aspecto fueron creciendo, ya no era ¿qué quiero estudiar? sino ¿cómo voy a financiar eso que quiero estudiar? Descubrí Kickstarter y Fondeadora. Encontramos que atraves del crowdfunding se podía ayudar a que chavos de bajos recursos pudieran estudiar”. Él tiene una idea totalmente diferente con respecto al crowdfunding: “Integración comunitaria: lo importante no es el funding sino el crowd. Nuestro modelo de negocio entiende el crowdfunding como un pretexto nada más. Trabajamos con jóvenes de educación publica. Ellos financian con nosotros modelos de negocio en etapa muy temprana. Lo que a nosotros nos importa es darles a todos, los que fondean y los que no, una alternativa que les abre las puertas” admite Arellano, quien asume que el fon-
deo colectivo es un mecanismo mediante el cual pueden voltear a la comunidad y decirles “estoy haciendo algo” y la comunidad decirles “estoy aquí y te apoyo y creo en ti y en tu iniciativa”. “Las plataformas de crowdfunding nos hemos concentrado en un mercado muy puntual: el de los jóvenes adultos, hipsters acomodados. La verdad de las cosas es que el mercado mexicano es mucho más grande que eso. Si crees que el target son los sectores con menos recursos, tampoco es oportunidad de negocio porque hace falta mucha inversión en educación, en concientizar al mercado. Falta educación financiera y tecnológica. Para saber utilizar de un modo productivo todas las herramientas. El mercado tiene mucho que decir todavía”, puntualizó Arellano.
¿Qué es un Cochinito? Periodo de 15 a 60 días donde un ahijado recauda fondos, a través de las diferentes opciones que brinda la plataforma. El monto a “craufondear” (como le dicen en micochinito.com) parte de $1,000 pesos mexicanos hasta lo que la masa crítica le permita reunir, esto significa que la recaudación dependerá del número de personas a las cuales el emprendedor se pueda acercar y convertirlos en padrinos.
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Casos de Crowdfunding en México