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La corrupción Carrera de ratas
Está presente en casi todo el mundo y aumenta con preocupación provocando graves daños. A pesar del aumento tecnológico que ha facilitado el trabajo, más del 60% de la población mundial está sumida en la pobreza, dando como explicación la ambición y el egoísmo de personas que enceguecidos no se percatan de la existencia de la naturaleza y la sociedad, en su delirio cree que ambas existen para satisfacer sus deseos y ambiciones.
Se vive permitiendo la corrupción , incluso fomentando, pues la persona honesta y decente ha pasado a ser una excepción, ahora la cultura es defraudar la confianza, aprovecharse de cargos para robar y mentir, haciendo que la honestidad consigo mismo no tenga valor, se traiciona sus principios, se lo ve dentro del argot popular como inteligente.
La corrupción como enfermedad ha invadido nuestra cultura, la ha contaminado con argumentos cobardes que ha ido deformando a los más débiles, que van perdiendo toda coherencia consigo mismos y poco a poco se van acomodando a la corrupción y así vemos que personas que hasta hace poco eran decentes pierden su valor y caen en la trampa, si no lo hago yo, otro lo va hacer, ese es el argumento de alguien que ha perdido la dignidad y por ende la libertad, esta misma cultura de la corrupción dice que es muy difícil perseguir la corrupción, en realidad eso es una falacia, cualquier persona que sepa aritmética básica puede concluir cuando alguien tiene posesiones que están por encima de sus ingresos.
No hay una voluntad clara de perseguir la corrupción porque la misma cultura la ampara.
“El mundo no está amenazado por las malas personas, sino por aquellos que permiten la maldad”. Albert Einstein