Ajedrez para primaria y secundaria
El Alfil es la pieza que puede desplazarse a toda velocidad por las casillas diagonales del tablero, dado que en dichas diagonales puede moverse cuantas casillas quiera. Esto es, si estuviera en una esquina del tablero podría desplazarse a la esquina opuesta en un sólo movimiento. Esa velocidad para trasladarse es su mayor ventaja, pero para ello necesita que dichas casillas diagonales estén libres de piezas porque no tiene la posibilidad de salto del Caballo y cualquier pieza (propia o rival) que se cruce en su camino le impide el paso.
Otra peculiaridad del Alfil es que el de casillas negras sólo puede moverse por dichas casillas del tablero y el de las casillas blancas solo puede hacerlo por éstas últimas. Así que si perdemos alguno de los Alfiles en el desarrollo de la partida y nuestra/o rival conserva los dos estaremos en desventaja. En efecto, habrá casillas del tablero que no podremos controlar (las correspondientes al Alfil que hayamos perdido), mientras que el bando rival sí podrá hacerlo al tener todavía los dos Alfiles. En el Diagrama 4 se señalan los lugares del tablero a los que puede desplazarse el Alfil de casillas blancas desde su posición de partida y siempre y cuando dichos lugares estuvieran libres de piezas: Vemos, como sucedía con el Caballo, que el Alfil tiene mayores posibilidades de movimiento si se encuentra en las casillas centrales del tablero y menos si se ubica en las laterales o en las esquinas. Es más, si lo situáramos en una de las dos esquinas del tablero que le corresponderían sólo podría desplazarse por esa diagonal.
UD1 Profesorado
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