77 años de El Siglo

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ón Edici de los 77 ativa a de r o m con os de vid añ Siglo y o El o Sigl v e u El N

Director LAUREANO GOMEZ JOSE DE LA VEGA Jefe de Redacción JOSE DOMINGO ROJAS Gerente JESUS NARANJO VILLEGAS

01- DIARIO DE LA MAÑANA

Bogotá sábado 1o de febrero de 1936

PRIMER EDITORIAL DE EL SIGLO EL 1º DE FEBRERO DE 1936

Para servir los intereses nacionales en su más alto y noble sentido, aparece este diario, que aspira a ejecutar su empeño en forma que todo colombiano vea en el esfuerzo que su sostenimiento implica, una contribución generosamente inspirada en el progreso moral y material de nuestra republica. En formas varias y en ocasiones numerosas, casi no interrumpidas, los directores y colaboradores de “EL SIGLO” han consagrado sus actividades a la defensa de aquellos principios filosóficos, que en primer término ponen los deberes del individuo para con Dios y de allí deducen con lógica cerrada, perfecta armonía y seductora exactitud de raciocinio, el luminoso sistema de deberes y de derechos que ligan, sostienen y alimentan la personalidad humana en la elevada categoría que la naturaleza le ha designado, no envaneciéndola con prorrogativas ilusorias, ni abatiéndola y anonadándola ante un absolutismo que en los tiempos modernos se hace radical en el estado como en los antiguos se consagraba en la persona del déspota. Esta experiencia en la vida, el estado constante, la observación cuidadosa y desvelada de las incidencias de la vida política colombiana en lo que ya corrido de esta centuria han dejado en el espíritu de los directores de “EL SIGLO” una convicción profunda. Tocóles ver primero, en la infancia ya consciente y reflexiva, y en la primera juventud, los estragos de la guerra civil y la afrentosa mutilación del territorio. Presenciaron luego el ensayo de régimen personal, el autoritarismo a que vuelven los ojos quienes se desencantan con las diferencias y tropiezos de los regimenes legales. En la ebullición fervorosa que siguió a la dictadura dieron sus primeras contribuciones personales a la acción política. En ella continuaron de diversos modos hasta la caída del partido conservador por si lamentable división en 1930. Luego, hasta la fecha han presenciado el rumbo que se ha dado al país, soportando las reales o pretendidas innovaciones y compartido los tratamientos de excepción desfavorable a que una inmensa masa de la opinión nacional esta sujeta. Dominando el panorama de tan diversas situaciones, ya las del poder, ora las de la persecución, algo sólido y firme subsiste en el espíritu de los directores de este diario: la idea de una patria colombiana, grande, valerosa, austera y justa, no como entidad inmutable, ya moldeada para la eternidad, sino por el contrario, como

obra inmediata, directa y constante de los hijos del país. Los hombres nacidos en pueblos de tradiciones seculares pueden creer que la obra de una generación no alcanza a desvirtuar el legendario carácter de su patria. Pero los hijos de estas repúblicas americanas tienen muy distinta responsabilidad para sus actos. Prácticamente no se encuentra en ninguna de ellas una tradición civil que por si sola, resista los embates de la veleidad. No existen antecedentes nacionales y los hechos contemporáneos los van formando. Ahí reside su importancia, cualquiera que sea su entidad real. Las ideas políticas que, trasladadas a la práctica, garantizan mejor la realización del concepto de patria, formado “a priori” en la inteligencia solícita del hombre que no quiera llevar un gentilicio mediocre o depresivo, sino exultante y glorioso, son las que pueden inspirar una acción íntegra, insomne y desinteresada. Otras habrá más cómodas, por dúctiles; más llevaderas, por laxas; más seguidas tal vez, por su capacidad de adaptación, a las conveniencias momentáneas de las personas o los grupos políticos. Más lo que se creyera de éstas ganan en atracción externa, lo pierden, con creces, en fuerza espiritual, en ese impulso oculto e irresistible que subyuga las almas escogidas, las que elaboran su convicción filosófica por lo datos de su conciencia vigilante, lejos de la delatora inspección del circulo partidario y de las sugestiones concupiscentes de la utilidad personal. La aparición de “EL SIGLO” quiere significar – por lo que vaga poco o mucho – el aporte de un testimonio nítido, sin ambigüedad en las ideas, ni reticencias en la forma. Aparece en el foro, donde muy diversos conceptos se contraponen, a hacer pública, una vez más, una convicción íntima, profesada de antiguo, a la que la ciencia y la experiencia aportan cada día más robustos sostenes. La convicción es esta: sin las ideas conservadoras óptimas para configurar a Colombia según el ideal más excelso, noble y puro ambicionable para la patria. Censuras y diatribas por sucesos acaecidos cuando se decía que esas ideas predominaban en el manejo del Estado, bien conocidos son. En lo que tuvieren de justo, no podrá probarse que le mal o el daño provinieron de los principios conservadores como consecuencia necesaria; antes, en cada caso, es fácil la demostración del abandono de esos principios. Más ya la inculpación está cambiada en contumelia, por la insinceridad con que es hecha y la falta de autoridad moral de quienes la profieren. En efecto, no hay escándalo ni vicio imputables a los gobiernos conservadores, que no hayan superado ya las dos administraciones liberales. En cambio, la dura adversidad a que han sido sometidos sus servidores demuestra que la doctrina conservadora tiene una especie de hálito divino, una fuerza intrínseca, capaz de suscitar en quien la profesa sentimientos de abnegación y sacrificio, de desinterés y heroicidad. A raíz de su vencimiento, el partido conservador fue atacado por tres sistemas de terrible eficacia: el engaño, la corrupción y la crueldad. Engaño, porque mientras se planeaba su destrucción, palabras melífluas y mentirosas promesas velaban la intención recóndita. Corrupción porque de la más cínica manera se premiaron con cargos públicos y gajes del erario las contadas defecciones que pudieron lograrse. Y crueldad, además y sobre todo, porque el alma fría y perversa de quien había ideado los procedimientos anteriores, no hallándolos bastantes, confió la autoridad y las armas de la epública a pavorosos sicarios que sumieron en la desolación extensas y pacíficas comarcas que se enorgullecían de su adhesión al conservatis-

mo. Ningún espectáculo han podido presenciar los colombianos vivientes más honroso que el de la resistencia opuesta por el partido conservador al triplicado ataque. La despiadada y sangrienta hostilidad, la corruptora intriga, la hipócrita falacia alcanzaron apenas a desprender insignificantes elementos cuya ausencia no puede computarse como pérdida. En cambio cuántas acciones de heróico valor, cuánta magnífica constancia ha podido ser desplegada ante la brutalidad de los verdugos ¡ El fuego de los incendios, la sangre vertida sin tasa, las copiosísimas lágrimas han purificado a la inmensa colectividad perseguida. Nunca como ahora estuvo el partido conservador más unido. Nunca tampoco tuvieron las ideas un culto más férvido ni un acatamiento más leal que el que ahora les es rendido por nuestros amigos. Casi todas las circunstancias materiales pueden ser adversas al conservatismo: implacablemente eliminado de la administración, excluido de los cuerpos deliberantes, reducido a injusta y exigua participación en el poder judicial, ha mostrado cómo sabe guiarse por consideraciones más altas que las mezquinas de los intereses inmediatos. La magnífica austeridad de sus servidores es un ejemplo de que otras doctrinas no podrían gloriarse. La corriente de los sucesos diarios no alcanza a ocultar la grandeza de esa actitud que no alardea ni gesticula para hacer viso, sino que es tranquila, callada y firme, como todos los actos que obedecen a una profunda convicción. Observadores atentos de la realidad nacional, los directores de este diario, al ver cómo la mediocridad moral que predomina en las esferas directivas no ha logrado impedir el cultivo de virtudes excelsas que los principios conservadores estimulan, sienten por éstos un amor vivo y encendido que los sucesos, en apariencia adversos, acrecientan ¡Bienhadada doctrina que enseña a no doblegarse ante la arbitrariedad, a resistir la injusticia, y a dejar nulos los conatos de la violencia!. Considerada la acción política únicamente como medio para alcanzar un ideal patriótico nada pueden decir a los directores de este diario los estímulos personalistas. No estarán sus actos movidos nunca por tan secundarios propósitos. Queremos señalar, fenómeno consolador que confirma la actitud que “EL SIGLO” toma, la fervorosa adhesión que al credo conservador presta en la actualidad la más lúcida, y también la más numerosa parte de la juventud colombiana. En las ciudades universitarias y en los establecimientos más ilustres y concurridos, los jóvenes conservadores no sólo se destacan por su número, sino por su capacidad y también por su orgullosa y valiente profesión de fe política, lo que permite hacer del porvenir de Colombia un vaticinio no dudoso, Más quienes les antecedemos en la vida, sentimos una obligación con esa juventud que se prepara para la dirección del futuro. Preocúpanos que mientras cultivan su mente para el anhelado servicio del ideal que profesan, a favor de la confusión de esta hora, fuerzas aciagas destruyan la posibilidad de resurgimiento que ya se vislumbra. Sentimos que no nos es permitida la pasividad egoísta sin mengua del cumplimiento de nuestro deber y como una advertencia grave y premiosa parécenos oír al latino: “Una manu sua faciebat opus et altera tenebat gladium”. Invocamos la divina asistencia para este doble empeño asumido en la plena conciencia de su carácter transitorio, hasta que llegue el día en que manos más jóvenes y fuertes tomen la espada y sigan la empezada labor. Laureano Gómez José de la Vega

VALOR 5 CENTAVOS - NUMERO 1.O

TRES GRANDES DE EL SIGLO

Dos directivos de El Siglo, Laureano Gómez y Belisario Betancur llegarón a presidencia de la República por la vía de elección popular. Alvaro Gómez, varias veces candidato presidencial, quien fué secuestrado por el M-19 y años después es inmolado al salir de su cátedra en las puertas de la Universidad Sergio Arboleda cuando estaba en ferrea oposición al régimen.

INGLATERRA ESTA LISTA A REFORZAR SU PODERÍO Se prepara un gran debate sobre armamentos – Los proyectos que hay. LONDRES 31 (Servicio de AP exclusivo para EL SIGLO). En los primeros días de febrero habrá un gran debate sobre armamentos. La comisión parlamentaria que tiene a su cargo el estu-

dio de los proyectos que se han presentado para reforzar y aumentar la organización de la defensa militar en el Reino Unido y en el Imperio Británico. Este debate, que promete tener enorme influen-

EL DIA PARLAMENTARIO - SENADO La secretaria del senado lee un telegrama de Marmato, suscrito por una gran cantidad de firmas en el que protestan contra el contratista Uribe Afanador y

le piden al ministro de hacienda que no vaya, bajo ningún motivo, a prorrogar el contrato con los actuales administradores. El s. Badel dice que el telegra-

cia internacional, se verificará en la sesión de la de febrero. Hay expectativa en torno a la cámara de los comunes el día dos, ante el resultado de la discusión. ma debe pasarse a una comisión especial de investigación ya que en él se hacen fuertes cargos. En vista de la petición, la presidencia pasa el telegrama a los s.s. Gaviria y Caamaño para que dictaminen acerca de dicho problema.

ITALIA CONTINUA LOS PREPARATIVOS PARA LA GUERRA ROMA.- El gran consejo fascista se reunirá el sábado en el palacio de Venecia. Las últimas sesiones tuvieron lugar el 18 y el 20 de diciembre de 1935 y en ellas se decidió que la suprema asamblea del régimen se reuniría el 18 de enero. Pero esta sesión fue aplazada para el 1º de febrero con el fin evidente de esperar que terminase la sesión de la Sociedad de las Naciones. En el curso de esta sesión Italia ha podido ver con satisfacción que la atmósfera se le ha presentado calmada y que el asunto de la prolongación de las sanciones no fue discutido, pero aquí se piensa que esta calma no es sino pasajera y que el esfuerzo hacia las sanciones se presentará de nuevo. Ya en las declaraciones hechas por el premier Mussolini al Consejo de Ministros se ha puesto en evidencia que Italia no piensa cambiar de actitud y que su esfuerzo militar continuará cueste lo que cueste. Los comentarios de la prensa oficiosa dejan comprender claramente que Italia permanecería pasiva en caso de llevarse a cobo el embargo del petróleo y que dicha medida puede considerarse más como política que económica.

ASÍ NACIÓ EL SIGLO

“El infierno del primer día”

Uno de los redactores del naciente diario recuerda anécdotas e inconvenientes del ejemplar del 1 de febrero de 1936 La noche del 31 de enero de 1936, Laureano Gómez subía y bajaba escaleras apurado, registraba gavetas y preguntaba a todos los trabajadores del nuevo diario: ¿Dónde está la Frontera del Norte?; un desnivel en la impresora hacia que, antes de salir el primer número de EL SIGLO se rompiera la bobina del papel y el solo proceso de volverla a montar retrasaba todo el trabajo, veinte minutos. El país entero estaba pendiente de la salida del periódico que prometía una fuerte oposición al gobierno, pero durante las primeras semanas no alcanzó a ser enviado por tren a la provincia. Todo ello hace que Antonio Arcila González, uno de los tres redactores de aquel número uno dejara en este escrito aquella trasnochada en el viejo edificio de la carrera 8 con calle 17 centro y que calificó como el “infierno del primer día”. Cuando Arcila se retiró de la dirección de EL SIGLO se dedicó a su profesión, abogado. La razón es que quería probarse a sí mismo que podía vivir de “redactar memoriales”. Durante su vida no dejó de recordar esa escuela que tuvo en EL SIGLO , ni el día en que él y sus compañeros tuvieron que dejar temporalmente la redacción para hacerle frente a una asonada que no se produjo y hasta el “embuchado” que por una mala información publicó EL SIGLO . Se necesitaba el periódico “Era grande la expectativa que existía en toda la Nación, y especialmente en el partido conservador por la aparición del periódico, especialmente por el prestigio de sus fundadores. Después de la derrota electoral , los dos periódicos conservadores habían cerrado sus puertas y no se volverían a ver El Nuevo Tiempo ni El Debate. El País sobrevivía pero se había venido a menos. y corría el rumor de que estaba próximo a liquidarse”, recuerda el redactor. Arcila era entonces un estudiante de último año de derecho que se sostenía siendo corresponsal del periódico La Defensa, de Medellín y no vaciló en ofrecerse para apoyar la idea que había difundido Laureano Gómez y José de la Vega. “Cinco meses después me retiro, había terminado su carrera y deseaba irse a Antio-

Primera página de El Siglo en 1936.

quia para ver si aprendía a redactar memoriales”, comenta. La primera odisea Arcila, durante su breve estadía en el periódico, rápidamente se convirtió en motor de la redacción. Es por ello que es uno de los más autorizados para recordar esos primeros días de EL SIGLO. “Recordar ese primer día y los siguientes es revivir las angustias, horas de incertidumbre e inconvenientes, un verdadero infierno para sus directores, redactores y empleados…Una máquina que había quedado mal nivelada , tan pronto comenzaba a funcionar rompía el papel y tocaba repetir la operación completa de montar el papel. De todo el país llegaban agobiadores telegramas reclamando el periódico y, en Bogotá, desde las siete de la mañana, la multitud se agrupaba en los alrededores de la casa donde se hacía el periódico, que muchos días no lográbamos sacar a las ocho. Finalmente se decidió que cerraríamos la edición temprano para compensar el tiempo en la ruptura del papel. La Frontera del Norte Antonio Arcila contó repetidas veces la anécdota del primer día, no dejaba de reírse mientras recordaba: “El doctor Laureano Gómez, la víspera de la salida, bajaba a los talleres, iba al segundo piso, donde quedaba la redacción; registraba las gavetas , miraba papeles y nos preguntaba a todos: ¿Dónde está la Frontera del Norte?. Horas después alguien

le contestó que en La Guajira o en Norteamérica , pero al día siguiente nos enteramos de que ese era el título de un artículo seleccionado para el primer número, cuyo original nunca apareció. Años después, nuestro saludo con los ex compañeros de ese día era: ¿dónde está la Frontera del Norte?. Los “copetines” El periodismo entonces tenía un carácter bohemio. En otros periódicos, la empresa pagaba el licor de los linotipistas y jefes de armada porque existía la convicción de que era un medio efectivo para contrarrestar la intoxicación con plomo. El jefe de redacción, José Domingo Rojas, había enfermado durante la primera semana y no volvió: el jefe de armada, Pedro Luis Belmonte, era catalogado el mejor diagramador de aquellos años en el país, pero tenía la costumbre de tomarse unos “copetines” todos los sábados y falló la primera semana. El domingo siguiente llegó hasta la puerta del periódico pero, por pena o por amor propio, regresó a su casa y jamás volvió a aparecer. La crisis se agudizaba durante los primeros días. Según cuenta Arcila “muchos de los empleados no llegaban a tiempo y como el saca-pruebas tampoco cumplía con su obligación, el doctor Gómez se veía obligado a sacar las pruebas de su editorial y de algunas de las colaboraciones”. Mi amigo Pepe Entre los redactores de los

primeros números se encontraban Jorge Gálvez Mejía, César Garrido, Carlos Ariel Gutiérrez y Antonio Arcila. El primer gerente fue Jesús Naranjo Villegas y el administrador Luis Enrique Uribe Cualla, cuyo hermano Juan inició una de las más recordadas columnas en el número uno de EL SIGLO, con el título “Cosas del Régimen” y firmada por el seudónimo de O.K. Pero para Arcila fue muy especial entre todos ellos el caricaturista José de Jesús Gómez Castro, “Pepe Gómez”, “Lápiz”, “Jack Monkey”, “Mikey” o como quiera que se llamara. “El no le daba amistad a nadie fácilmente, recuerda Arcila.; como yo llegaba temprano, él se encontraba conmigo en el momento de dejar su mono y me invitaba a conversar un rato antes de que llegaran los compañeros. Era una cuota de risa que tenían mis días en la redacción de EL SIGLO. Entre los dos solíamos reírnos de todo el mundo pero durante un tiempo muy breve porque su colaboración era muy esperada. ¡Y vaya si lo esperaban. Cuando no aparecían sus monos no faltaban las docenas de cartas y telegramas reclamando”. Las soluciones Poco a poco, los inconvenientes se fueron salvando, la impresora se niveló, el horario se hizo más estricto y el periódico, un mes después de fundado, salía a tiempo para ir en los trenes de las seis de la mañana. A cambio de José Domingo Rojas entró como jefe de redacción José Tomás Escallón y un nuevo jefe de armada se cuidó de no faltar ningún día. Sólo faltaba solucionar la amenaza contra la integridad de los trabajadores del periódico, que se vio perturbada realmente el 1 de mayo de 1936. “Este día se inició la Revolución en marcha –cuenta Arcila- Con pruebas irrefutables tuvimos conocimiento de que ese día se iba a incendiar el periódico. Según comunicaciones de Boyacá, nuestra sede sería incendiada. Nosotros nos preparamos convenientemente: electrificamos la entrada e hicimos barricadas dentro del periódico. Sin duda los sicarios conocieron nuestra prevención y no pasó nada, pero nuestra actuación de ese día demostró que todos los empleados estábamos dispuestos a jugárnosla toda para defender el periódico”.


