Jazz con él, aunque es posible que la necesidad de ganarse un buen contrato el próximo verano saque lo mejor de él. Este asunto no puede ser desdeñado, ya que Millsap también concluye su vinculación con los Jazz en junio y muchos prevén que alguno de los dos será traspasado en febrero en calidad de expiring.
Aunque no destaque explícitamente como director, el base representará una amenaza exterior que Utah no tenía con Devin Harris. Su suplente habitual será el siempre cumplidor Earl Watson. Respecto a los puestos de escolta y alero, no existe, de momento, una distribución de minutos y roles tan clara y axiomática. Como “doses” parten, en principio, Randy Foye y Alec Burks. Ambos son tiradores de buen nivel y comparten una decente capacidad de lectura del juego. Será interesante comprobar la progresión de Burks, que a pesar de jugar poco en su campaña debut transmitió excelentes sensaciones. Como tercero en discordia quedaría Kevin Murphy, cuyo papel se antoja testimonial.
Si esto ocurriera, a Utah le quedarían dos ilusionantes jugadores para solventar la hipotética pérdida. De quien más se espera es de Derrick Favors, cuyo rendimiento desde que aterrizara en Salt Lake ha sido muy bueno; ahora aspira a obtener la titularidad y a consolidarse entre los hombres altos más imponentes de la liga. Por otro lado queda Enes Kanter, que debe progresar tras un año rookie algo gris para un número tres del Draft. Sería una grata noticia que su nueva dieta –dicen que ha abandonado su pantagruélico régimen anterior- ayudara a potenciar sus cualidades. En el perímetro, una asignatura pendiente –quizás la mayor- era paliar la falta de tiradores de larga distancia. La política de incorporaciones aplicada no ha obviado este detalle, como ejemplifica el fichaje de Mo Williams. GUIA NBA 2012-13
Por otro lado, Gordon Hayward parece definitivamente asentado como SF. El pasado año supuso su confirmación como uno de los líderes de los Jazz, siendo titular indiscutible y clave a lo largo de la temporada. Ahora le tocará compartir galones con Marvin Williams, que, por sus características, complementa perfectamente las principales carencias de Hayward, formando de este modo una pareja muy interesante. Jeremy Evans alternará minutos en las posiciones de “tres” y “cuatro”, completando así la rotación. En definitiva, Tyrone Corbin cuenta con un grupo de notable amplitud y destacable homogeneidad, con una segunda unidad más que aceptable. Repetir presencia en los Playoffs es el objetivo, ya que Utah debería aspirar a luchar por las últimas dos plazas de la Conferencia a pesar de los cambios que puedan producirse a mitad de temporada.
144