1 minute read

Integral Beauty World Magazine

Perder a mi único retoño me dejó sin aliento. Es un dolor innombrable.

Sin embargo, si pudiera volver a nacer, elegiría ser mujer para convertirme en madre otra vez porque eso es, para mí, un superpoder. En su honor y desde su muerte intento sacar fuerzas de donde no las tengo para vivir la vida que le fue negada. Fui una madre amada, admirada y muy respetada. Y aunque a veces se me hace difícil seguir adelante, me aferro a mi Dios y vivo con propósito y pasión, como a Natalia le hubiera gustado que lo hiciera.

Advertisement

This article is from: