BIENVENIDA MIEMBRO DE LA FAMILIA: La música, debidamente empleada, es un precioso don de Dios, destinado a elevar los pensamientos a temas más nobles, a inspirar y elevar el alma. Se cuenta que en la Segunda Guerra Mundial, un soldado tuvo enfrente a su enemigo a una distancia en la que no podía fallar el tiro. Pero cuando iba a oprimir el gatillo, escuchó de labios de un hombre una hermosa melodía que había oído en su iglesia cuando era pequeño, se detuvo y pensó para sí: “Puedo matarlo, después”. Pero cuando el hombre terminó de cantar, el soldado ya no quiso oprimir el gatillo. Años más tarde se encontró con este hombre en la iglesia y le relató lo sucedido. ¡Cómo puede transformarnos un canto de alabanza a Dios! Con este relato en nuestro corazón, ¡sean todos bienvenidos!, especialmente nuestro Padre celestial, su Hijo y el Espíritu Santo. INTERVENCIÓN MUSICAL MIEMBRO DE LA FAMILIA: Así como los israelitas, en su peregrinaje por el desierto, alegraron su camino con la música del canto sagrado, Dios invita a sus hijos de hoy a alegrar también con el canto su jornada hasta la patria celestial. Pocos medios hay tan eficaces para grabar las palabras en la memoria, que el de repetirlas en el canto. Y el canto sagrado tiene poder para subyugar naturalezas rudas e incultas, para avivar el pensamiento y despertar simpatía, para promover la armonía de acción y desvanecer la melancolía y los resentimientos que destruyen el valor y debilitan el esfuerzo. Escuchemos esta alabanza que cantaremos aquí en nuestro hogar. (En este momento se escucha que tocan a la puerta. Cuando alguien abre la puerta, entran las tres personas que tendrán a su cargo el Informe Secretarial, el Relato Misionero y el tema de promoción Marcando el Rumbo). Participante 1: Perdonen que interrumpimos el programa que están llevando a cabo y el canto que están por interpretar, pero quería compartir con ustedes los logros alcanzados por la Escuela Sabática. (Presenta el Informe Secretarial). Participante 2: Junto a mi compañero(a), quiero hablarles del rumbo que debemos seguir para el bien de la Escuela Sabática y sus miembros. (Presenta el tema de promoción de Marcando el Rumbo). Participante 3: Antes de despedirnos y, agradeciéndoles por habernos permitido compartir con ustedes en familia, me gustaría relatarles brevemente una experiencia sucedida en______ de la División _______. (Presenta el Relato Misionero). Participante 1: Bueno amigos, nos vemos la próxima semana. Nos alegró estar con ustedes. (Se despiden y salen).
Programas para la
Escuela Sabática 2013
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