enfermedad de un familiar , o porque hoy está triste porque sí, porque lo da el día.Nos hemos propuesto un objetivo para las dos 1ªsemanas de marzo: Hay que pensar razones para experimentar emociones positivas y poder transmitirlas al compañero /a. EL BINGO DE LOS SENTIMIENTOS
Objetivos que nos proponemos: Encarnación Gómez Luque
Raquel Sánchez Padilla EL TALLER DE LOS SENTIMIENTOS
-Representar mediante mímica sentimientos y emociones. -Reconocer situaciones en las que se experimenten diferentes sentimientos. -Favorecer un clima de confianza entre los alumnos. Esta actividad la hemos realizado con los alumnos de atal del tercer ciclo. Hemos preparado cartones para jugar al bingo donde las casillas son los nombres de diferentes sentimientos y emociones. Se han repartido los cartones del bingo .A continuación cada alumno ha representado el sentimiento o emoción y posteriormente han comprobado si la tienen en su cartón. Cuando un alumno cantó línea tenía que describir una situación en que se sintió emocionado pudiendo todos comprobar que cuando le regalaron a su perrita se sintió la persona más feliz del mundo. Cuando otro alumno cantó bingo , tuvo que contarnos una historia en la que aparecía las cuatro palabras de las esquinas del cartón: alegría- tristeza- interés- aburrimiento. Entre todos le ayudaron a contar la historia representando estos cuatro sentimientos. Se lo pasaron muy bien escenificando y expresando con sus caras todos los sentimientos, dándose cuenta que es posible que nuestra cara refleje lo que sentimos en cada momento y que la otra persona sepa reconocerlo.
EL TALLER DE LOS SENTIMIENTOS
Raquel Sánchez Padilla
7
He trabajado con mis alumnos a través de un taller de sentimientos. Este taller se ha basado en explicar los sentimientos que han tenido durante la semana. Han explicado porque se han sentido así, han contado a los demás compañeros sus preocupaciones´. La mayoría de los días se sentían felices, aunque algunos días estaban tristes porque tenían exámenes o incluso tenían miedo de no poder aprobar la asignatura. Cuando observaron que durante una semana entera, todos los días se habían sentido felices, decidieron jugar a ver que posibles sentimientos tenían sus compañeros, imitando los rasgos faciales de cada una de las imágenes. Con este juego, los alumnos se dieron cuenta de que algunas micro-expresiones eran muy difíciles de diferenciar. Han decidido seguir trabajando los sentimientos y observar a los compañeros de clase y así poder adivinar que tal se sienten. Les ha resultado una experiencia muy divertida y sobre todo desconocida para ellos. Ahora quieren seguir trabajando, pero a modo de investigadores, viendo las expresiones de los demás y adivinando como se sienten cada día. Les ha encantado la tarea y a mi también, puesto que he podido conocer a mis alumnos aún más, y eso es lo más gratificante.