36 • Aves Argentinas N&C |
Diciembre 2014
Frondosos y húmedos bosques recubren las laderas; el guindo es una de sus especies arbóreas.
Gracias a que la isla se ubica en el extremo sur de la corriente fría de Malvinas, se acercan a sus costas aves y mamíferos marinos que viven en mar abierto o en Antártida. Sorprende la exuberante vegetación que recubre las laderas y disimula el relieve desigual. A diferencia del bosque andino-patagónico, dominado por especies que pierden el follaje en invierno como el ñire y la lenga, el bosque magallánico está compuesto por especies perennes. Guindos y canelos son acompañados por maitenes, calafates, helechos y musgos. Recién en las franjas superiores hallamos bosques de ñire y lenga, espléndidos y nunca talados. La vegetación es impenetrable debido a lo intrincado de los arbustos cuya altura, ni muy alta ni muy baja, hace tedioso el avance. En algunos sitios la cobertura es tan densa que aunque uno cree caminar sobre el suelo, lo hace sobre ramas. Tan prolífica vegetación brinda refugio a especies como el huillín, nutria patagónica en peligro de extinción y al ratón de los guindales que no habita ningún otro lugar del mundo. También protege
cabras domésticas, descendientes de aquellas que liberó el Capitán Piedrabuena en 1868. Este ganado sobrevive en un ambiente extremo desde hace casi 150 años, por lo que puede aportar valiosa información genética a otras poblaciones de caprinos como ya vislumbrara el Dr. Vinciguerra en la expedición científica de 1883. Al observar el follaje surgen aves como el comesebo patagónico, de riguroso azul y amarillo o la ratona que busca pequeños huecos donde construir su nido, para lo que llega a utilizar los sitios más extraños. En cuanto a los cantos, el zorzal patagónico da la nota muy temprano como sus primos de la ciudad, mientras la gallineta común, oculta junto al agua, emite estridentes llamados. Si nos acercamos al borde de los puertos, hallaremos a la garza bruja pescando inmóvil, fija la vista en las límpidas aguas esperando descubrir la figura de una estrella de mar, erizo, pulpo, calamar o pez que retribuya su paciencia. En el sector occidental hay sitios bajos y laderas donde el suelo desaparece bajo turberas. En estas depresiones con agua permanente que acumulan musgos e ínfimas plantas carnívoras durante cientos de años es fácil hundirse hasta las rodillas. Aquí encontramos también praderas del pasto tussok de los malvineros, donde nidifican pingüinos magallánicos y de penacho amarillo. El mismo desolado paisaje vegetal se encuentra en los islotes de Año Nuevo que emergen del mar como mesetas parejas, casi circulares. Sobre estas plataformas expuestas al viento viven pingüinos patagónicos, cormoranes, gaviotines y hasta conejos soltados en la Isla Observatorio. Allí también se refugian los lobos marinos, elefantes marinos del sur y nutrias marinas que fueron cazados, casi hasLa garza bruja pesca erizos, calamares, pulpos y peces en las costas marinas.