Un corto paseo por el camino de tierra
Parque Nacional Terepaima En Venezuela, en territorio compartido entre los municipios “Palavecino” del estado Lara y “Araure” del estado Portuguesa se localiza el Monumento Natural “Parque Nacional Terepaima”. Decretado parque nacional en 1979; posee un área de 18.650 ha de extraordinaria belleza natural, las cuales podemos ver, oler y sentir cuando nos aventuramos a recorrer sus fascinantes espacios desde los 500 hasta los 2000 m snm. (1) Es una experiencia de vida disfrutar de sus naturales encantos.
Por: ATeresa. Márquez-Araque/2021
Luego del respectivo registro en el puesto de Guardaparques, nos encontramos con este imponente cactus que emerge solitario entre la hierba, y parece desafiar a los arbustos vecinos.
Mientras que nuestros habituales compañeros de ruta toman ventaja, el camino de ocres contrates se viste de colores; y a nuestra vista, la vida florece entre blancos, rojos, rosados y violeta.
Aunque en el horizonte las nubes conservan el gris de amanecer, ya el astro Rey comienza a expresarse intensamente. A la orilla del camino, un par de árboles de bajo porte saludan con sus inquietas sombras.
Por allí… Una hermosa y fragil orquídea le da sombra a una huella humana…
Un “Mirador” que siente la tristeza del abandono, …pero viene la recompensa… Al voltear la mirada, vemos una cubierta de nubes sobre la ciudad de Barquisimeto y, a la distancia los perfectos senos de las montañas lejanas.
Cada metro de ascenso se convierte en kilómetros de emociones… Y es que la euforia no tiene límites, cuando en un claro del camino nos espera un cactus, que parece tener atrapadas entre sus dedos, las nubes.
…y entre mariposas seguimos avanzando…
Al intenso ritmo de un corazón lleno de fatigadas emociones, se divisan las “Antenas”. Pero apenas, estamos a poco menos de la mitad del camino. Las Guacharacas saludan inquietas. Tal vez, a la distancia, algún oso andino nos observa temeroso de perder su hábitat. Entre el silencio y la quietud se escuchan sonoros gemidos, algún mono capuchino o araguato nos dice: “Aquí estamos”. …Y el verde del paisaje, es salud para el alma.
Más flores, extrañas criaturas que nos miran desde los árboles y una cuesta que parece infinita nos indican que estamos llegando a …
Por un rato, la neblina nos arropa. Hacemos un breve descanso, y nos disponemos a continuar…
Por aquí vamos. A ratos, sin consciencia somos unos más en las ramas de los árboles.
El camino es todo nuestro, solo árboles, flores y los seres que habitan la montaña; nos acompañan, desde lejos o desde la orilla del camino; respetan nuestro silencioso andar.
Los músicos de la montaña, los pájaros, las abejas, los grillos, el viento, las hojas de los árboles nos regalan en su mejor concierto “La melodía perfecta”.
El camino no tiene fin.
La puerta parece estar abierta, invitando a pasar por ese estrecho espacio de luz; la prudencia nos advierte que es hora de dar la vuelta y retornar.
El “Parque Nacional Terepaima”
Con las piernas cansadas, el alma y el espíritu reconfortados, y el corazón más vivo que nunca, regresamos por el camino andado. En la mochila ya está el próximo paseo, a la vuelta de siete días…
… “es un importante refugio de biodiversidad para la ecorregión de Bosques Montanos de los Andes. Su vegetación abarca desde bosques semideciduos y herbazales en las zonas más bajas, hasta bosques nublados siempreverdes en las cimas montañosas del parque. Terepaima alberga poblaciones de especies amenazadas como el oso frontino o el paují copete de piedra”(1) Es un ecosistema amenazado (1) PARKSWATCH (2004). Perfil del Parque Nacional Terepaima.