1 minute read

“Elvis”, la historia del Rey del Rock que va por el Óscar

La película se adentra en la relación entre Elvis Presley y su mánager en la década de 1950.

Ana Lucía Mendizábal Ruiz elPeriódico

Advertisement

Corría el año de 1997. Elvis Presley (Austin Butler) había dejado de existir 20 años antes. Sin embargo, en su lecho de muerte, el coronel Tom Parker (Tom Hanks), quien fue su mánager, recuerda cómo fue su encuentro con el jovencito que tenía magia en la voz, la inspiración y las caderas.

Así arranca la cinta Elvis, una de las diez nominadas como Mejor Película para el Óscar, que además cuenta con otras ocho candidaturas para la gala que se celebrará el 12 de marzo.

La cinta se adentra en la relación entre el llamado por todos coronel y el cantante que cambió la historia de la música a partir de la década de los 1950. Sin duda alguna, la principal virtud de Parker fue ser lo suficientemente astuto como para reconocer el enorme potencial del entonces muy joven Elvis, que combinaba sus influencias del blues, el jazz, el country, las baladas y el gospel, y que terminó por consolidar el rock, que más adelante lo proclamó como su rey.

En la cinta dirigida por Baz Luhrmann muestra la manipulación que Parker hace de diversas situaciones. Desde convencer al gobierno de reclutar a Elvis para que vaya a la guerra para diluir los prejuicios que se cernían sobre el “demasiado sensual” cantante hasta convencer al artista de no aceptar una gira internacional, porque resulta que el coronel no podía salir de Estados Unidos debido a su situación migratoria.

En la cinta también se exploran otros tópicos como la relación de Elvis con su madre Gladys (Helen Thompson), su romance, matrimonio y posterior divorcio de Priscilla Presley (Olivia DeJonge) y los cuestionamientos que el propio Presley se hacía por no interpretar temas que pintaran más la convulsa realidad de su tiempo.

La Producci N Y El Derroche

“Elvis” sigue el estilo extravagante de Luhrmann, quien tiene en su haber títulos como Moulin Rouge, Romeo y Julieta y El Gran Gatsby. La cinta fue diseñada como un gran espectáculo, ideal para verse en una gran pantalla. La puesta en escena es excesiva. La recreación de conciertos de Elvis permite a sus verdaderos fanáticos una identificación con el joven Austin Butler, quien está nominado al Óscar como Mejor actor.

This article is from: