
3 minute read
REVELAN AVANCES PARA LA INDUSTRIA DE LA CONSTRUCCIÓN
NUEVAS ÓRDENES EJECUTIVAS Y ADMINISTRATIVAS PARA SIMPLIFICAR Y AGILIZAR EL SISTEMA DE PERMISOS FUERON EL TEMA PRINCIPAL EN EL ESTADO DE SITUACIÓN QUE OFRECIÓ LA GOBERNADORA DE PUERTO RICO, JENNIFFER GONZÁLEZ COLÓN, EN EL EVENTO “EN RUTA HACIA LA RECONSTRUCCIÓN” CONVOCADO POR LA ASOCIACIÓN DE CONSTRUCTORES DE PUERTO RICO (ACPR).
Las medidas reveladas por la primera mandataria fueron acogidas con entusiasmo por los miembros de la industria de la construcción en un salón lleno a capacidad. Para Agustín Rojo Montilla, presidente de la ACPR, la Gobernadora tiene la visión correcta. A pesar de que en términos históricos, el sector de la construcción no está en su mejor momento, “estamos viendo que la administracion tiene la visión correcta de cuáles son los pasos que hay que tomar para corregir eso”.
Tanto para la Gobernadora como para el sector de la construcción es vital simplificar los permisos, sus requisitos, acabar con la vaguedad en los reglamentos. “Necesitamos agilidad, que las respuestas sean oportunas, destacó González Colón.
Una de las órdenes ejecutivas mencionadas fue la OE-2025-003: Procedimiento expedito para la presentación y tramitación de solicitudes de permisos para proyectos con fondos federales, proyectos de emergencia, así como para proyectos críticos o estratégicos. Con esta orden, las agencias concernidas, en un término de 20 días, deberán emitir su opinión sobre un proyecto. De no recibir respuesta, se entenderá que las agencias no tienen recomendaciones por lo que el funcionario de la OGPe deberá darle trámite a la solicitud de permiso y deberá adjudicarla sin dilación alguna.
En años recientes el sector de construcción generó cerca del 8% del PIB de Puerto Rico y se estima que género cerca de 50,000 empleos directos en el año 2023. “A pesar que estos números suenan saludables, uno de los mayores retos que enfrentamos hoy es la escasez de vivienda asequible”, apuntó Rojo Montilla.

Para el presidente de la ACPR tener un PUT tan restrictivo, y un proceso de permisología difícil ha provocado que el 55% de la vivienda en la isla es informal o ilegal, lo que la hace más vulnerable a desastres naturales y reduce la recaudación fiscal porque no pagan CRIM.
“Estas son viviendas que se construyen en zonas inundables sensitivas a desastres naturales y cuyos techos se pierden cuando nos azotan los inevitables huracanes. La manera de evitar esto es fomentar la construcción formal en cumplimiento de códigos facilitando el proceso de permisos”.