Ambiente
Ciudad Guayana Del 29 de abril al 5 de mayo de 2016
Semanario
Correo del Caroní
A11
Abandono estatal propagó las llamas en el incendio más grande de la historia del bosque de Uverito Antes de Semana Santa, cuatro días de fuego arreciaron con entre 15 mil y 30 mil hectáreas de los pinos Caribe plantados por la antigua CVG Proforca. FOTOS WILLIAM URDANETA
n Oriana Faoro ofaoro@correodelcaroni.com
Durante marzo ocurrió el mayor incendio forestal que haya afectado en toda su historia a la plantación de pinos Caribe de Uverito, perteneciente a Maderas del Orinoco (antigua CVG Proforca). Desde la vía nacional a El Tigre, estado Anzoátegui, se divisan árboles chamuscados de lado y lado. Desde el aire, se aprecian las amplias hectáreas afectadas por las llamas, incendios que no pudieron ser combatidos a tiempo por el poco equipamiento con que cuentan los bomberos forestales de Maderas del Orinoco, según contaron trabajadores de la estatal que pidieron permanecer en el anonimato. Antes de Semana Santa (del 21 al 27 de marzo) hubo cuatro días continuos de incendios forestales sin intervención de esta o ninguna estatal para sofocar las llamas y salvar la plantación. “Aquí hay 15 bomberos de guardia, siempre vienen, pero trabajan con las uñas. Los rastrillos están en malas condiciones, no tienen dotación, tienen las botas rotas…”, contó un trabajador del campamento Los Hachos, estado Anzoátegui, uno de los tantos afectados por los incendios. Los bosques de Uverito son un proyecto de la antigua CVG Proforca, que comprende 500 mil hectáreas de pinos Caribe, planta que tarda entre 15 y 18 años en crecer totalmente para ser aprovechable en aserraderos o en producción de pulpa de papel. Los trabajadores estiman que se han quemado unas 30 mil hectáreas de terreno entre enero y abril de 2016: “Nunca se había visto algo así”. Según estadísticas de Proforca a las que Correo del Caroní tuvo acceso, de 1980 a 1999 se quemaron 30 mil hectáreas de terreno. Es decir, en cuatro meses de 2016 se incendió la misma cantidad que en 19 años. En la carretera hacia El Tigre, las llamas se extendieron por encima del asfalto, por medio de pavesas o brazas que vuelan gracias al viento, debido al nulo mantenimiento de cortafuegos. “Se movieron cuando ya el fuego había quemado lo que tenía que quemar”, indicó un trabajador.
No es “El Niño”
El jueves 21 de abril hubo un despliegue de funcionarios de la Corporación Venezolana de Guayana (CVG) en los bosques de Uverito. Correo del Caroní constató la presencia del campamento en la vía a El Tigre,
pudo ser que el anterior presidente de Maderas del Orinoco, Jesús Medina, mandó a quemar las plantaciones por las denuncias por corrupción dentro de la empresa que el sindicato formalizó en el Ministerio del Trabajo.
Abandono total
Vecinos de varias residencias de Alta Vista Norte protestaron por tres días para reclamar públicamente la sequía de ocho días
Respuesta tardía Los trabajadores consultados en Los Hachos refirieron la ayuda de CVG como tardía, toda vez que los incendios vienen ocurriendo desde hace más de tres semanas. “Muchas veces la candela llega hasta donde tiene que llegar. Mira cómo se perdió eso en La Isabel”, campamento de Maderas del Orinoco que se quemó por completo “y está irrecuperable”, pues se dejaron avanzar hasta su consumación natural.
Pérdida de materia prima Trabajadores de Maderas del Orinoco aseguran que en el mercado se comercializa la madera quemada a menor precio que la óptima, cuando el incendio es controlado a tiempo: “Esa madera que usted ve en la carretera, quemada, esa sirve. ¿Qué pasa? Que la dejan perder. Dejan eso ahí hasta que se caiga”. Según la diputada Hernández, el haberse perdido 15 mil hectáreas, se estaría hablando de la demanda de madera de todo un año que fue arrebatada por las llamas, arropadas en la poca prevención y desatención estatal. Además, se han perdido grandes áreas que también son el pulmón vegetal de esa zona, ya que una sola hectárea de pino puede absorber anualmente 10 toneladas de Dióxido de Carbono para convertirlas en Oxígeno.
comandado por el presidente de la CVG, Justo Noguera Pietri. Ofreció a la prensa regional un sobrevuelo en varias hectáreas de bosque y admitió que se habían quemado la mayor cantidad de hectáreas de bosque en todas la historia de la estatal maderera. Este sobrepasó las 5 mil hectáreas incineradas en 2010. De acuerdo con los trabajadores para este trabajo, los incendios forestales rara vez son espontáneos o causados por la sequía. De hecho, los causados por la naturaleza son aquellos fuegos generados por la caída de
un rayo en un árbol, durante las lluvias. “Por ahí agarraron unos cazadores y les van a echar la culpa de todo esto, pero aquí nunca más se le hizo mantenimiento a los cortafuegos, no hay tractores para ir a los incendios, es un desastre”, contó la fuente consultada, que tiene 20 años trabajando en la empresa. Mientras la CVG mantiene la tesis de que, además de la sequía, cazadores furtivos prenden fuegos para atrapar a las especies que habitan dentro de los bosques y poder matarlas, los empleados de la estatal sostienen que
Trabajadores consultados por este trabajo denunciaron años de precaria dotación al personal y a los bomberos forestales, así como nulo mantenimiento a los cortafuegos de las plantaciones.
Un exgerente de la antigua CVG Proforca, conocedor del proyecto Uverito, informó a Correo del Caroní que la gestión forestal de la estatal en el bosque artificial más grande del mundo era óptima, tanto, que las plantaciones “estaban aseguradas por empresas internacionales, que reponían los daños de las quemas forestales porque sabían que la supervisión de la empresa era eficiente”. Según la fuente, “en los últimos 15 años ha habido un descuido total” de los bosques de Maderas del Orinoco, que entre Anzoátegui y Monagas arropan a 85 comunidades campesinas, cuyas conductas indiscriminadas también habrían incidido en la propagación de los fuegos. Entre las deficiencias que permiten lo narrado está el deterioro de las torres de detección de incendios. Antes había siete operativas, hoy solo están funcionando tres. Desde la carretera a El Tigre se puede apreciar cómo los cortafuegos, áreas desprovistas de vegetación para evitar la propagación de incendios forestales, están cubiertos de maleza. Según los trabajadores, lo mismo se repite bosque adentro. Ante esto, Noguera Pietri contestó “hay que evaluar la gerencia de la empresa (Maderas del Orinoco) y tomar los correctivos. Esto aquí hay que mejorarlo”. CVG no tiene incidencia en el bosque de Uverito, sino el Ministerio de Industrias Básicas, que estrenó titular hace un mes, con el nombramiento de Juan Arias. El despliegue de CVG el pasado jueves movilizó camionetas Toyota “machito”, una Hummer, una cisterna de Barrio Tricolor, un camión de combustible de Maderas del Orinoco, un tractor de CVG y un avión AS 532 Cougar del Grupo Aéreo de Operaciones Especiales, perteneciente a la Fuerza Aérea, proveniente de Maracay. Los equipos de otras estatales confirmaron el precario equipamiento del que hablaron los trabajadores consultados por Correo del Caroní y lo comunicado por la diputada Hernández: De tenerlos habrían frenado el incendio. De haber una gerencia participativa, el presidente de Maderas del Orinoco, José Mas Queralt, hubiera sido el vocero de toda la actividad.