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EL TIEMPO Miércoles 20 de abril de 2011

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ECONOMÍA > Vocero de la Federación de Pequeños y Medianos Industriales afirma que financiamiento oficial está haciendo crecer a privados

320 proyectos abren el compás para la Pymi La encuesta de coyuntura realizada por Fedeindustria reflejó que las expectativas económicas para este año son positivas, según resalta el presidente del gremio, Miguel Pérez Abad, quien apuesta al apoyo crediticio del Estado, al plan de viviendas y al desarrollo de la Faja Petrolífera del Orinoco. Para el economista Augusto De Abajo Chávez, esto “no deja de ser una travesura del lenguaje politiquero muy poco respetable”

/ KATY JURADO / GABRIELA DÍAZ

Entre incredulidad, apagones y otros temas

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La encuesta de coyuntura realizada por la Federación de Pequeños y Medianos Industriales de Venezuela (Fedeindustria) en el cuarto trimestre de 2010, arrojó que 27,50% de los empresarios considera que las expectativas económicas del año 2011 son buenas, 25% respondió regulares, 6,25% excelentes y 2,50% malas. Basado en los resultados obtenidos en el sondeo realizado a 150 empresas del país, el presidente de Fedeindustria, Miguel Pérez Abad, estima que la Pequeña y Mediana Industria (Pymi) no han dejado de invertir ni en las peores condiciones. En la actualidad trabaja a 70% de su capacidad instalada. El dirigente empresarial aseguró que las perspectivas serán muy favorables para el sector, ya que este año arrancarán 320 proyectos industriales a escala nacional, mediante una inversión de Bs.F 3 mil millones, a través del Fondo Bicentenario. “Se trata de proyectos de ampliación de la capacidad productiva que deben generar unos 1.500 empleos directos y 100 mil indirectos”. Agregó que también las pymis participarán en la Misión Vivienda. La meta del Gobierno es construir unas 150 mil casas, de las cuales ya algunas están en ejecución, pero requieren dotación de insumos. “El Ejecutivo le solicitó al sector privado el suministro de 30 productos, entre ellos, piezas sanitarias, techos, bloques, cemento, arena, piedra picada, puertas ventanas. tuberías y cables. Por ello confiamos en que la economía se reactivará, ya que la construcción es un sector permeable”. Aunado a este panorama, Pérez Abad mencionó el plan de desarrollo de la Faja Petrolífera del Orinoco, donde las empresas mixtas prevén invertir 70 mil millones de dólares. “Esta será una gran oportunidad para los estados orientales, porque va a generar una gran demanda de bienes, servicios, producción agrícola y alimentos”. Sin cierres La encuesta de coyuntura industrial habría reflejado una reactivación en varios sectores productivos, entre ellos, metalmecánico (22,50%), construcción (13,75%), plástico (12,50%), textil y calzado (11,25%) y petróleo (10%). “En el sector industrial hay un reporte de crecimiento progresivo. En 2002 y 2003 cerraron

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EXPECTATIVAS. Los industriales ven oportunidades de empleo en planes adelantados por el Gobierno nacional (Foto: Rafael Salazar) entre 900 y 1.100 pymis producto del paro petrolero, pero mediante una política de financiamiento público y privado se han recuperado. Hace 10 años, Fedeindustria tenía 1.300 cámaras afiliadas, y hoy en día tenemos tres mil. No se reportan cierres”. El directivo argumentó que anteriormente el problema era financiamiento. En la actualidad es de tecnología y mano de obra. “La oferta crediticia supera la demanda de los sectores industrial, agroproductor y turístico. El Estado ha puesto a disposición de los privados los recursos del Fondo Bicentenario, Foncrei y del Banco Bicentenario”. Refirió que en Anzoátegui están registradas 1.200 pequeñas y medianas empresas. No obstante, ocupa el noveno lugar de los estados con vocación industrial y el segundo de Oriente, después de Bolívar. Según las cifras de Fedeindustria, en 1998 la entidad reportaba 64% del Producto Interno Bruto (PIB) industrial. En 2010 se elevó a 75%.

