exigencia del “judicial” que vestía pantalón de mezclilla–, éste le golpea en ambas axilas con los dos brazos, le zafa el cinturón y baja los pantalones y después los calzoncillos. Ante ellos, Martha Leticia le suplica: –Por favor, no lo humilles así. –Usted cállese, no sabe que este cabrón quería secuestrar al juez; no se meta –increpa el “judicial”. Cuando los “judiciales” terminan de revisar el vehículo no encuentran nada. “Porque no había qué encontrar; no llevábamos nada malo, somos gente trabajadora, honesta”, diría Martha Leticia posteriormente a Huellas. Al no haber encontrado irregularidades, otro “judicial”, le pide a Adrián que, junto con sus cinco familiares suban al Honda, que dé la vuelta en “U” y se meta al estacionamiento de los juzgados. Junto con ellos se trepa otro “judicial”. Adrián así lo hace y por orden del “judicial” frena frente a la Agencia del MP que está “pegadita” a los juzgados. Era la Fiscalía Desconcentrada Xochimilco. Allí, los cinco familiares fueron llevados a los separos, desde donde escuchaban al juez que gritaba: “Soy el juez del Juzgado 33 Penal y estos cabrones me persiguieron desde la Gustavo A. Madero; me amenazaron con un arma y me querían secuestrar; son unos pinches delincuentes; pero lo van a pagar porque ya le avise a Mancera (Miguel Ángel, procurador de Justicia del DF), hijos de la chingada”. Mientras a grito abierto el juez ha-
cía su “declaración”, un judicial que se identificó como “Oro Franco” le dijo a Alberto que le tuviera confianza y le depositara su arma de cargo, porque él lo sabía: “era requisito de trámite”. Alberto le dice: “Deja avisarle a mi jefe qué es lo que está pasando”. Molesto, “Oro Franco” contesta: “Te lo estoy pidiendo de buena manera, si no ya sabes que te someto y te la quito; entrégamela, por favor”. Al escuchar aquello, Martha Leticia interviene: –No le entregues tu arma de cargo, porque dice el juez que hay una arma de por medio y como revisaron el carro y no encontraron nada, no vayan a decir que tu arma es la que tanto pregona el juez; la vayan a presentar y a involucrar en lo que está diciendo el juez, porque no es verdad. Finalmente, Alberto entregó su arma de cargo y su identificación, que lo acredita como Policía de Investigación de la Procuraduría General de Justicia del DF. Más adelante, otro judicial entregó una tarjeta en blanco, para que Adrián, Carlos y María Enriqueta escribieran su nombre completo. Martha Leticia llena dicha tarjeta y la entrega al judicial, a quien pregunta: “¿Y tú, cómo te llamas? “No jefa, no le puedo decir, nada más deme la tarjeta”. –Y ¿y el juez y toda su gente que trae? –le insiste. –Ya está levantando el acta, por secuestro –le confiesa el agente judicial. – Se las van a cuadrar, porque le habló por su celular al procurador Mancera, y
el fiscal de Xochimilco Central dijo “que iba a ser una consignación por línea, por apoyo al juez –reveló mientras se alejaba con la tarjeta y el nombre completo de sus tres familiares: Carlos, Enriqueta y Adrián. Minutos después, otro judicial le pregunta a Martha Leticia: –Usted, ¿quién es? –Leticia Saldaña, la abogada de ellos –respondió, señalando a su hermano Alberto, a su esposo Adrián, a su hermana Enriqueta y a su cuñado Carlos. –Recójale todas sus pertenencias, incluyendo cinturones, todo –le dice, para luego agregar –Por favor, sálgase, licenciada, usted bien sabe que no puede estar con ellos. Dos horas después, Martha Leticia salía de la Fiscalía con las pertenencias, en la sala de espera vio que todavía allí seguía Ruvalcaba Ramírez con media docena de personas. Pasaban de las 8 de la noche. Desde ahí, Martha Leticia llama a su hermano mayor, Francisco Saldaña, para que junto con su sobrino Alan Saldaña Martínez le lleven los documentos que acrediten la propiedad del Honda Civic, todavía confiando en que no iba a proceder la Averiguación, porque “honestamente no conocíamos al juez, y mucho menos el carro que él conduce”. Pero todavía le esperaba otra sorpresa. Cuando nuevamente revisó la pantalla electrónica en la que se informa del nombre, Averiguación Previa, hechos que se le imputan, fecha de inicio y su estado jurídico, encontró que los nombres de su esposo Adrián, su cuñado Carlos, su hermana María Enriqueta, con la Averiguación Previa FXH/XO-1/ T2/00647/11-03 aparecían como indiciados de una denuncia de hechos con fecha 30/03/2011 y se había levantado en su contra el Acta a la 01:52:11 PM, con una diferencia entre uno y otro de dos minutos. Hasta las cinco de la mañana, su hermano Alberto aún no aparecía relacionado en la denuncia falsa del juez. Pero una hora después, en la pantalla también éste apareció, con el mismo número de Averiguación Previa y también en los hechos, pero con una diferencia de sólo dos minutos y once segundos respecto a la última. h
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