MARA, LA

La alcaldesa convirtió Cancún en negocio privado al pasar de humilde servidora a funcionaria millonaria.

MARA, LA “CENICIENTA” DE OTRA “CASA BLANCA”

QUIERE LA GUBERNATURA

A través de una red de complicidades que involucra a notarios, empresarios y al ayuntamiento, ella y su familia disfruta los lujos de su encargo público. Jura inocencia pero no aclara nada

Por Fernando Sánchez Márquez y colaboración de Revista Fusión Q

Mara jura inocencia, -pretenden extorsionarme, acusa-, pero la dulce y tierna, la que arrolló en las elecciones pasadas por su sencillez, simpatía e identificación con las necesidades del pueblo, se transformó de humilde servidora a millonaria cenicienta en solo dos años.

Ahora disfruta los lujos de su encargo y acaricia otro de sus sueños: convertirse en gobernadora con el apoyo del presidente Andrés Manuel López Obrador quien le guarda mucha deferencia y confianza, pero antes Mara tendrá que enfrentar denuncias millonarias, junto con su esposo Omar Terrazas y su hijo Daniel Berrón Lezama, por enriquecimiento inexplicable.

A través de una red de complicidades que involucra a notarios, empresarios y al ayuntamiento, la familia de la alcaldesa María Elena Hermelinda Lezama Espinosa disfruta de la comodidad de su residencia en Puerto Cancún, valuada en 70 millones de pesos, adquirida a través de una permuta inmobiliaria al disponer de manera ilegal de un bien público.

En principio se habla de movimientos irregulares hasta por más de 170 millones de pesos como quedó asentado en actas judiciales, pero las evidencias que revelan la forma en que ha convertido Cancún en negocio personal y de su familia, podrían multiplicar esa cifra.

Las organizaciones Opus Magnum y la asociación civil Monseju interpusieron sendas denuncias ante la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, donde quedaron asentadas con el número de oficio 110/F/B/4145/2020 y ante la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) que se radicó bajo la carpeta número FED/SEIDO/UEIORPIFAM-QR/0000372/2020.

ME LA PRESTARON: MARA

Mara o Hermelinda Lezama que es su nombre de pila, dijo en principio que la residencia donde ahora vive, ubicada en el número 178 de la calle Puerto Escondido del exclusivo fraccionamiento Puerto Cancún, se la prestó Alejandro Moreno, amigo, cómplice y empresario consentido de la alcaldesa, para protegerse de la epidemia de Covid-19.

Posteriormente en una débil defensa contra esas acusaciones ha dicho que todos esos señalamientos son producto de presiones e intentos de extorsión en su contra, pero no da la cara.

A través de un video en sus redes sociales, señaló que no cederá antes estos ataques de los que está siendo víctima y continuará atendiendo los problemas por las que está pasando el municipio a consecuencia de la pandemia y los fenómenos meteorológicos, pero de su nueva y lujosa residencia no habló nada.

“No es la primera vez que de manera malintencionada y con noticias falsas quieren dañar mi imagen, mi reputación y a mi familia. A mis hijos que son menores de edad y a los de terceros... Yo haré lo que he hecho siempre, trabajar en pro de los seres humanos, en pro de las causas justas y en pro de la verdad”, no se refirió como se va a conducir antes las demandas penales en su contra, ni tampoco se refirió al predio de su propiedad que cuenta con salida de yates al Mar Caribe.

De acuerdo con la información desplegada por el diario “Luces del Siglo” que se edita y circula en Cancún, firmada por el reportero Marco Antonio Barrera, el velo de corrupción comenzó a develarse al descubrirse una trama montada por empresarios y notarios de Cancún que participaron en la compraventa disfrazada de permuta del deportivo “Casa Blanca”, de la que se benefició María Elena Hermelinda Lezama.

En esta operación están vinculados con la empresa Desarrolladora Cumpal, S.A.P.I. de C.V., propiedad de la alcaldesa y de su familia.

Destaca la información que en la venta del antiguo club realizada por Tarjetel del Sureste, S.A. de C.V., el vendedor del predio área natural, del que partió todo, fue Rafael Gerardo Obregón quien en su calidad de “accionista” donó el terreno a los activos de la empresa, el cual se fusionó al club deportivo para que su superficie creciera de 18 mil 900 a casi 34 mil metros cuadrados, donde se pretende construir torres de 20 pisos a todo lujo, llevando a David Garza Lagüera y Federico Garza Santos, dos poderosos inversionistas regiomontanos, como principales accionistas.

Inclusive se especula que de ahí partiría el puente vehicular de casi 8.7 kilómetros que cruzará la Laguna Nichupté que iría del centro a la zona hotelera.

Para que estas obras puedan arrancar, en el Ayuntamiento de Benito Juárez, a cargo de Mara Lezama, ya se están acelerando los trámites de reclasificación del uso de suelo y destino dentro del proyecto del nuevo Plan de Desarrollo Urbano de Cancún, de acuerdo con las menciones que se hacen en redes sociales “Este mismo empresario fue quien vendió al esposo y al hermano de la alcaldesa de Cancún, Omar Terrazas García y Miguel Ángel Lezama Espinosa, el terreno de 900 metros cuadrados en la Unidad Condominal 69-4-269, en la manzana 27, lote 1-02 del condominio residencial de Puerto Cancún, donde ahora vive la alcaldesa, protegiéndose de los efectos del Covid-19.

NOTARIOS A MODO DEJAN PISTAS INDELEBLES

“Es el terreno baldío que tiene embarcadero de yates con salida directa al Mar Caribe, el cual tiene la escritura pública P.A. 14784, protocolizada por el notario público 62, Heyden José Cebada Rivas (actual síndico municipal), el 21 de junio de 2016.

En esta operación el notario 67 de Cancún, Luis Gabriel Palacios Velasco, fue quien tuvo a cargo la protocolización del traslado de dominio entre el predio área natural y Tarjetel del Sureste, según consta en la escritura pública P.A. 4724 del 20 de diciembre de 2019.

El citado notario es el mismo que constituyó la empresa de los Terrazas Lezama, (Desarrolladora Cumpal), mediante la escritura P.A. 2046 con fecha del 5 de mayo de 2016, cuya inscripción se realizó ante el Registro Público de Comercio de Cancún (folio 30605), 26 días después de haberse creado.

En la compraventa del “Casa Blanca”, el también notario 30, Luis Miguel Cámara Patrón, validó la compraventa del antiguo club deportivo por la cual se pactaron cuatro propiedades localizadas en fraccionamientos exclusivos de Cancún, además de un par de depósitos por un monto total de 28.9 millones de pesos entre Tarjetel del Sureste y Buró Inmobiliario

América. El trato quedó por escrito en la escritura número P.A. 112,433, inscrita registralmente (folio 430866) el 23 de junio pasado.

El mismo notario Cámara Patrón también sirvió a Desarrolladora Cumpal al dar fe pública cuando Daniel Berrón Lezama, cuando tenía 26 años de edad (hijo mayor de la alcaldesa de Cancún) compró un departamento valuado en 4.9 millones de pesos en el Condominio “Marina Condos & Canal Homes”, según la escritura P.A. 106849 que expidió el 4 de diciembre de 2018.

En ese momento, María Elena Hermelinda Lezama ya estaba en funciones como presidente municipal en Benito Juárez, Quintana Roo.

Los accionistas de Desarrolladora Cumpal son Omar Terrazas García, Miguel Ángel Lezama Espinosa y Daniel Berrón Lezama, el esposo, hermano y el hijo de la alcaldesa morenista de Cancún, respectivamente.

INVESTIGAN HUELLAS DE MARA EN FRAUDE A FONATUR

Una vez abiertas las dudas sobre la honestidad de la alcaldesa no es remoto que se encuentren pistas de su participación en desviaciones y desfalcos por casi 30 millones de pesos en el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), donde su titular es identificado como amigo y protegido de la titular municipal.

De acuerdo con registros de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), se detectaron desfalcos en las obras del Centro Integralmente Planeado de Cancún, municipio de Benito Juárez.

Se hallaron contratos adjudicados directamente sin justificación, pagos superiores a los máximos autorizados por la normatividad y desembolso para cubrir trabajos no contemplados, entre otras anomalías.

El contrato, por 64 millones 288 mil 100 pesos, ampara el pago de trabajos de conservación de áreas verdes, vialidades, infraestructura de alumbrado público, banquetas, guarniciones, limpieza de áreas públicas, recolección de basura y “apoyo turístico” en el Boulevard Kukulcán y el desarrollo Tajamar, de los cuales muchos de esos servicios se encuentran vinculados a las obligaciones del municipio.

LOS HUMILDES CUARTITOS DE LOS LEZAMA

De entrada se habla que la operación “Casa Blanca”, está muy lejos de ser considerada una compra-venta de interés social, porque el contrato asciende a 171 millones de pesos.

Protocolizada el pasado 9 de junio la permuta consistió en la venta del predio que durante más de 20 años albergó las instalaciones del Club Casa Blanca, a cambio de dos departamentos de lujo en la zona hotelera y dos residencias en el fraccionamiento Puerto Cancún (a una de ellas se mudó la familia Terrazas Lezama durante la contingencia sanitaria), así como dos transferencias bancarias por la cantidad de 28 millones 972 mil 238 pesos.

El paquete de cuatro inmuebles recibidos en la permuta por Tarjetel del Sureste incluye: un departamento de 361 metros cuadrados en el Condominio Emerald Residential Tower & SPA que consta de cuatro habitaciones, cinco baños, sala de televisión, estudio, piscina y jacuzzi en terraza, por la cantidad de 58 millones de pesos; el condominio registrado como “Unidad de Propiedad Exclusiva 04 del ‘Marina Condos & Canal Homes’, ubicado en la manzana 27, Lote 1-02 en la Unidad Condominal 27-1 de la Av. Bonampak, se compone de dos niveles y sótano, con despacho, patio, terraza, tres recámaras, tres baños, sala de televisión y terraza en segundo nivel, por

17 millones 650 mil pesos.

Y las residencias gemelas marcadas con los números exteriores 178 y 179 de la calle Puerto Escondido en el fraccionamiento Puerto Cancún, quedaron registradas como unidades condominales 69-2-178 y 69-2-179 y oficialmente fueron vendidas como lotes. Aunque las construyó el mismo arquitecto, con iguales medidas, una al lado de la otra, en el contrato de permuta el valor registrado para la residencia 178 fue 25 millones de pesos, mientras que la 179 se vendió por 44 millones de pesos.

Estas lujosas residencias tienen dos plantas, sótano, cinco habitaciones espaciosas, cada una con su baño, estancia, cocina, sala y comedor confortables, estacionamiento subterráneo, dos terrazas, jacuzzi, piscina, áreas verdes y embarcadero propio para yates con salida directa al Mar Caribe. La residencia de la familia de la alcaldesa Mara Lezama además cuenta con paneles solares instalados poco antes de habitarla.

OPERACIONES ENTRE PUROS AMIGOS

El fraccionamiento Puerto Cancún es de acceso privado, cuenta con seguridad las 24 horas, cámaras de vigilancia, casa club, canchas de tenis, campo de golf de 18 hoyos y entre sus residentes figuran poderosos personajes del sector empresarial y político como Fernando Chico Pardo, presidente del Consejo de Administración de ASUR, o la tamaulipeca Adriana González, esposa del ex gobernador de Tamaulipas Eugenio Hernández, preso por acusaciones de peculado y operaciones con recursos de procedencia ilícita.

La presencia de la familia Terrazas Lezama en Puerto Cancún fue notoria desde marzo pasado que los propios vecinos comenzaron a quejarse con la administración por negarles el acceso a las áreas públicas, como la casa club o las canchas de tenis, tan sólo porque la “señora Mara Lezama las había solicitado en exclusiva” por seguridad, sin previo aviso al resto de los residentes.

Todo este enjambre de corrupción disfrazada de operaciones mercantiles, sirvió como base para las organizaciones Opus Magnum y Monseju que presentaron como pruebas de posible enriquecimiento ilícito-

Las otras tres propiedades involucradas en estas denuncias ante la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (Seido) y la Fiscalía Especial contra la Corrupción y la Criminalidad Organizada son: el departamento identificado como la Unidad de Propiedad Exclusiva 604, Lote 1-02, Manzana 27 del condominio Marina Condos & Canal Homes, adquirido en 4.9 millones de pesos; un terreno de dos mil metros cuadrados en la Av. Huayacán, Lote 1-18, manzana 01 y SM338 en Alfredo V. Bonfil en 3.4 millones de pesos en mayo de 2018, y un terreno de 630 metros cuadrados en la Av. Yaxchilán, Manzana 02, Lote 11, SM 17 en 1.9 millones de pesos, Todas las propiedades fueron escrituradas ante el Notario Público 62, Heyden José Cebada Rivas, ahora síndico municipal.

Los cuatro inmuebles fueron adquiridos por Desarrolladora Cumpal S.A.P.I., cuyos accionistas son Omar Terrazas García, Miguel Ángel Lezama Espinosa y Daniel Berrón Lezama, esposo, hermano e hijo de la alcaldesa Mara Lezama. La constitución de la empresa fue protocolizada el 5 de junio de 2016 por el Notario Suplente Luis Gabriel Palacios Velasco, el mismo que se encargó de la fusión del terreno de área de conservación con el predio del Club Casa Blanca para sumar el precio de venta de 171 millones 395 mil 678 pesos pactados en la permuta.

