TERMODINÁMICA
Federico G. Salazar
CICLOS TERMODINÁMICOS. Son arreglos ordenados e interrelacionados de equipos y dispositivos que sirven para, a través de intercambio, transformación y procesamiento de energía, obtener algún beneficio neto. Básicamente existen dos tipos de ciclos: los ciclos positivos en donde se extrae un trabajo útil a costa del manejo de calor transferido a un fluido de trabajo; y los ciclos inversos o de refrigeración que requieren de un trabajo efectivo para extraer calor de una región fría o de baja contenido de energía. Figura No. 3. Esquema de ciclo positivo e inverso
En otro aspecto, existen ciclos que trabajan en una sola fase gaseosa y otros que trabajan en fase líquida y vapor combinadas, aprovechando el manejo de los calores latentes y sensibles, que juegan un papel preponderante en la eficiencia del ciclo. Para el primer caso existen los ciclos Brayton o Joule, Diesel, Otto, Stirling y Ericksson, principalmente. Del segundo tipo, con manejo de dos fases está el ciclo Rankine o Planta de Vapor. Los ciclos inversos de refrigeración y bombas de calor también operan en dos fases.
Ciclo de Carnot La máquina de Carnot descrita en el módulo anterior, es un ejemplo de ciclo termodinámico. Se trata en realidad del ciclo termodinámico por excelencia, que fundamenta la teoría sobre la segunda ley. Es, sin embargo, un planteamiento teórico que no puede ser llevado a la práctica sencillamente, pero que sirve de base para la operación del ciclo Rankine, como una aplicación práctica. Se presenta en un diagrama el ciclo Carnot para un fluido que cambia de fases.
MODULO 4 - T304
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