Mensajero 171 by Diócesis Valle de Chalco

Año 6 TLALNEPANTLA

No. 171

Mensajero

CUAUTITLÁN

Provincia Eclesiástica de Tlalnepantla IZCALLI

ECATEPEC

TEOTIHUACÁN

Bienvenido

Domingo 04 de enero de 2015

TEXCOCO

NEZAHUALCÓYOTL

Mensaje de la Jornada Mundial de la Paz

No esclavos, sino hermanos

Donativo: $5.00 VALLE DE CHALCO

La familia: Tierra fértil para la restitución del tejido social Pág. 10

Pobreza: Primera luz para el joven que quiere ser diferente.

Pág. 11

Pág. 9

La Epifanía

Pág. 13

Los laicos: ¿debemos orar en Facebook?Pág. 15

Voz del Pastor

Acción de gracias y esperanza Pág. 2

Voz del Pastor

Mensajero DIRECTORIO Excmo. Sr. D. Carlos Aguiar Retes Arzobispo de Tlalnepantla Excmo. Sr. D. Ricardo Guízar Díaz Arzobispo Emérito de Tlalnepantla Excmo. Sr. D. Guillermo Or z Mondragón Obispo de Cuau tlán Excmo. Sr. D. Francisco González Ramos Obispo de Izcalli Excmo. Sr. D. Oscar Roberto Domínguez Cou olenc, M.G Obispo de Ecatepec Excmo. Sr. D. Onésimo Cepeda Silva Obispo Emérito de Ecatepec Excmo. Sr. D. Guillermo Francisco Escobar Galicia Obispo de Teo huacán Excmo. Sr. D. Juan Manuel Mancilla Sánchez Obispo de Texcoco

Acción de gracias y esperanza En las postrimerías de un año vivimos muchos sentimientos y emociones, a veces tan cercanos a nosotros mismos que suscitan choques interiores; éstos pueden fortalecer nuestra esperanza –que es una virtud–, o ponernos nostálgicos –debilidad que puede convertirse en enfermedad. Lo mejor es ser realistas. Valorar nuestra existencia implica mirar con detalle nuestro interior antes de ver el exterior. Somos tan complejos que si no nos cuidamos podemos confundirnos. Si nos organizamos interiormente, es posible ver con más claridad nuestra vida, nuestro entorno, a los demás. Este paso del año viejo al nuevo, agradeciendo lo recibido y lo logrado, representa la oportunidad para revisar, rehacer y seguir hacia delante; todo ello nos permite entrar en contacto con la realidad sin que ésta nos apabulle, pues muchas veces podemos caer en la dependencia de los demás, del ambiente, de lo que sucede afuera, para vivir de una u otra manera. En otras palabras: ser proactivos, no sólo reactivos. Un ejemplo es el pasado intercambio de regalos, con ocasión de la Navidad. ¿Lo hicimos porque “hay que hacerlo, y porque todos lo hacen ahora”, o porque en realidad quise expresar mi interior? ¿Fui apabullado por el consumismo o salí ileso porque elegí con libertad interna la reconciliación y la amistad, a partir del encuentro con el Hijo de Dios que ha venido y he recibido en mi vida? La sociedad y el individuo tienen una relación necesaria. La sociedad ofrece una serie de elementos que pueden ayudar o dañar al individuo. Depende de cada persona participar en la transformación de su sociedad para mejorarla, dejarla igual o empeorarla; ser activo o pasivo en ella. Si hemos logrado tantas cosas, apostemos a mantenernos en el camino de los logros y a no dejarnos vencer. Miremos el porvenir con esperanza. Entre las cosas bue-

nas que podemos recuperar están las iniciativas de la Iglesia por anunciar permanentemente a Jesús, camino de vida y salvación; contribuir a superar el hambre en el mundo; atender a las personas en situación de migración; unirnos como Iglesia para dar solidez a su acción. Cada diócesis en nuestra provincia puede señalar muchas cosas concretas. Está, en el ámbito social, la iniciativa hecha el pasado 11 de diciembre por el Gobernador del Estado de México, Dr. Eruviel Ávila Villegas, de convocar a las asociaciones religiosas de la entidad a ﬁrmar un pacto para el fortalecimiento de los valores. Se trata de una disposición del gobierno por entrar en diálogo con la Iglesia y así propiciar el bienestar de las familias, llegar a los más pobres, y acompañar el crecimiento de los jóvenes. Que los servicios sociales lleguen a quienes en verdad lo necesitan. El 2015 presenta, si queremos verlo, una serie de oportunidades para crecer. Nos toca, como Iglesia, vivir con Jesús su epifanía en las distintas etapas en las que la hemos celebrado: Encarnación, entrando de lleno a la realidad con la guía del Espíritu Santo; Nacimiento, asumiendo nuestra humanidad redimida en Cristo; Adoración de los Magos de Oriente, abriéndonos a la humanidad con la total decisión de anunciar la presencia de Dios; Bautismo, acogiendo con fe la historia de las promesas para que se cumplan en nosotros como se han cumplido en Cristo, nuevo Adán. Que la celebración del Nacimiento del Salvador nos ayude a que sea el 2015 un Año de Gracia para todos los lectores. Un abrazo afectuoso.

† Guillermo Ortiz Mondragón Obispo de Cuautitlán

Excmo. Sr. D. Héctor Luis Morales Sánchez Obispo de Nezahualcóyotl Excmo. Sr. D. Víctor René Rodríguez Gómez Obispo de Valle de Chalco Excmo. Sr. D. Francisco Ramírez N. Obispo Auxiliar de Tlalnepantla Excmo. Sr. D. Efraín Mendoza Cruz Obispo Auxiliar de Tlalnepantla DIRECTOR GENERAL Mons. Víctor René Rodríguez Gómez Presidente de la Comisión Provincial para la Pastoral de la Comunicación DIRECTORA EN TURNO Abril Villanueva SUBDIRECTOR Mons. Luis Mar nez Flores CORRECCIÓN Y ESTILO San ago Ma as DIAGRAMACIÓN Y DISEÑO Samuel Nájera COLABORADORES Equipo de la Pastoral de la Comunicación de la Provincia Eclesiás ca de Tlalnepantla. Registro en trámite.

Mensajero Es una publicación catorcenal de la Provincia Eclesiás ca de Tlalnepantla. Se distribuye en la Arquidiócesis de Tlalnepantla y en las Diócesis de Cuau tlán, Izcalli, Ecatepec, Texcoco, Teo huacán, Nezahualcóyotl y Valle de Chalco.

periodicomensajero@gmail.com

Mensajero

Editorial

Gritos desde el silencio

Desde el silencio, tan cerca de nosotros, en nuestra misma sociedad, los pobres, los marginados, los indigentes, los que sufren violencia e inseguridad lanzan un llamado, un grito de socorro, auxilio y esperanza. ¿Cuáles son las causas de su lamentable situación, y cómo buscar entre todos alguna solución? Como Iglesia debemos escuchar con oídos de fe ese grito sufriente y desgarrador, debemos oír su clamor como la voz que clama por la vida, la esperanza, la justicia y la paz. Todo lo que acontece y de lo cual somos testigos es una llamada para ayudar y ayudarnos. ¿Qué no somos la voz de los pobres, del que sufre, del doliente?

Abramos los ojos sobre este escenario de pobreza en el mundo, en nuestra patria, y contemplaremos un panorama desolador, en el que millones de personas viven en la miseria, sometidos a unas condiciones precarias en el campo de la alimentación, vivienda, salud y seguridad. Los textos sagrados nos recuerdan que Dios escucha con gran misericordia "el grito del que sufre”. Nuestra actitud ante este escenario es lo que debe deﬁnir nuestro ser y quehacer, como individuos o institución. Todos debemos implicarnos y comprometernos, impulsados por la caridad de Cristo, para promover la dignidad de las personas como parte preferencial de nuestra acción evangelizadora.

Paz, don precioso

México: país peligroso

Por: CODIPACS Ecatepec

Por: Pbro. Gustavo Tapia González Tristemente hoy nos vemos sumergidos en un México convulsionado por la ira, el resentimiento y el odio, que no nos permite ver al otro como una persona con la misma dignidad y miembro de una misma fraternidad llamada humanidad. Donde cada quien y de acuerdo con sus intereses enarbola una bandera de "justicia y de paz", pero donde el miedo, el dolor, la desconﬁanza y el anhelo de venganza son el caldo de cultivo perfecto para lastimar al otro. Muchos argumentan que cuando alguien atenta contra ti o contra tu familia es válida la violencia, pero yo pienso que no hay nada que pueda justiﬁcar actos violentos, pues éstos provocarían hacer más grande el mal que se quiere remediar; sobre todo nos olvidaríamos de que fuimos creados para amar. Debemos recordar que la violencia y la injusticia no se curan con violencia, sino con la voluntad de la Paz y construyendo una sociedad con mejores oportunidades para todos. La Justicia y la Paz no son valores relativos o subjetivos sino universales que ayudan al hombre a alcanzar la plenitud. La Paz es una virtud que todo hombre debe cultivar para encontrar armonía consigo mismo y con los demás y no sólo para disfrutar de un efímero confort que le permita desplazarse de un lado a otro sin mayor problema o para hacer lo que le venga en gana. La Paz es un recordatorio de que la tranquilidad y la segu-

ridad del hombre están en la certeza de una vida digna y con esperanza de lograr sus más grandes anhelos. El papa Francisco nos dice que la Paz es un don precioso que debe ser promovido y tutelado. Nosotros como cristianos católicos, junto con los hombres y mujeres de buena voluntad, estamos llamados a evitar el dolor y el sufrimiento de nuestros hermanos y a construir sin demora iniciativas claras para alcanzar la Paz. Debemos recordar que la Paz es un bien de toda la humanidad y sólo se construye mediante el diálogo, la convivencia, la tolerancia, pero sobre todo con la verdad. Tan sólo pensemos en los más recientes ganadores del premio Nobel, la joven pakistaní Malala Yousafzai, quien recibió un tiro en la cabeza por promover e insistir en que las niñas también tienen el derecho y el deber de educarse en su país; y el hombre maduro hindú Kailash Satyarthi, quien promueve que todos los niños tengan derecho a la educación y que en su discurso dice de manera tajante: No a la pobreza y esclavitud infantil. Que nosotros como ellos y recordando el ﬁnal de la oración que nuestros obispos nos han dejado, digamos y actuemos: “Que como discípulos misioneros tuyos, ciudadanos responsables, sepamos ser promotores de Justicia y de Paz, para que en Ti, nuestro pueblo tenga vida digna.”

