ORIGEN LATINO DE PALABRAS RELATIVAS A LA FAMILIA Gente: el término latino gens hacía referencia a un grupo político y religioso formado por varias familias y descendientes de un antepasado común. En castellano conservamos el término en la palabra gente. Familia: deriva de famulus (siervo) y se aplicaba para designar el conjunto de esclavos de una casa y también el conjunto de personas que vivían bajo el mando de un mismo pater familias. Marido: deriva del adjetivo latino maritus, palabra a su vez derivada de mas, que significa “animal macho”. El término uxor (esposa) en castellano ha desaparecido, salvo en la terminologia judicial: uxoricida (“el que da muerte a su esposa”). Hijo/-a: de filius y filia que mantienen los mismos nombres que había en latín. El cambio se debe a la evolución fonética sufrida por las palabras a lo largo de su historia: f> h, en inicial de palabra, y el grupo li> j. Hermano/-a: los sustantivos que en latín se usaban para designar al hermano (frater, de donde fraterno, fratricida y cofradía) y a la hermana (soror) fueron sustituidos por germanus, adjetivo que significaba “originado del mismo germen”. De sororinus “el hijo de una hermana”, es de donde procede nuestro sustantivo sobrino. Abuelo/a: derivan de aviola (“abuelita” en latín), un diminutivo cariñoso de avia (abuela en latín) y, por analogia, se creó el masculino abuelo. Los términos latinos para referirse a este parentesco son avius y avia y los hemos conservado en palabras como atávico (“antiguo”, “ancestral”) y abolengo (“ascendencia antigua”). Nieto/a: se formaron a partir de nepta, nieta en latín, y el masculino por analogia con el femenino. El término latino que significaba nieto era nepos, palabra que hemos conservado en el término nepotismo “aprovecharse de las influencias de una persona para favorecer a los parientes”. Cuñado/-a: etimológicamente significaba “nacido con”, nacido de la misma família. Con el tiempo perdió su significado origianal y adquirió el que hoy tiene de marido de una hermana, cuñado. Infante: etimológicamente significa “el que no habla”. Hoy en dia hace referencia a los hijos de los reyes, pero derivados de su sentido primitivo como niño pequeño, conservamos palabras como infantil, infancia... Alumno/-a: al niño recién nacido que se alimenta de su madre le daban el nombre de alumnus (“el que es alimentado”). En sentido metafórico en castellano se conserva el mismo nombre alumno para designar al que se alimenta intelectualmente.