PAGINA SEGUNDA

Viernes 1 de febrero de 2013

“ EL SIGLO ”

La prensa nacional y “EL SIGLO” Fue disuelta la EL SIGLO y “Acción Francesa” EL NUEVO SIGLO

EL viernes 1 de febrero de 1936 Laureano Gómez y José de la Vega fundan el diario El Siglo, para defender los postulados conservadores desde la oposición al gobierno de Alfonso López Pumarejo, quien impulsa la radicalización del liberalismo con la denominada Revolución en Marcha. López promueve la reforma agraria y fomenta la creación de sindicatos adictos a su partido, con lo que radicaliza la política; al mismo tiempo evita que los izquierdistas conquisten las masas. La política nacional e internacional se mueve al vaivén de la disputa política entre derechas e izquierdas. A la vieja competencia por el poder entre conservadores y liberales, que había provocado varias guerras civiles en el país durante el siglo XIX, se suma la pasión con la que los medios y la opinión pública siguen los acontecimientos políticos en España. Como se recuerda, la Revolución Comunista en Rusia, con la pretensión de instaurar y promover desde Moscú la dictadura del proletariado, había desatado la confrontación internacional contra los gobiernos burgueses, conservadores, liberales y socialdemócratas. La democracia europea pierde terreno bajo la presión de las masas al servicio del comunismo internacional, en medio de la confusión de la primera Guerra Mundial y la posguerra. Al agrietarse el edifico democrático en distintos países y como consecuencia de la crisis económica, surge el fascismo en Italia capitaneado por Benito Mussolini, antiguo socialista que se aparta de Lenin, para alistarse como soldado en la primera Guerra Mundial. Y Mussolini con la marcha sobre Roma de 1922 respaldado por miles de camisas negras y desempleados nacionalistas se toma el poder. A partir de ese momento se radicaliza la lucha política en Europa, los partidos de centro se derrumban, incapaces de superar la crisis pierden el apoyo popular. Ese espacio tiende a llenarlo la extrema derecha en disputa feroz con el comunismo. En Alemania llega al gobierno el 30 de enero de 1933, por elecciones, el ultranacionalista Adolfo Hitler. A los 15 días de salir a circular El Siglo gana los comicios en España el Frente Popular. Las gentes de orden en Colombia se estremecen, y no se equivocan. Se desata una implacable persecución contra la derecha conservadora. El 13 de julio de 1936 es asesinado el exministro conservador José Calvo Sotelo, por sabuesos del Gobierno. El 18 de julio de 1936 los militares nacionalistas y conservadores se pronuncian contra la República, el intento de golpe degenera en una de las más sangrientas guerras civiles de la historia. El 20 de noviembre de 1936 es ejecutado en la prisión de Alicante José Antonio Primo de Rivera. El mundo se prepara para lo que será la segunda Guerra Mundial, guerra geopolítica e ideológica, entre la extrema izquierda y fascismo. Como lo señala Ernest Nolte, la guerra ideológica europea se convierte en guerra mundial. Los efectos políticos en nuestra región aún persisten. Puesto

que la guerra fría se traslada a nuestro Continente, convertida en guerra de guerrillas castrista de la que no hemos salido aún. Y al mismo tiempo surge, pese a la caída de la Unión Soviética, como del Muro de Berlín, mediante una involución doctrinaria, el socialismo del siglo XXI, remedo de utopías socialistas fracasadas en los siglos XIX y XX. Por efectos de la descomposición social y el exacerbado antagonismo político en Hispanoamérica, los sectores conservadores y de centro son derrotados electoralmente o por la vía militar. Colombia consigue mantenerse como democracia formal, pese a los frustrados conatos de golpe de Estado contra López y al cierre de las asambleas durante el gobierno de Eduardo Santos, dentro de las reglas de la Constitución. El Siglo, dirigido por Laureano Gómez y José de la Vega, se convierte en el motor del nacionalismo moderado y de propuestas sociales dentro de los cánones de la Iglesia Católica, para conjurar la miseria y el atraso. En realidad lo que enfrentan desde el diario es el desafío de la izquierda que plantea la revolución comunista desde 1917 y de los diferentes actores de la corrupción. Lo mismo que se esfuerzan por defender la Constitución de 1886, que consagraba el bien común contra el individualismo egoísta. La Constitución es reformada por el presidente López Pumarejo, que al decir de notables constitucionalistas, con el concurso de Darío Echandía, le rompen el espinazo a la Constitución. Demoler el Estado moderno creado por Rafael Núñez en el 86 se convierte en una obsesión de sus malquerientes, olvidando que juristas conservadores y liberales ayudaron a su consagración y se trataba de una obra magna en su brillante concepción nacionalista. El Siglo ha sido a lo largo de su historia el campeón del orden y lo sigue siendo como El Nuevo Siglo. Es la mayor fábrica de periodistas del país y de la mejor calidad, por aquí pasan los grandes de la profesión; dos de nuestros directivos, Laureano Gómez y Belisario Betancur, fueron elegidos popularmente a la Presidencia de la República. Álvaro Gómez influye en la vida nacional más que varios presidentes. El Frente Nacional, pactado por los dos partidos tradicionales, del que fueron signatarios Alberto Lleras y Laureano Gómez, contó con el brillante apoyo intelectual de Álvaro Gómez El Siglo ha sido incendiado, clausurado por la dictadura y sufre el vil asesinato de Álvaro Gómez, su mayor inspirador y orientador. Y nada lo detiene, como el ave fénix renace de sus cenizas y se moderniza y adapta a los nuevos tiempos. Los directores Juan Pablo Uribe y Juan Gabriel Uribe se obsesionan con la información y la competencia por la veracidad y el análisis político-económico. El Nuevo Siglo a sus 77 años sigue en el cotidiano e indeclinable compromiso de servir a la sociedad, defender los ideales nacionalistas y bolivarianos, la democracia, el desarrollo, el orden, la justicia social y la libertad.

“NUEVO DIARIO CONSERVADOR” “Hoy aparecerá el nuevo diario conservador EL SIGLO, dirigido por los doctores Laureano Gómez y José de la Vega. Anticipamos al colega nuestro atento saludo y formulamos votos por el éxito de sus labores. Conocedores de la dura faena que representa el periodismo en Colombia; habiéndonos tocado iniciar labores, en las condiciones más impropias, merced a una lucha perseverante y tenaz, orientada especialmente por el general Pedro J. Berrío, síntesis de patriótico desprendimiento y de infatigable energía, contando además con experta colaboración de hombres como Miguel Jiménez López, Jorge Vélez, Aniceto Guzmán, Mariano Ospina Pérez, Francisco de P. Pérez, Rubén Jaramillo Arango y José Arturo Andrade, quienes como miembros de la Junta Directiva de la empresa en un principio, y como colaboradores en diversas oportunidades, compartieron con nosotros la ponderosa carga, hemos logrado realizar a favor de las sanas ideas y de las doctrinas de orden campañas que no han sido perdidas como servicio a la república y como contribución a unificar el pensamiento del conservatismo en las horas más difíciles de su historia. Para toda iniciativa noble y para todo servidor meritorio ha tenido “El País” la palabra de reconocimiento desinteresado y el estímulo constante, sin que haya pretendido cosa distinta de defender lealmente los sagrados intereses religiosos y políticos encarnados en el credo conservador. La causa conservadora necesita en estos momentos el aporte decidido de todos los elementos que la integran, recibirá complacida a un vocero más de sus ideas”. (“El País”)

“EL SIGLO” UN DIARIO PARA LEER “Nos anticipamos a saludar la aparición de EL SIGLO, cuya primera edición será conocida mañana por toda la república. Será un periódico para leer y no para hojear. Y decimos que será para leer, porque el periódico que tiene a su cabeza a los doctores Laureano Gómez y José de la Vega, será una insomne y fervorosa trinchera de ideas al servicio de la patria y del conservatismo. Arma mortal para la lucha política, acondicionada a las exigencias de la época. Como en otros días, el doctor Gómez vuelve al tenaz forcejeo de la prensa. Como periodista, ama navegar entre las borrascas políticas con un atrevido, pasional y fuerte sentido del peligro, la tremenda vocación de escritor público, la aceptación con todas sus luchas y goces. En la actualidad fluyente e inagotable del instante, EL SIGLO será síntesis y tendrá intensidad, agilidad y vibración. Tipográficamente vendrá vestido según las reglas del buen gusto. Habrá en sus páginas movilidad y rapidez, según lo reclama el periódico de tipo moderno. Resumen vivo y fresco de la vida colombiana. EL SIGLO será periodístico; esto es atrayente al rojo vivo, despierto y altavoz en todo lo que toca a la significación intelectual, social y política del país. La dirección del diario la llevan a su cargo dos temperamentos intelectuales, el uno, una combatida personalidad, un conductor de duro perfil rodeado por una numerosa marea de multitudes, inquietado por los movimientos políticos, buceando la perfección de los sistemas de gobierno. Todo eso ha sido, en su existencia pública la turbulenta travesía del doctor Laureano Gómez. En José de la Vega, prima el hombre de gabinete; el que escruta con perspicacia y agudeza la trabazón internacional de los hechos y ejercita la crítica acerada de las ideas, es además, un explorador de la sociología americana, de las teorías sociales contemporáneas, que maneja un pulcro y noble estilo. La aparición del diario conservador obedece a una imperiosa necesidad histórica,

es la urgencia de expresión de una causa, perseguida y martirizada por una horda vencedora y colérica de la patria, extraviada ahora por manos inhábiles, torpes y aventureras. Por eso intuimos, EL SIGLO empuñará como bandera el lema viril que el católico Charles Peguy, estampó en uno de sus “Cahiers” “decir la verdad, toda la verdad, sólo la verdad: decir estúpidamente la verdad, estúpida, fastidiosamente, la verdad fastidiosa, tristemente la verdad, triste”. A EL SIGLO, periódico para combatir “Derechas” le presenta sus aceros.” “EL SIGLO” “La aparición del diario de los doctores Laureano Gómez y José de la Vega, es en la vida periodística del país un suceso de innegable trascendencia. En este hecho – que nosotros registramos con complacencia cordial – no intervienen solamente los factores ordinarios y habituales que rodean el nacimiento de un órgano nuevo de expresión ideológica o de opinión diferenciada, sino también la circunstancia especialísima de que EL SIGLO viene a constituirse en la dirección responsable de una política por entre el mapa vivo de las ideas y los hechos nacionales. En reiteradas ocasiones, la radiografía de la oposición que ha venid haciéndose al gobierno y a los programas liberales, ha descubierto un fondo de pugnacidad desvinculada de todo análisis racional y aun de indispensables elementos de justicia. Oposición outrance encaje o no dentro de los cuadros de la realidad administrativa y de la verdad periodística, parece ser lema escogido por algunos diarios conservadores como “La Patria”, de Manizales, que llevan por estos conductos caprichosos y violentos los principios formales y doctrinarios de un partido respetable. El país conoce suficientemente la capacidad combativa del doctor Gómez y la estructura dogmática del doctor de la Vega. Y sería de un candor inexplicable pensar que estos dos tenaces, vigorosos e inteligentes adversarios, van a desarrollar desde su diario una labor apacible y tranquila; pero sí puede esperarse que “EL SIGLO” instaure un nuevo estilo en el ataque y lleve a la controversia entre las fuerzas que operan directamente sobre el espíritu y la materialidad de la república y las que integran la oposición, una modalidad diferente de la que hasta aquí ha venido informando este dialogo histórico. Al presentar nuestro saludo al colega conservador, deseamos sinceramente que su presencia en la vida periodística de la república se traduzca a términos de alta justicia intelectual y de noble lucha democrática”. (“El Espectador”)

APARECIÓ “EL SIGLO” Simultáneamente con las primeras auras sabatinas, se escuchó la vocinglería estridente de las gargantas infantiles de los expendedores que pregonan: - EL SIGLO de Bogotá! acaba de llegar!. Y advertimos claramente que las vías de la urbe se congestionaban de expectativa que se alargaron innumeras manos solicitantes y que por doquiera se esparció su influencia buena. De ahí su precio a semejanza de ciertos valores de bolsa – marco velozmente una oscilación ascendente en breves minutos, hasta convertirse casi en artículo de lujo, y los ejemplares fueron pocos para satisfacer la precipitada demanda. Fresco todavía, cuando guardaba aún el olor grato de la tinta, hemos tomado el primer número del periódico conservador que nació hoy en la capital de la república bajo los signos del éxito y que asume por derecho propio la gestión de los intereses de nuestro partido en la sede administrativa del país. Le hemos leído atentamente a través de sus doce planas densas, prestigiosas de inteligencia y gusto, hemos hallado exactamente cuando teníamos derecho a esperar y anhelábamos confiadamente los eximios talentos de sus directores se reflejan allí. Desde las palabras inaugura es compendio del lacerante cielo político último, de doctrina y fervor, en medio de su orientación serena y grave hasta la austera disposición de páginas y colaboraciones. Un almíbar vigoroso como EL SIGLO era precisamente la ambición del conservatismo deseoso de poseer un guión que orientase su marcha y estimulara su paso desde la ciudad capital, y por eso se explica la general ansiedad que había por su aparición y el expreso beneplácito con que ha sido acogida su primera edición. Pero no solamente colma EL SIGLO de un modo amplísimo la urgencia política e informativa, sino que su contenido mismo es una espléndida vibración de cultura y ánimo patriótico, de generosa decisión para servir los empeños nacionales y restaurar nuestras insignes tradiciones de esmerado afán por llevar acopio a los espíritus abarcando en este sentido todos los aspectos y reclamos de la vida contemporánea. Nos complace íntimamente tender palmas de felicitación al nuevo colega que ingresa bajo tan excelentes auspicios a las milicias del diarismo nacional y expresar nuestro saludo cordial a los preclaros directores, doctores Laureano Gómez y José de la Vega, al experto gerente doctor Jesús Naranjo Villegas, al jefe de redacción doctor José Domingo Rojas, todos ellos apreciados amigos nuestros, al tiempo que a su cuerpo de redacción y demás cooperadores.” (“La Defensa”, de Medellín”).

PARIS 13. (Servicio de la Agencia Havas para EL SIGLO).Cuando desfilaba el cortejo fúnebre del conocido escritor Jacques Banville por el boulevard de San Germán, esquina de la calle Lille, apareció un automóvil que quiso cortar las filas del acompañamiento. Los concurrentes y los curiosos se opusieron al paso del carro; el chauffeur insistió en términos nada corteses y la gente se resolvió a imponerse al conductor del vehículo. En ese momento el pasajero que iba dentro del carro, León Blum, salió a protestar por la detención de que era víctima, y cometió el error de invocar su calidad de Diputado a la Cámara Francesa. La intervención de Blum y su extemporáneo llamamiento o invocación a su título de miembro de la cámara, produjeron un gran movimiento entre los concurrentes, quienes impidieron resueltamente el paso del automóvil y agredieron de obra a León Blum; pero sin que esta agresión causara ningún daño al diputado. Esto es lo que se ha llamado el “atentado contra la vida de León Blum”. Acompañaba a León Blum en el carro, el diputado socialista Georges Monnet. La policía complicó la situación reduciendo a prisión a varios de los que acompañaban el entierro de Banville. El gobierno a dictado un decreto por el cual se ordena la disolución de los célebres Camelots y de la Acción Francesa Estudiantil. Dicho decreto proviene de la ley sobre orden público y ha sido dictado con el fin de evitar motines que, según temen los diputados, pueden estallar después del atentado de que fue víctima el diputado señor Blum. La policía requisó el cuartel general de la Acción Francesa, confiscando varios documentos importantes; las autoridades exigieron se les suministrara los nombres de los miembros que componen dicha asociación, petición que les fue negada. La policía se retiró sin hacer arresto alguno. Duadet y Maurras preparan para mañana violentos artículos en su periódico. –“el decreto sobre disolución nada quiere decir” – han manifestado. El decreto que ordena la disolución de todas las asociaciones monarquistas, firmado por Lebrun, fue promulgado después de una reunión extraordinaria del Gabinete, convocada como resultado del ataque contra el jefe socialista Blum, quien fue golpeado por los Camelots. El atentando que se acaba de cometer contra León Blum tendrá muy graves repercusiones en todos los sectores políticos de Francia, y se avecinan los días tenebrosos de las represalias. La decisión de disolver la Liga de la Acción Francesa y las organizaciones similares,

Charles Maurras.

es la primera aplicación de la ley dictada el diez de enero del presente año. El decreto aparecerá mañana en el Diario Oficial. También la policía judicial comenzará sus investigaciones, rondando las oficinas de la Acción Francesa, y los domicilios particulares de sus dos jefes, Carlos Maurras y León Daudet. Muchísimos jóvenes que se encontraban en los alrededores del lugar en donde se cometió el atentado han sido detenidos e incomunicados. En el Eliseo se reunieron los ministros a fin de tomar en consejo pleno las medidas que crean adecuadas para mantener la tranquilidad y el orden público, y desde allí planearon el modo de disolver cualquier manifestación popular que trataran de organizar los miembros de la Acción Francesa. El comisario Guillaume, acompañado del Juez de instrucción Linais y del suscrito Estorgues, se presentó a las diez y siete horas de hoy a las oficinas de la Acción Francesa, con el objeto de practicar allí una minuciosa ronda; la diligencia duró hasta las veinte horas, del meridiano de Paris, y se desarrollo casi toda en la secretaria de los Camelots del rey; a ellas asistieron Daudet y madame Daudet, Charles Maurras, Calzant y Pujo, jefe de redacción del periódico “La Acción Francesa”. El juez de instrucción Aubry se ha hecho cargo de la investigación del delito de provocación al asesinato, delito de que ha sido victima Maurras, y seguramente fallarase el asunto muy en breve, porque en estos casos de provocación o incitación meramente verbal el procedimiento aceptado es el correccional, según el artículo 13 de la ley que acaba de expedirse. El premier Sarrault ha declarado que el gobierno desea que la disolución de la Liga de la Acción Francesa no sea un texto muerto de la Ley, y así toda manifestación de este grupo político no solamente será prohibida, sino también castigada. Espera que la acción judicial será rápida y enérgica para conseguir la eficacia y el cumplimiento integral de la ley que acaba de dictarse para disolver las luchas de carácter político que no son del gusto de los radicales socialistas.


Viernes 1 de febrero de 2013

“ EL SIGLO ”

PAGINA TERCERA

LA DECADENCIA EN EL PARLAMENTO

Verificado el cambio de régimen, ha habido, en los campos antconservadores, verdadero afán de desfigurar los motivos reales que produjeron aquel suceso. Se olvida la malhadada división conservadora y se finge y aparenta un movimiento de ideas, inventado en todas sus piezas, al que se proclama triunfante y se atribuyen fuerzas ocultas y virtudes de acción que vigorizan el ánima de la revolución en marcha. Durante los cinco años pasados, el colombiano inteligente ha esperado la demostración de la pretensa ideología nueva, que no podría menos de mostrarse en los actos de gobiernos que se jactaban de interpretarla con fidelidad. Pero el de Olaya Herrera- del que puede emitirse ya juicio cabal, por haber concluido – dejó de su gestión dos trazos preponderantes y tan caracterizados, que sólo por ellos va a conocer la historia ese infausto régimen. Uno de ellos es atroz : la horrenda e inicua matanza de compatriotas inocentes por la armas que dependían de aquel sanguinario presidente; los incendios, los delitos, contra la propiedad, las depredaciones inauditas, el arrasamiento de comarcas enteras, y la impunidad para tales delitos, de los agentes oficiales, erigida como norma inflexible de la administración. Mayor baldón todavía: el ascenso y estímulo de los delincuentes. El otro rasgo es infame, en el exacto significado de la palabra. Suficientemente advertido de que se intentaba un asalto contra el territorio nacional, aquel mandatario lo facilitó, con desocupación de

Leticia, orden criminal que ha podido, ni podrá ser nunca explicada. Todo lo que sigue después es una historia lúgubre, de engaño y burla a los más nobles sentimientos del pueblo, de mendicidad y falsía, de abrumadora incompetencia y pávido miedo. Resultaron el país empobrecido, lleno de deudas y humillado y unos pocos comisionistas de la república liberal, enriquecidos. El gobierno del señor Alfonso López no puede dar motivos sino para un juicio fragmentario. Apresurose a igual el estigma de nepotismo merecido por la administración anterior. Después, parece querer significarse por dos características: la incompetencia del personal que utiliza y el despilfarro nunca antes visto y a que no puede atenderse sino con la imposición de nuevos tributos. En el mundo de las ideas políticas nada significa la administración Olaya. Nada, tampoco, lo que va corrido de la administración López. Ante esta evidencia se balbuce que el aporte mental de la revolución está concretado a obtener la reforma de la Constitución de 1886 y que en los debates a que ese intento ha dado lugar habrá de conocerse el idearium de los nuevos mentores. Más las circunstancias y la forma como se desarrolla en la corporación liberal, que hace las veces de senado, la discusión de lo que pretende ser reforma de la carta fundamental es una demostración palmaria y triste de la gran decadencia de los días que vivimos. ¡Reforma Constitucional! Natural era que al as corporaciones de quienes se esperaba la realización de

esa tarea, se hubiesen llevado los sabios, los profesores, los especialistas, capaces de abocar la materia con idoneidad y discernimiento. Más la consideración del personal de que aquellas reuniones liberales se componen, muestra la carencia de individuos capaces, llevada hasta el inverosímil extremo de la escasez completa. Sin duda se habla mucho todas las tardes; pero ninguna de esas gárrulas voces consigue atraer la atención pública. Los hombres de pensamiento, la prensa, la juventud estudiosa, apenas si paran mentes en aquellos debates insignificantes. Sabedores de que no ha de oírse allí nada que merezca la consideración de una persona ilustrada. Los cuerpos científicos y los espíritus cultivados no disimulan su desdén por lo que está ocurriendo. El país se desinteresa de aquella exhibición de verbalismo y no puede anotarse otra actitud de la opinión general que la de zozobra y temor por los agravios al buen sentido y los entuertos a la justicia, que puedan resultar de allí, engendrados por la incompetencia con la ayuda del fanatismo de partido. Cualquiera de nuestros lectores puede cerciorarse de la exactitud de nuestro juicio y la fidelidad del dictamen que merece la obra de las juntas liberales que pretenden estar reformando la constitución. Si en las primeras horas de la noche quiere oír la transmisión radiofonica de los debates, advertirá que los conceptos que la materia obliga a emplear, como los de deber, derecho, obligación, responsabilidad, función social, etc.

Camilo José Cela.

caricia de la corbata desde los días de la primera comunión no echaban demasiado en falta la necesidad de llamar la atención del transeunte sobre su paso. Madrid que, en general, tenía cierta justificada fama de ciudad bien vestida en sus hombres y bien calzada en sus mujeres, nos está ofreciendo este verano el desdichado espectáculo del sincorbatismo, o la deprimente visión del corbatismo a la americana: algo así como un fantasía del pastelero moruno enloquecido. Aún no hemos llegado a conclusión alguna sobre cuál de los dos fenómenos es peor, altera más nuestro hígado o descompensa más nuestro sistema nervioso. Ante un señorito con la pechuga al aire – el señorito de pescadora que aprovecha el calorcito, cuidadosamente, esmeradamente, para presumir de fuerte y enseñarnos los rizos del pecho – y otro señorito con una corbata amarilla con la silueta de Franz Sinatra, o unas lentejuelas de auténtica lata superpuestas, nosotros la verdad, aún no hemos tomado partido. Afortunadamente tampoco se nos ha exigido optar. ¿Por qué, santo Dios, se han perdido aquellas nobles corbatas de pañuelo, aquellas reconfortadoras corbatas enteras, de color granate o azul que tanto sosiego daban a nuestras conciencias? ¿Dónde están? ¿Qué se han hecho ellas? ¿En que ignotos abismos se han hundido? ¿Qué tristes pozos del olvido se las han tragado? El cronista, lo confiesa sin

José de la Vega.

por el burdo pincel de un pintor de parroquia. El vocabulario que se emplea, la deficiencia de cono-

cimientos que se demuestra, las razones que se alegan, la endeblez de los raciocinios, la inferioridad intelectual que

a cada paso se exhibe, dejan en nuestro ánimo una impresión desoladora. Es Beocia legislando.

ESPIRAL DEL PROGRESO

LAS CORBATAS Según aseguran los sociólogos –y nosotros nos permitimos pensar que sus motivos tendrán para asegurarlo-, las guerras, las epidemias, el hambre, las catástrofes y similares, suelen implicar un descenso de la moral en las conciencias, un desequilibrio en los vasos comunicantes del alma. Los sociólogos vienen con esto a respaldar un poco la tesis de que la moral es un lujo, supuesto contra el que lleva veinte siglos de denodada lucha el cristianismo. Lo evidente –sin meternos en demasiadas honduras, ni en camisas de once varas, ni en berenjenal alguno – es que las guerras, cuando van seguidas de la derrota, hunden aún más los espíritus en la sima del egoísmo, una de las determinantes – con el sexo y el estómago de los médicos vieneses – de las actitudes del ser humano ante los demás; no del hierático ser humano que asiste, más o menos imposible, al entretenido espectáculo del mundo, sino del histriónico ser humano que actúa, con mayor o menor honestidad, sobre las tablas del gran “ballet” de la vida a la cruda luz de sus violentas candilejas. La última guerra mundial – la guerra que todos los hombres blancos habíamos perdido ya en el día que se disparó el primer fusil – ha traído, entre otros signos de podredumbre, la derrota de la corbata. Nunca, desde que se anudó al cuello del hombre para que los otros hombres supieran que quien pasaba era un caballero, ha sufrido la corbata como institución, un embate más serio que en estos últimos tiempos. La corbata, como muestra de atildado señorío, ha desaparecido, y las gargantas aparecen hoy desnudas, o lo que es peor, anudadas por un trozo de seda detonante, brillador, hiriente, que cualquier cosa, menos señorío puede indicar. Decía el dandy inglés que la corbata ha de ser algo tan entonado, tan en su sitio, tan discreto y tan noble que nadie, vuelto ya de espaldas el hombre que la lleva, pueda describirla, pueda recordarla precisamente. Los tiempos del dandy inglés eran los tiempos en que el dinero, sobre poco más o menos, coincidía con la nobleza y con el buen gusto de la cuna. Entonces el comercio, a más de ser un ruin entretenimiento, no era todavía un fábrica de hacer billetes de banco con multicopista y los cuellos encorbatados, aquellos que sintieron la

Están empleados por los que participan en la discusión con tal incertidumbre y de manera tan imprecisa, que de lejos denotan la improvisación, el empleo de nociones de emergencia y soplillo, adquiridas por la mañana en los manuales baratos con que la propaganda izquierdista y judía del mundo entero inunda las librerías de segundo orden. Da pena ver aquella indigencia mental, aquel alegato atropellado, sin grandeza, sin elocuencia, sin ninguna profundidad; aquel ergotismo empecinado sobre vocablos cuyas significación se desconoce y que muestra la incapacidad de llegar a fondo de ningún problema. Ya en las últimas entregas de la revista colombiana José Tomás Escallón ha mostrado hasta que grave punto ignoran la gramática los autores del proyecto que se discute. Y estos son tenidos por los más capaces entre los miembros de la junta. Oír cualquiera de tales sesiones muestra que estudiantes de segunda enseñanza de cualquiera clase de ética, o alumnos de cursos elementales de filosofía del derecho o sociología, poseen ideas más sólidas, conocen mejor los sistemas en que se reparte el pensamiento de los entendidos, se expresan con más propiedad y raciocinan con más sujeción a las eternas leyes de la lógica, de lo que lo hacen los corifeos del senado liberal. Quienes profesamos una admiración reflexiva y documentada a la obra magistral de los constituyentes de 1886, al verla estropear por gentes tan intensas, sentimos impresión semejante a la de quien viera retocar la Madona de San Sixto

rubor, no tiene más que una corbata, una corbata para todo, como las criadas baratas, una corbata que somete a los más crudos hielos de la Navidad, a los más jolgoriosos chubascos del Carnaval, a los más atroces calores del estío. El cronista, un día que su corbata empezó a cosechar las patas de gallo de su vejez y a desflecarse por la parte del nudo, se echó a la calle, un poco entristecido, esta es la verdad, en pos de otra corbata para sustituirla. Guardaba por su vieja corbata mucho más respeto que aquel betanciero por su vieja mujer, que a los cincuenta años corrió el riesgo de que su hombre la llevase a la feria de la ciudad a cambiarla por dos mozas de veinticinco. Pero su respeto y su cariño no llegaron a cegarlo hasta el extremo de negarle la evidencia de la vetustez de su corbata. Visitó amigos que le aconsejaran, frecuentó elegantes centros de reunión para inspirarse y recorrió todas las camiserías de que tuvo noticia. Todo fue inútil. Madrid estaba sin corbatas. Entre docenas de miles de corbatas, ni una sola corbata era capaz de sustituir a la corbata vieja. El cronista, con el rabo entre las piernas, regresó a su casa mustio y carioconecido y se metió dos días en la cama: el tiempo que tardaron en el tinte, el instituto de belleza de su corbata, en regenerarla, en alisarla, en devolverle un poco su prestancia, su lozanía y casi, casi su misma apariencia de juventud. CAMILO JOSÉ CELA, PARA EL SIGLO

QUIEN lo ignora? Los lentos viajes a caballo o en coche facilitaban el conocimiento mutuo entre los pueblos. De punto de partida a punto de destino multiplicábanse las posadas. No siempre caían estas en metrópolis; se entraba con los altos con los mismos incidentes del camino, en la intimidad de las gentes. El viajero las veía entonces al natural, sin el apresto de la ocasión extraordinaria, sin las comedias inevitables cuando media el interés turístico pasivo, la propaganda de cualquier orden que sea. Nuestros abuelos ya les oyeron decir a los suyos que en las diligencias es donde se hacían las amistades. Esto, entre las personas privadas. En la diplomacia – que es una especie de diligencia aplicada a las relaciones internacionales- se hacían también las amistades entre los pueblos. A favor de la lentitud se desvelaban y se satisfacían en todo las curiosidades recíprocas. Si en el tiempo comprendido entre la publicación de la primera parte del “Quijote” y la de la segunda aparecieron tantas madrugadoras ediciones extranjeras, se debió tal fortuna, además de al mérito del autor, en parte a la oportunidad del libro, en parte a su coincidencia con las estimulantes lentitudes de la diplomacia y de la diligencia. Vino la invención del ferrocarril, vino su enorme generalización. Los viajes se fueron adaptando a un nuevo estilo. Su valor, ahora cifróse en la maravilla de la rapidez. Un día, medio día, unas horas de capital a capital. La vuelta al mundo en ochenta días. Naturalmente, toda la atención, toda la posibilidad de experiencia se coloca por modo exclusivo en los cabos. Lo intermedio se queda para la observación en una categoría confusa y amorfa, la categoría de lo que se llama el “paisaje”: el paisaje que se divisa, fugitivo, desde la ventanilla del tren … ParísConstantinopla. París-LyonMediterráneo: si lo de Lyon es un cambio tan solo, ni siquiera una “parada –y-fonda”, y no da tiempo ni para advertir, yendo a misa, las particularidades de la liturgia lionesa ni para apreciar, sentándose a la mesa sin prisas, la “poulardedemi-deuil” y las “quenelles” de “la Mére Filloux”, tanto peor. Ya se aprenderán estos detalles en los libros.

Lo importante es llegar y llegar pronto: aunque luego, al llegar, el viajero se encuentre en la situación del cliente del gitano del cuento, que “no sabía lo que iba a hacer en Alcalá a estas horas”. ¿Qué iba a hacer? Volverse. En lo psicológico, en lo íntimo, todos los viajes por ferrocarril eran viajes de ida y vuelta. El movilizado regresaba con sus mismas deficiencias de información, con sus prejuicios de nacimiento. No había conocido más que las metrópolis, los grandes centros estandarizados, los grandes hoteles donde el servicio es igual, las incidencias uniformadas según un patrón; los hospedajes, que se llaman “Saboy”, lo mismo en Amsterdam que en Sevilla, o “Palace”, en Buenos Aires como en El Cairo. Un “Palace” un “Saboy”, y lo demás, paisaje. Sobre las costumbres, sobre el alma de las naciones, sobre sus mismos aspectos físicos, ignorancia efectiva. El tiempo de auge del nacionalismo. Si unos años bastaron para que el “Ingenioso Hidalgo” fuera universalmente conocido, medio siglo de esfuerzo se hizo necesario para que la pintura impresionista pudiera transporte de París a Munich. El progreso que en el Ochocientos había traído los viajes en ferrocarril, han traído en el Novecientos los viajes en automóvil … ¡Ah, esto ya era otra cosa! La consigna de la celeridad continuaba vigente: el trayecto, sin embargo, se desmenuzaba en recorridos, en altos e improvisaciones, a tenor de las circunstancias. La brevedad, por otra parte, podía obtenerse con atajos, sin obligación de servir a las razones colectivas que un día decidieron el trazo de la línea férrea. Así, el conductor del automóvil, los ocupantes del auto pueden entrar en contacto directo con los habitantes del país que atraviesan. Hallan con ellos, requieren a cada instante sus servicios, los ven vivir, trabajar, bailar, sentarse a la mesa. Si, a precio de alguna ligera desviación, el viajero mismo logra sentarse a alguna de ellas, famosa por la excelencia de los guisos o el privilegio de las especialidades típicas, tortillas del Mont-Saint-Michel, queso de Ementhal, mostaza de Dijon, mostachones de Utrera, ¿por qué rehusarse a este placer?. Infinitos albergues de carretera, gloria y prez de días antiguos, que se habían cerrado o estaban a

Eugenio D´Ors.

punto de cerrarse, al empezar nuestro siglo, cuando todo el mundo viajaba en ferrocarril, resucitaron y conocieron nuevos días de esplendor con el florecimiento del automóvil. El común de las gentes aprendió con ello mucha geografía. Entraron inclusive en ella, así como en la afición y respeto por las diferentes maneras de ser de otras naciones, algunas, como Francia e Inglaterra, tradicionalmente reacias en este capítulo. Las ventajas morales traídas por esto no es dable calcularlas. Las personalidades intelectuales que ahora van a reunirse en Ginebra para dilucidar las relaciones entre el progreso técnico y el progreso oral, encontrarían en el examen del cambio de costumbres traído por las comunicaciones de carretera serias motivaciones de optimismo para concluir en sentido optimista, acerca de la correspondencia entre ambas formas del progreso. Cuidado. Un progreso técnico permitía esta afirmación. Otro progreso técnico, al siguiente día viene a hacerla imposible. Como el automóvil había sustituido al tren, el avión substituye al automóvil. Y ocurre que el avión resucita, agravándoles hasta el infinito, los inconvenientes que, respecto del conocimiento recíproco de los pueblos, había traído la comunicación ferroviaria. Ya un viaje vuelve a significar un paréntesis de vacío entre dos puntos de interés. Ya lo intermedio no es ni siquiera, visto desde tanta altura, un paisaje. Ya ni tan solo el punto de destino representa una posibilidad de reposo. Se toma el avión con

el desayuno; se regresa por la misma vía para el té de la tarde. Entre vuelo y vuelo se ha tenido la entrevista eficaz, se ha consultado el documento indispensable, se ha asistido al Consejo de Administración, se ha firmado el convenio. Se ha decidido el curso de una vida, la suerte de un Estado. Todo esto con un mínimo de observación directa de las cosas, de reflexión, de simpatía o patetismo humanos. Ni ha habido por qué acostarse en una cama alemana a la noche siguiente de haberlo hecho en otra a la francesa; ni de cambiar la cocina al aceite por una cocina al graso, la cocina al graso por otra a la mantequilla; ni para cambiar de abrigo en obsequio a la diferencia de latitudes, ni para hacerse la boca a los acentos esdrújulos si la condición nativa se ha avezado a las graves. La geografía puede ser olvidada impunemente; la existencia misma de otros hombres diferentes a los que habitualmente se tropiezan, puede ser ignorada, según la actitud que los ingleses logran subrayar, con tanta perfección. El avión, con toda su aparente vocación de cosmopolitismo, llevaría al nacionalismo otra vez si no se le buscan compensaciones por otro lado …Y así, lo cierto es que la ventaja moral que una de las manifestaciones del progreso técnico permitió ganar, con otro progreso técnico puede perderse. Si, es verdad; la estructura histórica del progreso reproduce la estructura geométrica de la espiral. EUGENIO D’ORS, de la ACADEMIA ESPAÑOLA, ESPECIAL PARA EL SIGLO.