En estos días la violencia en México se ha incrementado y parece no poder ser contenida, esto fue corroborado el día 26 de diciembre cuando apareció muerto el padre Gregorio López Gorostieta de la Diócesis de Ciudad Altamirano, quien había sido “levantado” por un comando armado en el Seminario diocesano. Poco antes, el 23 de diciembre, la agencia de noticias Fides, publicó un artículo titulado: “México es el país más peligroso de América Latina donde ejercer el ministerio sacerdotal”, en el que expuso que de 1990 a 2014 los agentes pastorales que han muerto de manera violenta en nuestro país, son: 1 cardenal, 34 sacerdotes, 1 diácono, 3 religiosos, 5 laicos y 1 periodista católica. En el estado de Guerrero la situación se ha tornado muy grave. En la Diócesis de Ciudad Altamirano, junto al asesinato del padre Gregorio, se suma el asesinato del padre Ascención Acuña Osorio, encontrado el 25 de septiembre pasado y del padre Habacuc Hernández Benítez, junto a dos seminaristas el día 13 de junio de 2009. Por otro lado, también el padre John Ssenyondo, de Uganda, que ejerció su ministerio en la Diócesis de Chilpancingo-Chilapa, desapareció el 30 de abril de este año y encontrados sus restos el 29 de octubre. Los obispos de México han dado un mensaje ante este hecho lamentable. El 25 de diciembre expresaron el sentir de muchos mexicanos: “¡Basta ya! No queremos más muertes. No queremos más desaparecidos. Exigimos a las autoridades el esclarecimiento de éste y de los demás crímenes que han provocado tanto dolor en tantos hogares de

nuestra patria, y que se castigue conforme a derecho a los culpables”. México, por desgracia, se ha convertido a nivel mundial en un país peligroso, junto con lo señalado anteriormente; hay otros datos que muestran la situación grave, como los que presenta la Organización Reporteros sin Fronteras, donde se dice que México es el país que más periodistas asesinados tiene en América Latina, según la información dada a conocer en septiembre de este año. En otro informe del 29 de septiembre, la Organización Mundial de Migración dio a conocer que México es el país con el transito más peligroso para los migrantes. En días anteriores la Organización de las Naciones Unidas (ONU) informó que México ocupa el lugar número 12 en asesinatos, entre más de 130 países. Ante estos acontecimientos dolorosos, debemos sumarnos y buscar la justicia, la verdad, el amor, la solidaridad a favor de la paz. No debemos permitir que se siga desgastando el tejido social, que se atente contra la integridad de las personas, tanto física o psicológicamente, tanto individual como colectivamente. Los asesinados, los desaparecidos, no son sólo números de una estadística, son seres humanos que dejan en el corazón de sus familias y comunidades el dolor, la pena, la rabia a causa de tantas injusticias e impunidad. Por desgracia los culpables no son detenidos ni procesados. Unámonos en la oración, pidiendo a Dios por los que sufren la violencia, pero también por los que provocan sufrimiento y muerte, y demos pasos más ﬁrmes y concretos para ser promotores de paz y justicia.

Caminar Diocesano

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En el nombre del cielo, los padres piden posada Por: seminarista Antonio Pérez Hernández Los Remedios, Naucalpan, Méx. 17 de diciembre 2014.- Como cada año, el 17 de diciembre se iniciaron los festejos navideños de nuestra Arquidiócesis con la posada del Presbiterio, que regresa a su casa del Seminario Mayor de Tlalnepantla, para compartir la espera de las próximas ﬁestas de conmemoración por el nacimiento de nuestro Señor Jesucristo. Uno a uno los sacerdotes que sirven en las diferentes comunidades se fueron reuniendo en torno al señor Arzobispo, don Carlos Aguiar Retes, para realizar juntos la celebración de la Palabra y después entonar la letanía a la Virgen María, saliendo en procesión con los peregrinos, para dar una vuelta a la cancha y llegar al auditorio, donde se hizo la petición de posada. Los miembros del Seminario, de la sección de Discipulado (antes Filosofía), presen-

taron la tradicional pastorela, con cierto humor negro. Al concluir ésta, los sacerdotes se dirigieron al comedor para compartir el banquete que inició con la bendición de los alimentos. Cada uno de los presbíteros ocupó un lugar en las mesas, compartiendo anécdotas, experiencias, momentos graciosos, la vida misma. Casi al ﬁnal del banquete, don Carlos Aguiar Retes realizó el brindis deseando unas felices ﬁestas a los asistentes, además de enviar sus deseos a cada uno de los feligreses que peregrinan en la Arquidiócesis de Tlalnepantla. También entregó un presente a los sacerdotes y a los seminaristas. Así, entre alegría y buenos deseos, uno a uno se fueron retirando del Seminario Mayor de Tlalnepantla, dejando la casa con esa sensación de alegría por ver en sus instalaciones a muchos de sus ex alumnos, ya ejerciendo el sacerdocio de Cristo y sirviendo con dedicación al pueblo de Dios.

De esta manera, el Presbiterio expresó su sentido de unidad con el Arzobispo, así como con los Obispos auxiliares de don Carlos, don Efraín Mendoza y

don Francisco Ramírez, como una sola Iglesia unida por el misterio de la Natividad del Hijo de Dios.

Conviviendo y creciendo en la unidad

El pasado jueves 18 de diciembre, el Presbiterio de la nueva Diócesis de Izcalli tuvo su primera posada sacerdo-

tal. Todos los sacerdotes se dieron cita alrededor de las 10:00 horas en las instalaciones del Seminario Mayor. La

jornada dio inicio con la meditación del Santo Rosario, dirigida por el padre José Rurico, Vicario General de la Diócesis; después, cantando las letanías, hubo una procesión hasta la capilla, donde se pidió la tradicional posada, acompañando a los peregrinos de Belén. Dentro de la capilla esperaba el Obispo, quien presidió la liturgia de la Palabra. En la celebración, don Francisco González Ramos, quien se mostró siempre cercano y afable con sus sacerdotes, invitó a los asistentes a vivir el misterio de la Navidad siendo cercanos a Dios y a los ﬁeles: “La Navidad es un don de Dios que nos invita a ser generosos con nuestro ministerio y con nuestros hermanos, a mostrarnos cercanos al Dios que se hace cercano a nosotros, y a mostrarnos cercanos con aquellos que son hermanos nuestros por el bautismo”, dijo

el Obispo en su homilía. Durante la celebración, se adelantó el arrullo del niño Dios, adorándolo en la pequeña imagen del niño Jesús. No faltaron al ﬁnal las felicitaciones y las expresiones de cercanía para el Obispo. Terminada la celebración litúrgica y de piedad, tuvo lugar una convivencia muy fraternal que reﬂejó la unidad y la disposición de un Presbiterio joven. En la convivencia se rompieron piñatas, lo cual hizo recordar los viejos tiempos, además de que provocaron muchas sonrisas. Ya cada uno con sus dulces en las manos, pasaron a compartir los alimentos, ocasión en la que hubo oportunidad de expresar, entre todos y como hermanos, sus buenos deseos para estos días de trabajo pastoral, pero también de alegría por el nacimiento del Salvador. La primera convivencia como Presbiterio fue una experiencia de fraternidad y unidad, de cercanía entre hermanos y de cercanía con el Obispo. Asimismo, fue posible vivir la gracia y el amor del Niño recién nacido. Gracias a todos por su disposición para la convivencia y, sobre todo, para vivir en la unidad.

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Caminar Diocesano

¡Un día marcado por la alegría y la gracia de Dios! Obispo de Texcoco celebra la tradicional posada Navideña con los hermanos del Relleno Sanitario de Escalerillas Por: Evangelina Martínez Chimalhuacán, 22 de diciembre 2014.Comencemos haciendo unas anotaciones propias del lugar y del tiempo en que se llevó a cabo esta celebración: había una gran cantidad de ruido, que seguramente era incómodo para algunos de los ahí reunidos. Cuando las cosas así suceden, Dios trae a nuestras mentes en qué condiciones predicaba Jesús, pues a Él sí que le tocaba duro, lo hacía sin micrófono, no tenía ayuda, y muchas veces ni siquiera un templo dónde reunir a la gente. Ante dichas circunstancias, el mismo Espíritu que ayudó en aquel momento a que la Palabra penetrara poderosamente en los corazones, estuvo presente en este lugar, y fue una bendición para quienes escucharon y también para las personas que únicamente pasaban y observaban. Con la humildad y puntualidad que caracteriza a don Juan Manuel Mancilla, Obispo de Texcoco, a las 16:00 horas inició el acto litúrgico en el Relleno Sanitario de Escalerillas en Lomas de Chocolín, Ejido de Santa María Chimalhuacán, comunidad Santo Niño, perteneciente a la Parroquia de San Isidro Labrador. Estuvo acompañado por los presbíteros Gerardo Bastida Delgado, párroco de la comunidad, Martín Alejandro Torres Muñoz y Juan Miguel González Salas.

En la homilía reflexionó sobre la oración: “Queridos hermanos, nos encontramos en este lugar orando, unidos estamos invocando al Señor, al único Dios verdadero, al que mira los corazones, al que ama con un amor infinito, personal; un amor directo, un amor concreto, un amor sublime, hermosísimo. Aquí están ustedes, sus hijos, con su corazón limpio, con sus manos limpias, con su espíritu limpio, aunque el mundo tenga otra mirada, aunque el mundo nos vea como le dé la gana, aquí están, estamos por la misericordia de Dios (…) Los que trabajan, los que vienen aquí a ganarse el pan digna, honestamente, son una ofrenda agradable a Dios”. Y agregó: “Aquí eres visto por Dios, Él sigue tus pensamientos, sigue tus dificultades, tus oraciones, tus sufrimientos (…) Aquí en la evangelización escucharás palabras de vida eterna, palabras que son joyas, tesoros, que son sabiduría, vida y gozo, alegría perpetua”. El Obispo les dijo: “Hagan comunidad, hagan familia. Los invito a no pelear, a no envidiar, y así brillarán más que las estrellas. Pido a mi Padre Dios que éste sea el momento más hermoso de mi vida episcopal y que Dios siga presente en sus corazones”. Para finalizar, el Obispo agradeció el trabajo al padre Gerardo Bastida, a la hermana misionera Daniela Fois, de la

comunidad de Villaregia, y a los grupos que apoyaron con su entusiasmo. Pidió a cada uno seguir con el trabajo que han realizado hasta el momento. Después envió sus bendiciones a cada una de las familias. Entre cantos y alegría continuó el evento con la tradicional posada navideña, cuyos personajes principales fueron representados por hermanos de la comunidad. Monseñor Mancilla Sánchez repartió y compartió los dulces que él mismo llevó. Visitó la capilla en construcción del “Santo Niño”, oró ante la Santísima María. Nuestra Iglesia particular de Texcoco

hizo eco a la encomienda del Santo Padre Francisco de que el Señor no quiere una Iglesia de poder sino de amor, servicio y humildad, que salga al campo de trabajo en busca del hermano y le predique el Evangelio. Quienes se dieron cita agradecieron a Dios por tener un Obispo entregado a las buenas obras en favor de los más necesitados, pero, sobre todo, por estar pendiente de que la fe católica se siga fortaleciendo en las comunidades que conforman su diócesis. Agradecemos a los voluntarios de los diversos grupos pastorales que apoyaron con entusiasmo y dedicación esta posada.

Conmemorando el nacimiento de Jesús en nuestra Diócesis Por: Francisco Hernández CODIPACS Ecatepec El día 24 de diciembre de 2014, en la Catedral del Sagrado Corazón de Jesús, el Sr. Obispo Mons. Óscar Roberto Domínguez Couttolenc presidió la misa solemne con la que se conmemoró un aniversario más del nacimiento de Jesús. Al inicio de su homilía dijo: “Queridos hermanos y hermanas, nos encontramos reunidos en esta noche santa celebrando la Navidad, el nacimiento de Jesús con nosotros; éste es un acontecimiento que tenemos que conmemorar, y no solamente recordar si queremos darle sentido a nuestra vida, y si queremos reconocer y encontrar a Jesús en cada día de nuestra existencia”. En otro momento de su mensaje reﬁrió estas palabras del profeta Isaías: “El pueblo que habitaba en tinieblas vio una gran luz. Sobre los que vivían en la tierra de sombras, una luz resplandeció”, luego comentó que la luz es imagen de la vida y de la salvación, y que únicamente –y no nos confundamos–,

únicamente viene del Dios verdadero. Más adelante también retomó las palabras de San Pablo cuando afirma que: “La gracia de Dios se ha manifestado para salvar a todos los hombres y nos ha enseñado a renunciar a la vida sin religión y a los deseos mundanos, para que vivamos ya desde ahora de una manera sobria, justa y fiel a Dios”; luego abundó: “Con el nacimiento de Jesús inicia para la humanidad una nueva oportunidad de vida; Él es luz que alumbra las tinieblas que se manifiestan en destrucción, en injusticia, en vicios, en muerte y en pecado; Él es la liberación que destruye la opresión que nos esclaviza; Él es paz y gozo”. Después nos invitó a que apliquemos a nuestra vida el gozo que Jesús nos trae. Asimismo, recordó las palabras que dijo el papa Francisco al celebrar la Navidad: “La Navidad suele ser una fiesta ruidosa, nos vendría bien un poco de silencio para oír la voz del amor. Navidad eres tú cuando decides nacer de nuevo cada día y dejar entrar a Dios en tu alma. El pino de Navidad eres tú

cuando resistes vigoroso a los vientos y diﬁcultades de la vida. Los adornos de Navidad eres tú cuando tus virtudes son colores que adornan tu vida. La campana de Navidad eres tú cuando llamas, congregas y buscas unir. Eres también luz de Navidad cuando iluminas con tu vida el camino de los demás con la bondad, la paciencia, alegría y la generosidad. Los ángeles de Navidad son tú cuando cantas al mundo un mensaje de paz, de justicia y de amor. La estrella de Navidad eres tú cuando conduces a alguien al encuentro con el Señor. Eres también los reyes magos cuando das lo mejor que tienes sin importar a quién. La música de Navidad también eres tú cuando conquistas la armonía dentro de ti. El regalo de Navidad eres tú cuando eres de verdad amigo y hermano de todo ser humano. La tarjeta de Navidad eres tú cuando perdonas y reestableces la paz, aun cuando sufras. La cena de Navidad eres tú cuando sacias de pan y de esperanza al pobre que está a tu lado. Tú eres, sí, la noche de Navidad cuando humilde y

consciente recibes en el silencio de la noche al Salvador del mundo sin ruidos, sin grandes celebraciones. Tú eres sonrisa, conﬁanza y ternura en la paz interior de una Navidad perenne que establece el Reino dentro de ti. Una muy feliz Navidad para todos los que se parecen a la Navidad. Y agregó: “Hermanas y hermanos, también yo a cada uno de ustedes, a sus familiares, amigos, vecinos… les deseo que pasen una muy feliz Navidad”. Al terminar la misa se hizo el arrullo del Niño Dios, bendiciéndolo y colocándolo en el Nacimiento.

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Geopolítica y la paz frágil Por: José Luis Ramírez Diócesis de Nezahualcóyotl Se dice que la globalización ha anulado las fronteras. Aunque aún no se conoce a fondo la trascendencia de esta manera de conducirse del imperio y del poder, lo cierto es que el mundo cambia, y que en este 2015 podrían registrarse pasos concretos. La paz en gran parte en el mundo se tambalea en mayor o menor medida, de acuerdo con los intereses de la lógica imperial. Obama tiene enfrente el deterioro de ese poder fáctico que se tambalea, por eso naturaliza latinos y se acerca a Cuba. Vaya manera de concluir el 2014: los gobiernos estadounidense y cubano abrieron la posibilidad de que concluya el distanciamiento, el cual ha durado más de medio siglo. Sin embargo, ahora la conﬁanza para que se abran canales hacia

una paz duradera ya no depende sólo del restablecimiento de esas relaciones, sino de la fragilidad económica con la que concluye este año, pues de nueva cuenta los precios del petróleo amenazan con poner en jaque la economía mundial y, con ello, la paz. En el marco de dicha globalización, México no está exento de esos cambios globales; se verá afectado por la desestabilización petrolera, incluso ahora que Pemex había logrado abrir sus puertas a la inversión extranjera. En ﬁn, esa lógica del poder mexicano no acaba de aterrizar sus reformas, y ahora se apresta a iniciar este 2015 con un portafolio lleno de pendientes, como el de los normalistas de Ayotzinapa, pues sus efectos continuarán, al igual que el asunto del deterioro salarial. Éstos son puntos importantes, pero no los

únicos. La Arquidiócesis de México considera 2014 un año trágico para la Iglesia mexicana, tras señalar que durante los pasados 12 meses fueron asesinados cuatro sacerdotes y un laico. De los casos reportados, cuatro ocurrieron en la región de Tierra Caliente en Guerrero. Aunado a lo anterior está la consternación de la grey católica que sigue de cerca la situación de los 43 normalistas desaparecidos (según la versión oﬁcial, ya son sólo 42, ¡como si eso fuera un consuelo!). Los obispos han expresado su solidaridad con esta tragedia, estableciéndolo en un comunicado: “Pedimos a Dios que les dé fortaleza en estos momentos de dolor y nos conceda que pronto quede esclarecido el paradero de sus hijos, hermanos y compañeros”.

¡Acción de gracias con nuestros hermanos migrantes! El pasado martes 16 de diciembre, en la Casa del Migrante San Juan Diego en Huehuetoca, celebramos con nuestros hermanos migrantes la misa anual de Acción de Gracias, así como una convivencia junto con las instituciones, bienhechores y voluntariado que participan en este lugar. La misa fue presidida por nuestro Obispo, don Guillermo Ortiz Mondragón, quien destacó la importancia del trabajo pastoral de la movilidad humana, de manera especial en esta casa y en las estaciones del transporte suburbano. Ese día estuvieron presentes 24 migrantes centroamericanos, hospedados en la casa, quienes participaron de la Acción de Gracias sin importar su credo; ellos recibieron algunos presentes de manos del Obispo, y también les fue entregado a cada uno el Libro de los Evangelios. También se dieron agradecimientos a las instituciones, que de manera conjunta han trabajado con la diócesis en bien de los migrantes. Se reconoció al H. Ayuntamiento de Huehuetoca, a la organización Médicos Sin Fronteras (MSF), al Sistema Municipal DIF, a la

policía estatal y municipal, al Instituto de Salud del Estado de México (ISEM), a la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México (CDHEM) y municipal de Huehuetoca, al Instituto Nacional de Migración (INAMI), a la Cruz Roja Mexicana, a la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR), al comisariado ejidal, a la agrupación Convivencia Joven A.C, y a Catholic Relief Services; todas ellas instituciones y organizaciones que han brindando sus esfuerzos para asistir a los hermanos migrantes en su salud física y emocional, y con ayuda legal para garantizar sus derechos en su tránsito por México. También estuvieron presentes los bienhechores, quienes con su generosidad apoyan materialmente a la Casa del Migrante. Me reﬁero al voluntariado que dona su tiempo y caridad en los distintos servicios de la casa. Juntos, migrantes, Obispo, sacerdotes, bienhechores, instituciones y voluntariado degustaron de una comida especial y aguinaldos; también se rom-

pieron las tradicionales piñatas. El compromiso como Iglesia de continuar asistiendo a nuestros hermanos migrantes continúa, ya que el propósito es hacer lo que nos pide el Señor: “Asistir al hermano forastero, dar de

comer al hambriento, vestir al desnudo”. Y ahora es posible recibir al migrante en un lugar más digno, en la nueva casa que ya funciona en bien de muchos, aquí en Huehuetoca.

