el ojo y medicina general
Queratitis herpética.
Figura 2: Queratitis epitelial herpética en forma de un mapa geográfico.
Queratitis herpética La queratitis herpética es una inflamación de la córnea causada por una infección del virus grupo herpes, siendo el Herpes Simplex tipo I el más común. Puede afectar a otros tejidos oculares como la conjuntiva causando una conjuntivitis, la retina causando retinitis y a la piel de los párpados y los labios. Dr. Victor Charoenrook Oftalmólogo Unidad de Superficie Ocular
E
l cuerpo humano es el único lugar donde el virus del Herpes puede reproducirse y seguir vivo. Por ello, el contagio se produce por contactos físicos o por la saliva. El virus infecta a través del epitelio de las mucosas y a través de las heridas, donde se replica, causando una infección local que puede ser una conjuntivitis si la vía de entrada es el ojo o una dermatitis con pequeñas vesículas si la vía de entrada es la piel. Normalmente establece infecciones latentes, sin dar ningún tipo de síntomas, en las células neuronales por donde viaja a través del sistema nervioso hasta depositarse en los ganglios nerviosos. Es en este lugar donde el
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virus permanece. Posteriormente el virus también puede viajar en dirección opuesta para llegar al lugar inicialmente infectado, causando recurrencias. En la infección ocular, el periodo de incubación puede variar entre 1 y 28 días. El primer contagio suele pasar desapercibido y sin síntomas. Si el cuadro se hace clínico, aparece una conjuntivitis que se asemeja a la causada por cualquier otro virus. En la mitad de estos casos, el virus afecta al epitelio de la córnea, causando pequeñas heridas de forma punteada y superficial. Una vez que el virus ha entrado por el epitelio de la conjuntiva o de la córnea, viaja a través de la rama oftálmica del nervio trigémino hasta llegar al ganglio neuronal del mismo lado del ojo afectado. El virus se queda latente y reside en el ganglio. Varios factores y agentes estimulantes pueden provocar una replicación y activación del virus. La menstruación, la fiebre, la expo-
sición a la luz ultravioleta, las alteraciones psíquicas, traumatismos corneales leves, el láser excímero, instilaciones de algunos colirios oculares, son algunos ejemplos. Pacientes inmunodeprimidos o con atopia, son propensos a que se active el virus. Al reactivarse, el virus viaja desde el ganglio hacia el ojo, con recurrencia de la enfermedad. La córnea es el tejido más comúnmente afectado causando la queratitis herpética. Aproximadamente el 94% de las infecciones afecta sólo a un ojo, pues el virus no contagia al ganglio del ojo contralateral. La queratitis epitelial herpética, suele ser localizada y superficial. Se la reconoce por las pequeñas heridas que se agrupan y adoptan una forma dendrítica, lineal y con ramificaciones, debidas a la invasión destructiva del virus a las células epiteliales de la córnea. El paciente cursa con dolor ocular, lagrimeo, ojo rojo y fotofobia. La pérdida de visión ocurre cuando la lesión afecta el área central.