ÉPOCAS EN LA ESCUELA
21 de septiembre
Imagen: “El rapto de Perséfone, origen griego de la
primavera.”
La diosa Demeter, Madre Naturaleza, vivía alejada del Olimpo. Era hermosa, y a su paso todo reverdecía y daba frutos en abundancia. Démeter vivía sobre la Tierra, y gracias a eso, el mundo era un vergel. Démeter tuvo una hija con Zeus, una hermosa niña a quien llamó Perséfone. La niña era la felicidad de su madre, y su inspiración para crear nuevas y bellas formas sobre la Tierra. El tiempo pasó y Perséfone se convirtió en una hermosísima muchacha, y solía andar por los campos junto a las ninfas, admirando y recogiendo flores. Hades, Señor del Inframundo, codiciaba la belleza de Perséfone, y cierto día, mientras la joven estaba en uno de sus paseos, abrió una grieta en la tierra y la raptó. Cuando Démeter supo lo ocurrido, dejó de trabajar. Las plantas comenzaron a secarse. Perdieron sus flores primero, luego sus colores, sus hojas… lentamente el paisaje se fue volviendo seco y gris. Zeus no podía soportar lo que estaba sucediendo, y decidió intervenir para que Démeter recuperara a su hija y la vida volviera a florecer en la tierra. Hades no accedió a devolverla, pero si a compartirla. Desde entonces, Perséfone es la Reina el Inframundo, hasta que el dia del equinoccio, sube a la Tierra a vivir junto a su madre. Entonces, el corazón de Démeter se llena de alegría, y la Tierra renace en brotes y flores, el color y el perfume vuelven a dar vida al paisaje, hasta el equinoccio siguiente, cuando el otoño anuncia que Perséfone vuelve a vivir en el mundo bajo la Tierra.