXTERIOR, entonces que un modelo de ACUERDO NACIONAL se cubra con los ancestros y la ambateñía.