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Primer Aniversario del Plan Diocesano de Pastoral Por: Lic. Patricia Peña Veloz, CODIPACS Valle de Chalco Valle de Chalco, México, 19 de diciembre de 2014.- Reunidos en la Catedral laicos integrantes de los Consejos Parroquiales de Pastoral y de los EPAPs, religiosos(as) y sacerdotes, junto con el Señor Obispo Víctor René Rodríguez Gómez, manifestaron su disponibilidad para seguir adelante con la realización de las metas trazadas para el año 2015, conforme al segundo objetivo de la primera fase de la etapa inicial. Al iniciar este encuentro, se reconoció la presencia activa y la entrega generosa de don Víctor René, quien conoce, motiva e impulsa continuamente el Plan Diocesano de Pastoral proclamado el 19 de diciembre de 2013. Después de la oración, el Obispo saludó y dio la bienvenida a los participantes, diciendo que no sólo con la unidad, el ánimo y la motivación se puede construir la diócesis más bella del mundo, pues es necesario saber exactamente qué se quiere lograr y qué debe hacer cada uno para no desperdiciar las energías y sumirse en el desaliento. El Plan Diocesano de Pastoral permite

ver claro cuál es la situación de la diócesis, ayuda a delinear los sueños con proyectos concretos que se van confrontando con la situación, dejando ver los obstáculos y potencialidades, con la finalidad de programar paso a paso y así fortalecer la pertenencia a la Iglesia, la dignidad de las personas y el compromiso de los miembros vivos y activos, descubriendo nuevos caminos para la evangelización, que permitan hacer realidad el objetivo del año: Una Iglesia con rostro humano. Iglesia en salida al encuentro del hermano. Asimismo, el Obispo comentó que se debe tener en cuenta que no sólo el Santo Padre bendijo este plan en la visita Ad Limina, sino que además con su magisterio pontificio ha ido señalando que el camino y la enseñanza de la Iglesia se fortalecen con la acción del Espíritu Santo. Los pequeños pasos que se han logrado durante este primer año son los que permitirán caminar con firmeza y seguridad. Programar el trabajo pastoral puede parecer complicado, ya que se trata de un compromiso, el cual estimula a caminar mejor; sólo se podrá aprender a programar programando. Posteriormente, dio inicio el concier-

to-conferencia, animado por el Ing. Abraham Flores Ramos, Director de PPC Editorial, el Lic. Eduardo Ortiz Tirado y Salvador Guerrero, quienes presentaron los principales ejes temáticos de la Exhortación Apostólica Evangelii Gaudium, haciendo que los asistentes reﬂexionaran sobre la necesidad de renovar las actitudes, el ánimo misionero, y que al mismo tiempo tuvieran presentes las frases más signi-

ﬁcativas que ha dicho el Santo Padre. Y así con risas, cantos, alabanzas, frases, alegría y la participación de todos, cada agente de Pastoral fue descubriendo que la alegría del Evangelio debe llenar la vida de la comunidad y la necesidad de salir de sí, para caminar y sembrar siempre de nuevo, siempre más allá. Finalmente, en un clima de fraternidad se celebró la eucaristía y se compartieron los alimentos.

Invaluable el valor histórico y cultural del descubrimiento en Teotihuacán Por: CODIPACS Teotihuacán El arqueólogo Sergio Gómez, director del Proyecto Tlalocan, que investiga la ofrenda hallada en el túnel bajo la Pirámide de la Serpiente Emplumada de Teotihuacán, aﬁrmó que “los hallazgos hasta hoy obtenidos son de una importancia capital y única, de increíble valor histórico”. Entrevistado por Notimex, explicó que la información surgida de este descubrimiento es mucha y muy variada: “Tenemos más de 50 mil objetos recuperados, materiales únicos como semillas de distintas plantas, materiales tan importantes como ámbar y hule”. No obstante, el especialista fue cauto cuando fue consultado sobre si el valor de este descubrimiento es similar al del Templo Mayor, pues acotó que cada uno tiene que ser considerado en su justa dimensión: “Cada espacio y cada lugar son importantes, no se trata de una competencia, los trabajos que se realizan en el Templo Mayor son extraordinarios, pero son cosas distintas, contextos distintos que se tienen que trabajar de forma diferente, no

podemos compararlos”; continuó: “contamos con especialistas en técnicas de física nuclear, en biología, en estudios sobre cerámica en torno a materiales lapidarios y metálicos, y en relación al posible signiﬁcado astronómico que tuvo una parte del túnel”, apuntó. Reiteró que al parecer el túnel encontrado refuerza la teoría del ciclo del Sol, del ciclo de la vida, del inframundo, pues por su orientación corresponde al mito de que la entrada a ese estamento se realiza de oeste a este, como está construida la cavidad: “En la última parte del túnel, que nosotros decimos que es el verdadero inframundo, es donde estamos encontrando la mayor cantidad de ofrendas”, reﬁrió Sergio Gómez. Subrayó que los mitos narran que esa parte es un lugar de riquezas, de abundancia y fertilidad, pero otros elementos importantes son los minerales metálicos adheridos a las paredes y techos, que al parecer recrean la bóveda celeste: “Te narran los mitos de que el inframundo tiene su propia geografía sagrada, sus propias montañas, ríos y lagos, y su propia bóveda con sus estre-

llas, entonces todos estos elementos nosotros los integramos y creemos que se trata de una representación de una metáfora del inframundo”, insistió. También consideró que tendría que replantearse la historia de Teotihuacán, porque anteriormente se pensaba que la Ciudadela era la sede del poder político y militar, pero la información que se tiene en la actualidad indica que se trataba de un santuario, un lugar al que podía entrar una gran cantidad de gente para participar en los rituales que aseguraban la continuidad del cosmos.

“Entonces tenemos que replantearnos que la Ciudadela funcionó como un santuario y un lugar donde se llevaban a cabo actividades de carácter político, donde seguramente los gobernantes asumían el poder para gobernar a sus pueblos”, precisó. “Por ejemplo, la recuperación de pequeños fragmentos de piel probablemente humana ha sido una labor muy delicada, entonces tenemos que hacer el trabajo con mucho cuidado. Adelantó que los trabajos serán reanudados a principios de 2015.

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Testimonio de mártires

El pasado 26 de diciembre celebramos en toda la Iglesia la fiesta litúrgica de San Esteban, el primer mártir cristiano que dio testimonio de su fe en Jesucristo. Ese día el Evangelio nos recuerda que la misión del cristiano en el mundo no es una tarea fácil de cumplir, sobre todo cuando el mismo Jesús dice: “Los llevarán a los tribunales, los azotarán en las sinagogas, los llevarán ante gobernadores y reyes por mi causa, así darán testimonio de mí ante ellos y ante los paganos”. En este sentido, la fiesta de San Esteban parecía terminar con la ternura y la paz que la fiesta de Navidad nos había dejado, y en la que mucho había insistido; pero el papa Francisco, en el Ángelus de ese mismo día, nos decía que la fiesta de San Esteban no rompe con la Navidad, antes bien “la desnuda del falso revestimiento dulce que no le pertenece”. La fiesta de San Esteban, comenta el Papa, “nos hace comprender que en las pruebas aceptadas a causa de la fe, la violencia es derrotada por el amor, la muerte por la vida. Y para acoger verdaderamente a Jesús en

nuestra existencia y prolongar la alegría de la noche santa, el camino es aquel indicado por el Evangelio, es decir, dar testimonio de Jesús en la humildad, en el servicio silencioso, sin miedo de ir en contra de la corriente”. Estas palabras del Papa, dichas en la ﬁesta litúrgica de San Esteban, para muchos de nosotros fueron palabras de consuelo, después de que un día antes, en México, padecíamos la profunda pena por la muerte del padre Gregorio López Gorostieta, de la Diócesis de Ciudad Altamirano. Las palabras del Papa vinieron a reforzar nuestra fe en Jesucristo, sabiendo que la vida del cristiano es exigente en la coherencia y en el testimonio, pero también bella en la entrega, sobre todo cuando la entrega por el Evangelio es la propia vida. Hoy la muerte del “padre Goyo”, como la de otros muchos sacerdotes y compatriotas muertos de manera violenta en nuestro país, sigue siendo indignante; no obstante, nuestra fe nos invita a continuar siendo ﬁeles y coherentes con el Evangelio que hemos

recibido y por el cual vivimos, nos cansamos, nos entregamos y buscamos caminos de paz. Desde este pequeño espacio invitamos a todos los cristianos y hombres de buena voluntad a ser coherentes con su

fe y a construir la paz. Al Excmo. Señor Obispo Maximino Martínez Miranda y a todos los ﬁeles de Ciudad Altamirano los acompañamos con nuestras oraciones en este momento de prueba y testimonio cristiano.

