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HECHA CON MOSAICOS DE 60 PAÍSES

POR: CLAUDIA CASTRO, DI.

FOTOS: MAURICIO MALDONADO.

Una de las atracciones turísticas más famosas y simbólicas de Río de Janeiro en Brasil, son Las Escaleras de Selarón. Estas llevan una historia inmemorable por su triste tragedia. Las escaleras se conocen como una “obra viva y mutante”, componiéndose de un colorido mosaico que constan de 410 pies (250 metros) de alto con 215 escalones en total, cubiertos por más de 2 mil azulejos de 60 países distintos.

Este proyecto fue realizado por al artista plástico chileno Jorge Selarón, quien se estableció en Brasil en 1982 después de viajar el mundo huyendo de la dictadora de su país. Por su adoración al país, Selarón decidió renovar las escaleras que se encontraban frente su casa como un regalo a él. Comenzó con azulejos de colores azul, verde y amarillo, representando la bandera brasileña, y luego empezó a utilizar azulejos de todo el mundo que conseguía en el centro de Rio de Janeiro. Un detalle que se ve repetidamente es la imagen de una mujer embarazada; él contó que en su pasado había dejado a su amante embarazada en Chile y luego de unos años, se entera de su muerte. Por todos los años que se dedicó a la obra, esta se convirtió en una obsesión para él, vendiendo pinturas cada vez que se quedaba sin azulejos para poder continuar su proyecto.

La obra culminó el 2013, tras la muerte del artista. El cuerpo se encontró sin vida en las escaleras una mañana. Todavía no se sabe si era suicidio u homicidio pero se estableció que el cuerpo fue prendido en fuego. Existen teorías que un excolaborador lo amenazaba desde un año antes de su muerte en relación con las ventas de sus pinturas, por lo cual se piensa que fue un homicidio.

Las escaleras de Selarón son visitadas por turistas diariamente debido a su belleza, historia y espectacular diseño. Algunos visitantes se les ve buscando los azulejos de sus países. Es una de las joyas de Brasil que no se puede perder si alguna vez visita este destino.