

García, Marisa Mónica
Lo que no muere/ Marisa Mónica García - 1a ed. - Ciudad Autónoma de Buenos Aires: Barnacle, 2020.
106 p.; 21 x 15 cm.
ISBN 978-987-4044-57-0
1. Poesía Argentina. I. Título. CDD A861
Editora General: Diseño de tapa: y
Primera edición: Agosto de 2020
(c) 2020, Marisa Mónica García Buenos Aires- Argentina
ISBN 978-987-4044-57-0
BARNACLE
barnacle.cia @gmail.com www.barnacle.com.ar
Impreso en la Argentina
Queda hecho el depósito que previene la ley 11723
Escisión
La otra orilla es áspera respira rumores nuevos paños de luz, miedos y sudores, ríos de lava en la estrenada ribera.
Querer ser y no querer el ser entre pantanos entrecruzados, rayuela de emociones nuevas y pulso loco que abreva y abreva.
Más acá, el acá más sórdido tiene un nicho de algodones mullidos, tentación irrevocable cuando amainan los iracundos vientos del allá.
La mascarada de la vida bulle con vidrios empañados de misterio la cobardía se acomoda en su trono sentada sobre un valiente manto de oro.
Más acá, más allá, más afuera, más adentro, tic, tac, tic, tac, esplendoroso y agobiante. Querer ser y no querer el ser. Una orilla y la otra sobreviven la una en un nicho, la otra siempre espera por más.
Refugio
En puntas de pie sobre un vidrio opaco desconozco los rostros del afuera.
Una y otra vez el rocío nocturno miente la vida.
Sólo la verdad brota de este pecho fatigado, goza la ecuanimidad, la transparencia de lo bello. Invita a desafiar la noche diurna. Salir al adentro.
Diamanteonírico
Soñé el sueño de tu sueño que soñaba soñar con mi vientre. ¿Los sueños tienen sueños?, pregunté. Y tú, que soñabas que el sueño de tu sueño soñaba con mi vientre, me hiciste tuya, desperdigando en miles de cristales el diamante de lo inaprensible.
Lazari o L
uciérnaga:
¿Porqué te ocultas?
Ve con él esta noche de lunas furtivas y violetas sagaces que envuelven con su canto de sirena a las estrellas.
Siembra cunas de albor entre el follaje y a la altura de su misma cabeza. Que el hombre sepa: la tiniebla más pura se erige con dos ojos de retinas sanas y corazón aletargado.

QUE
Aires, año veinte del siglo.
