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Manejo de la otitis externa. ¿Siempre es necesario usar antibiótico? La otitis es una enfermedad compleja en la que intervienen distintas causas que se pueden combinar de varias formas. Para su abordaje terapéutico lo fundamental es tener claro que, ante todo, se trata de un proceso inflamatorio. La administración de antimicrobianos debe estar supeditada a la confirmación de la existencia de infección. La otitis es una inflamación del oído que puede tener o no una infección asociada, por lo que los antibióticos no siempre son necesarios para su manejo. En este aspecto hizo hincapié Isaac Carrasco (LV, PhD, AcredDerm AVEPA) durante una conferencia celebrada en el Congreso de AVEPA-SEVC.
Causas primarias
En su opinión, es necesario llevar a cabo una “acción pedagógica” entre veterinarios y tutores, para remarcar el carácter inflamatorio de esta enfermedad y contribuir de esta manera al uso racional de antibióticos. “El tratamiento de la otitis es uno de los actos clínicos veterinarios en los que se usan más antibióticos y, además, de forma indiscriminada”, recalcó el ponente.
Estas patologías son capaces de dar lugar a una otitis porque originan cambios:
Carrasco explicó que, para elegir el mejor tratamiento y lograr el éxito en el manejo de la otitis, es imprescindible entender la fisiología del oído y la patología de la enfermedad, así como lograr el diagnóstico adecuado y conocer las diferentes opciones terapéuticas que existen en el mercado.
Patología multifactorial
La otitis es una enfermedad compleja en la que intervienen distintas causas que se dividen en primarias, secundarias, predisponentes y perpetuantes (sistema PSPP). Todas estas causas pueden darse de forma simultánea y combinarse de distinta forma.
Una de las principales causas primarias de otitis es la dermatitis alérgica; otocariasis, cuerpos extraños, neoplasia en el conducto auditivo, algunas endocrinopatías y determinadas enfermedades inmunomediadas, como el pénfigo foliáceo, también pueden causarla.
• En el microambiente del oído, es decir, en su temperatura media (38,2 – 38,4 ºC), su humedad relativa media (88,5%), su pH medio (6,1-6,2) o bien en su mecanismo de autolimpieza, que funciona muy bien en condiciones normales, pero está alterado si hay una masa tumoral, una espiga, etc. • En el microbioma del conducto auditivo1, que es menos diverso en perros alérgicos, lo que hace que tengan una mayor predisposición a padecer otitis2,3. Dado el amplio abanico de causas primarias posibles, para asegurarnos de identificarlas de forma correcta lo recomendable es seguir un protocolo diagnóstico ordenado que incluya: conocer la historia clínica completa del paciente, realizar una buena anamnesis, llevar a cabo un examen físico general, dermatológico y otoscópico, así como utilizar las pruebas de imagen necesarias.
La clave del abordaje terapéutico de las otitis reside en mantener la inflamación bajo control, evitando así la aparición de infecciones secundarias y de los factores perpetuantes.
Puntos clave de la otitis canina • Es una enfermedad compleja y multifactorial. • Siempre se debe realizar un abordaje completo y multimodal y un • •
diagnóstico ordenado, con un buen examen físico, dermatológico y otoscópico, así como un examen citológico de las secreciones. El tratamiento se debe plantear tanto a corto como a largo plazo y se debe centrar en el manejo de la causa primaria. Se debe evitar la aparición de factores perpetuantes.
Causas secundarias Las causas secundarias de otitis son las infecciones, que se pueden reconocer mediante citología, una prueba que es clave realizar siempre. En este sentido, Carrasco remarcó que es importante no dejarse llevar por el aspecto macroscópico de las secreciones, es decir, no anticipar los agentes microbianos causantes (figura 1).
Factores predisponentes Los factores que pueden predisponer a la aparición de una otitis no son suficientes para su aparición, pero sí hacen que esta sea más probable. Están relacionados con las condiciones anatómicas del paciente (estenosis, exceso de pelos, etc.), la conformación de sus orejas (péndulas) y el exceso de humedad (motivo por el cual se debe tener precaución con los limpiadores líquidos y utilizar una pauta adaptada a las necesidades de cada paciente). “En lo que respecta a las orejas péndulas como factor predisponente, es probable que también exista algún carácter racial diferencial en las glándulas que haga que determinadas razas con este tipo de orejas estén más predispuestos a padecer otitis que otras”, añadió el ponente.
Factores perpetuantes Los factores perpetuantes, por su parte, son la “causa del fracaso en el manejo de la otitis” y “casi siempre son culpa nuestra”, en opinión de Carrasco. Por tanto, nuestro objetivo debe ser evitar su aparición. Entre ellos están la otitis media (a menudo debida a una evolución de la otitis externa), la estenosis y la calcificación del conducto auditivo externo (figura 2).
Abordaje terapéutico
Quizá el momento más difícil del manejo de la otitis se corresponde con la elección de un fármaco concreto en función de las característi-
Figura 1. Las infecciones son causa secundaria de otitis y, para reconocerlas, es fundamental recurrir a la citología.
Figura 2. La otitis media, la estenosis y la calcificación del conducto auditivo externo son factores perpetuantes de la otitis cuya aparición debemos evitar. cas del paciente, de su tutor y del presupuesto de este, entre otros factores. “El error más habitual a la hora de abordar esta enfermedad consiste en centrarse únicamente en las causas secundarias, es decir, en las infecciosas”, comentó Carrasco. En realidad, la clave del abordaje terapéutico de las otitis reside en mantener la inflamación bajo control, evitando así la aparición de infecciones secundarias y de los factores perpetuantes.
Tratamiento de las causas secundarias Sobre este aspecto, Carrasco expuso un análisis restrospectivo4 llevado a cabo sobre una muestra de 1.899 pacientes visitados en un hospital de referencia (perros, gatos y caba-
Recomendaciones del Grupo de Expertos Ad Hoc en Asesoramiento Antimicrobiano (Antimicrobial Advice Ad Hoc Expert Group, AMEG) para el uso prudente y responsable de antibióticos en animales (disponible en la página web de la EMA).