PAGINA CUARTA

“ EL SIGLO ”

El Talante

Hace algún tiempo, en una librería de viejo encontré un libro sobre la emperatriz María Teresa que tenía este lema: “Biografía del último conservador”. Naturalmente que lo adquirí no sólo por mi admiración hacia esa gran reina a la que tan adecuadamente cuadra esa designación política, como por el adjetivo “último”, que me pareció pretencioso o desesperanzado. Rápidamente advertí que cuanto murió María Teresa, aún no se usaba en el mundo el término “conservador” para designar partidos políticos, pues realmente éste fue invención del decimonónico. Resultaba así que el libro de marras daba por terminado y concluido lo que, por lo menos en el origen de los vocablos aún no había empezado a ser. En ésta como en otras expresiones genéricas que a diario usamos para señalar hechos y cosas de la política hay no poca confusión. ¿Dónde empieza y dónde acaba eso de ser conservador? Si se reduce a un determinado partido como tal, es fácil concretar su nacimiento, su evolución y acaso su muerte. Y no son pocos los que tienen esta proclividad, anotando fastos y nefastos y llevando una estricta cronología como si se tratara de la trayectoria de una persona jurídica. Este método que pone el énfasis en la delimitación del sujeto estudiado, facilita la investigación y permite concretar causas y resultados. Pero en el análisis de la evolución de las ideas no siempre resulta idóneo porque el pensamiento es polivalente, caprichoso, no siempre lógico y por lo tanto no cabe dentro del itinerario de una comunidad formal considerada como sujeto de la acción política. Así me explico muy bien que este ciclo de conferencias no empiece tomando como primer tema el día tal de determinado mes del año 1848 en que pudo haberse establecido el Partido Conservador (1) como organismo político en Colombia, sino que arranca de más lejos, pues en la fecha mencionada ya lo que legítimamente se puede entender como conservatismo colombiano había tenido héroes y mártires, había tenido triunfos y derrotas, acaso los más decisivos para su formación y que no quedarían comprendidos en la cronología de su existencia como organización jurídica. Por el lado contrario, tomando el término conservador en su sentido más amplio, bien se puede cobijar con él situaciones y seres de muy distinto tiempo y lugar, pues estaríamos nada menos que ante una de las constantes del temperamento humano. Y en ese sentido los conservadores

hablamos de nuestro padre Aristóteles, algunos creen que Catón fue conservador; otros pensamos que Justiniano es exponente significativo de nuestro modo de concebir el Estado; no faltan quienes encuentren ascendencia de la idea conservadora en Santo Tomás naturalmente, en Dante y Federico de Hohenstaufen (por aquello de que en todo buen conservador hay siempre un gibelino recóndito), en Fernando de Aragón y nuestro rey Felipe II; en Hobbes y Suárez y Herder y los románticos alemanes, pasando claro está por los indiscutibles: Mariana, Bossuet, Burke, De Maistre, De Bonald y Hegel. Un vasto, un variado repertorio de ideas y de sistemas, que no siempre coinciden, que tomados aisladamente pueden contraponerse, que, sin embargo tienen una misma tendencia, a veces una misma orientación, más frecuentemente una cadencia común, un estilo, un talante. Eso es: un talante. Este concepto hace falta para designar ese universalismo de lo conservador. El talante es un estado de ánimo, una disposición espontánea, preracional; es una situación anterior a la actitud, una voluntad inadvertida de captar, de comprender o de rechazar. Tiene por lo tanto una importancia decisiva en la aptitud gnoseológica. Las cosas son, en política, como nuestro talante nos las permite apreciar. La continuidad de un talante se desarrolla en una “articulación jerarquizada de los estados de ánimo” (2), lo cual ciertamente se parece mucho a la concepción del mundo del tipo dilteyano (3). Sí. Los conservadores tenemos, gozamos, de una concepción del mundo. Partiendo de ella llegamos a conclusiones convergentes o no. Quizás eso no tiene verdadera importancia. Lo que para nosotros vale es que las vivencias las tenemos iguales, las experimentamos de la misma manera, con el mismo talante. Al leer una biografía de cualquiera de las personas significativas antes nombradas, esa de María Teresa, por ejemplo, se forma entre el personaje y el lector conservador un ámbito de comprensión, una comunidad de anhelos y acaso de sentimientos que no es otra cosa que la comunicación de los talantes. Esos talantes que suponemos que son uno mismo. Son vivencias que se provocan necesariamente, inquietudes que suscitan, experiencias que se trasuntan. Al descubrir y aceptar que hay una universalidad del talante se amplía necesariamente el ámbito de la investigación política. Se puede pensar, por ejemplo, que el talante conservador ha hecho la mitad de la historia universal. La otra mitad los demás, si es que

Viernes 1 de febrero de 2013

Alvaro Gómez.

en frente acaso no haya sino otro talante que sea precisamente el contrario. De todas maneras, es teniendo como fondo el gran telón de una concepción del mundo como vale la pena de ser miembro del partido. Uno se afilia a su partido en la convicción de que es el órgano apropiado para realizar una concepción del mundo. En el caso nuestro, de esa concepción del mundo que el talante conservador nos ha revelado. Siempre quisimos que el conservatismo colombiano fuera un partido con concepción del mundo (lo que los alemanes llaman un Weltanschauungpartei), a diferencia de los partidos norteamericanos, que son reflejo o expresión no comprometida de opiniones populares. Tener una concepción del mundo y obrar en función de ella da un sentido de profundidad que es un delicioso estímulo para la inteligencia. No sé si en esta época estas cosas ya no se entiendan bien. Me leí un ensayista original que sostiene que en este tiempo hemos destruido la tercera dimensión: que las cosas son largas y anchas pero no profundas. Que en cambio han surgido otras, las famosas dimensiones desconocidas, no propiamente las de la física nuclear, sino las sociológicas como la de la eficacia oportunista o ese sincretismo kennediano de saber triunfar, que tiende a justificarse sólo por el triunfo. Y que se puede crear una entelequia con las dimensiones, 1, 2, 4, 6, 7 ó 10, prescindiendo de la tercera, de la dimensión profundidad. El conservatismo colombiano, unas veces, ha sido más concepción del mundo que partido y, otras, más partido que concepción del mundo. En ocasiones no ha sido sino un mero talante. Tal ocurrió, por ejemplo, a la muerte del Libertador. Nada quedó como organización, sino unos amigos en fuga del Padre de

la Patria; y como ideas, casi ninguna, porque la mitología liberal se había adueñado del firmamento. Pero quedó el talante. El cual, sin nombre y sin cuadros, triunfó en el año de 1837, luego en el 40, hasta que una nueva adversidad lo convirtió en partido. Hoy puede estar ocurriendo lo mismo. Destruidos los cuadros, sin jerarquías, se perdió toda la iniciativa; y no hablemos de que se tenga una concepción del mundo. Las ideas actuales son pobres, paupérrimas, y no hay voluntad de imponerlas, de desarrollarlas. Nos queda sí, el talante: él nos marca el ámbito de comprensión que tendremos que convertir en campo de acción. Pero no debemos caer en estas tentaciones. Aquí hemos venido como “historiadores”, para contribuir, modestamente, a un estudio sobre el conservatismo, realizado por gentes que profesan o no esa doctrina, que tienen o no ese talante. Me parece que ahí está el mérito. Lo que hasta aquí llevamos dicho es apenas un prólogo justificativo de la amplitud que se ha querido dar al tema. La independencia suele ser tenida como el principio de las ideas políticas en Colombia. Diríase que todo nació un veinte de julio. Y como no era aceptable que hubiese habido en materia de ideas una generación espontánea, nuestros rutinarios historiadores, sin audacia y definitivamente sin imaginación –¿es que acaso los historiadores no deben tenerla?– han intentado remontarse más atrás de 1810 como si penetraran en el terreno de la prehistoria, con vacilaciones y temblores y, lo que es peor, con una consigna única: buscar precursores a las ideas que, se supone, provocaron el motín del florero. Así no han llegado muy lejos: que si la traducción de los Derechos del Hombre, que si el Memorial de Agravios, que si los Comuneros... Poquísima cosa para tan vasto tema.

COMO SE EVAPORAN UNAS ELECCIONES l l

La visión dantesca de Haití Duvalierismo sin Duvalier

Desde la caída del Nene Doc, la posible consolidación de un régimen democrático, en que pensaron muchos comentaristas extranjeros, se vio comprometida en el interior del país. Las fuerzas armadas no regresaron a sus cuarteles ni se han sustraído de la toma de decisiones. Los partidos políticos, si así pudieran llamarse, oportunistas y demagógicos, gravitan en torno a la anarquía, sin capacidad de competir libremente por el poder. Cuando se quiere derrotarlos se eliminan brutalmente sus jefes o sus candidatos. A la luz de la civilización política. Haití es y ha sido la negación absoluta de las libertades públicas. Como un islote de barbarie, está al margen de cualquier confrontación electoral seria. Lo ocurrido con los comicios de estos días constituye apenas la radiografía de su régimen, tradicionalmente ensangrentado. El soplo milagroso de unas elecciones duró bien poco. Y con la frustración del certamen se dio un paso decisivo para aplastar, casi en su origen, el relámpago de democracia en que algunos confiaban. Sin embargo, los ciudadanos mártires de este desventurado país, casi siempre azotado por la violencia y gobernado despóticamente, que nunca han gozado integralmente de garantías para el ejercicio de sus derechos, no se atrevían a pensar que cuanto con la imaginación veían matanzas sangrientas, ciudades saqueadas, urnas robadas, papeletas quemadas y carreteras blo-

queadas por barricadas sería en breve una atroz certeza. Cerca de treinta años duró la dictadura hereditaria de los Duvalier que se proyecta ahora nuevamente como duvalierismo, irónica y cruel contestación al júbilo que siguió a su caída y a las esperanzas múltiples de que la nación siguiera por una ruta democrática. Bien el contrario, el caos, la violencia, el hambre, la represión y la falta de soluciones continúan siendo las características de la vida en Haití. Y al mirar hoy los acontecimientos de la cruenta semana se puede afirmar que los propósitos de desarrollo y de civilización no sólo se detuvieron sino que la nación retrocedió a peligrosos niveles de salvajismo. El ingreso a la democracia no se puede improvisar. Ha de ser el fruto de una actitud positiva hacia el progreso que permita la educación de un pueblo, considerado éste en su totalidad, es decir en lo correspondiente a sus gobernantes, a sus trabajadores, a sus fuerzas armadas, a quienes orientan e impulsan la instrucción pública y a quienes defienden la cantera de sus principios morales. Con los Duvalier, Haití constituía una satrapía hereditaria. Con la junta militar, la represión para aplacar una población hambrienta, desnutrida y analfabeta, en su mayoría, se convirtió en la orden del día. Las víctimas de la violencia política son innumerables. La crueldad sin límites ejercida aun contra dos candidatos presidenciales, asesinados en infames acciones, ha servido

para delatar el pan diario de la violencia. Pero el país tiene una procelosa historia que no siempre se desarrolló en mal sentido. Antes de su independencia, en 1804, constituía una de las más ricas colonias del mundo y los franceses desarrollaron allí un productivo centro agrícola con mano de obra de esclavos africanos. La descolonización que vino posteriormente sólo sirvió para poner a los esclavos bajo el control de gobernantes arbitrarios y aprovechadores y de pequeños grupos militares desorganizados y sin escrúpulo. Violencias pendencieras que se resolvían continuamente en homicidios aleves, voces broncas, negocios sucios y el continuo centellear de las armas, desterraron el turismo. Hoy, como ocurre en otros países subdesarrollados, y aun más que en ellos, nadie sabe hacia donde se dirige la nación haitiana. Lo que parece deducirse de los últimos acontecimientos, especialmente de lo ocurrido en la noche de San Bartolomé, que transcurrió del sábado al domingo, cuando grupos incendiarios formados por los tonton macoutes, considerados como responsables de sinnumero de asesinatos, fueron culpables de la destrucción y el hostigamiento contra las elecciones. La junta de gobierno y el jefe militar del país Henri Namphy, no desean que las elecciones se verifiquen. Y para complementar la confusión, no ha faltado quien abogue por una invasión multinacional encabezada por tropas norteamericanas.



PAGINA SEXTA

LA GRANDEZA DE NUESTRA PRENSA l l

Lo bueno hay que ejercerlo No podemos pasarnos a la ordinariez

Las libertades son siempre un medio contra la decadencia. Cuando los valores han dejado de reinar, porque de pronto alguien abusó de las libertades, éstas, paradójicamente, se convierten en el instrumento de rescate. Obran como motor regenerador. Porque de nuevo civilizan. Porque permiten que los hombres vuelvan a distinguir entre lo bueno y lo malo. Y la libertad de prensa es el gran activo con que contamos para que ese rescate se realice sobre las bases de la inteligencia. Es la herramienta firme, sólida, capaz de ejercer sobre las situaciones decadentes, la estupenda misión de aclarar. La grandeza de la prensa en Colombia ha sido la de preservar los esquemas de la decencia. Así nos reconocen en otras latitudes. Estamos caracterizados por la bondad del trabajo que desarrollamos ante la opinión pública. Ello nos enorgullece. Es un privilegio al que no se accede fácilmente. Pero la evolución de nuestra estructura periodística, escenificada por los nuevos valores que ha impuesto la publicidad, podría llegar a sorprendernos. Podría arrebatarnos la ambición de seguir siendo un poder espiritual. Se ha caído en la ordinariez. Ocurre, sobre todo, en la radio y la televisión, donde los conceptos han empezado a refundirse. Para cautivar a la opinión, se recurre al instinto bajo, al lenguaje aplebeyado. Hay una exhibición diaria. Es un modelo que, equivocadamente, tiende a implantarse como si fuese el desiderátum de la prensa contemporánea. De repente parecería que a la opinión hay que darle lo que pide, sin medir los efectos negativos que conllevan tal actitud facilista. Ahí hay un peligro. Que nadie quiere contemplar o que, contemplado, no causa mayor asombro. Estamos trabajando sobre el supuesto de la ignorancia. Y esto es de una enorme gravedad para el espíritu del periodismo.

Porque es el camino para no cumplir con una obligación social. Para abandonarnos, irresponsablemente, al conformismo. Para no retorcer más la conciencia colectiva, sino para engrosar las utilidades de las empresas periodísticas. Hemos dejado a un lado la dignidad humana. No se trata, sin embargo, de un fenómeno excluyente. Así lo creemos. Ambas cosas pueden convivir, comprenderse mutuamente. La audacia está en la armonía que seamos capaces de imprimirle. Se puede hacer el mejor periodismo sin perder la cordura. Sin desmejorar su intensidad, su bondad, su vehemencia. Pero, para ello, hay que ejercerlo bajo el convencimiento de que nos empleamos a fondo, sin concesiones, en una majestuosa tarea de redención moral. Bogotá fue, por estos días, escenario de dos eventos libertarios. La Asociación de Diarios Colombianos – Andiarios – cumplió un cuarto de siglo. Sus esfuerzos a través de estos años, son plausibles. Ha dinamizado la prensa escrita y la ha reconciliado con el carácter de empresa privada. Al tiempo, se reunieron en esta ciudad prestigiosos representantes del periodismo iberoamericano, en el seno de la Federación Iberoamericana de Asociaciones de Prensa – Fiap -, para discutir con altura intelectual sobre tópicos que conciernen al ejercicio de la libertad de prensa. Las lúcidas exposiciones de los conferencistas fueron una hermosa oportunidad para reflexionar en torno a este noble oficio. Celebramos el éxito de estos dos testimonios de libertad. Ellos no han puesto a pensar otra vez en lo que somos y en lo que queremos. En nuestra vocación periodística. En la grandeza que ella traduce para el régimen de libertades consagrado en Colombia. La fe puesta en sus tradiciones es lo que hoy la hace sentir como recurso final de la verdad.

