En el sector
CERDEIMAR, 130 años de historia
El Presidente de la Xunta de Galicia junto a miembros de la familia Cerdeimar .
Cerdeimar, grupo familiar de empresas del sector alimentario con sede en Camariñas (A Coruña), dedicado al cultivo, depuración, transformación, producción y comercialización de pescados y mariscos frescos, refrigerados y en conserva, ponía en septiembre pasado el broche de oro a los actos de su CXXX aniversario. Entre otras personalidades de la vida política, económica y social, el acto central de la efeméride contó con un testigo de excepción: el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijoo.
El colofón a un programa Tras una ofrenda matutina en la iglesia parroquial de la villa, la cita comenzó a mediodía con el descubrimiento de una colosal escultura conmemorativa situada a la entrada de la factoría y la actuación del Coro de Mujeres de Camariñas Brisas do mar. Más de trescientos invitados, entre autoridades, personalidades, proveedores, colaboradores, amigos y trabajadores arroparon en todo momento a los integrantes del consejo de administración del Grupo y a la familia Cerdeiras. Tras recorrer sus instalaciones industriales, Alberto Núñez Feijoo escribió una cariñosa dedicatoria en el libro de honor de la empresa que resume la trayectoria y valores de una saga comprometida “con Camariñas, con su pueblo, con sus mujeres... Familia de mar, familia de iniciativa, familia de éxito. Gracias, en nombre de Galicia”. El aperitivo de bienvenida, los discursos de rigor y el homenaje a los últimos trabajadores jubilados dio paso a un almuerzo que se prolongó durante más de dos horas. Fue el colofón a un año de festejos, de iniciativas socioculturales y deportivas que dejó patente no sólo el estrecho vínculo del Grupo con la villa, sino también su compromiso responsable con a Costa da Morte y con Galicia. Una
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filosofía que Andrés Cerdeiras, su codirector general, resumió durante su discurso en seis valores: “honradez, respeto, trabajo, formación, educación y familia”, su mejor garantía de estabilidad y perdurabilidad desde 1884. “Hemos llegado hasta aquí sobre todo respetando a la empresa y, a la vez, entendiendo que lo primero es la familia, tal y como nos inculcaron nuestros padres”, explicó. “A día de hoy, la familia está unida gracias a la empresa y que la empresa funciona, y sigue en el mercado, gracias a la familia. Somos la cuarta generación de la saga: parte de la familia participa directamente en la gestión, el resto como propietarios, tomando decisiones responsables como renunciar a cualquier beneficio para seguir invirtiendo y fortaleciendo a la empresa”.
Compromiso con Camariñas y a Costa da Morte Camariñas ocupa un lugar especial para la saga. “Aquí ha vivido, y vive, nuestra familia; aquí se desarrolló el negocio que nos dio la oportunidad de formarnos… Además, nos sentimos responsables, como empresarios y como empresa, de las familias ligadas a la nuestra que dependen de nuestra actividad. Y las nuevas empresas, Mariscos de Camariñas y 1884, y la constitución como grupo lo ratifican: lejos de desarraigarnos o deslocalizar la empresa, hemos seguido invirtiendo aquí”, aseveró Cerdeiras. “Tenemos ideas y proyectos suficientes ya en marcha, o pendientes de algún trámite, para optimizar las fortalezas de la empresa conforme a los tres pilares que sustentan nuestra estrategia: especialización, diversificación y diferenciación y contribuir a las economías local y comarcal. Somos una empresa con raíces que suministra al mercado, nacional e internacional, productos de calidad contrastada, manufacturados en Galicia, fabricados por gente de aquí”.
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