Justicia y perdón cimientos de la paz Por: Pbro. Alberto Villamil Calderón Estamos iniciando un nuevo año. ¿Qué sucederá en estos 365 días? ¿Llegaremos al término del año? ¿Qué necesitamos para establecer paz en nuestras vidas? Como humanos tenemos soluciones técnicas e inmediatistas; sin embargo, como cristianos debemos ofrecer lo que tenemos, no oro ni plata sino a JESUCRISTO, nuestra convicción más profunda que Jesucristo es nuestra paz, como lo anunciaron los ángeles a los pastores de Belén (Lc. 2,14), pues Él declara dichosos a los constructores de la paz (Mt. 5,9), ordena a sus discípulos llevar la paz a todos los hogares que visiten (Mt. 10,13) y después de su resurrección los saluda con un saludo de paz (Jn. 20,19). Todos los que formamos la Iglesia de Jesucristo tenemos la

misión de continuar su obra paciﬁcadora; por tanto, nuestra tarea es unir a los que están divididos, convocar a la reconciliación a los que están enemistados, colaborar con todos cuantos hacen algo para fomentar paz, e invitar a la conversión de los corazones para encontrar caminos de paz. El papa San Juan Pablo II enviaba en uno de sus mensajes para la Jornada Mundial de la Paz la siguiente aﬁrmación: “No hay paz sin justicia, no hay justicia sin perdón.” Los pilares de la paz son la justicia, y esa particular forma de amor que es el perdón. El perdón es ante todo una decisión personal, una opción del corazón que va en contra del instinto espontáneo de devolver mal por mal. Dicha opción tiene su punto de referencia en el amor de Dios que nos acoge a pesar de nuestro pecado, y como modelo supremo, el perdón de

Cristo, el cual invocó desde la cruz: “Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen.” Las familias, los grupos y cada uno de nosotros necesitamos abrirnos al perdón para remediar las relaciones interrumpidas, para superar situaciones de estéril condena mutua, para vencer la tentación de excluir a los otros, sin concederles la posibilidad de la espiritualidad de la comunión. Demos gracias a Dios por los beneﬁcios que nos ha concedido durante este año que terminó, y retomemos nuestro compromiso de ser Discípulos y misioneros, intensiﬁquemos nuestra participación en la Eucaristía, la lectura orante de la Palabra de Dios y la oración. Pidamos al Espíritu Santo que logremos la UNIDAD entre todos los que formamos esta gran comunidad llamada Iglesia.

Mensajero

Iglesia Universal / Iglesia México

No esclavos, sino hermanos Resumen del Mensaje del Santo Padre Francisco para la celebración de la XLVIII Jornada Mundial de la Paz Al comienzo de un nuevo año, deseo dirigir a cada hombre y mujer, así como a los pueblos y naciones del mundo, a los jefes de Estado y de Gobierno, y a los líderes de las diferentes religiones, mis mejores deseos de paz, que acompaño con mis oraciones por el fin de las guerras, los conflictos y los muchos de sufrimientos causados por el hombre o por antiguas y nuevas epidemias, así como por los devastadores efectos de los desastres naturales. El flagelo cada vez más generalizado de la explotación del hombre por parte del hombre daña seriamente la vida de comunión y la llamada a estrechar relaciones interpersonales marcadas por el respeto, la justicia y la caridad. Este fenómeno abominable, que pisotea los derechos fundamentales de los demás y aniquila su libertad y dignidad, adquiere múltiples formas sobre las que deseo hacer una breve reflexión, de modo que, a la luz de la Palabra de Dios, consideremos a todos los hombres «no esclavos, sino hermanos». A la escucha del proyecto de Dios sobre la humanidad El tema que he elegido para este mensaje recuerda la carta de san Pablo a Filemón, en la que le pide que reciba a Onésimo, antiguo esclavo de Filemón y que después se hizo cristiano, mereciendo por eso, según Pablo, que sea considerado como un hermano. Así escribe el Apóstol de las gentes: «Quizá se apartó de ti por breve tiempo para que lo recobres ahora para siempre; y no como esclavo, sino como algo mejor que un esclavo, como un hermano querido». Onésimo se convirtió en hermano de Filemón al hacerse cristiano. Así, la conversión a Cristo, el comienzo de una vida de discipulado en Cristo, constituye un nuevo nacimiento que regenera la fraternidad como vínculo fundante de la vida familiar y base de la vida social. En la historia de los orígenes de la familia humana, el pecado de la separación de Dios, de la figura del padre y del hermano, se convierte en una expresión del rechazo de la comunión traduciéndose en la cultura de la esclavitud, con las consecuencias que ello conlleva y que se perpetúan de generación en generación: rechazo del otro, maltrato de las personas, violación de la dignidad y los derechos fundamentales (…) El que escucha el evangelio, y responde a la llamada a la conversión, llega a ser en Jesús «hermano y hermana, y madre» y, por tanto, hijo adoptivo de su Padre. (…) La comunidad cristiana es el lugar de la comunión vivida en el amor entre los hermanos. Múltiples rostros de la esclavitud de entonces y de ahora Desde tiempos inmemoriales, las

diferentes sociedades humanas conocen el fenómeno del sometimiento del hombre por parte del hombre. Ha habido períodos en la historia humana en que la institución de la esclavitud estaba generalmente aceptada y regulada por el derecho. Éste establecía quién nacía libre, y quién, en cambio, nacía esclavo, y en qué condiciones la persona nacida libre podía perder su libertad u obtenerla de nuevo. Hoy, como resultado de un desarrollo positivo de la conciencia de la humanidad, la esclavitud, crimen de lesa humanidad, está oficialmente abolida en el mundo. El derecho de toda persona a no ser sometida a esclavitud ni a servidumbre está reconocido en el derecho internacional como norma inderogable. Sin embargo, a pesar de que la comunidad internacional ha adoptado diversos acuerdos para poner fin a la esclavitud en todas sus formas, y ha dispuesto varias estrategias para combatir este fenómeno, todavía hay millones de personas –niños, hombres y mujeres de todas las edades– privados de su libertad y obligados a vivir en condiciones similares a la esclavitud. No puedo dejar de pensar en los niños y adultos que son víctimas del tráfico y comercialización para la extracción de órganos, para ser reclutados como soldados, para la mendicidad, para actividades ilegales como la producción o venta de drogas, o para formas encubiertas de adopción internacional. Pienso finalmente en todos los secuestrados y encerrados en cautividad por grupos terroristas, puestos a su servicio como combatientes o, sobre todo las niñas y mujeres, como esclavas sexuales. Muchos de ellos desaparecen, otros son vendidos varias veces, torturados, mutilados o asesinados. Algunas causas profundas de la esclavitud Hoy como ayer, en la raíz de la esclavitud se encuentra una concepción de la persona humana que admite el que pueda ser tratada como un objeto. Cuando el pecado corrompe el corazón humano, y lo aleja de su Creador y de sus semejantes, éstos ya no se ven como seres de la misma dignidad, como hermanos y hermanas en la humanidad, sino como objetos. La persona humana, creada a imagen y semejanza de Dios, queda privada de la libertad,

mercantilizada, reducida a ser propiedad de otro, con la fuerza, el engaño o la constricción física o psicológica; es tratada como un medio y no como un fin. Entre las causas de la esclavitud hay que incluir también la corrupción de quienes están dispuestos a hacer cualquier cosa para enriquecerse. Compromiso común para derrotar la esclavitud Con frecuencia, cuando observamos el fenómeno de la trata de personas, del tráfico ilegal de los emigrantes y de otras formas conocidas y desconocidas de la esclavitud, tenemos la impresión de que todo esto tiene lugar bajo la indiferencia general. Aunque por desgracia esto es cierto en gran parte, quisiera mencionar el gran trabajo silencioso que muchas congregaciones religiosas, especialmente femeninas, realizan desde hace muchos años en favor de las víctimas. Se necesitan leyes justas, centradas en la persona humana, que defiendan sus derechos fundamentales y los restablezcan cuando son pisoteados, rehabilitando a la víctima y garantizando su integridad, así como mecanismos de seguridad eficaces para controlar la aplicación correcta de estas normas, que no dejen espacio a la corrupción y la impunidad. Globalizar la fraternidad, no la esclavitud ni la indiferencia En su tarea de «anuncio de la verdad del amor de Cristo en la sociedad», la Iglesia se esfuerza constantemente en las acciones de carácter caritativo partiendo de la verdad sobre el hombre. Tiene la misión de mostrar a todos el

camino de la conversión, que lleve a cambiar el modo de ver al prójimo, a reconocer en el otro, sea quien sea, a un hermano y a una hermana en la humanidad; reconocer su dignidad intrínseca en la verdad y libertad, como nos lo muestra la historia de Josefina Bakhita, la santa proveniente de la región de Darfur, en Sudán, secuestrada cuando tenía nueve años por traficantes de esclavos y vendida a dueños feroces. A través de sucesos dolorosos llegó a ser «hija libre de Dios», mediante la fe vivida en la consagración religiosa y en el servicio a los demás, especialmente a los pequeños y débiles. Debemos reconocer que estamos frente a un fenómeno mundial que sobrepasa las competencias de una sola comunidad o nación. Para derrotarlo, se necesita una movilización de una dimensión comparable a la del mismo fenómeno. Por esta razón, hago un llamamiento urgente a todos los hombres y mujeres de buena voluntad, y a todos los que, de lejos o de cerca, incluso en los más altos niveles de las instituciones, son testigos del flagelo de la esclavitud contemporánea, para que no sean cómplices de este mal, para que no aparten los ojos del sufrimiento de sus hermanos y hermanas en humanidad, privados de libertad y dignidad, sino que tengan el valor de tocar la carne sufriente de Cristo, que se hace visible a través de los numerosos rostros de los que él mismo llama «mis hermanos más pequeños». Te invitamos a leer el mensaje completo en el sitio de la Santa Sede www.vatican.va

Familia

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La familia: Tierra fértil para la restitución del tejido social

Por: Pbro. José Guadalupe Granados Fitz. CODIPACS Ecatepec Amor, justicia, paz, respeto, tolerancia, responsabilidad, perdón, caridad, solidaridad, sensibilidad, éstas y otras virtudes tienen su origen en la tierra fértil que representa la convivencia en familia. No podemos como hombres y mujeres de fe vernos sin responsabilidad social ante aquello que más nos exige en nuestro tiempo. Me reﬁero a que como miembros de una comunidad social no podemos permanecer indiferentes ante la realidad que vivimos y que nos afecta directa o indirectamente. El tejido social que nos rodea se encuentra invadido por el virus de la enfermedad mortal de la violencia e inseguridad, pero, ¿dónde encontraremos el antídoto, antivirus, la medicina para curar a nuestra sociedad de la cruel enfermedad de la violencia e inseguridad? La tenemos tan cerca de nosotros que no la vemos, no la valoramos y no la consideramos como tal. La medicina

la podemos y tenemos que adquirir en el seno de nuestras familias. Debemos aprovechar las relaciones personales que se dan en el seno familiar como tierra fértil para sembrar buena semilla, para sembrar virtudes, valores, responsabilidad y sensibilidad por el otro; para que cuando nuestros niños y adolescentes comiencen a convivir por sí mismos en la sociedad den buen fruto de lo que se ha sembrado desde la familia. La sociedad mexicana comenzará entonces a experimentar tolerancia, respeto, solidaridad, sensibilidad, entre otras virtudes y valores, pero fundamentalmente el Amor por el otro. Esto será así si las personas recibieron desde su hogar una humana y sólida formación. La sociedad es el campo donde brotan los frutos sembrados en la tierra fértil del seno familiar. ¿Qué frutos estás sembrando como hombre y mujer de fe, responsable de la educación de nuestros niños y adolescentes? En un periodo muy corto la realidad que vivamos

nos permitirá saber qué semilla plantamos en el corazón de nuestros pequeños. ¿Estás listo para agradecer a Dios por los frutos recibidos de la buena

semilla sembrada? ¿O nos quedaremos de brazos cruzados diciendo: Qué hicimos mal que nuestros jóvenes de hoy no son como los de antes?

