ESTE LIBRO HA SIDO ESCRITO E ILUSTRADO POR…
Maitane Mijancos Virginia Hoyos Lilou Ruellan Roque López Alejandra Arangüena Irene Albo Vega Castro Luca Maxim Andoni Luis
CRIE, Viérnoles 2020.
Soy Luna. Me gustan los gorros de purpurina y los vestidos de unicornios voladores. Soy muy alta y llevo muy corto el pelo, aunque me gustaría tener el pelo largo. Soy un poco presumida, loca, maga y… ¡mucho más!
La pingüina vive en el desierto. Su casa está hecha con palos secos. Por dentro, a la derecha, tiene una piscina con agua muy fría.
Fuera tiene un jardín. A la izquierda, tiene un cactus de hielo, a su lado, otro de arena y, por último, a la derecha, margaritas de color azul, rosa y amarillo. ¡Está supersatisfecha!
Un día la pingüina se encontró con un pingüino que tenía las plumas de oro, se llamaba Tierra. Era majo, amable, tímido, bajo y ni flaco ni gordo. Tenía unos auriculares de plástico todo el día. De repente un día, el pingüino que estaba bailando la canción de “Indeciso”, no se dio cuenta que una pingüina no dejaba de mirarle. La pingüina sintió algo, pero no sabía qué era. Se fue corriendo porque no sabía escribir y quería que alguien le ayudara.
Enseguida llegó Pepito Pig dispuesto a escribirle una carta a al pingüino. -¡Hola pingüino! ¿Te gustaría jugar en el barro, comer patatas y dormir en la granja?
Te espero.
LUNA Pero a la pingüina no le gustó y dijo: -¡No, a mi no me gusta nada de eso!
Al día siguiente, le fue a visitar un dromedario que, inmediatamente, se puso a escribir la carta con una pluma de buitre. “Querido pingüino: ¿Quieres pasar la sequía de 2 meses conmigo, haciendo una caminata sin agua de 100 km cada día? la pingüina Luna.
Atentamente,
Pero a la pingüina no le gustó y dijo: -¡NOOOO! Y mil veces ¡¡¡¡¡NOOOOO!!!!!
Por la tarde se encontró con Bob Esponja que, con mucho esfuerzo, escribió una carta con un lápiz de coral.
“Querida Luna: Te invito al CangreBurger a comer hamburguesas, patatas, batidos… Te espero y, si quieres, te vienes al fondo del mar conmigo a pasear. Besos, Luna.” Pero a la pingüina no le gustó y dijo: -¡No, no y no! No me gusta nada lo que me has puesto en la carta.
A la mañana siguiente, se encontró con un mosquito que, en un momento, le escribió la carta en un papel de seda.
“Querida pingüina: Te invito a un sorbo de sangre muy rico, y también podemos oler caca y jugar a averiguar de quién es. Un saludo. La pingüina.”
Pero a la pingüina no le gustó y dijo: -¡No, no y no! ¡qué asco, sangre no!
La pingüina ping ina triste y desolada, pensaba: - Si yo pudiera escribir le diría… quieres ir a dar un paseo por el desierto y luego parar a comer unos peces en el único restaurante del desierto. También podríamos ir al solarium del Sahara a contemplar las estrellas de allí. Luego ir al concierto de “Los Pingüinitos” o ir al Palacio de los Pingüinitos, volando con las avionetas mágicas.
El pingüino ping ino, que estaba paseando, escuchó muy emocionado a la pingüina.
- Me encanta lo que me has propuesto y ojalá alguna vez lo hagamos. A mí me gusta comer polos, volar en alfombras mágicas, nadar en las nubes y en el lago; y hacer castillos de arena gigante.
Al final, el pingüino y la pingüina se casaron e hicieron todos los planes que tenían en mente.
ESTE LIBRO ES UNA ADAPTACIÓN DEL ÁLBUM ILUSTRADO “EL LEÓN QUE NO SABÍA ESCRIBIR”, ESCRITO E ILUSTRADO POR MARTIN BALTSCHEIT. EDITORIAL LÓGUEZ EDICIONES.