Virgilio maron, publio la eneida bilingue

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Publio Virgilio Marón

A E N E I D O S -

tertia iam lunae se cornua lumine complent 645 cum uitam in siluis inter deserta ferarum lustra domosque traho uastosque ab rupe Cyclopas prospicio sonitumque pedum uocemque tremesco. uictum infelicem, bacas lapidosaque corna, dant rami, et uulsis pascunt radicibus herbae. 650 omnia conlustrans hanc primum ad litora classem conspexi uenientem. huic me, quaecumque fuisset, addixi: satis est gentem effugisse nefandam. uos animam hanc potius quocumque absumite leto.' Vix ea fatus erat summo cum monte uidemus 655 ipsum inter pecudes uasta se mole mouentem pastorem Polyphemum et litora nota petentem, monstrum horrendum, informe, ingens, cui lumen ademptum.

trunca manum pinus regit et uestigia firmat; lanigerae comitantur oues; ea sola uoluptas 660 solamenque mali. postquam altos tetigit fluctus et ad aequora uenit, luminis effossi fluidum lauit inde cruorem dentibus infrendens gemitu, graditurque per aequor iam medium, necdum fluctus latera ardua tinxit. 665 nos procul inde fugam trepidi celerare recepto supplice sic merito tacitique incidere funem, uertimus et proni certantibus aequora remis. sensit, et ad sonitum uocis uestigia torsit. uerum ubi nulla datur dextra adfectare potestas 670 nec potis Ionios fluctus aequare sequendo, clamorem immensum tollit, quo pontus et omnes intremuere undae, penitusque exterrita tellus Italiae curuisque immugiit Aetna cauernis. at genus e siluis Cyclopum et montibus altis 675 excitum ruit ad portus et litora complent. cernimus astantis nequiquam lumine toruo Aetnaeos fratres caelo capita alta ferentis, concilium horrendum: quales cum uertice celso aeriae quercus aut coniferae cyparissi 680 constiterunt, silua alta Iouis lucusue Dianae. praecipitis metus acer agit quocumque rudentis excutere et uentis intendere uela secundis. contra iussa monent Heleni, Scyllamque Charybdinque inter, utrimque uiam leti discrimine paruo, 685 ni teneam cursus: certum est dare lintea retro. ecce autem Boreas angusta ab sede Pelori missus adest: uiuo praeteruehor ostia saxo Pantagiae Megarosque sinus Thapsumque iacentem. talia monstrabat relegens errata retrorsus 690 litora Achaemenides, comes infelicis Vlixi. Sicanio praetenta sinu iacet insula contra Plemyrium undosum; nomen dixere priores Ortygiam. Alpheum fama est huc Elidis amnem occultas egisse uias subter mare, qui nunc 695 ore, Arethusa, tuo Siculis confunditur undis. iussi numina magna loci ueneramur, et inde exsupero praepingue solum stagnantis Helori. hinc altas cautes proiectaque saxa Pachyni radimus, et fatis numquam concessa moueri 700 apparet Camerina procul campique Geloi, immanisque Gela fluuii cognomine dicta. arduus inde Acragas ostentat maxima longe

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E n e i d a

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Tres veces los cuernos de la luna de luz se han llenado 645 desde que arrastro mi vida en las selvas y en las cuevas y guaridas que las fieras dejan y desde una roca observo a los Ciclopes gigantes y tiemblo al ruido de sus pasos y a sus voces. Pobre alimento, bayas y cerezas silvestres de los roquedales, me ofrecen las ramas y las hierbas me nutren con las raíces arrancadas. Al recorrer estos lugares vi, por vez primera, que una flota llegaba a estas costas, la vuestra. Y, fuese cual fuese, a ella me he rendido, contento de haber escapado de un pueblo nefando. Vosotros mejor cobraos esta vida con la muerte que os plazca.” »Apenas había hablado cuando en lo alto del monte descubrimos 655 al propio Polifemo, pastor de sus ganados, moviéndose con su vasta mole en dirección a las conocidas riberas, monstruo horrendo, informe y gigantesco, sin su ojo. Un pino cortado gobierna sus pasos y les sirve de apoyo; le siguen sus lanígeras ovejas, que era éste su solo placer 660 y el consuelo de su desgracia. Luego que tocó las aguas profundas y llegó al mar, de su ojo atravesado lavó la líquida sangre rechinando los dientes en un gemido, y camina ya en medio de las aguas sin que las olas mojen sus altos costados. 665 Así que nosotros aceleramos la huida temblorosos, merecidamente acogiendo al suplicante, y en silencio cortamos las cuerdas y nos lanzamos al mar empeñados en un combate de remos. Se dio cuenta, y encaminó sus pasos hacia el sonido de las voces. Cuando por fin se queda sin poder alcanzarnos con su mano 670 ni es capaz de igualar a las olas jonias con sus pasos, lanza un grito terrible con el que el mar y todas las olas se agitaron y tembló de lo profundo la tierra de Italia y el Etna mugió por sus curvas cavernas. Y a su llamada acude corriendo de los bosques y las cumbres 675 la raza de los Ciclopes al puerto y llenan las riberas. Allí de pie los vemos en vano con su torvo ojo, a los hermanos del Etna tocando el cielo con sus altas cabezas, horrendo concilio: cuales con la copa erguida las aéreas encinas o los coníferos cipreses 680 se yerguen, alta selva de Jove o bosque sagrado de Diana. Un agudo miedo nos lanza a sacudir las jarcias hacia donde sea y a tender las velas a vientos favorables. En contra están los avisos de Héleno, que entre Escila y Caribdis, camino de muerte a uno y otro lado en pequeño trecho, 685 no haga pasar mi rumbo: es más seguro volverlas velas. Y hete aquí que se presenta Bóreas escapado de su angosto encierro del Peloro: dejo atrás las bocas en roca viva de Pantagia y el golfo de Mégara y la tendida Tapso. Tales costas nos mostraba el compañero del infortunado Ulises, 690 Aqueménides, quien ya las surcara en sentido contrario. »En el golfo sicanio se encuentra una isla tendida frente al undoso Plemirio; los antiguos la llamaron Ortigia. Es fama que el Alfeo, río de la Élide, se abrió hasta aquí un oculto camino bajo el mar y que hoy, 695 Aretusa, con las aguas sículas se confunde en tu boca. Según lo ordenado, invocamos a los grandes númenes del lugar y al punto dejo atrás el fértil suelo del pantanoso Heloro. De aquí los altos riscos y las rocas salientes del Paquino bordeamos y aquella a quien los hados dijeron que nunca se moviera, 700 Camerina, aparece a lo lejos, y los campos geloos y Gela, llamada por el nombre de un gran río. Luego enseña a lo lejos sus murallas la escarpada


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