EL CAMERINO ¿Qué es lo mejor que le ha dado el deporte? “Amigos, los amigos del deporte son para toda la vida. También las experiencias, la satisfacción de ver los esfuerzos recompensados de nuestros deportistas. Por ejemplo, en el ciclis-
“los amigos del deporte son para toda la vida”. mo una de las solicitudes que le hice al Alcalde es que me dejara seguir con la gerencia del equipo de ciclismo Coldeportes- Claro-Zenú, y eso tiene un propósito, y es que los jóvenes vayan a cumplir su sueño en Europa. En tres años hemos exportado ocho ciclistas, entre ellos Fernando Gaviria, que es uno de los mejores embaladores del mundo”.
¿Una anécdota que recuerde mucho?
“De los mejores recuerdos que tengo es haber estado como subjefe en la delegación de los
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Juegos Olímpicos en Londres 2012, uno se acostaba a las dos de la mañana y a las cinco ya estaba despierto, pero la satisfacción de poder acompañar a los deportistas, de llevarlos a los entrenamientos, de compartir con ellos tantos momentos bonitos, de verlos cuando conseguían sus medallas, de mirar que en una hora les podría cambiar la vida porque eran cuatro o cinco años de entrenamiento para competencias de un minuto; eso era una cosa muy bonita, -ríe sospechosamente, y luego se comprende por qué-. “En Londres estábamos el día de la inauguración, cuando nos llaman a decirnos que Rigoberto Urán no estaba inscrito y la carrera era al otro día, nos tocó hacer de todo, inventé demandas para que los organizadores nos solucionaran el impasse, a “Rigo”, Santiago Botero lo entretenía mientras calentaba, y yo aun consiguiendo el chip. El caso es que lo logramos y vea, medalla de plata”, -vuelve a reír, y también recuerda la tranquilidad de Caterine Ibargüen para salir a las competencias y la pereza de Santiago Botero para despertarse cada mañana.