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Cuento “El perro y el diablo”

El perro y el diablo

Había una vez un señor que tenía un perro. Una madrugada, mientras dormía, llegó el diablo y le dijo al perro: —Sabes, voy a comerme a tu dueño. —No vas comértelo, porque yo le cuido y no lo permitiré —dijo el perro. —No me importa, me lo comeré —aseveró el diablo. —Bueno, pues si quieres comértelo lo dejaré, con la condición de que cuentes todos los pelos que tengo —propuso el perro. El diablo, a quien le encantan los retos, aceptó y empezó a contarlos. Iba muy rápido; pero ¡Claro, cómo que era el diablo! Cuando llegó a la cola del perro, éste se sacudió y el diablo perdió la cuenta. —Ya me confundiste —reclamó. —Pues empieza de nuevo —dijo el perro. El diablo reinició la cuenta y cuando llegó a la cola, el perro se sacudió otra vez. —Ya me confundiste nuevamente —replicó el diablo. Pues así, una y otra vez, cuando el diablo estaba contando el perro se sacudía. Empezó a clarear el día y el gallo ya cantaba, cuando el diablo dijo: —Me voy, volveré otro día. Fue así como el perro logró que el diablo no se comiera a su dueño.

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Martínez Huchim, A. P. (1999). “El perro y el diablo”. En Programa de Apoyo a las Culturas Municipales y Comunitarias, Cuentos enraizados (pp. 28 -29).

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