jóvenes tímidos, sobreprotegidos y atosigados de actividades, sino dejarlos jugar, aventurarse, inventar. Necesitarán sueños para saber que sus hijos precisan mucho más sus caricias, sus besos, sus elogios, sus historias de vida, que dinero, ropa de marca, ordenadores y videojuegos. Los sueños y los maestros
Maestros: ustedes no necesitarán sueños para tener elocuencia, metodología, conocimiento lógico. Ni necesitarán sueños para gritar a sus alumnos, imponer silencio en el aula, decirles que