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DOS ESPAÑOLES ASESINADOS POR YIHADISTAS EN BURKINA FASO Los periodistas David Beriain y Roberto Fraile
Los periodistas españoles David Beriain (43 años) y Roberto Fraile (47 años) son las dos últimas víctimas mortales españolas por terrorismo yihadista. Ambos fueron asesinados en Burkina Faso, junto a un nacional y el conservacionista irlandés Rory Young, el pasado 27 de abril, cuando preparaban un documental cerca de la frontera con Benín, en la zona de Pama. El atentado contra los periodistas, que fueron secuestrados tras sufrir una emboscada en una zona considerada peligrosa, fue asumido por el Grupo de Apoyo al Islam y los Musulmanes (JNIM), una federación de grupos yihadistas vinculada a Al Qaeda. “Según la versión oficial, los reporteros se encontraban rodando un documental sobre adiestramiento de guardias forestales, centrado en particular en la protección de los elefantes, con la oenegé Chengeta, uno de cuyos miembros es 32
el ciudadano irlandés también asesinado”, informó La Vanguardia. El grupo, acompañado de una patrulla militar dedicada a combatir a los cazadores furtivos, se dirigía hacía la reserva forestal de Pama cuando sufrió una emboscada en la misma carretera, llevada a cabo por hombres armados a bordo de dos camionetas y una decena de motocicletas. Los secuestradores estaban escondidos en un bosque de la zona, repleta de vida salvaje que atrae a los cazadores, según declaraciones de una fuente de seguridad local a la agencia EFE. Para el Gobierno de Burkina Faso, los terroristas trataron de rodear el convoy y abrieron fuego. La investigación de los hechos abierta con posterioridad determinó, según El País, que Roberto Fraile resultó gravemente herido y tanto David Beriain como Rory Young se negaron a abandonarle.
DECLARACIÓN CONJUNTA Tras los asesinatos, España, Francia, Italia y Alemania expresaron en una declaración conjunta su “firme condena” por todos los actos de violencia, al tiempo que transmitieron sus condolencias y apoyo a los familiares de las víctimas. Los cuatro países, ante las persistentes amenazas a la seguridad y los complejos desafíos socio-económicos en la región del Sahel, reiteraron su compromiso para reforzar su apoyo en el marco de una aproximación transversal que aúne ”seguridad, gobernanza, estabilización y desarrollo”, al tiempo que expresaron su “voluntad de mantener los esfuerzos conjuntos de estrecha cooperación con los países de la región y el G5 Sahel, en el marco de la Coalición por el Sahel, la Alianza Sahel, el Partenariado para la Seguridad y la Estabilidad en el Sahel (P3S) y otras iniciativas regionales, para lograr que esta región se convierta en una zona