REPUNTE El presidente de Fedeindustria, Miguel Pérez, considera que es muy pronto para establecer metas, pero estima que este año el crecimiento del sector manufacturero podría estar entre 1,2% y 1.5% , “pudiera ser superior si el sistema de planeación de la Misión Vivienda con empresas de capital privado funciona de manera adecuada y se superan las trabas burocráticas”. Pese a esas proyecciones, destacó que siguen las dificultades. “Sectores como servicio y comercio crecen más rápido que el industrial, ya que cada proyecto requiere al menos tres años para estar en plena producción”. Señaló que el Gobierno debe atender requerimientos como el de infraestructura portuaria y recuperación de parques industriales a fin de reconectar la agenda productiva con los empresarios.

“La inversión petrolera de los próximos 50 años será en Anzoátegui. Esta es la oportunidad de recuperar fuerza productiva. Debemos prepararnos. Los primeros que deben incorporarse son los sectores primario e industrial”. En contraste Para el articulista Augusto De Abajo Chávez, el argumento esgrimido por Pérez Abad de que la economía seguirá creciendo en Venezuela “no deja de ser una travesura del lenguaje politiquero muy poco respetable”. El expresidente del Colegio de Economistas de Anzoátegui puso en el banquillo las palabras del directivo industrial y expresó que “han involucionado en materia social, educativa, tecnológica, económica, seguridad institucional, entre otras”, por lo que no es posible crecer “bajo una cúpula de contante asfixia”. Considera que las actuaciones del régimen político en Venezuela se sustentan en una economía de “inestabilidad de

los taludes” (término tomado de la geotecnia), donde “son tantas las fisuras, que esto se traduce en una pobreza galopante y en un desasosiego colectivo. No hay medidas remediales que por lo menos alivien tales roturas. La falacia de pretender asumir el rol benefactor creador del empleo universal ha sido un cáncer presupuestario. El desempleo es estructural y muy vinculado al episodio partidista y no al sector productivo”. El caso de las pymis es algo atípico para De Abajo. Ellas responden para su existencia a una ecuación universal que se concentra en la productividad y en la calidad bajo el marco de una competencia libre de mercado. Es decir, que para su engranaje es imprescindible que haya un marco institucional creíble y respetuoso de las reglas de su actuación. “No se puede ser competitivo cuando la sombra del competidor es el propio regulador, quien pretende ahogarlas con una apertura desafiante de una economía de puertos para barrerlas del mapa comercial”.

“Las escasas cifras creíbles que han venido ofreciéndonos (el Gobierno) no son sustentables. Son focos de presión estadística como resultado de la volatilidad del margen diferencial de los precios petroleros, pero en ningún momento como resultado de la expansión productiva endógena”. Con estas palabras, el economista y articulista Augusto De Abajo Chávez pretende desbaratar la tesis de Miguel Pérez Abad, presidente de Fedeindustria, y agrega que el despegue de la economía criolla no se logra sólo con “financiamiento barato”, habida cuenta de que quienes lo gerenciarán están sujetos a una condicionante estatal y, peor aún, “sin un plan integral comprometido, articulado con un futuro promisor. En este país nadie habla de invertir por encima de los seis meses”. Pretender el auspicio de un mejoramiento de estas organizaciones productivas (las pymis) como resultado del Plan de la Faja Petrolífera del Orinoco, “no pasa de ser otra grieta en el talud por cuanto qué futuro puede haber con un petróleo pesado si las refinerías externas las entregaron a extraños”. Según su parecer, decir que la Misión Vivienda acelerará el crecimiento de las Pymis, no le causa otra cosa que risa “ cuando jocosamente el humo de las velas encendidas ha reemplazado el que dan las chimeneas de las fábricas funcionando a plena capacidad”. Sin disimulo El abogado y analista político Francisco “Pancho” Aguilarte también ofreció su punto de vista sobre las afirmaciones de Pérez Abad en torno al crecimiento industrial. Coincide en que “son pocos creíbles, pues no hay que olvidar que el vocero pertenece a la directiva nacional del Partido Socialista Unido de Venezuela y tampoco disimula sus aspiraciones a la Gobernación de Anzoátegui”. GABRIELA DÍAZ


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