“ EL SIGLO ”

Viernes 1 de febrero de 2013

que acababan de pasar… Y esto que eran las trece del día dieciocho de febrero. Bajo la presidencia del s. Caicedo Castilla se abre la sesión a las cuatro y treinta de la tarde.

el proyecto de ley por la cual se aprueba el nuevo Código Penal. En uso de la palabra el R Castro González, dijo que el proyecto no debía aprobarse en bloque, sino que debían aceptarse las modificaciones que introdujera la cámara porque los hombres del gobierno no podían acertar en todo.

EL DIA PARLAMENTARIO

SENADO A las once y treinta se dio comienzo a la sesión matinal. Presidencia del senador Burbano. Se leen los negocios de la Presidencia y se aprueba el acta. Luego se presenta el informe que estudió la Comisión sobre el monumento a los generales Uribe Uribe y Herrera, el cual proyecto fue aprobado en segundo debate.

Artículos Nuevos En seguida fueron aprobados los artículos 14 a 30 del proyecto de “Sucesiones y Donaciones”.

afirma que el sistema es de integridad de la terna, según la interpretación que dio el Consejo de Estado a una consulta del ministro Turbay. Por último, el s. Vargas manifiesta que la formula es inaceptable y por lo tanto debe modificarse la redacción del artículo para evitar problemas posteriores. Cano contra LLeras

Debate Constitucional En tercer debate fue aprobado el primer acto reformatorio de la Constitución Nacional.

Rafael Uribe Uribe.

Técnicos Electorales Acto continuo se dio lectura al informe de la Comisión que estudió el proyecto de reforma electoral y el que fue devuelto con informe favorable. Establece el proyecto en mención que el gran Consejo Electoral tendrá ocho miembros elegidos cuatro por el senado y cuatro por la cámara y los de los departamentos tendrán cinco elegidos por aquél, igual número los de los municipios elegidos por el concejo departamental y se aprobó en segundo debate con una modificación que dice que por un período de dos años a partir del primero de octubre del corriente año. Cuando se discutía el segundo numeral, el Presidente dice; ¿aprueba el senado el segundo inciso? El senador Hernández Rodríguez en voz baja: - El presidente confunde el inciso con las coordenadas; se dice es numeral. La sesión fue solitaria; veintiséis senadores dejaron descansar la curul que ya no recibía el peso del voluminoso expediente de la sabiduría de su dueño; parecía como si el Gobierno se hubiera compadecido del pueblo decretando la clausura. Sólo cinco policías escuchaban en las barras a los senadores de Greiff, Morillo, Galvis Galvis y Navarro, que en torno a la mesa de la secretaria combinaban fórmulas electorales; todo parecía que estuvieran haciendo un escrutinio liberal. Los senadores tomaban sus sombreros y salían precipitadamente. Dejemos a los técnicos electorales, que ellos sí saben, decía el senador Odilio Vargas. Todos bostezaban secretamente y el presidente, luego de un suspiro lastimero, exclamó: Se levanta la sesión y pase el proyecto a la revisión del senador Galvis Galvis; todos se fugaron felices porque diz que habían salvado al partido liberal con la reforma electoral

Segundo acto legislativo La discusión sobre el proyecto presentado continúa y se entra a discutir el artículo nuevo de los senadores Cano y Hernández Rodríguez sobre nombramiento del Procurador en el sentido de que lo haga directamente el señor presidente de la república. Interviene Arrieta El s. Arrieta sostiene que el nombramiento debe hacerlo directamente la cámara de representantes, independizándose de toda influencia del gobierno. En seguida se refiere a un memorial del doctor Jorge Ramírez Gaviria y declara que en las discusiones sobre el proyecto en discusión cuando él se refirió al doctor Clodomiro Ramírez no fue para hacerle un ataque al hombre, que le parece respetable y digno de todo elogio, sino que criticó un sistema que había sido establecido en los días en que el doctor Ramírez había sido Procurador general de la nación. La fórmula presentada por los senadores Cano y Hernández Rodríguez fue negada, lo mismo que el artículo 114 del proyecto presentado por la comisión. La fórmula aprobada Los senadores Combariza, Gómez Naranjo y Rubiano presentan la siguiente fórmula: “Artículo nuevo – El Procurador de la Nación y el Fiscal del consejo de Estado serán nombrados por el presidente de la República, escogidos de ternas que presentará la cámara de representantes, y durarán dos años en el ejercicio de sus cargos. El presidente de la república podrá remover a tales funcionarios en receso de la cámara, por justas causas que determinará la ley”. Habla Héctor José Vargas El s. Vargas empieza por criticar el sistema de elección por la cámara ya que esta corporación está dominada por clanes políticas que viciarían la elección; que un asunto de semejante trascendencia no podía someterse al capricho sectario de las mayorías políticas. El ministro de hacienda

Carlos Lleras Restrepo.

El s. Luis Cano se muestra enemigo de la nueva formula porque lo único que hace es complicar la situación, enmarañar un problema claro que no merece que se le ponga tanto bizantinismo. Demuestra sus deseos de que el Procurador lo nombre directamente el presidente. Por último, termina demostrando sy desagrado porque el ministro de gobierno no asista a los debates constitucionales como es su obligación, y como debe hacerlo un ministro que tenga noción de su responsabilidad. Habla Echandía Asegura el señor ministro de Educación que la fórmula del gobierno fue estudiada consultando las funciones a que está llamado el ministerio publico y a las tareas fiscalizadoras de la cámara de representantes. La cámara tiene en verdad participación en las funciones del ministerio público, es con el gobierno la cabeza de ese ministerio y por lo tanto han creído darle cierta acción en el nombramiento del Procurador. Termina diciendo que la formula del gobierno, la que nombra el Procurador la cámara por terna escogida por el presidente, aunque no es la más democrática, sí es la más técnica y la que mejor consulta las aspiraciones de la hora renovadora que vive la república.

Darío Echandía.

Hernández Rodríguez El s. Hernández Rodríguez sostiene que el ministerio público debe funcionar bajo la inmediata dirección del gobierno. Combate la fórmula del ministro LLeras y que defiende Echandía, porque es una fórmula de transacción de criterios que no puede concebirse técnica ni jurídicamente ni en la Filosofía del Derecho. Esa forma del Ministerio Público –en dos cabezas- compuesta por el presidente y la Cámara elimina la responsabilidad que debe haber en la fiscalización, y además, origina conflictos en la práctica. Anota por último la contradicción que existe entre algunos senadores porque se propugne por un régimen presidencial si ellos los legisladores pertenecen al partido de gobierno y legislan para un ejecutivo integrado por hombres de su mismo partido que han venido aquí exclusivamente a robustecer al partido de gobierno. Así, no tiene explicación la insistencia para arrebatar al presidente la facultad de remover al Procurador general de la nación. Presenta una fórmula que no la acepta la presidencia porque resuelve que es la misma negada anteriormente. La fórmula aprobada Puesta en discusión la fórmula Combariza – Gómez Rubiano fue aprobada en votación nominal por una pequeña mayoría.

Habla Cárdenas El s. Cárdenas se opone a que los Fiscales de los Tribunales y Juzgados Superiores sean nombrados directamente por el Procurador y presenta la siguiente modificación, que es aprobada y adoptada: “Artículo nuevo. – El Procurador general de la Nación, nombrará los Fiscales de los Tribunales de Distrito Judicial de ternas formadas por el gobernador del respectivo departamento. Asimismo nombrará los fiscales de los Juzgados superiores de ternas formadas por el respectivo Tribunal Superior. En seguida se aprueba el artículo 5 del proyecto, modificado por la comisión en la siguiente forma: “Para ser Fiscal de Tribunal Superior se requieren las mismas condiciones que para ser magistrado de Tribunal; y para ser Fiscal de Juzgado Superior, las mismas calidades que para ser Juez de Circuito”. Interviene Echandía El señor ministro Echandía no considera adecuado el artículo 113 porque por una parte la técnica constitucional se opone a que en la Carta Fundamental se consignen cuestiones de reglamentación y se pongan hasta los personeros , y por otra parte, cree que no deban atribuirse las funciones del ministerio público a los personeros agobiados de trabajo, sino que se creen funcionarios especiales, fiscales municipales, que ejerzan esas funciones. De nuevo Galvis Galvis

Alejandro Galvis Galvis.

El s. Galvis habla sobre la necesidad de considerar ya el artículo 1, y luego explica la manera como han de formarse las ternas para la elección de Procurador. Este procedimiento corresponde reglamentarlo a la ley porque no es de índole constitucional. Se aprueba la proposición y el s. Galvis modifica el articulo 1, así: “Artículo 1º.- Son atribuciones de la Cámara de Representantes : 1ª 2ª 3ª 4ª 5ª Dar al Presidente de la República terna para elegir Procurador de la Nación y Fiscal del Consejo de Estado. La votación se hace por partes. Se aprueban los tres primeros artículos; el cuarto se niega y el quinto se aprueba con la modificación del s. Galvis. A las nueve de la noche se terminó la sesión. CAMARA La sesión de la Cámara se abrió a las cuatro y media de la tarde, con asistencia de cincuenta y dos representantes. Se aprobó en tercer debate un proyecto por el cual se asocia la república a la celebración del centenario de la fundación de la ciudad de Mompós, y otro por el cual se ordena la construcción de un hotel nacional en Barrancabermeja. Se le dio primer debate a un proyecto de ley por la cual se cede al municipio de Florencia el área de su población urbana y se dicta una disposición en el ramo electoral. En seguida se leyó una comunicación del senado, donde informa que ha designado a los senadores Quintana y Badel para que sostengan antela cámara el proyecto de honores al general Cesáreo Pulido, con las modificaciones que el senado estimaba convenientes y que la cámara se había negado a aceptar. Se aprobó una proposición señalando el día para escuchar a los comisionados del senado. El Código Penal Continuó en el orden del día

Peñaranda Arenas El representante Peñaranda Arenas habló en el sentido de aprobar el proyecto en bloque, y abogó porque fuera aprobada la proposición del informe de mayoría, para darle segundo debate con esas modificaciones, que considera fueron estudiadas cuidadosamente. Romero Aguirre Se refirió el orador a la deficiencia del proyecto en el título que trata de las cuestiones de delito sexuales que habían quedado en forma retardataria, por motivo de una transacción con alguno de los miembros de la comisión, según informaciones que había recibido. Dijo que el código era susceptible deliberas modificaciones. Negada la proposición de Cruz La proposición del R. Cruz, que estaba en discusión desde las sesión anterior, y por la cual el proyecto se discutiría artículo por artículo fue negada, y en consecuencia se puso en discusión con la proposición que termina el informe de la mayoría, que fue aprobada. Seguido se abrió la discusión sobre el pliego de modificaciones, que comenzó por una sobre el artículo 143. Habla el R. Córdoba Empezó diciendo que el proyecto de nuevo Código penal revelaba estudio, pero que creía había muchas modificaciones por hacerle. Hizo algunas críticas al artículo relativo a homicidios involuntarios. Dijo que en la última parte del artículo se observaban inconsecuencias con el criterio de defensa social, que parece fue el que inspiró el proyecto. También hizo reparos al artículo 18 del proyecto. Al referente a los salarios de los penados, le anotó inconveniencias, por no permitir como debiera, un mayor engrosamiento de la caja de multas. Sobre el capítulo que comprende al adulterio, fue de opinión que debía suprimirse, porque no guardaba relación con las penas y las formalidades entre las establecidas para la mujer y las establecidas para el hombre. Dice que votará la eutanasia, porque es una medida necesaria y moderna, pero que debe discutirse a espacio y con calma. Agregó también que no votaba algunas disposiciones relativas al aborto, al abandono de niños y al infanticidio. Modificaciones Fueron aprobadas algunas modificaciones en lo referente al castigo de delitos contra las autoridades. El representante Amador y Cortés dejó constancia de su voto negativo para la disposición que establece penas a los que se dicen en armas contra el gobierno. Escupir un crucifijo no es sacrilegio. Una reforma teológica Al ponerse en discusión lo relativo a penas sobre el sacrilegio, el R. Cruz combatió este artículo. Dijo el R. Cruz, entre otras cosas, que el hecho de que un individuo escupiera, por ejemplo, un crucifijo, no podía entenderse como sacrilegio en cuanto lo hiciera en la calle, pues ello no sería sino un daño causado a una cosa. Que el sacrilegio se cometía únicamente en la iglesia y que ello estaba resuelto a comprobarlo con autores modernos. La modificación sobre el sacrilegio fue aprobada El R. Cruz presentó una proposición por la cual se niega el artículo 325 que dispone se impongan penas más fuertes para quien cometa delitos contra el culto católico, que para quien los cometa contra cualquier otra religión. Dijo que todos los cultos merecían igual respeto y pide que no haya castigos para las ofensas del culto en público.


Viernes 1 de febrero de 2013

“ EL SIGLO ”

PAGINA SEPTIMA

Manifiesto de Alvaro Gómez

EL ENEMIGO DE COLOMBIA ES EL REGIMEN Seis meses antes de su muerte, (el 27 de abril de 1995) Álvaro Gómez dictó una conferencia en el Centro de Estudios Colombianos en la que sentó las bases de su lucha contra el Régimen, tesis que desarrolló en los editoriales que publicó en este diario hasta horas antes de que los violentos segaran su vida y que se constituyó en su Manifiesto para la posteridad. Hay una ausencia de liderato político que se advierte a diario. La gente lo señala en las reuniones, en la prensa, en las esquinas de las calles. Es uno de esos casos en que el vacío, que por su esencia tiende a ser imperceptible, se hace notas. Es un vacío que pesa, que suena, que duele. La política se ensució hace ya dos décadas, cuando cayó bajo el dominio del clientelismo y se sometió a la preponderancia del dinero. Desde entonces se quedó sucia. Es la forma de dominio que ha tenido el Régimen imperante para poder doblegar la opinión pública y aprovecharse de las oportunidades de mando y de los gajes del poder. El Régimen necesita que la política sea sucia porque es la manera de conseguir la amplia gama de complicidades que se necesitan para mantener su predominio. Como la política tiene un mal aspecto, la gente de bien prefiere no enterarse de ella. Forma parte del establecimiento y es el vehículo contaminante de todo lo que a éste pertenece: el Congreso, los partidos, la prensa, los grupos económicos, los sindicatos, la policía y la enseñanza. Todo tiene algo de política, porque ésta ya no es un manejo de los conceptos sobre el Estado, sobre la libertad y sobre el orden, sino un enmarañado sistema de compromisos adquiridos. Se explica, entonces, que no haya opiniones políticas, puesto que todo se reduce al tráfico de las componendas. No es fácil preconizar la forma en que la política deba limpiarse. En el estado de descomposición existente ninguna propuesta parece tener credibilidad. Y por eso, las opiniones y las tesis que antes conformaban el oficio de la política han desaparecido. Factor de la decadencia ha sido la creencia de que no vale la pena opinar. Dada la omnipotencia del Régimen, también parece ridículo protestar. Y nos hemos resignado a un silencio cómplice. Si hubiera coraje para exponer estas tesis, y si ellas encontraran la manera de difundirse a la opinión pública, todo cambiaría y estaríamos ante una nueva oportunidad de salvación. El Régimen Debemos repetir que el responsable de la decadencia y de la corrupción del país es el Régimen, sistema de compromisos y de complicidades que está dominando la totalidad de la vida civil. Nuevamente decimos que el Régimen está integrado por diversos factores que operan en conjunto, en virtud de una red de compromisos de impunidad en torno al aprovechamiento de los gajes del oficio. El Régimen es más fuerte y más duradero que cada uno de sus componentes. Tiene una omnipotencia ilimitada, que proviene de su irresponsabilidad. Como no tiene jefe, ni personería, no se le puede pedir cuentas. Ejerce sobre la sociedad un dominio oscuro, denso, amorfo. A ese Régimen que se ha instaurado en Colombia, imitando al que existe en México desde hace 66 años con el nombre del PRI, pertenecen, con distintos grados de afiliación, El Congreso, los partidos políticos, la prensa oficialista, algunos grandes bloques económicos y sectores minoritarios de los sindicatos, de la Iglesia y de los gremios. Y, claro está, el Gobierno. El Gobierno es el agente más activo de este conglomerado de solidaridades ilegítimas. Al mismo tiempo actúa como un prisionero. Carece de independencia; no puede tener iniciativa. También, como en

México, nada se obtiene cambiando el gobierno, porque lo que sigue imperturbable es el Régimen. La anarquía imperante en Colombia nos ha hecho pensar en que es indispensable tumbar el Régimen, que, también aquí, ha corrompido la política. Y hace mucha falta que alguien convoque a una regeneración. El sistema existente se está cayendo sobre sí mismo, sin alternativas. Nos tocará sobrevivir entre los escombros de la anarquía. Lo Conservador El problema actual de nuestra democracia es que el balance de los elementos que constituyen el equilibrio de la política está desquiciado. Los valores conservadores no tienen presencia en los escenarios donde se decide el manejo del país. No están gravitando en la administración, ni en el Congreso ni en la prensa. Este influjo natural de lo tradicionalista, que debe existir en toda sociedad organizada, ha desaparecido en Colombia Hay sí, un amplio sentimiento conservador, que es característico del pueblo colombiano; gracias a lo cual el país no se ha desintegrado. Pero la angustiosa situación de decadencia por la que atravesamos se debe a que las posiciones conservadoras están siendo diariamente derrotadas, porque no han conseguido quienes la propongan y defiendan en el campo de la política. Contrasta que, existiendo tan notorio conservatismo ambiental no haya un partido conservador. Ahí está la raíz del desequilibrio que produce tantos estragos. La gravitación de lo conservador le está haciendo falta a la opinión pública. Este vacío adquiere paulatinamente la categoría de una catástrofe. Lo conservador le hace falta a la Iglesia, que está hoy sometida a la corrosión del laicismo, que ha neutralizado la influencia religiosa en la organización institucional del Estado. Las enseñanzas del Papa actual, que tienen un creciente y justificado sentido político, no encuentran apoyo político, no encuentran el apoyo conservador que les permita proyectarse sobre la sociedad. Lo conservador le hace falta al Ejército, porque el liberalismo “izquierdista” le arrebató toda iniciativa y lo convirtió en una víctima pasiva de los ataques impunes del bandolerismo. Al orden público le hace falta lo conservador para que se pueda recuperar la soberanía sobre el territorio nacional y relegar ese Alto Comisionado para la Paz, que ejerce la degradante función inconstitucional de dialogar con los delincuentes, cada vez que éstos cometen un crimen. Porque eso es esencialmente anti-conservador, por ser contrario al orden jurídico. Lo conservador le hace falta a las relaciones internacionales para no seguir en devaneos con el Castrismo, ni aceptando posiciones de sumisión ante los Estados Unidos. Lo conservador le hace falta a la industria y a la agricultura, para que no sean sometidas a los caprichos de la imagen presidencial, como ocurrió en la pasada administración con la apertura económica indiscriminada, hecha con propósitos simplemente publicitarios. Lo conservador le hace falta a la planeación, que el liberalismo no ha dejado implantar como lo manda la Constitución, porque no quiere perder la disponibilidad caprichosa del presupuesto. Lo conservador le hace falta al manejo del gasto público para que no siga ocurriendo lo de ahora, cuyo desenfreno obliga a calcular nuevos déficits fiscales y a prever la amenaza de nuevos impuestos. Dentro del Régimen actual, lo conservador no tiene ni puede tener vocería. Nadie realmente lo está representando. Se encuentran actitudes conservadoras aisladas, singulares y muy meritorias. Pero por fortuna, sin representatividad. No parece que lo conservador sea compatible con la decadencia actual de los valores que conforman la actividad política.