La vida familiar no puede reducirse a los problemas de pareja

Por: seminarista José Hernández CODIPACS Teotihuacán La Solemnidad de la Sagrada Familia, que se celebra el último domingo de diciembre, es una ﬁesta que motiva a

profundizar en el amor familiar, examinar la propia situación del hogar y buscar soluciones que ayuden al papá, la mamá y los hijos a ser cada vez más como la Familia de Nazaret. La vida familiar no puede reducirse a

los problemas de pareja, dejando de lado los valores trascendentes, ya que la familia es signo del diálogo entre Dios y el hombre. Padres e hijos deben estar abiertos a hablar y a escuchar, sin olvidar la importancia de la oración familiar que une con fuerza a todos los miembros de la familia. Debemos mantenernos unidos para lograr que cada familia que habita en nuestro suelo, sea, por medio de nuestro Padre y mediante el Espíritu Santo, fuente de Caridad Divina, y un verdadero santuario de vida y amor para las nuevas generaciones. Hacer que la Gracia de Dios guíe los pensamientos y las obras de los cónyuges, para bien propio y de todas las familias del mundo. Orar para que las jóvenes generaciones encuentren en la familia un fuerte sostén humano, para que crezcan en la verdad y el amor. Siempre hay que

recordar que el amor, reforzado por la gracia del Sacramento del Matrimonio, se maniﬁesta más fuerte que cualquier debilidad o crisis que puedan padecer nuestras familias. Qué hermoso es para los esposos reﬂejarse en la Virgen María y en su esposo José. ¡Cómo consuela a los padres especialmente si tienen una pena muy grande por la pérdida de un hijo o la enfermedad de éste! Cómo ilumina a los novios que piensan en sus proyectos de vida. El hecho de reunirnos a contemplar la imagen de la Sagrada Familia nos permite disfrutar de manera especial el don de la intimidad familiar y nos impulsa a brindar calor humano y solidaridad no sólo a los miembros de nuestro núcleo sino a todo hermano y hermana, en las diversas situaciones por desgracia numerosas en las que por varios motivos falta la paz, la unidad, la solidaridad, la armonía, el amor, en una palabra, falta la "familia". Es importante que como la Familia de Nazaret, la Iglesia y cada uno de sus miembros puedan cumplir esa misión fecunda en todas nuestras familias, en todas las naciones de la tierra.

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@joven

Contracorriente

Pobreza: Primera luz para el joven que quiere ser diferente. Por: P. Juan J. García Al parecer a ningún joven le gusta verse relacionado con la palabra pobreza ¿Quién quiere ser pobre? ¿No deseamos todos ser los más ricos o disfrutar de la mayor seguridad económica posible y llenarnos de los lujos que nos ofrece el mundo actual? Sin duda el joven que decide abrazar la pobreza es un “espécimen raro”, un auténtico ser “anticultural”. Propongo dos motivaciones para vivir en pobreza. La primera es imitar a Jesús; aunque él quizá nació en una familia de clase media baja, vivió de adulto voluntariamente pobre (Lc 9,58). La segunda motivación es más práctica y se desprende de la primera: Jesús fue pobre para ser libre y no estar atado a nada ni a nadie. Cuando no nos obsesionamos con acumular bienes terrenales, tenemos mayor libertad

para… vivir sin miedo, disfrutar de lo sencillo de la vida, no vivir envidiando, amar, desprendernos y hacer el bien. Pienso que aquí radica el verdadero sentido de la pobreza: no para vivir mediocremente sino para vivir disfrutando lo que Dios nos da cada día. ¿Cómo hacerlo? Ya que no estamos obligados por un voto o una regla de ninguna congregación religiosa, creo que podemos autodisciplinarnos con estos sencillos puntos: 1) Distingue entre lo que quieres y lo que necesitas. 2) Despréndete de lo que no necesitas. 3) Deshazte de las cosas que crees necesitar pero sin las cuales puedes vivir. 4) Aventúrate a conocer a los pobres y aprende de ellos a disfrutar el pan nuestro de cada día. Tal vez al principio esto te costará trabajo, pero al realizar los primeros pasos, seguro encontrarás la recompensa a tu esfuerzo, sintiéndote más pleno, libre y feliz.

La pobreza, en este sentido, es algo que se nos diﬁculta adoptar en nuestra vida; sin embargo, cuando lo hacemos, nos

regala mucha paz y libertad. Aventúrate a elegir ser pobre desde tu propio estilo de vida y comienza a ser libre.

Drogas: ¿paraíso o inﬁerno?

Millones de personas usan drogas en nuestros días. ¿Se hallan satisfechos? Buscan un paraíso, pero se encuentran con un inﬁerno. Al principio, la persona es asaltada por una oleada de colores y sonidos, en eso que llaman "viaje", pero pasado ese efecto suele entrar en una profunda depresión con sensación de debilidad. La alucinación puede llegar a ser tal,

que una mancha en la pared puede verse como si fuese un monstruo. Cuentan que una muchacha que había masticado un chicle con LSD quedó poseída de tales ataques de furia, que lanzaba los objetos de un lado a otro con ímpetu salvaje. Al fin, tomó la jaula del loro, la estrelló contra la pared, sacó al animal de la jaula y lo comenzó a comer. Murió ahogada por las plumas. Otro, salió desnudo a dirigir el tránsito. Muchos inclusive matan, porque ven en sus amigos a sus peores enemigos. ¿Por qué se han difundido tanto las drogas? ¿Cuál es la razón? ¿Qué es lo que lleva a la juventud a buscar un camino tan tortuoso que daña tanto la personalidad, la salud y felicidad? Hay muchos que piensan que para erradicar las drogas basta combatir a los narcotraficantes. Proponen toda clase de medidas, haciendo un gran despliegue de fuerzas militares y estrictos controles; sin embargo, no se atacan las causas. Si no hubiese consumidores, no habría traficantes y el negocio se

derrumbaría fácilmente. La causa real está en la desintegración de la familia, el deterioro de los valores morales y religiosos, y en el vacío que siente nuestra juventud. Aturdidos por la música ensordecedora, arrastrados por el frenesí del placer, absortos en los afanes de la supervivencia diaria, no se le da lugar a las cosas espirituales. No hay tiempo para Dios, y el alma queda desprovista del rocío necesario que ayuda a germinar la fe y a desarrollar las fuerzas morales necesarias para sobreponernos a los embates y las presiones de la vida diaria. El toxicómano puede llegar a tal esclavitud, que en el momento que le falta la droga sufre una verdadera pesadilla. Por ejemplo: cuando el que ha utilizado morﬁna, heroína, etc. se abstiene, después de 12 horas se siente intranquilo y débil, suda, tiembla, un líquido acuoso ﬂuye por la nariz y los ojos, y duerme mal. Luego se agrava, produciéndose vómitos explosivos, a veces hasta con sangre, dolores abdominales y violentas diarreas. Puede adelgazar hasta 5 kg diarios, presentando un aspecto infrahumano. Todo eso por haber comenzado quizás por curiosidad, imitación o por tratar de llenar, con algo equivocado, el vacío de su vida.

Queridos jóvenes: Evitemos aquellas cosas que pueden turbarnos tanto y dañar completamente nuestra vida. Las consecuencias de la droga son terribles. Esta esclavitud no mata solamente a quienes la consumen, sino también a quienes rodean a esa persona. Pero, ¿cómo podemos librarnos de los estupefacientes? Sólo hay una manera de resolver el problema. "El consumidor mismo debe hacerse responsable de sus actos y efectuar cambios en su propia vida". El que consume drogas reﬂeja una falta de responsabilidad personal, ya que el más desesperanzado de los adictos sabe que está destruyendo su cuerpo y su mente. Para dejar dicho hábito, es necesario que esa responsabilidad cobre interés, que una convicción impulsora lo lleve a la acción. Pero esa fuerza de voluntad se ha ido debilitando, por eso, si te encuentras amenazado por estos problemas, busca a Dios. Él desea ayudarte a hacer el cambio más sublime, y llenar tu vida con otros valores. Basta que hagas una entrega incondicional a Cristo. Busca aquello que realmente puede hacerte feliz: el cultivo de las cosas espirituales. Fuente: Biblia2000.com.ar

