
6 minute read
María Elena Mesa, pág. 26
from FIPGRA 2023. VI Festival Internacional de Poesía Patria Grande Latinoamérica y el Caribe
by FIPGRA
Artista visual, Poeta, graduada en estudios culturales Estudios
Taller 4 Rojo Taller de Artes, estudios academicos, Universidad de Antioquia, Universidad Nacional, York University
Desarrollo de proyectos poeticos y culturales y comunitarios
Festival internacional de Poesia de Resistencia, Sunday Poetry, Festival de Poesia Patria Grande
THE GOLDEN FRUIT
There, in that land
The golden reflection Embraces tomorrow
In the eyes of the children.
Unrobes over the rock,
To build the miraculous bolt, Towards dreams
Of the sacred and divided land, The one of green olive groves.
There, the earth bleeds
There, the earth bleeds
While the millennial sun shines
In the roundness of the Jaffa orange.
Here, no one names truth, not even partly
While the blind man swings his cane
Making other blind ones fall.
Here, there is no one more blind
Than the one who refuses to see with eyes twisted towards the past with eyes winced towards the future
For the always infernal war Is the present.
There and here, the bitter harvest of the alliance Deir Yasin repeats itself every day, every year Hula and Ed-Dawayimeh stand guard from the past
In silence, without mouths, without eyes, without Teeth
Sabra and Shatila, always here, with the echoes Of those half-men half-beasts Made of metal and fire.
From there, Yalu, Emwas, Beit Nuba
Rafah and Khan Younis, With houses demolished and razed
In front of the lightning-bolt eyes of the children.
Where have all the pieces gone?
To nourish the desert earth which kisses their feet
While it waves and churns throughout the homeland.
But even still, there, under the sky
Always the flashing aura,
In the eyes of the children,
In the sweetness of the Jaffa orange
And in its green olive groves.
And here in exile, ‘home’ is still carried inside, It has been brought regardless,
Measured by dreams
Without leaving the place that was never left
With the echoes of laughter,
With the perfume of orange blossoms
With the dance of return and its lovely tune.
Peace? Could there be peace on that land?
Could it return again to being Without flowering wounds
By songs of resistance?
There and here behind the koofiyyahs
The golden eyes of Palestinian children.
Maria Elena Mesa.
Translated from Spanish by Pedro Sanchez

EL FRUTO DORADO
Alli, en aquella tierra el dorado resplandor cuece su mañana en los ojos de los niños
Alli, el fulgor oscuro se desnuda sobre la piedra, para construir la milagrosa saeta hacia los sueños de la tierra sagrada dividida, la de los verdes olivares
Allí, la tierra se desangra mientras el sol brilla milenario en el redondo fruto del naranjo Jaffa
Aqui, nadie nombra la verdad ni a medias, mientras el ciego ruñe su baston haciendo caer a otros ciegos.
Aqui, no hay peor ciego que el que no quiere ver con los ojos torcidos al pasado con los ojos cortados al futuro mas la guerra siempre infernal es el presente
Allà y acà la cosecha amarga de la alianza, Deir Yasin se repite, cada dia, cada ano. Hula y Ed-Dawayimeh vigilan desde su pasado en silencio, sin sus ojos, sin su boca, sin sus dientes
Sabra y Shatila siempre alli, con el eco y la rudeza de aquellos hombres-fieras hechos de metal y fuego
Desde alli Yalu, Emwas, Beit Nuba Rafah y Khan Younis con sus casas demolidas, razuradas frente al relampago de sus ojos. hacia donde han ido sus pedazos? a nutrir el polvo del desierto
que besando sus pies va oleandose en su misma tierra?
Pero aun alli, bajo el cielo, siempre el aureo destello en los ojos de los niños, en el melado fruto del naranjo Jaffa y en sus verdes olivares.