de lucha contra la droga patrocinados por las Naciones Unidas. Y lo ha hecho con toda decisión y a gran costo. El mayor que haya pagado ninguna nación, en vidas humanas, en perjuicios económicos, en quebrantamiento institucional. Estos sacrificios son tanto más valiosos cuanto no existe el convencimiento de que ese sea un buen camino, de que son débiles los fundamentos éticos que respaldan nuestra acción represiva y de que los Estados Unidos han resultado unos malos socios. Hay que replantear la política antidroga, porque no sólo no está teniendo buen éxito, sino que las estadísticas oficiales suministradas por la Convención de Viena están demostrando que se halla al borde del fracaso: aumenta el consumo mundial, especialmente en los Estados Unidos; aumenta el valor global del formidable negocio del narcotráfico; se ha establecido que la persecución de la droga se debe hacer preferentemente en su etapa final (es decir en los Estados Unidos) y no en las siembras y en el comercio inicial de agricultores y “mulas”. Se ha establecido también que el mayor número de drogadictos norteamericanos provienen de las drogas sintéticas que ellos mismos producen y no del consumo de la coca o de la amapola. Todo ello se desprende de los últimos documentos emanados del Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas (E/CN.7/1995/3).

Nos deben la paz El Régimen le debe a los colombianos la paz. Está en mora de hacer algo por recuperarla. Es lo que manda la Constitución. La represión de los alzados en armas es una obligación política exigida por el consenso nacional que estableció el régimen democrático: es una obligación jurídica, base del Estado de Derecho; es una obligación moral, porque corresponde a las autoridades defender a los asociados, entre los cuales está, nada menos, que le derecho a la vida. En una sociedad ordenada hay que buscar el responsable de ese incumplimiento de los deberes primordiales del Estado. En los países democráticos, y aún en los que no lo son, el que debe responder por el orden público es el Gobierno. También aquí debería serlo. Hace cerca de doce años que nuestras autoridades han abandonado su misión, unas veces por cobardía, otras por afán populista. Se ha permitido que los delincuentes se apoderen de por lo menos el 80% del territorio nacional, que es allí donde hoy no se puede garantizarle la seguridad a los colombianos. En éste, desde el punto de vista del ordenamiento social, el período más desastroso de nuestra historia. Estamos avergonzados del tiempo en que nos ha tocado vivir y el desprestigio afrentoso que estamos padeciendo. Hemos tenido, de tiempo atrás, un gran reclamo por hacer a nuestras autoridades. Ellas le deben al país nada menos que el cumplimiento de su función primordial. “La paz es un derecho y un deber de obligatorio cumplimiento”. Eso dice la Constitución. Y eso es lo que el Régimen no cumple. Cada emboscada, cada asalto a un poblado, cada secuestro, es un hecho que se le debe cargar a cuenta de quienes nos gobiernan. Y eso es materia grave. Porque la Constitución dice también que “el derecho a la vida es inviolable”.- Y esto es lo que los bandoleros no cumplen. El responsable oficial de esta violación de las normas jurídicas es el Gobierno. Es el mando militar que ha desprestigiado al Ejército, que ha demostrado una impotencia ocasionada por la política gubernamental de transar la ley, de pactar con los subversivos. Y ese mando militar incompetente incluye al Presidente de la República quien, a su vez, es un prisionero del Régimen que usufructúa las inconsistencias

del derecho y obtiene ganancia indebida de la negociabilidad de la ley. El Régimen no quiere extirpar la subversión. La necesita como un recurso para obtener facultades de mando, para conseguir financiaciones extraordinarias. A este Régimen le va mejor distribuyendo caprichosamente recursos para rehabilitar las zonas devastadas del país. Los del Régimen no aceptan que, por la obligación constitucional que tiene el Estado de preservar la vida y honra de los ciudadanos se pueda limitar o disminuir la participación que ellos tienen en los gajes del Estado y en los dineros públicos. Debe adoptarse una política de paz que hoy no la hay. Las autoridades y las fuerzas armadas han claudicado frente al negocio de las guerrillas, que siguen secuestrando y cobrando “vacunas” y que le dictan al Gobierno las condiciones que debe mantener para que ellos sigan usufructuando la impunidad. Los últimos episodios y el tono altisonante asumido por los capos bandoleros, también le han hecho perder la dignidad a las autoridades. Y esa dignidad no sólo pertenece al Gobierno, sino a todos los colombianos, que tienen, por lo mismo, derecho a reclamar. Es indispensable evitar que, después de cada emboscada, los representantes del Gobierno se precipiten a declarar que nada ha pasado y que están dispuestos a seguir tratando a los criminales como delincuentes políticos. Es surgente dejar sin funciones al Alto Comisionado de Paz, cuya actuación tiene un significado desmoralizador para las Fuerzas Armadas y para la ciudadanía. Los colombianos tienen

derecho a pedirle al Régimen que permita a su presidiario –el Gobierno- buscar seriamente la paz. Con el empleo de las Fuerzas Armadas, como es lo tradicional, y con los procedimientos de diálogo que permitan preguntarle a la guerrilla qué es lo que quiere y en qué condiciones estaría dispuesta a dejar las armas. Y cuando contestara, habría temario para un diálogo breve y público en que se fijaran las respectivas posiciones: la de los subversivos y de la autoridad legítima. Y, entonces, se debería convocar un plebiscito para que la opinión decidiera sobre ellas. Entonces habríamos llegado, por uno u otro camino, a la recuperación de la paz. El negocio de la droga En nuestro país son múltiples y dispares los juicios que diariamente se emiten sobre la política antidrogas. Pero frente a la pretensión norteamericana de exhibir al país como un combatiente débil en ese campo, el rechazo es unánime. Los Estados Unidos son cómplices de los narcotraficantes al empeñarse en prolongar la prohibición de la droga, que es la base del negocio de ambos. Es sabido que la mayor parte de los rendimientos del tráfico de estupefacientes se queda en los Estados Unidos y forma parte del sistema bancario de ese país. Si la droga se legalizara en el mundo y su precio bajara, si, por lo tanto, dejara de ser uno de los negocios más prósperos de nuestro tiempo, sufrirían, claro, todos los que comercian con droga, cuya mayoría está seguramente en el territorio de los Estados Unidos. Colombia adhirió a los compromisos internacionales

El rescate de la dignidad Si esto es así, si Colombia está vapuleada por la DEA por causa de una política de represión mal planteada, que las últimas estadísticas demuestran que es obsoleta, el país necesita que el Gobierno haga un reclamo de trascendencia internacional, y que busque con estruendo un escenario donde existe la suficiente serenidad para valorar lo que está ocurriendo. La opinión nacional le exige al Gobierno que asuma una actitud que rescate la dignidad nacional, tan maltratada por la actitud defensiva que fue preciso asumir ante el ataque de los Estados Unidos. No disponemos de tiempo para seguir exponiendo las insondables fallas de la actual operación administrativa de Colombia: la turbulencia fiscal, tratada por otros expositores de este recinto, la quiebra del sistema de transporte, la perturbación de los servicios de educación y de salud, la agonía de la agricultura… Se requieren grandes objetivos Para que vuelva a haber política se requieren grandes objetivos. Será preciso ponerse de acuerdo sobre cuatro o cinco propósitos fundamentales que muevan la opinión. La enumeración de estos puntos, apenas se está empezando a hacer: la represión del bandolerismo, la restauración de la seguridad, la desnarcotización de las relaciones con los Estados Unidos, la disminución valerosa de la cuantía del gasto público y una limpieza general de los sistemas del compromiso en la burocracia. El desfallecimiento nacional frente a la decadencia de

los valores tradicionales es una quiebra de la dignidad. La falta de iniciativas restauradoras, la resignación, esa tolerancia pasiva de la adversidad están siendo producidas por la convicción de que no hay nada que hacer, de que todos los esfuerzos son inútiles y de que hemos sido condenados a la esterilidad. Se registra que el Gobierno no puede, que el Congreso no cumple, que los jueces no culminan y los investigadores no ofrecen remedir el desmedro moral. Y cada impotencia se acepta como el cumplimiento de un hado. Yo me atrevo a señalar que todo ello se debe a que no sabemos cuál es el enemigo. Algún notable político francés decía: “Busque el enemigo. Si lo encuentra, ¡ahí está la política!. El enemigo de Colombia es el Régimen. No vale la pena acusar al Presidente, o disolver el Congreso o zarandear a los jueces. Todo eso hay que hacerlo, pero dentro de un propósito nacional de terminar con el Régimen, para que las energías tradicionales de la política queden libres. Disponemos de un par de años sin elecciones para convocar a la opinión. A los liberales y conservadores, a los sin partido, a todas las minorías. A aquellos colombianos que puedan adoptar como propósito colectivo un acuerdo sobre lo fundamental; porque son desinteresados, porque tiene coraje, porque no son sobornables… Y porque creen tener un compromiso con el futuro. Este tiempo de convocación es histórico. El destino está por ahí, al alcance de la mano. Y nos vamos a dedicar a patrocinar a quienes tomen la iniciativa. Tenemos que recuperar la solidaridad como base de la política, para exterminar la complicidad. Proclamados los propósitos nacionales, vamos a ser solidarios con los que los propongan, con quienes los propugnen. Solidarios gratuitamente sin exigir sobornos. Es necesario pasar de la enunciación abstracta a una política purificadora, a la ejemplarización delo que ya se está alcanzando. Debemos verificar si es cierto que ya Barranquilla y todo el Atlántico se liberó del control del clientelismo, si algo similar está ocurriendo en Cartagena o en Montería, si hay síntomas de restauración moral en Caldas; si perdura la formidable y grata sorpresa de que la maquinaria de la corrupción y de ineficacia administrativa de la capital de la República, ha dejado de ser el territorio de las depredaciones del Régimen. Probablemente ya hemos empezado el gran proceso de recuperación de la soberanía y de la dignidad nacional. Si es así , estaríamos en mora de producir esa solidaridad que proponemos. Hay que descubrir dónde está el Régimen, cuáles son sus manifestaciones más ofensivas. Y señalarlo para ludibrio, para que la gente se motive, para producir una santa indignación. Cuando empecemos esa tarea nos daremos cuenta de que sí estamos haciendo algo, de que sí se puede, de que, nuevamente en Colombia, se puede hacer política.


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“ EL SIGLO ”

Viernes 1 de febrero de 2013

El trasfondo de la política

LA CRISIS DEL PARLAMENTO

Históricamente, y en muchas ocasiones, el Congreso de la República perdió credibilidad. Sin embargo, en la actualidad, el desprestigio es tal que crecen las voces en el país, que piden revocarlo. Los colombianos vivimos la más grave crisis política de los últimos tiempos, agravada por la presencia de dineros calientes en las elecciones presidenciales, lo que deslegitima el Gobierno de Ernesto Samper Pizano. El desarrollo del escándalo que sacude a la democracia colombiana es seguido por los medios de comunicación internacionales. Como la Carta del 91 deja en manos de la Cámara el estudio de las denuncias contra el Presidente de la República, y la Comisión de Acusación, según distinguidos juristas, prevaricó, la actual acusación del señor fiscal Alfonso Valdivieso por el gran acervo probatorio contra el mandatario pone a prueba la credibilidad del Parlamento, más cuando varios miembros del partido de gobierno son investigados por recibir dineros calientes para sus campañas o para la segunda vuelta que consagró a Samper.

Orígenes del Parlamento La convocatoria de los Estados Generales por Luis XVI degeneró en los episodios sangrientos de la Revolución Francesa que repercutieron en el mundo. En la Nueva Granada la evolución política es a la inversa: los congresos son posteriores a la revolución de Independencia. En realidad, nuestra primera Constitución, la de Cundinamarca, es de corte monárquico. Y los cabildos al estilo español son de la misma estirpe, con pocas excepciones. En Cúcuta el Parlamente da muestras de tender a actuar como partido, por lo menos al intentar desconceptuar a Don Antonio Nariño ante el Libertador, que lo había nombrado Vicepresidente de la Gran Colombia. Las contrariedades de Nariño con el Parlamento se hacen francamente intolerables, cuando se aprovechan los Parlamentarios del proyecto de constitución del precursor para acusarlo de actuar contra el pensamiento centralista de Bolívar. Un incidente de faldas y el desafío a duelo de un oficial son empleados nuevamente para desprestigiar a Nariño. El Prócer renuncia a la Vicepresidencia y enfermo y desgreñado emprende camino a Bogotá. En Bogotá se encuentra con el régimen de Santander; desde diarios oficiales se busca desprestigiar al más ilustre Precursor de la Independencia. Elegido al Congreso, los adictos de Santander desatan una campaña infame contra el traductor de Los Derechos del Hombre. Al vencer quebrantos de salud, aparece en el Parlamento; Don Antonio Nariño y su defensa es una verdadera sinfonía a la libertad y la dignidad de la lucha política. Sus acusadores quedan señalados por la historia y condenados a la vergüenza pública. Será la última aparición del gran hombre público, que fallece al poco tiempo en Villa de Leyva. Al fina de su vida, Santander se empequeñece en el Parlamento vencido varias veces por Don José Ignacio de Márquez, antiguo amigo, del que se distanció por problemas de amor y que le arrebató el poder al conquistar la mayoría de congresistas. Más el discurso del general Borrero, las derrotas de Márquez, amargaron los últimos días de Santander, o las dos cosas se juntaron. En otros tiempos, Santander había intentado arrebatarle la gloria a Bolívar, cuando por medio del Congreso le quitaron el mando de las tropas colombianas que avanzaban intrépidas para libertad del Perú. Pocas veces las jornadas parlamentarias tuvieron tantas sorpresas como las de 1848. La mayor de todas las sorpresas la dio Don Julio Arboleda, linajudo aristócrata tradicionalista, que la emprendió contra los jesuitas, no por anticlericalismo como piensan

Estadistas y oradores del siglo XIX

Simón Bolívar. ciertos historiadores, sino por su idea del estado que invocaba el regalismo y el patronato de corte hispánico. Dicen que su elocuencia opacó por momentos la de José María Rojas Garrido, que, al decir de Don Juan Carlos Holguin, superaba a los oradores y parlamentarios de Francia, España e Inglaterra. Otro debate memorable sería el que enfrentó a dos poderosas inteligencias: Florentino González y Rafael Núñez, por la entrega del dictado librecambista y manchesteriano del primero, y el progresivo desarrollo y el proteccionismo industrial del “estadista de Cartagena”. Para no pocos intelectuales ese debate está vigente. Lo normal en nuestras lides parlamentarias del siglo pasado, fue cierta perversión decadente, y con discusiones interminables sobre el sexo de los ángeles. En determinadas votaciones la turbas intervenían con el puñal abusivo, forzando la decisión. Don Mariano Ospina Rodríguez así lo consignó en una ingrata jornada, voto para que no asesinen al Congreso. Para viajeros desprevenidos el Parlamento Colombiano tenía más de circo que de Asamblea “sabios”. La guerra civil sería, infortunadamente es más de una ocasión, la continuación del debate parlamentario. En tiempos de radicalismo la debilidad del ejecutivo y el mal gobierno coinciden con la apoteosis de la demagogia parlamentaria. Colombia por poco se desintegra y el cuadro de ruina y anarquía se hizo insostenible. El Parlamento Moderno A partir de Rafael Núñez, había vívido en Inglaterra y admiraba sus instituciones, con la regeneración procura devolver al Parlamento su misión y responsabilidad. La selección de los mejores se da en cierta medida, en cuanto lo permite la modestia de nuestra clase dirigente. La reducción de las secciones parlamentarias a 190

Antonio Nariño.

Julio Arboleda.

Mariano Ospina Rodríguez.

José M. Rojas Garrido.

Rafael Núñez.

división liberal, hasta lograr la reconquista del poder. Se da el lujo de crear con Alberto Lleras Camargo el Frente Nacional. Sin embargo, la institución del Frente Nacional, que tanto contribuye a la paz, tiende a restarle funciones fiscalizadoras al Parlamento, en cuanto por la responsabilidad compartida, como decía Alvaro Gómez, los partidos estaban impedidos de meter goles.