Dios te llama

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Mira cómo se aman

Por: Hna. Julia Trinidad Félix Diócesis Valle de Chalco Acudían asiduamente a la enseñanza de los apóstoles, a la comunión, a la fracción del pan y las oraciones (Hch. 2, 42). Cuando escuché por primera vez este texto me impresionó, ya que lo vivía de una manera muy palpable, en mi pobre y humilde casa. En medio de la naturaleza sentía una paz que me invadía y diariamente esto me llamaba a querer tener ese encuentro con el mismo cielo, lo expresaba pero aún no tenía una idea clara. Me gustaba estar mucho tiempo cuando Jesús Eucaristía estaba expuesto. En este momento meditaba la pasión de Jesucristo, sólo tenía seis años. Los años pasaron y ver la alegría de las religiosas y su entrega hacia los más necesitados marcó mi vida. Al cumplir ocho años busqué una comunidad religiosa, donde me dijeron que no podían aceptarme porque en ese momento era menor de edad, y para ingresar es necesario terminar la preparatoria. Esto fue

mi primer reto; seguí estudiando y al concluir la secundaria empecé a trabajar como instructora en primaria. Cuando llegué a la edad de quince años tuve confusiones muy fuertes, una de las oraciones que aprendí desde pequeña fue el Santo Rosario, que en esa etapa era lo único que me llenaba de fortaleza y le pedía a la Madre de Dios que me iluminara para saber cuál era el lugar indicado para mí. No fue fácil, me resistí a pesar de que mis padres me apoyaban. El 19 de mayo de 1997 decidí buscar una comunidad religiosa y elegí las Misioneras del Smo. Salvador y Sta. Brígida. Cuando vi el rostro lleno de alegría de la Madre María Gómez, quien me recibió, dije: éste es el lugar, llevé mi proceso por un año y el 18 de agosto inicié la etapa del noviciado. El 8 de diciembre de 2000 realicé mi profesión temporal, en la cual mi Comunidad me dio la oportunidad de estudiar preparatoria, y algunos cursos, que me han ayudado para emprender la Misión que Dios ha puesto en mis manos. La experiencia en

mi apostolado ha sido maravillosa, he ido descubriendo en los diferentes estados del país así como en Venezuela, el gran valor de las personas. Cada día resuena esta frase: "El amor preferencial por los pobres” niños, jóvenes y adultos. Hoy más que nunca en ellos encuentro el amor apasionado a Cristo cruciﬁcado reﬂejado en los más pobres. Actualmente trabajo apoyando en la formación pastoral del grupo de Laicos Misioneros Brigidinos; con matrimonios a través de la catequesis permanente, Jóvenes en formación y procesos personales, en la Capilla de San José Tlacotitlán, Parroquia de San Andrés Apóstol, Tlalamac, México.

Deseo que así como un día descubrí mi vocación con el testimonio de alguien más, yo pueda ser ese instrumento para el llamado que Dios te hace…

Madre, dame a tu Santísimo Hijo como esposo Por: Ofelia Rodríguez Ortíz Hermanas Misioneras Agnus Dei Diócesis de Ecatepec Soy Ofelia Rodríguez Ortíz, nací en Ríoverde, San Luis Potosí. Mi inquietud por seguir a Cristo inició a los 11 años cuando veía a los niños que jugaban, gritaban y reían; me preguntaba: ¿conocerán a Dios? Me sentí responsable de dárselos a conocer, pronto di catecismo, ¡sentía una gran necesidad de colaborar más con Dios! Veía a las religiosas y deseaba ser como ellas para estar más con el Señor. La única a la que le platicaba de esta inquietud siempre fue la Santísima Virgen María, ella guió mi proceso y pienso que fue la que me impulsó a buscar el lugar indicado; yo le decía: “Madre, dame a tu Santísimo hijo como esposo”. Inicié mi discernimiento con las Misioneras Guadalupanas del Espíritu Santo. Mientras estaba en esto recibí una carta de la Madre María Trinidad Huerta Avilés (fundadora de las Hermanas Misioneras Agnus Dei). Posteriormente seguimos en comunicación por medio del teléfono. La Madre me impulsaba a orar por mi vocación, después me invitó a una misión de tres semanas, asistí y días antes de que ter-

minara le dije a Jesús: “Señor, yo te quiero seguir pero tengo muchos planes, quizá sea en unos tres años más”. Sentí dolor por lo dicho y le expresé: “Señor, pero si tú quieres que ya te siga háblame, pero háblame lo más fuerte que puedas, porque si no, no podré escucharte. ¡Y vaya que sí me habló! A los 15 días yo ya había ingresado a dicho Instituto, dedicado a la Familia. Me siento muy feliz de haberme consagrado al Señor en esta Obra. Sé que por la gracia de Dios y mi consagración, muchas familias se salvarán, muchos matrimonios seguirán unidos a pesar de las diﬁcultades. Estamos unidas al Cordero de Dios que quita el pecado del mundo, que desde el Antiguo Testamento en ﬁgura del cordero pascual salvó y alimentó a las familias hebreas, y ahora sigue salvando y alimentando a todos. Vive la aventura de seguir a Cristo Cordero de Dios, acompañando a las familias a descubrir su ser y quehacer en la Iglesia y el mundo. Contáctanos: Tel: (55) 5755-7072 Celular: 553853-8847 y 554014-3520 Correo: hnas.mis_agnus_dei@yahoo.com Facebook: Hermanas Misioneras Agnus dei Twitter: @misagnusdei.

Iglesia y Cultura

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La Epifanía Por: Pbro. Mariano I. Montiel Diócesis de Nezahualcóyotl La fiesta de la Epifanía tiene su origen en la Iglesia de Oriente. A diferencia de Europa, el 6 de enero tanto en Egipto como en Arabia se celebraba el solsticio, festejando al sol victorioso con evocaciones míticas muy antiguas. Epifanio explica que los paganos celebraban el solsticio invernal y el aumento de la luz a los 13 días de haberse dado este cambio; nos dice además que los paganos hacían una fiesta significativa y suntuosa en el templo de Coré. Cosme de Jerusalén cuenta que los paganos realizaban una fiesta mucho antes que los cristianos, con ritos nocturnos en los que gritaban: “La virgen ha dado a luz, la luz crece”. Entre los años 120 y 140, los gnósticos trataron de cristianizar estos festejos celebrando el bautismo de Jesús. Siguiendo la creencia gnóstica, los

cristianos de Basílides celebraban la Encarnación del Verbo en la humanidad de Jesús cuando fue bautizado. Epifanio trató de darle un sentido cristiano al decir que Cristo demuestra así ser la verdadera luz, por lo que los cristianos festejaban su nacimiento. Hasta el siglo IV la Iglesia comenzó a celebrar en este día la Epifanía del Señor. Al igual que la fiesta de Navidad en Occidente, la Epifanía nace contemporáneamente en Oriente como respuesta de la Iglesia a la celebración solar pagana, que trataban de sustituir; esto explica por qué la Epifanía se llama en Oriente Hagia phota, es decir, la santa luz. Esta fiesta nacida en Oriente ya se llevaba a cabo en la Galia a mediados del siglo IV; hay vestigios que indican que ésta fue una gran fiesta para el año 361. La celebración de dicha fiesta es ligeramente posterior a la de Navidad.

La Iglesia va acompañada por la permanencia de sus valores tradicionales

Por: Pbro. Manuel Méndez F. A lo largo de la historia de nuestro país, la Iglesia católica ha tenido una inﬂuencia innegable en la conﬁguración del sistema político y de la cohesión social. La presencia de la estructura eclesiástica ha permanecido a pesar del triunfo

del liberalismo en el siglo XIX y de otros procesos que amenazaron con reducir su campo de acción. Aquí se propone que la adecuación de la Iglesia va acompañada por la permanencia de sus valores tradicionales, una cualidad que deriva de su composición dual y que asegura su reproducción como

agente en el espacio sociopolítico a pesar de las múltiples transformaciones del entorno donde se desenvuelve. Palabras clave: Iglesia católica, orden sociopolítico, orden temporal, estrategias de reproducción, México contemporáneo. Un breve vistazo a la historia de nuestro país es suficiente para comprobar que la Iglesia católica ha sido, desde siempre, la institución religiosa más influyente en todos los ámbitos de la vida cotidiana. Más allá de la sacralidad que la rodea, la Iglesia gozó de una presencia prácticamente total en la sociedad y de una relación privilegiada con el poder civil en México cuando menos hasta el gobierno de Benito Juárez. La separación entre el Estado y las iglesias se estableció oficialmente en la Constitución de 1857. A partir de entonces, la relación entre la institución eclesiástica católica y el gobierno civil varió dependiendo de las convicciones particulares de quien se encontrara en el poder. A más de cien años de las Leyes de Reforma, la relación entre el Estado y las Iglesias continúa enarbolándose como un tema de discusión central en México. Pero la persistencia del debate no se debe a una simple falta de severidad por parte de las autoridades civiles,

sino a los atributos que hacen de la Iglesia católica un interlocutor ineludible. La Iglesia católica ha sido un agente, y no un receptor pasivo, en la configuración de sus vínculos con el Estado laico en México. La Iglesia católica es una institución religiosa jerárquica de alcance universal. Como tal, tiene una profunda influencia en procesos de carácter político, social y cultural que ocurren desde el espacio internacional hasta las pequeñas localidades. Esta presencia tiene efectos que pueden apreciarse en dos órdenes distintos: el espiritual y el temporal. La premisa anterior conduce a una interrogante que resulta imprescindible para comprender las acciones de la institución eclesiástica: ¿cómo se construye su relación con el entorno? No cabe duda de que esta pregunta ha sido formulada en más de una ocasión por los científicos sociales, que han buscado responderla a partir de perspectivas muy diversas. En México la Iglesia católica ha sido siempre un agente en la construcción de sus vínculos con el Estado laico. Esta propuesta rechaza la concepción de la estructura eclesiástica como un mero receptor pasivo.

Sección Infantil

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Queridos Santos Reyes ¡Amiguitos! Si no han escrito la carta a los Santos Reyes, todavía es tiempo. Aquí tienes una hoja donde puedes escribirles. Además te invitamos a iluminar a la Sagrada Familia que recibe los regalos de los tres Santos Reyes Magos ¡FELIZ DÍA DE REYES! Te recordamos que puedes enviar tu cartita de agradecimiento a los Reyes Magos, felicitación por el Año Nuevo, por el mes del amor y amistad o lo que tú quieras publicar en esta sección. Envíala a: sorclara@hotmail.com

Sigue los puntos y descubre a un viajero muy especial

Queridos Melchor, Gaspar y Baltazar:

¿Sabías que?... La palabra "Epifanía" signiﬁca "Manifestación", porque Jesús "se da a conocer". La ﬁesta celebra la adoración de los Santos Reyes al Niño Jesús. Los regalos que llevaron los Reyes a Jesús fueron: Oro, porque Jesús es Rey; Incienso, porque Jesús es Dios; y Mirra, porque Jesús es Hombre. ¡Los regalos! Hacer regalos a los niños el día 6 de enero se debe al recuerdo de la generosidad que estos Santos Reyes tuvieron al adorar al Niño Jesús y hacerle estos obsequios.