En este nuevo capítulo de corrupción, se prefigura también la presunta responsabilidad de conflicto de intereses ya que los principales accionistas de Tarjetel del Sureste, Carlos Moreno Gálvez (padre) y Carlos Moreno Sanén (hijo), son el cuñado y sobrino del regidor Jorge Sanén Cervantes con quien la alcaldesa ha estrechado fuertes lazos de amistad y complicidad.

Alejandra Sanén Cervantes, hermana del regidor y esposa de Carlos Moreno Gálvez, también es accionista de Tarjetel del Sureste al igual que su nuera Regina Cámara Herrero, hija del notario Luis Miguel Cámara Padrón, quien en junio pasado protocolizó la permuta con la empresa Buró Inmobiliario América.

Moreno Gálvez fue el empresario al que la alcaldesa de Cancún reconoció públicamente por el controversial diseño del logotipo conmemorativo “Cancún 50 años”, pero cuenta en su haber con una denuncia por beneficiarse con el remate del terreno del antiguo hotel del CREA en la zona hotelera durante el gobierno de Roberto Borge.

En esta denuncia también está involucrado su socio Ricardo Vega Serrador, el “zar de las gasolineras” en el estado y a quien la leyenda urbana ubica como el prestanombres del ex gobernador priista Félix González Canto.

Moreno Gálvez y Vega Serrador también son socios del Colegio Alexandre en Cancún edificado sobre el predio Álamo cuya posesión en su momento fue controversial debido a que pagaron por metro cuadrado la cantidad de 25 pesos.

Columna Fondos y Trasfondos Salazar Farias factor de unidad en Chiapas

Por Enrique Sánchez Márquez

Emilio Salazar Farías no pierde de vista cómo transcurre el acomodo de piezas y amarres políticos en torno a las intermedias de 2021 en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. Está preparado para contender por la capital del estado, incluso como candidato de unidad en alianza con otros partidos que cada día lo siguen más.

En esa entidad del sureste mexicano es bien sabido que Tuxtla ha sido un viejo anhelo en su carrera política. Una de sus fortalezas es ser tuxtleco y conocer el municipio como la palma de su mano, por lo que seguramente abonaría para sacar adelante a una ciudad ávida de desarrollo.

Sin embargo, está consciente que ésta no será la primera vez que se deba “enfrentar” al partido en el poder. “Hay que enfrentarlos, pero con ideas, con propuestas, las contiendas electorales siempre son muy intensas, muy cerradas, pero vamos a ganarles con propuestas”, pronostica a pesar de que Tuxtla ha sido siempre una plaza de altísima competencia.

Salazar Farías con su experiencia y con la simpatía de la ciudadanía, se encuentra en una posición favorable para poder contender incluso mediante alguna alianza con cualquier entidad política que tenga una ideología a fin y con la legítima idea de sacar a Tuxtla adelante, aspecto que beneficiaría a la ciudadanía.

Hoy por hoy Tuxtla necesita de políticos serios, con sensatez, pero sobre todo con amor a la capital, hoy existen más suspirantes, que aspirantes serios a la candidatura de la alcaldía, asimismo la madurez jugará un papel importante para tomar las mejores decisiones, en una ciudad que se merece por fin a un ciudadano que los represente, que genere identidad y promueva la comunión entre todos los sectores

En este contexto, Emilio Salazar Farías, presidente de la Comisión de Hacienda del Congreso chiapaneco y Alejandro Moreno Cárdenas, dirigente nacional del CEN del PRI, sostuvieron recientemente una reunión en la CDMX. En ese encuentro “Alito” ofreció todo su respaldo y simpatía al político tuxtleco.

En ese encuentro, el fuerte apretón de manos y el testimonio de la charla quedaron grabados en una fotografía de poster que circuló por todo el territorio nacional y saturó las redes sociales, lo que llamó fuertemente la atención de amigos y contrarios, pero al final muchos comentaron el hecho.

En la capital del estado cada día las diferentes fuerzas políticas de Chiapas se reúnen entre sí porque analizan la posibilidad de llegar en una candidatura de unidad en las elecciones de junio de 2021, llevando un buen candidato a presidente municipal; a buenos candidatos a diputados federales, que son dos y a diputados locales, que son tres. En eso se siguen poniendo de acuerdo.

Estos mismos encuentros también se concretaron durante los últimos días de septiembre pasado, tanto con los presidentes del PAN, PRD, MC, incluso se tendió una línea de comunicación con MORENA, sin descartar la alianza VERDE-MORENA, pues el gobierno estatal no correrá el riesgo de perder la presidencia municipal de Tuxtla en las elecciones de junio próximo.