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La artillería del pensamiento
La Unidad de Diversidad Biológica investiga para su mejor aprovechamiento
,OS SERES VIVOS TIENEN SUS DEFENSORES EN EL )6)# Dinora Sánchez, directora del organismo, señala que puede requerirse “disminuir el uso selectivo sobre alguna de las especies tradicionalmente empleadas” para favorecer su conservación, y acota que la incorporación de nuevos rubros “debe fundamentarse sobre el conocimiento de su biología y ecología”, lo que incluye “el reconocimiento e incorporación de los saberes ancestrales y tradicionales” T/ Vanessa Davies F/ Cortesía IVIC Caracas
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ecir que la diversidad biológica de Venezuela es un tesoro multicolor podría sonar a lugar común, pero no lo es que el propio Estado busque las vías para protegerla, para conocerla y para valorarla en su justa dimensión. En el Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC) funciona la Unidad de Diversidad Biológica, adscrita a la dirección de la institución, que nació –según lo explica su directora, Dinora Sánchez– para sistematizar, procesar y difundir la información necesaria “para la ejecución y seguimiento de la Estrategia Nacional para la Conservación de la Diversidad Biológica 20102020 y su plan de acción”, así como para “promover la formación y capacitación de actores vinculados con la conservación de la diversidad biológica”. En una entrevista vía correo electrónico, Sánchez resalta que la estrategia y su plan de acción fueron construidos de manera colectiva y reconocidos en el plan de la nación “para garantizar la defensa, conservación y aprovechamiento sustentable de la diversidad biológica nacional”. Recuerda que se definen siete líneas estratégicas, “entre las cuales se incluye la gestión de la información para la conservación de la diversidad biológica”.
RECURSO PRIVILEGIADO Venezuela, rememora, “es privilegiada por poseer una enorme diversidad biológica, que de hecho ha llevado a considerarla como un país megadiverso”. De la diversidad biológica “dependen el equilibrio ecológico; el acceso al agua potable, a la energía eléctrica; la disponibilidad de alimentos, medicamentos, así como la permanencia de la diversidad cultural de los pueblos indígenas y campesinos”. Por ello, señala Sánchez, “es un recurso estratégico imprescindible para garantizar el buen vivir de los venezolanos”.
–En la situación de Venezuela, ¿cómo hacer un aprovechamiento sustentable de la diversidad biológica? –El hecho de que seamos un país megadiverso nos brinda la posibilidad de diversificar los rubros que usamos para cubrir las diferentes demandas de la población, sobre todo las necesidades básicas (alimentación, medicamentos, agua, energía). Disminuir el uso selectivo sobre alguna de las especies tradicionalmente empleadas puede favorecer su conservación. La incorporación de nuevos rubros, no obstante, debe fundamentarse sobre el conocimiento de su biología y ecología, lo que incluye el reconocimiento e incorporación de los saberes ancestrales y tradicionales, sobre los cuales diversas comunidades campesinas y pueblos indígenas han fundamentado su vínculo con la naturaleza de una manera sustentable. La investigadora subraya que esa “diversidad de saberes” debe ser tomada en cuenta “para el diseño de programas de aprovechamiento, que cuenten con el acompañamiento y regulación del Estado”. No obstante,
“La diversificación de rubros, la generación de conocimientos y la promoción de programas poco impacto tendrán mientras la sociedad sustente su desarrollo en un uso ilimitado de los componentes de la diversidad biológica” advierte, “la diversificación de rubros, la generación de conocimientos y la promoción de programas poco impacto tendrán mientras la sociedad sustente su desarrollo en un uso ilimitado de los componentes de la diversidad biológica”. Sánchez indica que, entre las políticas incluidas en la estrategia de diversidad biológica se encuentra acciones dirigidas, por una parte, a regular el aprovechamiento no sustentable de esa riqueza, y por otra, a promover su apro-
vechamiento sustentable. “La primera considera aspectos como regular y restringir las prácticas de aprovechamiento no sustentable”, así como también “regular el acceso a los recursos genéticos” como una manera “de resguardar la soberanía y distribución equitativa de los beneficios derivados”. La segunda promueve “el aprovechamiento sustentable a partir de experiencias ecológicamente exitosas en manejo de poblaciones naturales, la implementación de programas socioproductivos a nivel local, las prácticas tradicionales y ancestrales de aprovechamiento de la diversidad biológica, entre otras tantas acciones”.
CONTRA LAS INVASORAS La unidad desarrolla acciones en tres direcciones, detalla Hernández: la sistematización y generación de información sobre diversidad biológica; su difusión y socialización y la formación y capacitación de actores vinculados con esta área. Uno de los proyectos que, en este contexto, son ejecutados, es el de la gestión integrada de las colecciones biológicas del IVIC.
%NTRE ANlBIOS TE VEAS Algunas especies de anfibios no solo se encuentran en peligro de extinción por las acciones de los seres humanos, sino que han sido amenazadas por seres cercanos a ellas. “No estamos realizando un trabajo especial con anfibios; sin embargo, colaboramos con un proyecto coordinado por Francisco Nava, del Centro de Ecología del IVIC, que lleva por título Evaluación del impacto, distribución y métodos de control de la especie invasora rana toro”, señala Dinorah Sánchez. Esta es una “contribución a la construcción y ejecución colectiva de su plan de control”. Alude directamente a la rana toro, que “es considerada una de las peores especies invasoras por los impactos negativos que puede ocasionar en las poblaciones de anfibios nativos donde es introducida”. En Venezuela “fue introducida hace unos 15 años en el estado Mérida, donde se ha vinculado con la disminución de al menos una especie de rana endémica de la zona”, reportó. “Este proyecto es coordinado por la Unidad y se desarrolla en colaboración con diferentes laboratorios del IVIC que tienen a su cargo el manejo de colecciones biológicas”. Con recursos de la institución y del IVIC se busca garantizar el mantenimiento de las muestras “mediante la atención a las deficiencias en materia de infraestructura, equipamiento y mobiliario”. Otro proyecto es el fortalecimiento del Sistema Venezolano de Información sobre Diversidad Biológica. Sobre este punto, Hernández aclara que el sistema “es una plataforma de construcción colectiva para difundir y socializar información sobre diversidad biológica”. Con la coordinación del Ministerio del Poder Popular para la Ciencia, Tecnología e Innovación y del Ministerio del Poder Popular para el Ambiente, se espera consolidar un grupo de trabajo “que contribuya con los diferentes procesos vinculados con la gestión de la información” de los encuentros de diversidad biológica, lo que también contribuirá “a generar estadísticas que contribuyan con el seguimiento de