Alvaro Gómez en el Parlamento Las etapas juveniles de Alvaro Gómez en el Parlamento, en tiempo del doctor Mariano Ospina Pérez, como le ocurre a los demás políticos del a época, están ligadas al desencuentro de los partidos que culminó con el cierre del Congreso. La segunda fase de la vida parlamentaria de Alvaro Gómez, sin duda alguna, es una de las más brillantes del Senado en Colombia cuando el gobierno planteó para grangearse las simpatías de los Estados Unidos y de Kennedy la Reforma Agraria en 1961 la voz del jefe conservador se elevó para proponer otras alternativas al campo y señalar las fallas del proyecto oficial. En estos días, dijo Alvaro: “Hay motivos de dignidad que nos impiden aceptar su proyecto agrario y eso no destruye nuestra adhesión al Frente Nacional, no determina siquiera los futuros actos políticos como congresistas frente al gobierno, vamos a ensayar una postura nueva en Colombia, lógica y racional, que consiste en no estar en el Gobierno por cuestiones de decoro”. Alvaro podía haber callado y resignado su política y su conciencia, para congraciarse con la equivocación oficial del Frente Nacional. Al contrario denunció la corrupción que vendría con el Incora y el escándalo de Fadul Peñalosa y Vives: la historia le dio la razón. Alvaro, el año pasado, era partidario del cierre del Congreso por su decadencia y complicidad a pesar del esfuerzo brillante de unos pocos parlamentarios. Hoy el Congreso puede reivindicarse, siguiendo el ejemplo del ilustre conductor en 1961; sería el camino para recobrar la dignidad, de lo contrario, no queda sino la revocatoria. Eventualidad que no descarta Enrique Gómez y que planteó una Editorial de El Espectador. Luciano Alcázar

Alvaro Gómez Hurtado. días, apenas cada dos años, con un ejecutivo de 6 años, contribuyen en gran medida a la normalización y el desarrollo de la estabilidad democrática. Pese a los intentos revolucionarios de los enemigos del sistema que ensangrientan la república, se logra la mayor temporada seguida de paz. La gran voz del Parlamento El Parlamento Colombiano va adquiriendo altura y

responsabilidad, como en algunos países de Europa, se transforma en la antesala de los grandes prestigios políticos. Guillermo Valencia y Ñito Restrepo embelesan a con compatriotas con la disputa oratoria por la pena capital. Jorge Eliécer Gaitán se crece en la Tribuna Parlamentaria y muestra un costal de husos humanos de las bananeras. Pero la gran voz y la más impresionante carrera

parlamentaria, al estilo de Churchill en Inglaterra, se da en Laureano Gómez; Suárez y López muerden el polvo al caer de la Presidencia fulmina en agotador y dramático duelo oratorio a Román Gómez, el lentejo de Olaya Herrera. Influye para elegir un sucesor de López que ofrezca garantías al conservatismo: Alberto Lleras Camargo impulsa una candidatura conservadora neutral al tiempo que contribuye a la



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EL NUEVO SIGLO

l VIERNES 1 DE FEBRERO DE 2013 l www.elnuevosiglo.com.co

Síntesis historial de El Siglo a El Nuevo Siglo 1. MARCO DE CONJUNTO 1.1Referentes • EL NUEVO SIGLO, diario nacional impreso por Editorial La Unidad S.A., de Bogotá, representa una institución con más de 77 años de historia y prestigio. • Sus tesis esenciales se refieren a la defensa del sistema democrático; el orden, las instituciones y la ley de fundamento social; la exigencia de la ética en el servicio público; y la protección de la propiedad privada y la libertad de empresa. • Reconocido como uno de los periódicos emblemáticos de Colombia, mantiene su influencia, credibilidad y particular enfoque informativo, que enfatiza las fuentes políticas, el análisis y la opinión. • Se edita con autorización estatal ISSN 0122-2341, marcas y patentes debidamente inscritas, cerca de 26.000 ediciones publicadas (colección en la hemeroteca) y página digital www.elnuevosiglo.com.co. • Está afiliado a las Asociación de Diarios Colombianos (Andiarios) y la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP). • Ha obtenido varios premios de periodismo Simón Bolívar, Círculo de Periodistas de Bogotá (CPB) e internacionales. José de la Vega. • Es producido integralmente en la planta de la Calle 25D Bis No. 101B-04, cerca de la Avenida El Dorado, en el Centro Aéreo Internacional en la zona del aeropuerto distrital, con sus nóminas, maquinaria, equipos y archivos. • Se publica diariamente en tamaño tabloide, doble edición semi-color (nacional y capitalina de 32 a 48 páginas, respectivamente), dividido por secciones, con periódico dominical (60 páginas), magazines y otros productos alternativos. • Tiene una planta de más de 56 columnistas semanales y colaboradores permanentes, servicios internacionales y un amplio portafolio de anunciantes fijos. • Mantiene una competente nómina entre empleados directos e indirectos. • Goza de lecturabilidad de 40.000 lectores en el impreso y entradas en la edición electrónica por 232,500 semana. • Se organiza con una redacción y una administración por divisiones y departamentos, con agencias y sucursales en varias partes del país.

Laureano Gómez.

1.2 Génesis • El periódico encuentra antecedente primario en el diario LA UNIDAD, fundado y dirigido por el recién egresado ingeniero de la Universidad Nacional, Laureano Gómez Castro, en 1910, con el respaldo de los jesuitas en la misma época en que aparece El Tiempo. • Ambos diarios surgen bajo la coalición bipartidista de la Unión Republicana liderada por el presidente Carlos E. Restrepo (1910-14), en el curso de la Asamblea Constitucional citada al fin de la dictadura del general Rafael Reyes. • En 1915, a su vez, El Espectador comienza su sucursal bogotana para pronto clausurar la sede central de Medellín y establecerse definitivamente en la capital. • Fruto de las divisiones del Partido Conservador, entonces predominante en el país, el periódico LA UNIDAD (nombre simbólico de la editorial actual), adscrito al denominado sector “histórico” contra el “nacionalismo”, deja de publicarse La Rebeca. en 1917 a raíz de perder la publicidad oficial y privada, manejada o asociada al oficialismo • EL SIGLO protagoniza, como vocero consernacionalista en cabeza de Marco Fidel Suárez, vador desde 1936, debates de amplio espectro jefe de la colectividad y Canciller en el gobierno principalmente con El Tiempo, de propiedad de José Vicente Concha (1914-18). y dirigido por Eduardo Santos, y el Gobierno • Más tarde, sin periódico pero en los debates López al que ve deslizarse del liberalismo hacia como congresista en los que alega faltas éticas, una izquierda de tipo Frente Popular, similar a el joven Gómez tumba al veterano Suárez de la la de los republicanos en España. Presidencia de la República (1918- 21), período • En todo caso ambos diarios liberales fungen de que finaliza Jorge Holguín (1921-22). gobiernistas y el conservador de opositor recio, ásperamente escindidos, como en el caso anterior, a causa de la pugna ideológica suscitada en 1.3 Primera etapa la guerra civil española que tiene alto impacto • Ya de ex ministro de Obras Públicas del gobierno político en el país. de Pedro Nel Ospina (1922-26) y ex diplomático • En esta primera etapa, con su formato univerdel de Miguel Abadía Méndez (1926-30), con sal de ocho columnas, el periódico se conserva una planta de colaboradores similares a LA vinculado a la política por ser sus accionistas y UNIDAD y nuevos inversionistas Laureano colaboradores protagonistas desde sus editoriaGómez, en compañía de José de la Vega, funda les y columnas, que hacen las veces de tribuna El SIGLO el 1 de febrero de 1936, actuando de parlamentaria, entre ellos Gómez, De la Vega codirector y dejando a los efectos sus sociedades (quien muere prematuramente), los hermanos en La Revista Colombiana y la emisora radial Uribe Cualla y decenas más. Voz de Colombia. • En la Segunda Guerra Mundial, Estados Uni• La creación de EL SIGLO, en su primera etapa, dos pide a Colombia defender militarmente se da como necesidad política por la falta de el canal de Panamá. Por protestar EL SIGLO garantías electorales para los conservadores y la ruptura de la neutralidad proclamada por la violencia desatada desde 1930 a la llegada al el ahora presidente Eduardo Santos (1938-42), poder del Partido Liberal, a través de Enrique también elegido sin adversario conservador, el Olaya Herrera (1930-34), por en medio de las embajador de Estado Unidos se mueve para que candidaturas del poeta Guillermo Valencia y el las empresas de ese origen, fuente sustancial de general Alfredo Vásquez Cobo. su publicidad en vista de la carencia de pautas • La pretensión, a causa de la abstención electoral oficiales, retiren los anuncios. decretada por el Partido Conservador desde • Antes de ello, al inicio de la Administración San1933, es fundar un diario que sirva de defensa tos, Gómez hace un primer intento por levantar así como de canal político, intelectual, informala abstención hacia las siguientes elecciones partivo y cultural, con el auspicio y financiación del lamentarias, con grandes avisos en EL SIGLO, empresario antioqueño, Alejandro Ángel, quien pero en la primera manifestación en Gachetá, después decide establecerse en Estados Unidos y Cundinamarca, los militantes conservadores reparte sus aportes entre los demás accionistas. son baleados, con varios muertos y heridos, en • El diario se crea bajo esa dinámica, para llenar el lo que el mismo Gobierno sugiere son maniobras vacío parlamentario y político e igualmente en de las “turbas lopistas” para impedir el esquema oposición al eslogan de la “Republica Liberal” prede avenencia que pretende. gonado por el presidente Alfonso López Pumarejo • A pesar de las presiones, EL SIGLO se sostiene, (1934-38), sucesor de Olaya elegido sin rival. recompone las cargas publicitarias con algunas • En tales circunstancias, los periódicos derivan compañías norteamericanas que no hacen caso en órganos de combate y se deben a fidelidades al embajador y se opone duramente a la reelecpartidistas, característica esencial de todos ellos ción de López Pumarejo, lanzando por su parte durante buen tramo del siglo XX, con mayor al candidato liberal, Carlos Arango Vélez, quien profundización en las décadas que van de 1930 pierde en medio de punzantes debates en los a la iniciación del Frente Nacional, en 1958, inque se alega fraude. cluidos El Tiempo y El Espectador, arraigados • Reelegido López Pumarejo (1942-45), los artíen el Partido Liberal. culos, servicios informativos e investigaciones,

como las de “Mamatoco” y el “caso Handel”, sitúan al diario entre los más leídos, así como es el primero en publicar tirajes a color. • Para ilustrar el nivel de distancias políticas del momento, Gómez deja de recibir en la dirección EL SIGLO, pese a su visita y la recomendación de algunos amigos, al poeta Pablo Neruda por la cercanía con algunos liberales de izquierda y en particular por su afiliación al Partido Comunista Chileno. Luego Neruda publica los famosos “Versos Punitivos” contra él, donde lo acusa de lo peor dentro de la derecha universal, de lo que Gómez sonríe. Como en reiteradas ocasiones, el director del rotativo es acusado de todos los males habidos y por haber. • Posteriormente, entre múltiples escándalos gubernamentales que el periódico denuncia en sus columnas y comprometen a su familia, López Pumarejo dimite, nombrado el ministro Alberto Lleras Camargo (1945-46) para terminar el período. • Un año antes EL SIGLO sufre su primera censura estatal, diferente del veto publicitario privado ya descrito, cuando el Gobierno de López Pumarejo produce una resolución suspendiendo su impresión, luego de vincularlo a un fallido golpe de Estado del que es ajeno, al igual que el diario debe defenderse de otra denuncia gubernamental por calumnia e injuria, pero gana la reapertura en una demanda ante los altos tribunales que le dan la razón. • En esa ocasión un juez intenta arrestar a su director, pero por ser miembro de la Comisión de Relaciones Exteriores Gómez goza de inmunidad y sale una temporada a Quito mientras se producen las sentencias anteriores. • El conservatismo accede finalmente a las corporaciones y a la Presidencia de la República en cabeza de Mariano Ospina (1946-50), aspiración que por considerarla moderada lanza sorpresivamente Gómez en sus editoriales de EL SIGLO, a cambio de su nombre pues como jefe indiscutido del conservatismo se consideraba la carta segura en medio de la división entre las candidaturas liberales del líder popular Jorge Eliécer Gaitán y la oficialista de Gabriel Turbay. • Gómez, en tanto, se dedica al periódico, mientras se le encargan los preparativos para la Novena Conferencia Panamericana, la primera reunión del continente después de la Segunda Guerra con presencia de todos los países del área y el

secretario de Estado norteamericano, George Marshall, a fin de crear la Organización de Estados Americanos, OEA. • El 9 de abril de 1948, en el transcurso de la Conferencia y a raíz del asesinato de Gaitán, finalmente jefe del Partido Liberal en trance de segunda candidatura presidencial y quien venía denunciando la violencia regional, el periódico es incendiado y sus instalaciones con la maquinaria en el centro de Bogotá, zona de La Capuchina, son derruidas en retaliación a un crimen en el que nada tiene que ver, de hecho de autoría intelectual impune hasta hoy. • Las emisoras tomadas por miembros del exiguo Partido Comunista señalan truculentamente que en la Plaza de Bolívar cuelgan los cadáveres de Laureano Gómez (veinte días antes nombrado Canciller), el senador Juan Uribe Cualla, el ministro José Antonio Montalvo y otros de lo que llaman el círculo de EL SIGLO, lo que sirve de acicate y combustible para la posterior asonada y destrucción del diario en mitad de la revuelta generalizada. • Tras el cataclismo conocido como “El Bogotazo”, el periódico reaparece con menor paginación en una pequeña imprenta clandestina gracias a las actividades de su gerente Luis Enrique Uribe Cualla, también conocido como “Tertuliano” por el nombre de su leída columna semanal, y se reedifica paulatinamente de las cenizas a modo de búnker en el mismo lugar de La Capuchina, con la dirección consecutiva de Hernando Uribe Cualla, Alvaro Gómez Hurtado y Belisario Betancur, coordinador de la edición dominical. • La editorial compra rotativa nueva en el año en el que Gómez accede a la Presidencia de la República (1950-51) al retornar del exilio forzado del Nueve de Abril, ahora con la abstención liberal, la fundación de guerrillas campesinas por parte de ésta directiva y el Estado de Sitio vigente a raíz de la espiral de violencia regional catapultada luego de la conflagración. • Asimismo, Ospina, al salir de la Presidencia y decidido a apartarse de Gómez, funda el diario La República con el propósito de neutralizar EL SIGLO y ambientar su reelección y que con el paso del tiempo se vuelve de nicho económico. • Gómez, tras reasumir la presidencia después de un síncope cardíaco del que convalece por dos años en que lo reemplaza el Designado (Vicepresidente actual) Roberto Urdaneta Arbeláez


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(1951-53), es derrocado por el general Gustavo Rojas Pinilla (1953-57) quien se resiste a la baja del servicio decretada por aquel, orden dada por la evidencia de torturas militares, y se arroga el poder con el respaldo de Ospina en el marco de la acre división conservadora. • EL SIGLO es sellado y proscrito, con su ex director y principal accionista en el destierro y sus nóminas en receso, salvo por un sector que irremediablemente desempleado se agrupa más tarde en Diario Gráfico, gaceta exclusivamente de fotografías, mientras el otro conspira en el llamado “Batallón Suicida” que reparte clandestinamente los folletos que Gómez envía desde España contra la dictadura. • En tanto, todos los demás diarios se publican bajo censura previa, inclusive con otros nombres, sin no obstante romper la línea y dinámica que traen en las tareas comerciales en ventas publicitarias, distribución y circulación. • Armonizados y reconciliados los dos partidos políticos y refrendados en plebiscito los pactos del Frente Nacional ideados por Gómez y Lleras Camargo en Sitges y Benidorm, que derriban la dictadura y dan fin a la llamada guerra civil “no declarada”, EL SIGLO reanuda su operación plena tras la Junta Militar de transición (1957-58), luego de las afectaciones e intermitencias de sus negocios en las casi dos décadas y media desde su fundación. 1.4 Segunda etapa • Durante la segunda etapa, que copa los gobiernos alternativos y paritarios del Frente Nacional (1958-74) y los acuerdos constitucionales posteriores de gobiernos compartidos hasta 1986, EL SIGLO tiene diversas perspectivas en 25 años largos, en particular a partir de la muerte de Laureano Gómez, en 1965. • De un lado, se escinde en el periódico el sector de máquinas planas e impresión a terceros, salvo la rotativa, con lo cual los herederos Gómez Hurtado fundan la empresa autónoma Italgraf, y de otro lado ceden las acciones en cabeza de la familia Caicedo, de Cali, en 1967, que entra a dirigir el diario y años más tarde se retira para retomar sus actividades en el Valle del Cauca. • Previamente, EL SIGLO ha sido plataforma investigativa y caja de resonancia a los álgidos debates del senador Alvaro Gómez Hurtado, hijo mayor de Laureano, contra la Reforma Agraria y en particular de sus denuncias de las “Repúblicas Independientes”, en referencia a la unión entre los resquicios de las guerrillas liberales y los nuevos focos comunistas que dan inicio a las Farc bajo la consigna de la combinación de todas las forma de lucha sin control alguno del Estado. • A raíz de ello, el grupúsculo en ascenso es bombardeado en Marquetalia, de lo que se recompone hasta bordear hoy los 50 años de fundación, aún con 9.000 hombres en armas. Al lado de las Farc surgen otras guerrillas como el Epl y el Eln, matriculada y organizada sobre las simientes de la revolución cubana y sus dirigentes, en la actualidad casi supérstite de Fidel Castro. • Terminado el Frente Nacional, con los gobiernos por partidos alternados de Alberto Lleras Camargo, Guillermo León Valencia, Carlos Lleras Restrepo y Misael Pastrana Borrero, se funda otra guerrilla, la del M-19, que se escuda en el supuesto fraude del último sobre el candidato Rojas Pinilla, rehabilitado en sus derechos políticos tras ser procesado en el Senado. • Entonces se produce la primera campaña presidencial libre, que gana Alfonso López Michelsen, hijo de López Pumarejo, contra Gómez Hurtado y María Eugenia Rojas, hija de Rojas Pinilla, en 1974. • Gómez Hurtado, luego de nuevos accionistas, es nombrado director de EL SIGLO durante casi una década, bajo el lema de “la otra opinión”, en el ambiente de coalicionismo determinado en el Constitución de remanente frente-nacionalista y que obliga a compartir el gobierno con el segundo partido en votos, durante las administraciones de López Michelsen (1974-78) y Julio César Turbay Ayala (1978-82). • En paralelo a la dirección de EL SIGLO, Gómez Hurtado es jefe de una de las vertientes en que se divide el conservatismo, conocida como “alvarismo” y heredera de Laureano Gómez, frente a la otra sucesora de Mariano Ospina, llamada “pastranismo”, por ser el ex presidente Misael Pastrana su conductor, ambos con ministros y parlamentarios de la cauda que orientan. • Al la editorial ingresan accionistas adicionales, empresarios convencidos de la línea que Gómez Hurtado exalta en sus reconocidos y agudos editoriales. El diario retoma a su alta calidad periodística, es premiado varias veces por sus columnistas o revelaciones como las de los tesoros abandonados del galeón San José, y recurre a la defensa de los gobiernos en que está comprometido pero con independencia crítica y ánimo propositivo. • Gómez Hurtado es elegido Designado del presidente Belisario Betancur (1982-86) a la vez que es nombrado embajador en Estados Unidos, mientras lo sustituye en EL SIGLO el ex ministro Gabriel Melo Guevara. • A partir de aquella época los problemas de orden público ya no se deben exclusivamente a las guerrillas, sino a los narcotraficantes que, en auge y empoderados de liquidez, deciden declararle la guerra del Estado y así irrumpen con el asesinato del ministro de Justicia, Rodrigo Lara Bonilla, por lo que se reimplanta la extradición a Estados Unidos. • Gómez Hurtado regresa en 1985 y emprende su segunda campaña presidencial, que gana Virgilio Barco (1986-90) tras ser acusado por aquel de favorecer los intereses petroleros de su familia y quien de inmediato propone el nuevo esquema de gobierno-oposición. • Bajo estas circunstancias de antagonismo, Gómez es de nuevo nombrado director y EL SIGLO emprende arduas faenas periodísticas. Enrola a su secretario privado de campaña, columnista

Dibujo de Izquierdo, fachada de la primera sede de El Siglo.