Y aqui en el exilio la casa continua se la han traido a cuestas, a la medida de sus sueños, sin salir de donde nunca se ha salido con los ecos de las risas, con perfumes de azhares con la danza del regreso y su amorosa musica
Paz? podrĺa haber paz sobre esa tierra? volver a ser de nuevo, sin heridas florecidas, por cantos de resistencia?
Allá y acá, detrás de las cufiyas los ojos dorados de los niños Palestinos.

ONIX LIQUIDO
Allí, hay un pais de ónix liquido
En cuyos cielos
El aparato de la destrucción
Hizo su espectáculo
Allí, hay un pais de Onix Liquido
En cuyas arenas
El aparato de la destrucción
Manufacturó la muerte
Allí, por mas de mil días y mil noches
Veloces agujas de fuego
Tejieron de arriba a abajo
El color de sus cielos, Frente a los ojos asombrados
Desmesuradamente abiertos de aquella tierra
Donde los metálicos resplandores
Fueron quemando piedras
Quebrando huesos, y desvaneciendo voces.
Allí, en aquella ciudad Antigua
Construida sobre lunas y oro negro
Las manos de una madre caen sobre la arena
Tornandola violeta
En ella, ya no habita el silencio, Pero si en el mundo.
Allí, hay un pais de ónix liquido
Para cuya gente el aparato de la destrucción afino el terror
Donde, vivos y muertos fueron lanzados en fosas comunes
O reducidos a cenizas.
Donde la mariposa fue muerta con dudosa precisión
Donde cada noche se escucha el canto de los niños muertos.
Aquí y allá, hay un mundo donde el silencio se hizo cómplice
A LA SOMBRA DE LA ESTRELLA
Imwas, Beit Nuba, Yalu...
Demolidos a la hora del sol
Y a la sombra de la estrella
Imwas, Beit Nuba, Yalu...
Y a quien maldicen tus escombros?
A la explosion? o al fiero metal de los bulldozers?
O a las manos asidas al terror de las paredes, Avidas tumbas, en donde en gritos
Tus cuerpos se rompieron?
Imwas, Beit Nuba, Yalu...
Y a quien libera el sonido de tus voces murmurantes?
O el de las feroces que acallando el verbo
Van triturando en sangre a la paloma?
Gentes de Imwas, Beit Nuba, Yalu...
Entre gritos sudorosos como en un río ellos van Columnas de refugiados marchando hacia Ramala
Con los dientes apretados
Con los ojos muy abiertos
Como sus Olivares y cipreses...arrancados de raiz!!!
Con la Mirada candente, llorando ellos van Dejando atras su tierra, desecha y arrasada
Gentes de Imwas, Beit Nuba, Yalu...
Arrojados a Beit Sira, con sus cansados animales
Como errantes sombras, cayendo en el camino
Como fantasmas muriendo en el camino
Envueltos en banderas blancas, abrazados por la sed ardiente
Cayendo en el camino
Muriendo en el camino
Y en la distancia aun se sienten tus arenas suaves al caminar
El canto del fogón y aquella mesa que quedo servida
Y la música en las sabanas que el viento agita Tejiendo en días el plazo del regreso
Y siempre en casa los pasos y las amorosas voces
Frente al Redondo y perfumado asombro de tus olivos y frutales
Imwas, Beit Nuba, Yalu...
Volverán de la memoria misma
Con sus nombres sellados por el fuego Volverán para no habitar olvidos
Con sus marcas ancestrales y las luces del regreso
Volverán sin fisuras a tu mapa de villas pacificas
Sin la fantasmagoria del despojo y la mentira
Imwas, Beit Nuba, Yalu...Volverán
De tu historia y milenario vientre, volverán
De la piedra de tus canteras, volverán
Con sus cantos y danzas volverán
Imwas, Beit Nuba, Yalu...
Sobre tus piedras los crímenes de Guerra Limpieza etnica bajo las “luces de un acto humanitario”
En aquella tierra viva, santa,
Imwas, Beit Nuba, Yalu...
Demolidos a la hora del sol ...
Y a la sombre de la estrella!!!