5. BIBLIOTECA BÁSICA
de azufre de la posición 3 por un átomo de oxígeno y la falta de la cadena lateral acilamino en posición 6. 2) Sulbactam, sulfona semisintética del ácido penicilánico.
Los inhibidores de escasa actividad antimicrobiana como agentes únicos, desarrollan un importante sinergismo cuando se asocian a penicilinas y cefalosporinas.
3) Tazobactam, otra sulfona muy similar a la anterior de la que se diferencia por la presencia de un grupo triazol en posición 3. – Todos ellos muestran escasa actividad antimicrobiana como agentes únicos, aunque de forma más o menos anecdótica puede citarse la buena actividad in vitro del ácido clavulánico frente a especies de Legionella o de sulbactam frente a la mayoría de cepas de Acinetobacter incluyendo aquellas que presentan un patrón de marcada multirresistencia. – Por el contrario, desarrollan un importante sinergismo cuando se asocian a diferentes penicilinas y cefalosporinas, lo que permite el uso generalizado en clínica de estas asociaciones en las que la muy superior afinidad del inhibidor por las betalactamasas permite la actuación sin interferencias del antimicrobiano en su diana bacteriana sin que, además, su exceso compita con estas dianas, ya que mientras que estos inhibidores “eligen” unas proteínas fijadoras de penicilinas preferentemente, por ejemplo, las PBP-2 por parte del ácido clavulánico, los antimicrobianos asociados prefieren otras, como las PBP-1a y 1b y PBP-3 en el caso de amoxicilina12.
2.2. Inhibidores. Resistencias No todos los inhibidores demuestran la misma eficacia en la inhibición de betalactamasas de la misma forma que no todas las betalactamasas son inhibidas por el mismo inhibidor13. Así, y tomando como base la clasificación de Bush, ninguna betalactamasa del grupo 3, es decir, las pertenecientes a la clase B o metalobetalactamasas, se ven afectadas en su eficacia por ninguno de los inhibidores utilizados en la actualidad. – 48 –