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Las minutas salvadoreñas
Las minutas son un postre que se vende en todas las calles de El Salvador. Las minutas salvadoreñas son un tipo de helado que se prepara con hielo raspado. Son refrescantes y tienen mucho sabor y personalidad. Las minutas salvadoreñas están saborizadas con una amplia variedad de jarabes de frutas e ingredientes como la mermelada de tamarindo y frutas.
Cuando los salvadoreños escuchan la palabra minutas lo que le viene a la mente es una delicia compuesta hielo molido o raspado con jarabe de fruta, como fresa, piña, vainilla, u otros.
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En El Salvador, las minutas las venden los minuteros, palabra que significa “el señor que vende minutas”. Estos minuteros son fácilmente identificables, ya que suelen empujar un viejo carro de madera o una carretilla con una gran variedad de botellas llenas de varios jarabes de colores. Las bocas de estas botellas generalmente tienen un dispensador de plástico blanco que permite exprimir el jarabe sobre el hielo raspado.
El hielo raspado generalmente está envuelto en un recipiente de plástico rodeado de hielo con sal. Esto ayuda a que el hielo no se derrita tan rápido en los climas más cálidos. El hielo raspado proviene de una gran familia de postres a base de hielo hechos de finas virutas de hielo y diferentes ingredientes dulces como leche condensada o jarabes.
MINUTAS “MINULAND”
José lleva ya 4 años trabajando como minutero en Minuland, al ver las necesidades por la que él y su familia pasaban y por la falta de un empleo formal, decidió emprender en un negocio de minutas, aunque no ha sido fácil recorrer el camino que él ha tomado, pues como en todos los negocios siempre hay dificultades grandes y retos que lo hacen desmotivarse y a no querer seguir trabajando en ese ámbito, “cuando el clima esta lluvioso o hace frío las ventas bajan” es lo que dice José.
A pesar de las dificultades José, no se rinde y siempre recibe con una sonrisa, carisma y amabilidad a las personas que quieran degustar de una deliciosa y colorida minuta, llamando más la atención de los niños, jóvenes y turistas que se pasean por el Centro de Santa Ana.
Ubicados a un costado del Parque Libertad justo enfrente de la Catedral, esperando a los turistas desde las 9:00 am, para ofrecerles su producto y así puedan degustar de sus ricas minutas.