Mensajero

La Sal y Luz del mundo

Los laicos: ¿debemos orar en Facebook?

Por: María del Carmen Máximo L. Diócesis Valle de Chalco En Facebook, Twitter y otras redes sociales encontramos publicaciones de todo tipo: fotografías, videos, publicidad, propaganda… un mundo de información al alcance de un click. Sin embargo, abunda la información falsa, el contenido superﬂuo y lo que es más grave: críticas y ofensas contra Dios. Si como explica el Catecismo de la

Iglesia católica: “La oración es la elevación del alma hacia Dios”, ¿debe ocupar un espacio dentro del superficial ciberespacio? ¿Debemos publicar nuestra oración, una cita bíblica o alguna reflexión en Facebook? Pienso que sí, y para afirmar esto no me baso en el propio criterio, sino en la Palabra de Dios contenida en la Biblia. Jesús nos dijo: “…cuando vayas a orar, entra en tu aposento y, después de cerrar la puerta, ora a tu Padre, que está

allí, en lo secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará” (Mt 6,6). Pero la oración no sólo puede ser privada, el apóstol Pablo en sus cartas nos invita a orar de manera comunitaria: “Pero les ruego, hermanos, por nuestro Señor Jesucristo y por el amor del Espíritu, que me ayuden orando por mí a Dios” (Rom 15,30). Nuestro Señor Jesucristo oraba antes de tomar decisiones importantes y con el Padrenuestro nos enseñó a pedir al

Padre. La oración en nombre de Jesús es propia de sus misioneros y discípulos, y si la compartimos en el mundo digital, Él escuchará nuestro llamado: “Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy en medio de ellos” (Mt 18,20). Dios no va a leer en el muro ni le va a dar like, pero cuando la oración pasa por la mente y el corazón, al escribirla Dios la escucha, porque escribir es una manera de hacer oración. Agradecer a Dios de todo corazón, proclamar todo lo bueno que nos ha dado y sentir el apoyo de la comunidad virtual, sin caer en el exhibicionismo, es válido y provechoso. En lo personal no me gusta que me etiqueten en publicaciones irrelevantes, promociones de compra y venta, propaganda política y en imágenes religiosas publicadas por superstición y sin propósito evangelizador. Como laicos comprometidos debemos mejorar las posibilidades de las redes sociales, porque dice San Pablo: “Todo me es lícito, pero no todo conviene; todo me es lícito, pero no todo edifica” (1 Cor 10,23). El papa Francisco ha dicho que si bien presenta algunos aspectos problemáticos como la manipulación y la exclusión, “Internet puede ofrecer mayores posibilidades de encuentro y de solidaridad entre todos; y esto es algo bueno, es un don de Dios”. La oración comunitaria nos edifica y unifica mientras compartimos nuestra fe. El Señor siempre escucha nuestra oración, también por Facebook.

Bioética para todos La Diócesis de Nezahualcóyotl, a través de su Instituto Diocesano de Formación para Agentes Pastorales, ofrece el curso "Temas Selectos de Bioética", que contribuye a la formación de los agentes de Pastoral y que se impartirá los jueves de las 16:00 a las 19:00 horas, del 15 de enero al 28 de mayo de 2015. Los presbíteros, religiosos, religiosas, seminaristas y un laico que preste servicio pastoral en alguna parroquia gozarán de una beca. Los temas a estudiar son: Antropología de la sexualidad, aborto, anticonceptivos, métodos naturales de reco-

nocimiento de la fertilidad, eutanasia, ortotanasia y distanasia, los cuales se abordarán desde la ﬁlosofía, la legislación sanitaria y la medicina. Las inscripciones serán los domingos 4 y 11 de enero de 2015 de las 9:00 a las 13:00 horas, en la Capilla Jesús, Señor de la Divina Misericordia en Av. Bordo de Xochiaca 2-A, Col. Tamaulipas, sección Las Flores, Ciudad Nezahualcóyotl, Estado de México, C.P. 57300 (a un costado de la Uni-

versidad La Salle). En el caso de los laicos becados les solicitamos presentar el formato que su párroco les proporcionará y una copia de la cre-

dencial de elector. Para mayor información, comunicarse al 044 55 38 89 80 82 con Guillermina Hernández Martínez.

Mensajero

Comunicado de la CEM por la muerte del P. Gregorio López Gorostieta

Los obispos de México nos unimos a la pena que embarga a S.E. Mons. Maximino Martínez Miranda, a la Diócesis de Ciudad Altamirano, al Seminario Mayor “La Anunciación” y a la familia López Gorostieta por el sensible fallecimiento del P. Gregorio López Gorostieta, quien perdiera la vida de forma injusta y violenta. Conﬁados en la vida nueva y eterna que Dios nos ofrece en Jesús, nacido en Belén para salvarnos, pedimos al Señor que conceda al P. Gregorio el eterno descanso y fortalezca con la esperanza cristiana a sus familiares, a los seminaristas, a los formadores, a S.E. Mons. Maximino y a toda la Iglesia que peregrina en Ciudad Altamirano. Haciéndonos eco del sentir de muchos mexicanos, repetimos: ¡Basta ya! No queremos más sangre. No queremos más muertes. No queremos más desparecidos. Exigimos a las autoridades el esclarecimiento de éste y de los demás crímenes que han provocado dolor en tantos hogares de nuestra patria, y que se castigue conforme a derecho a los culpables. Invocando la intercesión de Santa María de Guadalupe, renovamos nuestra invitación a unirnos para pedir a

Dios por la conversión de todos los mexicanos, especialmente de quienes olvidan que somos hermanos y provocan sufrimiento y muerte, y para que todos nos comprometamos a ser agentes en la construcción de un México justo, reconciliado y en paz. Por los obispos de México. † José Francisco Card. Robles O. Arzobispo de Guadalajara Presidente de la CEM † Eugenio Lira Rugarcia Obispo Auxiliar de Puebla Secretario General de la CEM

Mensaje del Papa por el asesinato del P. Gregorio Excmo. Mons. Maximino Martínez Miranda, Obispo de Cd. Altamirano Profundamente apenado al recibir la triste noticia del asesinato del padre Gregorio López Gorostieta, el Santo Padre expresa su más sentido pésame a Vuestra Excelencia, así como al clero,

comunidades religiosas y fieles de esa amada diócesis, a la vez que ofrece sufragios por el eterno descanso del sacerdote de Cristo, víctima de una injustificable violencia. Su Santidad, al expresar una vez más su firme reprobación de todo atentado a la vida y dignidad de las personas, exhorta a los sacerdotes y demás evangelizadores de la diócesis a proseguir con ardor su misión eclesial a pesar de las dificultades, siguiendo el ejemplo

de Jesús, el buen pastor. Con tales sentimientos, mientras desea hacer llegar también a los familiares del padre López Gorostieta su cercanía en tan dolorosa prueba, el Sumo Pontíﬁce imparte a dicha comunidad eclesial la confortadora bendición apostólica como signo de esperanza cristiana en el Señor resucitado. † Cardenal Pietro Parolin Secretario de Estado de Su Santidad

La libertad religiosa es un derecho inalienable Durante el Ángelus en la ﬁesta de San Esteban el recuerdo de numerosos mártires cristianos de hoy

News Va. 27 de diciembre de 2014.Una invitación a reforzar «en todas las partes del mundo el compromiso por reconocer y asegurar concretamente la libertad religiosa» dirigió el papa Francisco en el Ángelus que rezó con los ﬁeles en la Plaza de San Pedro, el vier-

nes 26 de diciembre, fiesta de San Esteban. Al recordar la figura del primer mártir, el Pontífice pidió oraciones por los numerosos «mártires de hoy», que «son discriminados, perseguidos y asesinados por su testimonio de Cristo». “Hoy rezamos de modo particular por

cuantos son discriminados por su testimonio de Cristo. Quisiera decirles a cada uno de ellos: si llevan esta cruz con amor, han entrado en el misterio de Navidad, están en el corazón de Cristo y de la Iglesia”, dijo el Papa. El día después de Navidad, el Obispo de Roma volvió a la Plaza del Santuario de San Pedro, esta vez para rezar el Ángelus con muchísimos fieles y peregrinos, con ocasión de la fiesta de San Esteban, primer mártir de la Iglesia. Explicó que el Evangelio de esta fiesta dice: “Serán odiados a causa de mi nombre. Pero el que persevere hasta el fin se salvará” y consideró que estas palabras del Señor, cuando envía a sus discípulos en misión, “no turban la celebración de la Navidad, sino que la despojan del falso revestimiento empalagoso que no le pertenece y nos ayudan a comprender que en las pruebas aceptadas a causa de la fe, la violencia es vencida por el amor, la muerte por la vida”. Dijo que aunque no todos somos

llamados, como Esteban, a derramar propiamente la sangre, “a cada cristiano se le pide ser coherente en cada circunstancia, con la fe que profesa”. El Sucesor de Pedro insistió que el camino es propiamente el indicado por este Evangelio, esto es, “dar testimonio de Jesús con humildad, en el servicio silencioso, sin miedo de ir a contracorriente y de pagar en persona”. Y pidió rezar “para que gracias al sacriﬁcio de estos mártires de hoy, se refuerce en cada parte del mundo el compromiso para reconocer y asegurar concretamente la libertad religiosa, que es un derecho inalienable de cada persona”. Al ﬁnalizar la oración y la bendición, el Papa agradeció a todos los mensajes y saludos de Navidad: “No siendo posible responder a cada uno, expreso hoy a todos mi sentido agradecimiento, especialmente por las oraciones. ¡Gracias de corazón! ¡Que el Señor los recompense con su generosidad!”