EL NARRATORIO ANTOLOGÍA LITERARIA DIGITAL NRO 40 JUNIO 2019

Page 145

consistían... Creo que había una iglesia pero no estoy seguro, de todas maneras eso no es lo importante, sino la misma plaza porque creo que fue esta la que me hizo tener una mínima esperanza de que no tendríamos que cambiar de lugar otra vez. Me gusta caminar, pero me encontraba realmente aburrido y me negaba a aceptar que toda la noche, las largas caminatas, y el unirme a este particular grupo, fuera para nada. Fue un alivio el contemplar a tantas personas preparándose para ese tan anhelado baile, y a tantas otras encendiendo sus equipos de música. Volví con mi grupo cuando algunos ya estaban bailando. Nunca se me ha dado eso de bailar, pero sabía que solo debía imitar lo que viera lo mejor que me fuera posible. Bastante sencillo. La amarga sensación llegó cuando me estaba preparando para hacer eso. Pensé que en el quinto intento sería distinto, pero estaba pasando de nuevo: los equipos de música estaban siendo guardados otra vez y las caras largas se hicieron presentes. Tampoco sería en esa plaza. Con la mirada mis compañeros me indicaron su frustración, así como el deseo y la esperanza de que la sexta fuera la de la suerte. No lo entendí y creo que no lo entenderé nunca. Ese instinto, que supuestamente tenían todos, ya se había equivocado cinco veces y, sin embargo, todos partían convencidos aún de que en el lugar siguiente podrían al fin comenzar con la algarabía, incluyendo mis acompañantes. —¡Esperen, hagamos el baile acá, ya fue! —grité con la intención de que me oyeran, no solo mi grupo, sino la mayor cantidad de gente posible. Los pocos que me escucharon voltearon a verme con expresiones despectivas en sus rostros, para luego seguir caminando sin haber formulado una respuesta— ¡Falta poco para que la noche termine, olvídense de todo eso! —nadie me oyó. Todos se fueron, determinados a bailar donde suceda, ni más ni menos. No sé por cuánto tiempo me quedé parado en ese lugar, teniendo a mi soledad como única compañía. —Hay más como vos —escuché una voz junto a mí. Me gustaría extenderme mucho más pero no puedo, el vehículo que estamos usando mis nuevos acompañantes y yo ya está llegando a su destino, así que ya debo concluir la narración con estas últimas palabras: por favor únanse a nosotros.

EDUARDO JAVIER BARRAGÁN

Argentina

Facebook: https://www.facebook.com/edu.barragan.77 Twitter: https://twitter.com/Edu_escritor Instagram: https://www.instagram.com/edu.escritornovato/ 145


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.