diendo del área de cultivo. De flores simples y levemente perfumadas son ideales para implantarlas en cercos protegidos del sol directo, o como apoyantes en alguna pared lateral de nuestras casas siempre que haya buena circulación de aire y sombra por la tarde. Las C. japonicas ofrecen el más amplia variedad de formas, tamaños, colores y momento de floración. Van desde mediados del otoño hasta entrada la primavera. Son plantas frondosas, de follaje denso y verde intenso. Siem-
pre dan la posibilidad de armar macizos con algunas plantas de bordura como terminación o plantarse en forma aislada. Finalmente las C. reticulatas aparecen como las más llamativas por el tamaño de sus flores, las más grandes dentro del género, llegan a alcanzar 15 cm de diámetro, sus hojas de gran tamaño y el aspecto desarmado de la planta en cuanto al porte, las convierte en una excelente alternativa para el diseño de jardines que necesitan detalles de cierta exclusividad. 105