Juan Pablo Uribe.

Juan Gabriel Uribe Vegalara.

aLBerTo Abello.

desde estudiante de derecho en la Universidad de los Andes y colaborador del diario en la área internacional y dominical, Juan Gabriel Uribe Vega-Lara (25 años), de Jefe de Redacción. • Uribe funda la Unidad de Investigación, que saca a la luz pública escándalos de la Administración Barco como los de la hacienda ministerial La Gloria, la pérdida de soberanía en el Golfo con Venezuela en la zona de Castilletes y la comisiones en la reparación de submarinos. • El diario cambia de instalaciones de La Capuchina a las amplias de la Avenida El Dorado, frente al monumento de Cristóbal Colón, luego de adquirir una rotativa Gazzette-Loire blanco y negro a la que se adecuan en talleres colombianos los tinteros a color, a cambio de la antigua Goss de 1950. • En 1988, en su condición de director de EL SIGLO, Alvaro Gómez (69 años) es secuestrado por el M-19. Uribe Vega-Lara juega papel básico en su liberación y es ascendido meses después a Editor General. • En ese marco, Uribe propone un viraje del periódico vistas, no sólo las nuevas tecnologías y tendencias, sino las modificaciones del escenario político de mayor apertura y diferenciación con las etapas previas. • Al aceptar Gómez la idea, Uribe diseña, dirige y aplica el proceso de cambio desde su nuevo cargo. • A poco Gómez vuelve a presentarse a la presidencia en una campaña relámpago, ésta vez a nombre del movimiento bipartidista de Salvación Nacional para retornar al periódico tras las elecciones que gana Cesar Gaviria (1990-94).

que cambia las perspectivas del país y en el que derogan la centenaria Constitución de 1886. • En medio del proceso hacia EL NUEVO SIGLO, que maneja el Editor, a la dirección del diario llega el ex ministro Rodrigo Marín Bernal, quien en el interregno del desarrollo constituyente reemplaza a Gómez por algo menos de un año. • Terminada la Asamblea, Marín opta por dedicarse a la campaña de Senado tras la revocatoria de la corporación anterior y de director, visto que Gómez será designado embajador en Francia, es nombrado Juan Pablo Uribe Uribe, padre de Uribe Vega-Lara, herederos filiales de los Uribe Cualla y quien deja sus otras tareas empresariales, retomando su antigua vocación periodística por sugerencia de aquel. • Posteriormente por oferta de Gómez Hurtado antes de viajar, la familia Uribe, a través de doña Elvira Vega-Lara de Uribe (recientemente fallecida), hace una primera inversión de capital del 18% en Editorial La Unidad, en una emisión de acciones que después incrementa paulatinamente ante la inhibición de los demás socios para aportar. • La idea es comenzar a aplicar criterios de empresa y sufragar débitos que venían de atrás, inclusive vendiendo a los efectos las instalaciones de la Avenida el Dorado a cambio de las que los Uribe adquieren a nombre propio al frente, en el Centro Aéreo Internacional. • De regreso al país, a finales de 1993, Alvaro Gómez vuelve a actuar en el periódico de asesor, editorialista, presidente del consejo editorial y tutor ideológico, al tiempo que hace lo propio en su noticiero de televisión 24 HORAS, donde el diario no tiene participación accionaria. • Durante el Gobierno Gaviria, la Unidad de Investigación de EL NUEVO SIGLO, dirigida por el Editor, descubre maniobras de la familia del Presidente en el otorgamiento de subsidios de vivienda que producen gran escándalo. • En 1994, estalla el denominado proceso 8.000, en el cual se comprueba la financiación narcotraficante de la campaña que lleva a Ernesto Samper Pizano (1994-98) a la presidencia contra Andrés Pastrana Arango. • La primera revelación pública de las grabaciones secretas que abren el vergonzosos y prolongado expediente se hace conjuntamente entre EL NUEVO SIGLO y 24 HORAS • Mientras Uribe Vega-Lara se dedica al área informativa destapando varias primicias al respecto, y alterna sus funciones de Editor con las de concejal de Bogotá, los editoriales de EL NUEVO SIGLO escritos por Alvaro Gómez y Juan Pablo Uribe son detonantes contra el gobierno. • Al arreciar el escándalo, y a causa de ello, Gómez Hurtado es vilmente asesinado (76 años) en noviembre de 1995, a la salida de dictar clase en la Universidad Sergio Arboleda bajo el manto de la impunidad hasta hoy.

• En las siguientes elecciones triunfa Andrés Pastrana (1998-2002), del que Uribe Vega-Lara pasa a ser Alto Consejero Presidencial, dejando su cargo de Editor en EL NUEVO SIGLO. Luego actúa de Senador y negociador de paz. • Al término del Gobierno Pastrana, Uribe rechaza volverse a presentar al Senado y regresa al periódico con dedicación exclusiva como codirector, en 2003, renovando y rediseñando el diario con la enseña del “primer diario de análisis y opinión” y una gerencia modificada. • Al año muere Juan Pablo y Uribe Vega-Lara se mantiene en la dirección durante los últimos nueve años, con un intervalo de seis meses en que actúa, en 2010, de jefe de debate de la candidata Noemí Sanín. • Durante el trayecto de los dos gobiernos de Alvaro Uribe Vélez (2002-10), EL NUEVO SIGLO acrecienta su ámbito dentro del análisis de la política. Uribe Vegalara promulga duras críticas en sus editoriales a la figura de la reelección presidencial inmediata que hacen del periódico un referente por dar esa batalla en principio en solitario. • En adelante, el diario ocupa principalmente el nicho político informativo en todas sus variantes institucionales, económicas, sociales e internacionales, con grande influencia en los estratos cinco y seis, incluso parte del cuatro, y sectores académicos, estatales y empresariales. • Al tiempo el diario ingresa en Internet, busca mecanismos de multimedia y está en vías de adecuar su infraestructura para las exigencias de los tiempos modernos. • EL NUEVO SIGLO sigue siendo vocero de un periodismo veraz, afincado en su legado, pero abierto a las diversas corrientes de pensamiento. • Hoy respalda, sin perder la autonomía y juicio constructivo, los criterios de estabilidad, desarrollo económico y unidad nacional del gobierno en curso, al mando del presidente Juan Manuel Santos (2010- ). • En el premio de periodismo Simón Bolívar 2007, entre los varios ganados por el diario en siete décadas y media, el jurado dice: “queremos destacar la historia de un colombiano que, atrapado en la vorágine capitalina de los medios de comunicación, ha luchado hasta posicionar un periódico como órgano de lectura obligatorio y como ejemplo de periodismo independiente, sin concesión alguna. Por su conocimiento, su convicción, su habilidad y su entrega, porque como periodista y como empresario su triunfo ha sido heroico, el jurado premia como periodista del año al director de EL NUEVO SIGLO”. • A partir del 3 de septiembre del 2012 Juan Gabriel Uribe Vegalara, se retira de la Dirección de El Nuevo Siglo e ingresa como ministro de Medio Ambiente del Presidente Juan Manuel Santos. Entre tanto, asume la Dirección de El Nuevo Siglo Alberto Abello.

1.5 Tercera etapa • EL SIGLO hace transición a EL NUEVO SIGLO, el 22 de agosto de 1990, veintidós años atrás, comenzando el periódico su tercera etapa con base en el plan acordado por el Editor con anuencia de Gómez Hurtado. • Conserva su razón, lineamientos y objeto social a través de Editorial La Unidad, primer diario de tamaño universal en Colombia en transformarse en tabloide, lo que entonces parecía una irreverencia para diarios serios, pero más tarde copiándose por varios de los medios escritos tradicionales del país. • EL NUEVO SIGLO se adecua a las nuevas técnicas informáticas y se concentra en el análisis como fundamento del periodismo impreso. Ya no sólo se cubren fuentes, sino procesos noticiosos, es decir, texto, contexto y contraste, y el método gradualmente se vuelve tradicional en los demás periódicos. • A comienzos del Gobierno Gaviria, se propone una Asamblea Constituyente que Gómez Hurtado, como cabeza de su movimiento, defiende en los editoriales de EL NUEVO SIGLO y luego participa con su propia lista de delegados, en un escenario


Director Alberto Abello

pilas con las y s puesta na e una bu a/4C r e h c lon

aguafiestas escolar/1C a 7C

29 DE EnEro DE 2013

Venta*..............$ 1.810,00 *casa de cambio

monseñor José Daniel Falla

Gerente Jaime Eduardo Hoyos Directores Emeritos Alvaro Gómez Hurtado Juan Pablo Uribe Presidenta Honoraria Margarita Escobar de Gómez

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PRIMER DIARIO DE ANÁLISIS Y OPINIÓN

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¿Votación a los 16 años? Otro salto a la modernización EDITORIAL

Aunque la iniciativa ha fracasado en varias ocasiones, se insistirá en el Parlamento para darle viabilidad. Según el senador Londoño, Colombia está madura para dar un paso en esa materia./2A y 3A

Secretos de la paz

El Emisor oyó clamor y redujo a 4% intereses

ANTE LA aparente postración de la demanda y el consumo, el Banco de la República decidió reducir las tasas de interés en otros 25 puntos básicos y dejarlas en 4 por ciento.

Esta decisión estaba casi cantada desde que se conoció el resultado del crecimiento del tercer trimestre del 2012, la disminución de la inflación y la reducción del consumo./16A

¿Violencia o Estado fortalecido?

“En la política colombiana reina la confusión... Cada aprendiz de Solón siente que tiene la verdad revelada y quiere modificar las tradiciones”./5A

Elección de presidente del Concejo

Todo parecía indicar que saldría humo blanco para escogerlo, pero decisión quedó aplazada/14A

Barreras ante el Consejo de Estado

Investidura del presidente del Congreso está en la mira del alto Tribunal/10A

98 testigos en juicio a Moreno

102 entrevistas, 142 informes de policía judicial, 1.036 folios, entre otros LOS pRESIDENTES de Colombia, Juan Manuel Santos, y de Cuba, tiene la Fiscalía/15A Raúl Castro, se reunieron ayer en Chile y entre otros temas, comercial y de impresión a terceros, otra de sus fortalezas editoriales. y se espera reducir los niveles de desperdicio de papel en un 30 l Se incorpora rotativa con tecnología de punta trataron el de la paz, cuyosGoss diálogos adelanta el Gobierno ¿Prueba La rotativa Goss Community SSC la componen dos torres de por ciento al utilizar los empalmadores automáticos”, manifestó. Community SSC nacional con las Farc en La Habana./13C cuatro niveles, contará con empalmadoras a velocidad cero y una EL Nuevo Siglo -con una historia de 77 años- está imprimiendo /11A sobre Chávez? plegadora con embudo superior. actualmente entre 40 a 48 páginas diarias con varios miles de ejemUn mensaje firmado Las directivas de El Nuevo Siglo, conscientes de la importancia plares. El diario ofrece diferentes secciones entre las que se destacan, de su puño y letra con El NuEvo Siglo, por iniciativa de su anterior director, Juan de manejar tecnología de punta para satisfacer las exigencias del portada, editoriales, opinión, política, economía, tintamundo, roja a cultura, la Celac, Gabriel Uribe Vegalara, con el apoyo de la Junta Directiva y la ge- mercado escogieron entre las mejores, a la rotativa Goss, ya que sociales, deportes, nación, actualidad y al cierre, que son las noticias escribió el presidente rencia importó de los Estados Unidos una rotativa Goss Community ofrece la versatilidad de imprimir el diario a todo color y productos de última hora. Además se cuenta con una separata diaria con temas venezolano/3B SSC de 8 unidades, para ofrecer a lectores, anunciantes y clientes una semicomerciales. A parte de ser una máquina muy práctica, permite de actualidad. Diálogos /10B “En el momento se tiene una capacidad del 50 por ciento en págimayor calidad en impresión y ser más competitivo en el mercado aumentar la productividad, mejorar la calidad y expandir la oferta comercial. nas con color. Con la instalación de la rotativa, el color y la calidad editorial del país. sin fechas ni Jaime Hoyos, gerente de El Nuevo Siglo, predice que los avan- aumentarán el 100%. La utilización de las torres que nos permitan Editorial La Unidad S.A. El Nuevo Siglo espera brindar toda almanaques una serie de ventajas, incluyendo un aumento de capacidad en la ces tecnológicos que obtendrá la empresa al instalar la rotativa impresiones a todo color por ambos lados del papel nos aportará CON LA renuncia del viceEN ELserán marco de la segunda paz debe ser una política versatilidad en el trabajo, facilidad en el mantenimiento, nuevas oportunidades comerciales”. destaca el gerente Hoyos. impresión de color y una notable baja en desperdicio de papel. Con de Estado y no de coministro de Asuntos Laborales, reunión de socialización de la las nuevas unidades es posibile ofrecer color en todas las páginas mayores niveles de productividad y ampliación del portafolio /12A Como es una máquina semicomercial se aprovechará la instalación yuntura, advirtió exmiDavid Luna, y tal como lo ha reforma pensional, el Gobierno de servicios. de sus hornos para brindar a los anunciantes, así como a los clientes para satisfacer las demandas del mercado. nistro Álvaro Leyva/9A venido anticipando EL NUEVO confirmó que se analizarán es “La empresa considera que la capacidad instalada aumentará de la Editorial, la impresión en el papel que deseen y se podrá hacer Con estas innovaciones técnicas, este Diario seguirá la línea de a un 300 por ciento gracias principalmente a la nueva velocidad impresiones hasta en 250 líneas para obtener una magnífica calidad mantenerse y superarse como uno de los primeros periódicos del SIGLO, se inició la avalancha trategias que permitan minimizar política ....................... 8a EcoNoMía .................. 16a de impresión. La paginación en color aumentará 100 por ciento en imágenes y textos. país en análisis y opinión, al tiempo que se afianzará en su oferta de dimisiones de funciona- los trámites. El ministro Rafael

Cambio Radical aspira a tener 15 senadores

Comienza Agilizarán avalancha acceso a de renuncias pensiones

agosto-25rios que2012 desean aspirar a los diferentes cargos de elección popular en 2014./13A

Periodo del Fiscal, en recta final

Pardo explicó que “se buscarán estrategias para que sea más posible pensionarse”./1B

Asesinan a Stalin Ortiz, concejal de Buenaventura

cUltURa ....................... 5B cRUciGRaMa................ 7B MUNDo ......................... 3B actUaliDaD..... .......... 14c

si no recibe este periódico a primera hora del día, llámenos al: 4139200. Ext. 110, 4139293 o informe a gerencia@elnuevosiglo.com.co

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“LA EMPRESA DE ACUEDUCTO, ALCANTARILLADO Y ASEO DE PUERTO ASÍS NIT: 800111304–2, invita a todos los interesados a participar dentro del proceso de contratación de mayor cuantía MAC-002-2012, cuyo objeto es la realización del CONSTRUCCION DE REDES DE ACUEDUCTO DE LA COMUNA NORTE DEL MUNICIPIO DE PUERTO ASÍS – PUTUMAYO; por valor de MIL CIENTO SETENTA Y UN MILLONES QUINIENTOS CINCUENTA Y TRES PESOS M/C ($ 1.000.171.553.00), el cual inicio en fecha de agosto 15 de 2012, cierra la recepción de propuestas el día 11 de septiembre de 2012 y se fija como diligencia de adjudicación para el día 25 de septiembre de 2012, para mayor información consultar el PROYECTO DE PLIEGO DE CONDICIONES en la oficina jurídica de la Empresa ubicada en Carrera 18 No. 8-62 B/ SAN FRANCISCO en Puerto Asís (Putumayo)o al TELEFAX: (098) 4227253. FELIX PEREZ SEPULVEDA Gerente Empresa de Acueducto, Alcantarillado y Aseo de Puerto Asís ESP


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