Daniel Defoe sentenció: «todo nuestro descontento, por aquello de lo que carecemos, procede de nuestra falta de gratitud por lo que tenemos». Louise L. Hay, dice: «una actitud de agradecimiento tiene el poder de convertir las dificultades en oportunidades, los problemas en soluciones». Para el viejo filósofo, ser agradecido, además de armonizarte con el universo, es una excelente manera de que dejes de concentrarte en los problemas, en las cosas negativas y fijes la atención en que vives diariamente en el límite de los milagros. David Yonggi afirma que «[Hay] personas [que] tienen una predisposición natural para quejarse, ¿nos quejamos más de lo que agradecemos? Debemos saber por qué es importante ser agradecido, porque dar gracias a Dios honra. Dar gracias trae bendiciones. Dar gracias trae gozo y felicidad. Dar gracias trae sanidad interior. Dar gracias nos ayuda a experimentar milagros y a superar dificultades». Permítame compartirle, con palabras de todos y de siempre, mi oración de fin de año: ¡Gracias, Padre! Por enseñarme que el amor es el secreto más grande de la felicidad; Porque no puede amar a otro, aquel que no se ama y no se respeta a sí mismo; Por darme la lección que mientras el ego es incapaz de dar, el amor todo lo comparte en humildad; Por instruirme que los problemas, y no el poder, son los que fortalecen mi espíritu; Por educarme que un abrazo dado con la fuerza del amor, es la medicina perfecta; Por llevarme a vivir en el milagro irrepetible del hoy a plenitud; Por enseñarme a escuchar la sabiduría de mi voz interior; Por reemplazar mis temores con la fuerza de la fe y la confianza; Por regalarme la elocuencia del silencio, que acalla mi incesante diálogo interno; Por darme momentos de soledad, para encontrarme conmigo mismo; Por “guiarme por mi intuición y no por mi interpretación”; Por ayudarme a no torturarme por aquello que no depende de mí; Por conectar a través de la oración mi alma con mi cuerpo, alineando mi vida con el universo; Por instruirme que “el perdón es dos veces bendito, bendice al que lo da y al que lo recibe”; Por enseñarme a encontrar mi oficio de vida; Por enseñarme, con la enfermedad, el valor de la salud; y con la adversidad, el secreto del éxito; ¡Gracias Padre! por darme la oportunidad de tener la humildad de volver a empezar;
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Por enseñarme a no llorar por el ayer, ni irritarme por el futuro, sino a vivir el hoy beneficiosamente; ¡Gracias! por enseñarme que “para ser feliz, basta con tener buena salud y mala memoria”; Porque la felicidad, no está en lograr todo lo que anhelo... sino en valorar tus bendiciones. Porque en el 2011 fuiste mi fuente de paz y alegría, y mi faro de luz y bendiciones…
¡Gracias, Padre! 1 elmistico.com.ar/louise_hay/GRATITUD-LOUISE_L_ HAY.docSimilares
2 L Hay, Louise. Recientemente apodada lo más cercano a una santa viviente por la prensa Australiana, es también conocida como una de las fundadoras del movimiento de autoayuda. filosofo2006@prodigy.net.mx/Facebook: filosofoguemez/Twitter: @filosofoguemez
Análisis 1137 Análisis Político Político 1137 1 1 de de enero enero de de 2012 2012