Carta a mis padres

No puedo ni empezar a agradecerles por todo lo que han hecho por mí a lo largo de los años, ustedes se han asegurado de que yo haya crecido en una familia llena de amor, en la que puedo confiar y de la que nunca me quiero separar. No me cabe en la cabeza cómo hay hijos que no quieren estar ni cerca de sus papás pues para mí ustedes son las personas más valiosas que tengo en la vida; si en algún momento he sido mala hija les pido me perdonen ya que ustedes para mí no han sido nada más que amor. Me han enseñado todo lo que sé y no sería lo que soy si no fuera por ustedes, nos han mostrado a mi hermano y a mí el valor de una familia unida.

Han estado siempre a nuestro lado ayudándonos a cargar los ladrillos con los que hemos ido labrando el camino hacia el futuro y aunque nos hayamos desviado en algunos momentos y algunos de esos bloques se hayan quebrado en otros, sabemos que siempre podemos contar con su ayuda para volver a armarlos. Además de pensar en ustedes como figuras de autoridad, pienso en ustedes más como mis mejores amigos, aquellos que yo sé van a estar incondicionalmente a mi lado sin importar las decisiones, problemas o caminos que decida tomar. Quiero que sepan que si en algún punto de la vida la distancia nos divide, siempre voy a pensar en ustedes y los voy a llevar en mi corazón y en mis pensamientos.

Los amo con todo el corazón, he admirado siempre su valentía, su fortaleza y su dedicación. Mami, desde pequeña te he admirado y he querido ser siempre igual que tu. Te prometo que sin importar la distancia siempre vamos a seguir conectadas por el corazón y el amor tan inmenso que nos tenemos voy a estar siempre cuando me necesites y yo sé que tú también vas a estar para mí.

Papi, te he admirado desde siempre, me has enseñado a trabajar duro por lo que quiero, a ser la mejor versión de mí misma y a amar a Dios sobre todas las cosas, nunca voy a olvidarme de tus abrazos, de las veces que me consolaste, de tus consejos, tus chistes y tus historias fantásticas. Eres mi inspiración y mi ejemplo a seguir; yo sé que siempre vamos a estar juntos sin importar nada, nuestro amor es demasiado grande y es lo que nos mantendrá unidos para siempre.

No me aguanto a saber que tiene Dios preparado para nosotros en el futuro, y todas las aventuras que estamos por vivir juntos. Gracias por hacer de nosotros personas de bien, por guiarnos en el camino de Dios e impulsarnos siempre al éxito. ¡Los amo!